ACORRALADA

Capítulo 15

*Capítulo 15*

¿Alguna vez les ha ocurrido que le cuentan algo malo acerca de una persona que ustedes recuerdan con alguiencariño y les parece que no les están describriendo a la misma persona?

Así me sentía, como si ella estuviese hablando de alguien ajeno a mi padre, yo no lo recordaba como un hombre ambicioso, todo lo contrario, sentía que era pasión por su trabajo, siempre quise ser como él.

La perspectiva que había cambiado era la de mi mamá, quien hablaba de lo mucho que me odiaba sin descaro alguno, no se oía ni una pizca de arrepentimiento en su voz, eso me taladraba todos mis nervios, cada palabra dura que salía de su boca derrumbaba el muro de confianza que con tanto esfuerzo había construido.

- lo lleve a la cabaña que desde hace muchísimo tiempo estaba preparada, y ahí me vengue de él - cayó un largo rato.

- ¿¡Qué diablos le hiciste!? - se me hizo inevitable, gritar, era horrible saber que tenía la causante de la muerte de mi padre frente a mis ojos, me levanté de un salto de la silla porque no pude aguantar más, ella abrió sus ojos en forma de amenaza, colocó su mano en mi hombro y me empujo hacia abajo para que volviera a tomar mi lugar.

- mucho cuidado como le hablas a tu madre - rió - sueno patética, en fin, aún no termino mi cuento.

›› soy amante de las fotografías, siempre lo fui, y Robert las detestaba, así que se me ocurrió la idea de darle como sorpresa de aniversario, muchas fotografías de mi con mi verdadero amor; un hombre que había conocido por azares del destino, él fue quien abrió mis ojos y me hizo ver que ustedes eran los culpables de mi vida, me dijo que si quería ser feliz con él debía eliminar mi pasado primero y eso es lo que estoy haciendo.

Tragué en seco ante su confesión.

Y continuó - tu padre se volvió loco - nuevamente soltó una carcajada como quien recuerda un chiste casual - y tomó su arma, lo recuerdo como si fuese ayer, yo sabía que la traía siempre a todos lados, por "protección" aunque a mí parecer era por cobardía, me apuntó con ella y dijo unas palabras que nunca olvidaré, ¿Sabes que me dijo Sofía?

- que eras una zorra maniática - escupí con toda la rabia que pude.

Su sonrisa se amplió más.

- te acercaste, pero no, dijo que terminaría sola, que te iba a llevar lejos y ustedes serían felices sin mi, pero el mundo es como un trompo mi querida Sofi y ahora quién está solo es él, a tres metros bajo tierra, y ahora tú lo acompañaras.

Metió su mano a la parte trasera de su pantalón y saco una pequeña pistola que yo no había notado.

No sabía cuánto tiempo había pasado pero deseaba que fuese más de una hora, este era el momento perfecto para que llegará la policía como le sugerí a los chicos.

- hace mucho que soñaba con hacer esto, y no te imaginas cuantas veces se me presentó la oportunidad, pero te perdí de vista, creí que te habías ido del país, y luego descubrí que habías estado internada por una estúpida depresión, en cuanto saliste y quisiste realizar tu vida con normalidad, me puse en marcha para hacerte sufrir otra vez, no podia creer que tú tratabas de ser feliz antes que yo, cuando tú fuiste la causante de todas mis desgracias.

¡Está mujer estaba loca! me apuntó con el arma, justo entre mis cejas, no podia creer lo que me estaba pasando.

- yo no hice nada - susurré. - yo no pedí nada de esto, cada quien es el culpable de su presente.

- ¡Cállate! - empujó el arma hacia mi cara y pude sentir el frío que provenía de esta, yo cerré mis ojos con fuerza, no quería mirarla más, no merecía ver el miedo en mis ojos - oye la buena noticia es que morirás con la misma pistola de tu padre.