Treinta.

Capítulo diecisiete

Día dieciséis

-¿Qué haces vestida así?- Amber se carcajeo desde su cama

- Cállate- rodé los ojos- Voy a jugar golf con Harry - acomodé mis trenzas a cada lado de mi cuello.

- Entonces, ¿Harry está tratando de que te acuestes con él llevándote a jugar el juego más aburrido en la historia de los juegos? , aparte que ni sabes jugar - ella se sentó para mirarme mejor.

- El va ha enseñarme, además el está siendo bastante lindo

- Lena, el debe entrar en acción si te quiere quitar las bragas- ella se quejo y yo le saque el dedo del medio.

- Se acabo está conversación- dije y la escuche carcajearse.

Me puse de pie y tomé un bolso de ejercicio que contenía agua , algunas toallas para el sudor y un cambio de ropa por si las moscas.

Mi teléfono me envió una notificación avisando que tenia un mensaje, rápidamente desbloquee el teléfono.

De : Harry

" Len, estoy afuera"

Guarde mi celular en el bolsillo de mis shorts y me mire en el espejo rápidamente.

- Nos vemos después Amber- me lance un rápido beso y salí del dormitorio.

Abrí la puerta del copiloto y vi a Harry usando su teléfono.

- Hey- saludé y me subí a la camioneta.

-¿Cómo estas Lena?- su sonrisa se hizo notable, se inclinó un poco y dejo un beso en mi mejilla causando revoltillos en mi estomago.

- Bien, ¿Tu cómo estas?

- Mejor ahora- encendió la camioneta y salió del aparcamiento.

*

Me quede observando la rosa adentro del hoyo uno y me gire a mirar a Harry.

Su sonrisa era amplía y abrió sus brazos indicando que fuera hacia él.

Caminé vacilante y con cautela y envolví mis brazos alrededor de su torso.

- Hay una flor en cada hoyo hasta el hoyo dieciséis- susurra en mi odió y mi piel se eriza- Me encanta la reacción de tu cuerpo al sentir el mío- sus manos acarician mi cintura y cierre los ojos ante el placer que eso me produce- Te aseguro que mi cuerpo reacciona igual al tuyo- sus labios dejaron un pequeño beso en la piel detrás de mi oreja.

Me salí de abrazo y sin así quererlo mire sus labios.

Rosados
Llenos
Y malditamente besables

Me puse en puntillas y estampe mis labios con los de él, Harry se tambaleo un poco ante la sorpresa pero sostuvo mis caderas con fuerza.

Lo hice retroceder a pasos torpes hasta que su cuerpo se detuvo ante el pequeño impacto con un árbol.

Mi auto-control se fue directo a la mierda agarrado de la mano con mi orgullo en el momento en el que Harry gimió.

Saque su camisa de entre sus pantalones y acaricie su abdomen siendo yo la que gimió esta vez.

Con las manos temblando toque la hebilla de su cinturón pero sus manos apretaron las mías.

- Amor, para- sus labios estaban rojos y su mirada desorientada.

Me sentí avergonzada por dejarme llevar por los sentimientos que empezaban a nacer en mi hacia el chico de rulos y ojos esmeralda.

Baje mi mirada incapaz de volver a verle la cara y con un nudo del tamaño de mi puño mi garganta susurré: