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Capitulo 25. "Fútbol"

¨(NOTA SUPER IMPORTANTE AL FINAL DEL CAPITULO, IMPORTANTE LEER)

-¡Emma! Apresúrate que el partido ya está por comenzar- me grito por enésima vez Mark.

Yo rodee los ojos (por enésima vez también) claro que me apresuraría… Creo que deberían saber lo que paso en el viaje.

De camino hacia aquí Dean durmió todo el tiempo en mis piernas, se entumieron tanto que le tuve que pedir a Mark que parara el auto para poder estirarlas un poco, al salir del carro en una estación de gasolinera nos dimos cuenta que Dean había olvidado meter mi maleta con cambios de ropa, no me moleste tanto ya que podría usar la que traía puesta y al día siguiente podría usar otra que casualmente estaba en el auto de mi padre. Lastimosamente era un short de… zorra.

Cuando llegamos al hotel, que resulto ser de dos camas matrimoniales, (Gracias, Dake, gracias, se que lo hiciste a propósito) Dean me regalo una camiseta de su equipo, pero estaba tan grande que a Dake se le ocurrió la idea de romperla un poco para que no se me viera tan mal, Y SE ROMPIO. Bravo, bravo. Dake tuvo que recorrer a las tijeras y termino cortándola, la verdad es que quedo muy mona… pero no es la clase de playeras que yo uso, sin mencionar que tiene un enorme escote… y por si fuera poco, así es… falta más. Cuando Mark y yo salimos a comprar botanas para comer antes del partido, un pequeño niño iba corriendo, me di cuenta muy tarde y los nachos terminaron embarrados en mi pantalón, por si fuera poco mi hermano comenzó a reír tanto, que su soda se cayó y me mojo todo el trasero. Perfecto.

-¡Sabes que no me gustan los mini-shorts Mark!- grite desde el baño. Mi ceño se frunció –Dios, parezco toda una zorra-

-Emma, te perderás el partido de tu novio, además ¿Quién te va a estar viendo? Todos van a estar atentos al partido-

-Bien, bien- dije saliendo del baño irritada.

-Wow- dijo Dake desde la cama. Nunca suelo ser muy grosera a menos que yo esté muy enojada, pero ese comentario hizo que los ojos de Dake ganaran una buena vista de mi dedito corazón.

-Ya vámonos…- murmuro Mark, pero cuando volteo a ver a Dake y se mordió el labio inferior supe que no vendrían en un buen rato -…Emma, nos vemos por allá, debemos hablar un asunto muy importante-

Rodee los ojos.

-Lo que sea, solamente no tarden tanto- dije saliendo del cuarto y haciendo una mueca de asco una vez afuera.

Respire profundamente y solté el aire una vez más a punto de entrar y sentarme en las gradas. Dean quería que yo lo fuera a buscar primero a las bancas donde juega el equipo, y desde aquí lo podía ver, buscándome por todo el estadio mientras Jake a su lado habla con chicas de las gradas, casual…

Bien Emma, tu puedes. Solo es un mini-short… que tu nunca usar pero solo es eso. Comencé a caminar y me lleve las primeras miradas de un par de chicos a mi lado, malditos asquerosos. Cuando llegue a las bancas donde estaban los demás jugadores, los ojos de Dean se abrieron como platos, por favor Dean quita esa cara…

-Wow…- murmuro. Estaba a punto de ganarse una vista de mi dedito corazón –Te ves… preciosa- sonrío.

Jake a su lado me miro de reojo, y al percatarse bien de que era yo alejo a las chicas con las que hablaba.

-Vaya… vaya hermanita- se mordió su labio y le dio un codazo en las costillas a Dean –ya veo porque te gusta- bajo la mirada un poco y sorprendentemente Dean le dio un golpe en su brazo.