Capítulo 23

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—Regresaste.. ¡Estás aquí!—exclamó Emma feliz. Envolviendo a Elliot en sus brazos.

El joven al contrario que ella, se notaba extrañamente incómodo, la tomo de los hombros separando a la joven de su cuerpo con lentitud.

—¿Qué sucede? —preguntó Emma confundida—. ¿Dónde estuviste todo este tiempo? ¿Por qué desapareciste? ¿Por qué.. Me dejaste?

—Lo lamento, Emma. Yo.. no quise irme de esa manera, realmente no quise.. hacerlo —dijo cupido con pesar—. Pero no es algo de lo que pueda darte una explicación. —continuo reponiéndose. No quería mentir, odiaba ver la mirada dolida y a su vez alegre de Emma, dolida por la falta de explicación de su parte y alegre porque él al fin había vuelto.

—¿Por qué nadie te recuerda? —preguntó esta vez la joven con dureza. Al menos quería una respuesta de aquello, pues él ni siquiera se imaginaba todo lo que ella sufrió al ver como parte de los recuerdos de sus seres queridos fueron desapareciendo.
—Porque así ellos los quisieron. Emma, lo lamento, pero no puedo decir más.

—¿Ellos? ¿Quiénes? —su cabeza estaba a punto de estallar, observo a Brenda aun en el suelo y se sintió mal, no tenia que estar discutiendo con su cupido, sino encargándose de su mejor amiga.
—Ella estará bien. —hablo Elliot, sorprendiéndola.

—¿Hablas en serio? ¡Cayó directo al suelo!

—Lo lamento, no llegué a sostenerla —se disculpo él—. El desmayo fue producto de la extracción de recuerdos, cuando despierte... No recordará nada relacionado a mi existencia, ni siquiera lo que ha hablado contigo.

—Pero regresaste.. —susurro Emma, aun sin entender lo que estaba sucediendo —. ¿Yo.. También te olvidaré? —preguntó, angustiada.

—No por el momento. —dijo Elliot, tratando de sonreír.

—¿Ni siquiera piensas darme una explicación de por qué desapareciste sin avisar? —había enfado en su voz, noto Elliot, sabía que ella se enojaría, estaba preparado para ello, pero en ese momento solo quería viajar al pasado tan solo unos minutos, y volver de ese cálido abrazo -que antes ella le había regalado- algo eterno.

—No, no puedo hacerlo, entre menos sepas mejor, estoy aquí para cumplír una misión y eso es lo que haré. —sentenció Elliot. Cortando toda posibilidad de alguna futura conversación.

******

—Lo has hecho bien. —dijo el joven alado que se encontraba a su lado.

—Si, bueno, estoy seguro que me odia. —murmuró Elliot observando a Emma que junto a una mareada Brenda avanzaba hacia la enfermería.

—De todas formas, es lo correcto Elliot, y lo sabes. No puedes cometer otra infracción.. No creo que quieras pagar las consecuencias por una simple humana. —dijo Nathaniel, su superior y supervisor, pues el consejo le había asignado un supervisor para mantenerlo vigilado.

—Ella no es una simple humana.. Creí que eso estaba más que claro. —espetó Elliot enfadado. Si bien Nathaniel le agradaba, le disgustaba bastante estar bajo su estrecha vigilancia.

—Da igual quien sea, es humana, por lo tanto lo mejor es que te olvides de ella. —finalizó el otro ángel terminando la conversación.

******

Creía que era un mito. Creía que un corazón no podía romperse, pero ella lo sintió, sintió como se desgarraba, como trozo a trozo fue cayendo a la fosa, lo sintió sangrar, cálida y húmeda sangre brotando de cada herida, de cada pequeña abertura, sintió como el metió la mano dentro de su pecho y se llevó con él un pedazo de su corazón, se lo arrebato sin reparos, dejándola incompleta, casi vacía.

—¿Por qué lloras, tonta? Fue solo un golpe. —dijo Brenda sonriente. Elliot había tenido razón, ella se encontraba bien.

—Lo siento, es que.. Me preocupe.—murmuró Emma tratando de sonreír.

—Oye, y.. ¿Qué harás? —pregunto su amiga realmente intrigada.

—¿Con qué?

—¡Con ya sabes quien! Vamos, Emma, no me hagas decirlo. —se quejo su amiga, observando cada rincón. Emma la observo sorprendida.

La esperanza brillo en su interior ¿Lo recordaba? ¿Ella, realmente lo recordaba? Sonrió, finalmente lograba sonreír, no estaba sola, al menos, tenía a su amiga.

—¿Hablas de Elliot? —pregunto finalmente.

—¿Elliot? No, de todas formas ¿Quién es Elliot? Hablo de James. —exclamó Brenda con obviedad.

Su sonrisa decayó. ¿Por qué? ¿Por qué recordaba todo lo que había pasado con James, pero no recordaba a Elliot?

—Hey, ¿Qué sucede? —preguntó su amiga, al notar su cambio de ánimo.

Emma, no soportando la situación, se desbordó, sus murallas cayeron, primero fue una, luego dos, le siguieron tres, cuatro, hasta que su mejillas se encontraban completamente mojadas, las lágrimas brotaban con libertad, anhelando liberar toda la tristeza y angustia retenida. Ya no lo soportaba ¿Querían deshacerse de ella? ¿Querían que se enamorara de James? Lo haría, haría todo lo que le pidieran, y luego olvidaría, para finalmente ser libre, el dolor, la tristeza, la angustia, la desesperación, todo se iría. Junto a sus recuerdos.

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Hellooooo! De nuevo! (?

Capítulo sorpresa, y como recompensa por ser la lectoras más comprensivas y geniales del mundo mundial.. Okno, pero en serio, gracias por nunca reclamarme mis falta de actualización o.. Actualización tardía xD

Espero que les guste! Voten y comenten por un nuevo cap!

Bye Bye :3

❤ Lily ❤

Un cupido OnlineWhere stories live. Discover now