Todo lo malo que hay en mi (sterek saga #1)

Chapter 3: soledad y dolor

Derek iba a ayudarle, Derek debía ayudarle. No iba a quedarse de brazos cruzados, eso seguro. Por lo que Stiles sabía, Derek estaba muerto hasta hace unos minutos, para que el resto de la manada pensara eso debió ser una gran pelea, de la que seguro el alpha no había salido contento.

Cogiendo el Móvil intento llamar a Derek, pero no respondía. Tras varios intentos decidió desistir y probar suerte directamente en su casa sin avisar.

Cuando ya casi estaba en la calle del loft de Derek, su Móvil comenzó a sonar, era Scott. No descolgó, sabía que Scott debía estar buscándolo, el hecho de contestar a Isaac no fue lo más acertado.

Cuando las llamadas cesaron volvió a intentar llamar a Derek, pero saltó el buzón de voz.

- ¡maldita sea! — se quejó lanzando el teléfono contra el otro asiento. La frustración iba ganando la batalla, se veía así mismo, siendo arrastrado lejos de Beacon Hills, de sus amigos, de su padre, de todo, sin la posibilidad de obtener justicia, de demostrar que no es de cristal, que puede defenderse.

"¿A quién trato de engañar?"- pensó — si iba a buscar a Derek es porque sabe que el solo no podría hacer nada. — "Al fin y al cabo soy solo un humano"- continuó pensando mientras las lágrimas se acumulaban en sus ojos emborronando la carretera. Cuando comenzaron a caer por sus mejillas, frenó en seco, haciendo que las ruedas chirriaran contra el suelo.

Lloró, no era justo, ¿Por qué su padre? ¿Por qué él? Necesitaba que todo dejara de girar, sollozó, golpeó con ambas manos el volante varias veces conteniendo la rabia. Gritó con la boca cerrada y abrió la puerta dispuesto a salir.

Se quitó el cinturón que le molestaba y piso el suelo, decidido a andar lo que le faltara, pero al mirar al frente vio el edificio de Derek, había frenado justo en frente.

Se tragó un sollozo comenzando a correr hacia la puerta, parando a mitad de camino a pensar.

- Derek está vivo — dijo para sí, cayendo en la cuenta una vez más. — está vivo.

El alivio que rondaba su pecho y mente no tenía una explicación en ese momento, tan solo sabía que cuando descubrió que Derek estaba vivo, supo que todo iría bien. 

atravesó la gran puerta, corrió hacia el ascensor y lo llamó, mientras este bajaba, sus pies no paraban quietos, no sabía porque, pero necesitaba hablar con Derek, se decía que era porque necesitaba ayuda, pero no podía evitar pensar que ahí había algo más.

La puerta del ascensor se abrió y marcó el último piso, el del loft de Derek. Dentro del ascensor comenzó a moverse hacia todos lados, mirándose en el espejo que había dentro.

Su aspecto era terrible, tenía ojeras, los ojos rojos e hinchados, los pómulos muy marcados y en general su aspecto era el de un muerto en vida, un muerto de 17 años.

El ascensor se abrió, y salió disparado hacia la puerta de Derek. Al llegar a ella se estampo con su cuerpo, golpeándola con los puños, estaba perdiendo el control de sus impulsos y todavía no sabía porque.

Le llamó, gritó su nombre, y justo cuando creía que no había nadie dentro o que Derek simplemente le ignoraba, la puerta se abrió y le vio.

Derek estaba ahí, mojado y casi desnudo. — "¿casi desnudo?" - subió la mirada de la cadera que solo cubría una toalla. Algo sonrojado le miró a la cara, pasando antes la vista por su musculoso pecho salpicado en gotas de agua. Se acababa de duchar y no sabía porque ese pensamiento...

Su cara era una máscara de alarma.

- Stiles — al ver que no había nada detrás de él miró al adolescente a la cara, percatándose de las lágrimas y el aspecto del chico. - ¿Qué ocurre?