Capitulo 27

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Chicas primero que nada perdón por desaparecerme, en un rato o mañana les subo otro capítulo, y ya llegamos a los 3k 😱 tan rápido, enserio gracias por el apoyo ❤️

Eran las diez de la mañana, me levanto de la cama y me dirijo al baño donde me baño, me lavo los dientes y me visto con un vestido básico arriba de la rodilla color azul marino con unos zapatitos negros, me maquillo leve pero agregando el delinead...

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Eran las diez de la mañana, me levanto de la cama y me dirijo al baño donde me baño, me lavo los dientes y me visto con un vestido básico arriba de la rodilla color azul marino con unos zapatitos negros, me maquillo leve pero agregando el delineado de ojos, haciendo que se me vieran más grandes, me deje suelto el cabello para que se secara al natural  pero me puse una diadema negra con un moño, la cual no se notaba tanto porque es el mismo color de mi cabello, me puse frente al espejo y me siento y me veo muy bien, me veo más niña que adulta.

No se si me entiendan, es de esas veces que con alguna ropa te sientes más adulta y formal, y con otra más niña y tierna, bueno así me siento ahora.

Es la primera vez que me arreglo tanto desde que llegue aquí, sin poder evitarlo el pensar que dirá Aarón al verme así me pone nerviosa, pero porque? Estoy loca definitivamente, como se me ocurre pensar eso, me debe dar igual como me ve.

Me termino de alistar y bajo las escaleras, me dirijo a la cocina y en ella está Aarón con un jugo naranja, trae puesta una camisa blanca con unos pantalones de mezclilla y unas botas negras y su cabello despeinado, dispuesta entro por completo en la cocina esperando algún comentario de parte de él sobre mi apariencia, pero inmediatamente me doy unos golpes mentales.

—Hola, buenos días.- le sonrió sentándome en la isla, el sin voltear a verme hace una seña con la mano en forma de saludo—se dice buenos días—hago un mueca de desagrado.

El voltea de mala gana y me sonríe sarcásticamente.

—No tiene nada de buenos.

—Uy, alguien se levanto de malas está mañana—hago una pausa—no espera, tú siempre estás de malas—ruedo los ojos.

—Yo no estoy de malas siempre, la gente me pone así—veo como termina de hacer su sándwich y se sienta frente a mi.

—Quién te va poder de malas aquí, si estamos solos.- me quedó mirándolo esperando la respuesta y el solo me mira a mi, dandole una mordida al sándwich, me mira como si fuera lo más obvio del mundo, yo tardo un poco en reaccionar—¿Pero porque yo? si apenas te hable hoy—pregunto indignada.

—Con solo verte me pones de mal humor—muerde su sándwich y me da una mirada sería.

¿Será que me veo mal?, por eso se habrá puesto de malas, naa no creo, el es un amargado, me trató de animar pero igual mis ánimos se caen un poco.

—Vaya, soy tan fea que con solo verme te arruino la mañana—me paro de mi asiento y me dirijo a la sala.

—No dije eso—escucho la voz de Aarón a lo lejos pero la ignoro, y me siento en el sillón—Te estoy hablando no me ignores—llega a mi lado pero no se sienta solo se queda parado por lo que yo tengo que levantar mi mirada.

—Eso trataste de decir, y perdón por no ser de tu agrado, pero no es lindo venir con buena actitud y que un estupido que te culpa de sus problemas te quiera joder—mis palabras sonaron más duras de lo que esperaba. Veo cómo se tensa un poco y aparta su mirada.

—Vale, está bien, disculpa, no empecé bien la mañana, déjame arreglarlo, unos amigos y yo iremos a la playa, ¿quieres venir?—tardó en pensarlo  pero no suena mala idea, así conoceré a gente nueva, y me despejare un poco.

—Está bien, pero sigo enfadada—lo miró con los ojos entre cerrados, el se da la media vuelta con una sonrisa que alcance a ver y dice.

—No que ibas a salir con tu amigo—se burla de mí y es cuando me doy cuenta que fue un plan de él para sacarme la sopa, mi boca se abre ligeramente pero la cierro.

Rápido Fernanda piensa.

—Ah si, ¿lo puedo invitar?digo para no cancelarle—su cara se transforma en cuanto digo eso, y niega—Oh entonces losiento no pondré ir, a la otra—me levanto del sillón.

—Está bien, puede ir—escucho como gruñe y yo sonrío victoriosa, en camino a la casa de iker, solo falta que no esté.

—Está bien, puede ir—escucho como gruñe y yo sonrío victoriosa, en camino a la casa de iker, solo falta que no esté

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Bajo el mismo techo  (BeMT#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora