Capitulo 21

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Allí apoyado en una encimera y rodeado de mujeres estaba mi hermanastro que se sacó de encima a una chica pelirroja para así poder saludar a su mejor amigo. Entonces me vio y su rostro se desencajó.

- ¿Qué haces aquí? -me preguntó mirándome como si fuera lo último que quería tener delante.

-Vivo aquí-le contesté cortante sin poder evitar fijarme en lo bien que le quedaba aquella camisa blanca... Dios, le resaltaba el moreno y el contraste con su pelo negro y sus ojos azules era increíble. Normal que tuviera a casi todas las chicas pendientes de él. Jenna iba a tener razón, Mewestaba demasiado bueno para que una no se sintiese afectada.

-Desgraciadamente-me contestó girándose y bebiéndose todo lo que le quedaba en su vaso de cerveza.

Genial, intoxicate, imbécil.

- ¡Vamos a bailar! -me dijo entonces Jenna tirando de mí hacia fuera, en donde la música estaba más alta y subiéndose conmigo a una de las tumbonas. Casi todas las chicas hacían lo mismo, pero fue divertido; además en ese momento sonaba una canción que me encantaba, la canción del verano y todos los allí presentes estaban cantándola a voz en grito y moviéndose al son de la música.

Seguí bebiendo mientras mi cabeza se alejaba de mis horribles sentimientos y del rostro de Dan, tan rubio y tan guapo, y el recuerdo de sus manos acariciándome cuando estábamos solos o como cuando me besaba en la nariz cuando hacia muchísimo frío y se reía de mí diciendo que me parecía a un reno de navidad. Era mí diciendo que me parecía a un reno de navidad. Era una idiota pensando en esos estúpidos recuerdos, pero habían sido seis meses de mi vida... Tampoco era mucho, pero yo los había vivido con intensidad... le quería... había sido mi primer novio de verdad y que me hubiese engañado con alguien tan importante... no, simplemente que me hubiese engañado...
Enfadado me giré y entré en la casa para servirme más cerveza. Jenna estaba por allí con Lion por lo que fui a buscarla en el salón, repleto de gente y con la música a todo volumen con la intención de distraerme con ella.

Justo en ese instante me llegó un mensaje al móvil.

Sabía de quien se trataba, seguramente era Dan, pero

al leerlo comprobé que era de la misma persona que me había mandado la foto de Dan y Beth besándose.

Quien fuera estaba claro que le gustaba atormentarme puesto que el email tenía como nombre: más
evidencias de tu engaño. Justo cuando le iba a dar a abrir el archivo, con el corazón casi saltándose de minpecho, el móvil se me apagó. Mierda... me había quedado sin batería, normal si lo único que había
hecho ese día había sido recibir mensajes de Dan ynllamadas telefónicas que intente con todas mis fuerzas ignorar. Con los nervios a flor de piel e impulsada por algún instinto masoquista, eso estaba
claro, por que quién iba a querer ver más imágenes densu novio poniéndole los cuernos, vi que el iPhone de Mew estaba allí sobre la mesita del salón. Había demasiada gente a mi alrededor por lo que nadie me vio cuando lo cogí y me dirigí a una esquina que estaba más apartada de la gente, junto a la puerta del despacho de Boonsak. Me temblaban tanto las manos que
me costó dar con los botones adecuados, teniendonque borrar y volver a escribir mi correo electrónico como cinco veces, pero finalmente di con lo que buscaba y el archivo de email se abrió para mí. Allí junto la foto que ya había visto había un montón de instantáneas de Dan y Beth enrollándose en la fiesta que supuse me habían engañado por primera vez... nada más lejos que la realidad. Había más fotos, de días diferentes de ellos besándose, incluso fotos hechas por ellos mismos, con la mano estirada y mirando a la cámara con los labios hinchados y los ojos brillantes. Me enfadé tanto viendo esas fotos, sentí tanta rabia y dolor en mi interior que por poco se me cae el móvil al suelo.

Entonces alguien se me acercó por detrás.

- ¿Qué demonios estás haciendo con mi móvil? -me dijo aquella voz tan conocida e irritante. Me sobresalté y antes de que pudiera cerrar lo que había estado viendo, Mew me arrancó el teléfono de las manos y se puso a mirar las fotos con el ceño levemente fruncido.

Hermanatros (1)Where stories live. Discover now