Querida "Hermanita"

Nada de lo que debas avergonzarte

Los rayos del sol entraban por la ventana, la vista al fondo que hacía que cada día luciera más hermoso, o más doloroso, ahora estaba adaptada no sabia que me esperaba al comenzar el día, ya por la noche me lamentaba lo que sucedía, hoy iba a salir con Will recordé aun en la cama, saldría con él a elegir un regalo para una "amiga" suya, oh Hailee las probabilidades de que llores hoy son: TODAS... 

No espera, hoy preparas la comida para el que será tu alegría, vamos anímate, ponte algo lindo y demuestra que puedes volver a sonreír, estés o no con Will, ¿Ja? ni tu te crees eso. 

Sonreí ante mis propios pensamientos, lo cual resulta raro ya que hace mucho que no se lo que es reír por algo que surja de mi mente, esta no ha hecho más que dañar últimamente, pero no hoy Hailee, no permitas que tu posible nuevo comienzo se vea afectado.

Me levanté de la cama, tome el cepillo de dientes y una toalla guindada en la puerta del armario, entre tarareando mi canción favorita (Forever young) la letra de esa canción verdaderamente me deprime, vale, no es como que la escuche para deprimirme, es sólo que cuando niños Will y yo solíamos cantar, era como nuestro himno, pero ahora eso tampoco existe, Hailee ¿Qué hablamos? entre al baño y comencé a desnudarme cantando, podía escuchar abajo un ruido, hice caso omiso y continúe en lo mío, cuando estuve completamente sin nada, amarre mi cabello y  me metí a la ducha, bailaba y cantaba...

"Permitámonos permanecer jóvenes, o permitámonos vivir por siempre no tenemos el poder pero nunca decimos nunca sentados en una excavación de arena, la vida es un viaje corto la música es para el hombre triste"

Continuaba cantando, ignorando al mundo mientras el agua recorría mi cuerpo, eche el jabón y comencé a pasarlo por todas partes, cuando enjabonaba mi cuello, no podía evitar pensar en Will, en cuando se acerca a mi, en como a veces me mira, en como me veía el día que tuve el "accidente" todas esas cosas que me dan alas pero luego se cortan, vamos Hai, puedes reprimir estos sentimientos, esfuérzate, no continúes cegada por la luz de sus preciosos ojos, o el danzar de su cabello, su piel lisa, su cuerpo marcado, oh por Dios tratas de olvidarlo o pensar más en el, no es tu chico...Y lo mas triste, no lo será.

Al salir de ducharme me cepille los dientes y sin mas salí del baño, camine despacio por la habitación, me acerqué al armario lo abrí, respire hondo, tomé un jeans alto blanco rasgado en las rodillas, una camisa Adidas de color negro, fui al gabetero y tome un brasier de color rosado con tirantes negros, que hace juego con un bikini del mismo modelo y color, solté la toalla que cubría mi cuerpo y me coloque la ropa interior camine hacia la cama, coloque la ropa para buscar los zapatos, solté mi cabello, cuando iba a hacerlo, la puerta se abrió.

-Ha- No termino de decir mi nombre cuando sus ojos se abrieron, ambos nos miramos y sentí arder mis mejillas, Will trago con fuerza, yo ni siquiera podía hablar, estaba parada frente a el semi desnuda- Wow- Dijo sin dejar de mirarme-

-¡Will!-Grite haciendo que este volviera en si-

-Lo lamento- mis manos temblaban, al igual que mi pulso aumentaba, Will estaba parado mirándome sin siquiera pestañear, él iba a decir algo pero se limitó a cerrar la puerta de prisa-

 El acto no duró menos de cinco segundos pero bastó para que mis mejillas ardieran, parpadee un par de veces, él estaba mirando mi cara, no pudo ver nada, no pudo ver nada, mi corazón y mis manos temblaban, después de varios minutos termine de vestirme por si se le ocurría la fantástica idea de entrar, entonces toco la puerta. 

-Hai- Estaba sentada sobre la cama tratando de procesar lo que acababa de pasar- Oye lo lamento-Dijo tras la puerta- ¿Puedo pasar?- 

-Tengo vergüenza- Dije escondiendo mi cara entre mis piernas ahora alzadas sobre el colchón, escuche a Will respirar profundo tras la puerta-

-¿Déjame entrar si?-Suplico- Si no, tendré que tumbar la puerta  o yo que se- 

-No Will- Dije, tenía ganas de llorar, pero me había prometido a mi misma no volver a hacer eso, vi la puerta abrirse poco a poco y volví a esconder mi rostro, Will se acercó hasta a mí arrodillándose justo en frente-

-Lo siento, no vi nada lo juro- 

-Es malo mentir-Dije escondida-

-¿Puedes mirarme?- Dijo mientras tomaba mi rostros entre sus manos, no quería mirar sus ojos, me negaba completamente a hacerlo-

-No voy a mentirte, si vi- Mis manos comenzaron a temblar- Pero, hey-Dijo para que lo mirara- Lo que vi no  es nada por lo que sentir vergüenza, si yo fuera tu estaría muy satisfecha- Dijo sonriendo-

-Will basta- Dije cerrando los ojos- Promete que olvidaras eso- Exigí-

-Esta difícil esa promesa, pero lo intentare si te ha feliz- Él sonrió- Ahora vamos a desayunar mira que gracias a ti vamos realmente muy tarde,- 

-Espero no sea como anoche, no podría comer tanto de nuevo-

-¡Dios!-Exclamó- Si no probaste bocado, eres demasiado dramática Hailee fue poco lo que traje- Dijo mientras nos levantábamos para ir a desayunar, cuando estuvimos abajo le respondí a Will-

-Eso debo decírtelo a ti que dices que no comí nada cuando tu si no comiste nada-

-Bueno hagamos una cosa, vamos a hacer un reto ¿va?- 

-Haces trampa Will te conozco- Dije riendo-

-¿Por quién me tomas? Siempre gano de forma limpia o acaso ¿Estás asustada?-Dijo mordiendo su labio inferior, haciendo que mis vellos se erizaran-

-¿De ti? por Dios ¿Qué quieres apostar?-

-Te lo diré cuando estemos en el lugar, ahora tomemos la molestia de comer- Sonrió, mientras me conducía al mesón de la cocina, el cruzo quedando frente a mi, coloco dos platos frente a mi, un vaso de agua y otro de jugo-

-Wow ¿a que le debo el honor de ser atendida así?-Dije mirando el plato con dos sándwiches- 

-Jaja búrlate, pero no te emociones no durará- No lo había tomado como chiste, como Will lo decía, lo tome como lo que es, dentro de poco el se ira y todo aquí cambiará, noto el cambio en mi rostro y se acercó frente a mi- Hai hoy tenemos que estar felices-

-Lo se- Sonreí sin ganas-

-Amiga vamos alégrate ¡iremos de shopping!-Dijo lo último fingiendo voz de niña, por lo que no pude evitar reír-

-Yo jamás he ido de Shopping-Admití- 

-Lo se pero no te preocupes a mi, te ayudare a elegir lo mas sexi que haya- Dijo mordiéndose el labio, lo cual me hizo ruborizar-Come se enfría - 

-Tu estas loco- Dije mientras comía un pedazo del sándwich-

-Además no se tu, pero me dieron ganas de pasar por una lencería-Dijo guiñándome el ojo, haciendo que me ahogara-

Dios mío Williams Rush ¿podrías dejar de hacer que muera algún día?