Epílogo

8.9K 632 74
                                    

Me acomodé la bufanda al cuello y miré la fachada del edificio ante mí. Solté un suspiro resignado porque si o si tenía que entrar. Otro aburrido día de escuela después de mis largas vacaciones en la isla Qatsina.

Luke me había dado ánimos esa mañana y de tan solo pensar en él di el primer paso. Mucha gente a mí alrededor me miraba. Por un minuto no supe porqué pero luego lo recordé. Que tonta fui por olvidarlo, ahora yo tenía un ex novio fugitivo y asesino. Los adjetivos me ocasionaron un escalofrío.

Cuando caminé por los pasillos las miradas fueron más intensas. Apenas llegué a mi casillero me puse a guardar cuadernos y libros con rapidez. Tan solo quería terminar con este día y así podría volver a casa, a mi habitación donde Lucas estaría esperando por mí.

–Vaya, vaya.

La puerta de mi casillero se cerró con fuerza, más bien la cerraron. Levanté la vista y me encontré con la amarga mirada de Layla. Detrás de ella estaban sus dos amiguitas de siempre con la misma ruda pose. Era bien fácil sentirse con tanto poder si eran tres contra una. Puse los ojos en blanco y suspiré con cansancio. Ya estaba harta de esto. Para empeorar la situación la gente a nuestro alrededor se detenía para observarnos, para ver mi supuesta humillación con diversión.

–Oye, asquerosa ¿ya pillaron a tu novio?

Se levantó un coro de varios <<uuuh>> a nuestro alrededor. Los curiosos formaron un círculo que nos dejó al medio y cada vez llegaban más. Yo no dije nada, solamente la miré con desprecio.

–¿No dirás nada? Bueno, supongo que no tienes mucho que decir –se encogió de hombros, riendo. Los demás la imitaron.

–Es inocente –espeté con los dientes apretados.

–Oh, ¿no me digas? No creo que alguien más te apoye en eso ¿o sí? –miró a los curiosos que negaron rápidamente. Se escucharon algunos gritos de <<asesino>>, <<es culpable>>, <<nadie le cree>> entre otros que ni recuerdo.

–¿Realmente crees que me importa tu opinión y la de todos ustedes? –miré a los curiosos, sin duda nadie se esperaba mi reacción. Normalmente, antes, yo era bien sumisa cuando Layla se metía conmigo o simplemente la ignoraba.

–¿Te vas a revelar? –se rió y no fue la única.

Su mirada divertida cambió abruptamente, se acercó a mí y me dio un golpe con sus dedos en la nariz. No me dolió pero si me molestó bastante.

Yo ya no era débil como antes, ni física ni mentalmente. Mientras más tiempo pasaba con Luke podía practicar mis poderes adquiridos por razones inexplicables. Lejos de buscarle alguna explicación lo acepté con gusto. Mientras Layla seguía dando golpecitos molestos en mi cara, causando la risa de los presentes, mi ira iba en aumento. Era suficiente.

Agarré con fuerza su hombro, le di la vuelta y agarré sus muñecas en la espalda, entonces la estampé con fuerza contra los casilleros. Todo mundo se quedó sin habla. El rostro de Layla estaba ahora horrorizado. Sus amigas intentaron ayudarla pero yo, sujetando las muñecas con una mano logré apartarlas con mi mano libre de dos empujones.

–Que te quede claro que esta fue la última vez que te ríes a expensas de mí. Como sepa que andas hablando cosas mías y de él no seré tan gentil contigo. Ah y lo mismo te pasará si te metes con Fanny.

La solté de golpe y cerré mi locker rápidamente. Cuando me alejé para encaminarme a mi siguiente clase las personas se apartaron para dejarme pasar, entre atemorizadas y admiradas.

Fanny no se apartó de mi lado, sus ojos estaban brillantes y cuando paseábamos por el pasillo y las personas nos observaban, ella sonreía emocionada. No por la atención, sino porque al fin podía caminar libre sin el miedo latente de Layla asechando para jugarle otra broma pesada.

Un novio de otro mundo #1: DestinadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora