Harry Potter y los métodos de racionalidad (Traducida por: AldiniBrothers )

Capítulo 9: Título redactado, Parte I

"¡Abbott, Hannah!"

Pausa.

"¡HUFFLEPUFF!"

"¡Huesos, Susan!"

Pausa.

"¡HUFFLEPUFF!"

"¡Arranca, Terry!"

Pausa.

"¡RAVENCLAW!"

Harry miró brevemente a su nuevo compañero de casa, más para echarle un vistazo rápido a la cara que cualquier otra cosa. Todavía estaba tratando de controlarse de su encuentro con los fantasmas. Lo triste, lo realmente triste, lo realmente triste verdad era que él no parece estar cada vez a sí mismo bajo el control de nuevo. Parecía no encajar. Como si debería haber tomado al menos un día. Quizás toda una vida. Quizás solo nunca.

"¡Esquina, Michael!"

Pausa larga

"¡RAVENCLAW!"

En el atril, frente a la enorme mesa principal, se encontraba la profesora McGonagall, que miraba con atención y miraba a su alrededor, mientras gritaba un nombre tras otro, aunque solo había sonreído para Hermione y algunos otros. Detrás de ella, en la silla más alta de la mesa, en realidad más como un trono dorado, se sentaba un anciano marchito y con gafas, con una barba blanca plateada que parecía que iría casi al piso si fuera visible, vigilando la Clasificación. con una expresión benevolente; tan estereotipado en apariencia como podría ser un Viejo Sabio, sin ser realmente oriental. (Aunque Harry había aprendido a desconfiar de las apariencias estereotípicas desde la primera vez que conoció a la profesora McGonagall y pensó que debería reírse). El antiguo mago aplaudió a todos los estudiantes de Sorted,

Al lado izquierdo del trono dorado había un hombre con ojos agudos y rostro adusto que no había aplaudido a nadie, y que de alguna manera lograba mirar a Harry directamente cada vez que Harry lo miraba. Más a la izquierda, el hombre de rostro pálido que Harry había visto en el Caldero Chorreante, cuyos ojos se movieron como si estuvieran asustados por la multitud que lo rodeaba y que ocasionalmente parecía sacudirse y retorcerse en su asiento; por alguna razón Harry seguía mirándolo fijamente. A la izquierda de ese hombre, una cadena de tres brujas mayores que no parecían muy interesadas en los estudiantes. Luego, al lado derecho de la alta silla dorada, una bruja de mediana edad de cara redonda con un sombrero amarillo, que había aplaudido a todos los estudiantes, excepto a los Slytherin. Un hombre pequeño parado en su silla, con una barba blanca y esponjosa, que había aplaudido a todos los estudiantes, pero solo sonrió a los Ravenclaws.

"¿Es el hombre parado en su silla el Jefe de Ravenclaw?" Harry susurró hacia Hermione.

Por una vez, Hermione no respondió esto al instante; ella estaba cambiando constantemente de un lado a otro, mirando el Sombrero Seleccionador, y moviéndose tan enérgicamente que Harry pensó que sus pies podrían estar dejando el piso.

"Sí, lo es", dijo uno de los prefectos que los había acompañado, una joven que vestía el azul de Ravenclaw. Señorita Clearwater, si Harry lo recordaba correctamente. Su voz era tranquila, pero transmitía un tinte de orgullo. "Ese es el Profesor de Encantamientos de Hogwarts, Filius Flitwick, el Maestro de Encantamientos más conocedor del mundo, y un Campeón de Duelo anterior -"

"¿Por qué es tan bajo? ", Siseó un estudiante cuyo nombre Harry no recordaba. "¿Es un mestizo? "

Una mirada fría de la joven prefecto. "El profesor sí tiene ascendencia goblin -"

"¿Qué?" Harry dijo involuntariamente, haciendo que Hermione y otros cuatro estudiantes lo silenciaran.

Ahora Harry estaba recibiendo una mirada sorprendentemente intimidante del prefecto de Ravenclaw.