Save your tears

Espera, que mi chispeante corazón se acelera y luego no sé que más hacer

SAVE YOUR TEARS

Espera, que mi chispeante corazón se acelera y luego no sé que más hacer

DÉCIMA CUARTA PARTE

La graduación había sido la cosa más extraña de todas, principalmente porque el padre de Lolito se había presentado en la graduación con la idea más loca de todas, quería que los acompañaran a él y a Lolito a un viaje extraño e intrépido por el amazonas, según les había comentado el mayor, Lolito le había hablado mucho sobre el gran grupo de amigos que eran y como los seis habían trabajado duro por ayudarlo con las materias que se le complicaban.

En el momento en que el padre de Lolito, Sergio, les había guiñado el ojo, suponían que Lolito le había contado sobre la aventura con el profesor de economía, no estaban seguros si aprobaba o no el comportamiento pero al menos sabían que valoraba bastante aquello. Lo siguiente fue saber que la mamá de Lolito se había contactado en secreto con los padres de todos ellos, casi desde que el inicio del segundo quimestre por lo que sus padres se encargarían del pasaje de avión y Sergio de los gastos de hospedaje y comida.

Luzu aún no podía creer que su madre haya ahorrado lo suficiente, cuando ella lo abrazó con fuerza diciéndole lo orgullosa que estaba de él y que se merecía cada moneda ahorrada, Luzu estuvo a punto de llorar en sus brazos, incluso recuerda haberle dicho que no gastara ese dinero en él, pero ella se lo reprochó diciendo que era su regalo de graduación y de todas maneras en algo para él lo iba a gastar "Me has ahorrado toda la universidad con tu beca, déjame al menos regalarte algo. Nunca me has pedido más de lo necesario"

Su madre lloró, él también, y ahora que lo recuerda, fue vergonzoso porque hicieron llorar a Lanita creyendo que algo malo había pasado.

Luego del discurso de despedida a cargo de Samuel las cosas habían empezado a ir demasiado rápidas en el programa, cuando se dio cuenta se estaban tomando muchas fotos y Auron pasó abrazándolo cada tanto. Luzu lo dejaba, porque sentía que el mundo podía ir al ritmo que quisiera si lo sentía cerca de él. Hubo una cena muy grande en la casa de Samuel, todos festejaron y se divirtieron.

Dos días después, Fargan propuso irse a celebrar a una disco, casi todos tenían la mayoría de edad, esa no había sido una idea muy ganadora. Habían salido de fiesta un sábado por la noche, Fargan y Alex habían pasado la noche entera bailando, demasiado pegados y presumiendo su ya algo largo romance, besándose cada segundo cuando estaban sentados, obligando a sus amigos a pedirles que mejor se fueran a bailar. Fargan reía divertido y jalaba a Alex a la pista.

Había visto a Willy y Lolito con chicas, bailando despreocupadamente y con un poco de licor entre las manos. Auron no salía a bailar, se quedaba junto a él conversando lo poco que podían debido a lo alto de la música. Pero una pequeña revelación ocurrió cuando Auron fue al baño y Samuel, con algunos tragos encima se acercó hasta él y soltó una simple y sencilla pregunta.

—¿Si no quería lo suficiente a Willy porqué empezó a salir con él? — Luzu lo miró, sin entender del todo su cuestionamiento, hablaba de Auron evidentemente pero Samuel no solía meterse en situaciones como esas y ahora, simplemente lo hacía sentir extraño – Estoy cansado de ser quien limpia las lágrimas de Willy... a la larga resulta agotador.

Luego de eso, Samuel se había recostado sobre su hombro y Luzu siguió impávido, incluso cuando Auron llegó, los miró con curiosidad, pero Luzu solo pudo sonreírle a la distancia, tratando de explicarle con un pequeño gesto que simplemente se había empezado a quedar dormido.

La razón por la que irse de fiesta aquel sábado no era buena idea fue porque al día siguiente tomarían el vuelo hacía su expedición, la mayoría se presentó con una resaca incapaz de permitirles mantenerse ante el sol más de diez segundos sin gafas. Habían tomado el vuelo cerca del medio día, y habían llegado a su destino casi veinticuatro horas después, tener el cuerpo jodido, era decir poco.