Recuerdos de un amor

VI

¡Hola a todos y todas! espero estén muy bien, yo estoy de maravilla trayendo aquí lo que seria el sexto capítulo de este fic, espero y disfruten la lectura y nos leemos abajo ^w^

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Los días venideros fueron como la perfecta luna de miel, besarse cuando quisieran, escaparse después de una misión larga, molestarse entre ellos, Dazai siempre lograba sacar de quicio al más bajo pero eso era algo ya común en la relación. No importa cuánto se insultasen frente al mundo, en la intimidad no había nada mejor que sentir los brazos del otro en su cuerpo, los besos en la frente y las palabras cariñosas. Si bien es cierto, ambos eran unos conquistadores y buenos amantes, el ir aprendiendo a amar para ellos era la cosa más bonita que podía pasarles en esa vida tan cruel y despiadada que les toco.

Todo era perfecto, hasta que Odasaku murió.

Aquellos que conocían su relación y sabían de la gran amistad que tenían Dazai y Oda aseguraban que él se encontraba terriblemente celoso de la confianza que tenía el castaño con el pelirojo, algunos hasta aseguraban que bailaría sobre su tumba el día que muriera el mayor. No podían estar más equivocados. La realidad era que Chuuya respetaba y apreciaba al mayor por ser el único amigo de la persona que amaba y de igual manera por ser un gran apoyo para su pareja e incluso para él.

Corría rápidamente a través del edificio, ignorando los cuerpos, la sangre y el caos que Odasaku había dejado a sus espaldas mientras iba a brazos de la muerte. Corría desesperado buscando a una sola persona. Desde el momento en que el jefe le notifico ir a limpiar el desastre creado por Mimic y enterarse que entre los caídos estaba Oda Sakunosouke el pequeño chico no dejo de correr hasta llegar al lugar con un solo objetivo.

Dicho objetivo se encontraba justo ahora frente a él, de rodillas sujetando el cuerpo del quien fue su mejor amigo, Chuuya quito su sombrero como muestra de respeto y se acercó a su compañero.

- ¿Vienes a recoger los cuerpos Chuuya? No te preocupes por Odasaku, de él me encargare yo- Dijo el castaño con voz tranquila, demasiado para quien acaba de perder a un ser querido.

- Lo lamento- fue lo único que pudo decir el otro, pero ¿Qué más podría hacer? ¿Cómo se cura a alguien que amas de su propio dolor? Al pelinaranja le enseñaron a vivir con la muerte diario, mas no como consolar en caso de que esta llegara.

- ¿Qué lamentas?- pregunto Dazai mientras volteaba a verlo con una sonrisa tranquilizadora- es parte del trabajo Chuuya, es normal en este mundo perder a personas.

Y a pesar de que estaba ahí sonriendo y con el rostro completamente despejado de la venda que lo cubría, Dazai estaba roto y Chuuya sintió la necesidad de vendar su alma y corazón para que así dejara de sangrar por dentro. Pero antes de lograr contestarle, sus subordinados llegaron y él comenzó a alejarse para dar las ordenes necesarias, hasta que sintió un jalón en su abrigo negro supo que Dazai lo necesitaba, ahora más que nunca.

Después de aquello, ambos se encargaron de llevar el cuerpo de Oda a un lugar tranquilo y pacífico, como lo fue él. Regresaron cansados a su departamento compartido, solo poner un pie dentro Dazai lo beso con pasión, con necesidad y él lo comprendió de inmediato, su tonto suicida se estaba rompiendo y él debía ser su pilar en ese momento.

Besos, caricias, promesas y palabras cariñosas fue lo único que se pudo escuchar después por parte de ambos y cuando estas cesaron el más alto abrazo a su compañero hasta que ambos cayeron dormidos. Dazai despertó algunas horas después y contemplo a su compañero, dormido a su lado con sus ruidosos ronquidos y el cabello desparramado por toda la cama, lo admiro un rato y acaricio su rostro con anhelo.

- Lo siento Chuuya- fue lo único que dijo antes de levantarse, se colocó sus vendas y ropa para después salir de la habitación en silencio. Los ronquidos pararon cuando la puerta de la entrada se cerró, apretó los puños con fuerza y ahogo un grito de frustración en la almohada.

Lo sabía, lo conoce demasiado bien y sabía lo que pasaría después, lo comprendía también, bueno más o menos. Pero comprenderlo no iba a calmar el dolor, no calmaría las dudas que se formaban en su cabeza, no secaría las lágrimas que derramaría de ahora en adelante mientras bebía, no calmaría las resacas después de una borrachera en su honor, comprender que se debía ir no mataría el amor que en pocos años lograron construir

-Idiota- murmuro Chuuya con voz ahogada, recostado en una tranquila colina, tranquila y pacifica como lo fue el hombre que recibió sus flores

-Idiota- volvió a susurrar- si me lo hubieras pedido, hubiera escapado contigo

Sin embargo, él hubiera no es una opción ¿o sí?

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Y hasta aquí el sexto capítulo :D ¿a alguien mas le da tristeza Chuuya?

Yo lo amo, y en este capitulo se muestra la tristeza de nuestro petit mafia ante el abandono de Dazai. Me gusta pensar que ambos lo pasaron juntos a pesar de saber lo que pasaría porque así de mucho se aman pero bueno ahora solo sigue ver que pasara con el pequeño Chuuya cuando sepa que Dazai lo quiere de vuelta.

¡Gracias por leer y hasta el próximo capítulo!