Capítulo 17

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Onur levantó la vista cuando vio a Sehrazat salir de la habitación. La mudanza estaba casi lista, todo había sido empacado, salvo los muebles, que ella había preferido dejar allí para que quien alquilara la casa, los tuviera... y además porque eran innecesarios y el costo de trasladarlos era inútil...

La vio suspirar, algo ensimismada y en sus pensamientos... y no pudo evitar sonreír, ella no parecía querer reconocerlo, pero estaba algo nostálgica con el traslado de su vida y sus cosas de vuelta a Estambul...

Hoy despachaban los libros y todo lo que querían llevarse a su nueva casa y al día siguiente tenían pasajes para volver...

-¿Qué hora es? - preguntó y lo sacó de su modo de observación.

-Casi mediodía...- dijo y la vio suspirar.

-Deberíamos despertar a Kaan para almorzar algo...- dijo y se dejó caer a su lado, estaba exhausta.

-Deberíamos hacerlo... creo que quedó algo de pollo al horno que comimos anoche y podríamos preparar una de esas ensaladas que tan ricas te salen...

-Podrías prepararla tú...- dijo casi en tono de ruego y apoyó su cabeza contra el hombro de él, que se acomodó para abrazarla un poco y besó su cabello con ternura- realmente estoy agotada... creo que prefiero trabajar dos noches sin dormir en lugar de hacer esto...

-Esto tiene mucho de emocional también...- dijo y ella giró la cabeza para mirarlo y luego separó su cuerpo del de él y se quedó con la mirada suspendida, pero algo ausente...

-Puede ser...- admitió.

-¿Quieres hablar de eso? - le preguntó y vio que a ella se le humedecían los ojos.

-Estoy bien...- dijo y se mordió el labio.

-Bien... como quieras... estoy aquí...

-Lo se... me hace feliz que estés...- dijo y luego de besar sus labios, comenzó a recorrer los distintos lugares de la habitación con la mirada y cuando sus ojos volvieron a los de él, no pudo evitar dejar que unas lágrimas se le escaparan.

-Mi vida...- intentó decir él, quería reconfortarla, hacerla sentir mejor...

-Este lugar fue mi cobijo cuando creí que no tenía nada más que a Kaan y mi orgullo...

-Sehrazat...

-Pasé momentos increíbles aquí... victorias, esas fueron las más abundantes, por suerte... pero aquí también me sentí algo sola, creyendo que aunque pudiera tener éxito en mi trabajo, evidentemente en el amor, no había logrado lo que deseaba...

-¿Y qué deseabas? - le preguntó él, focalizando sus ojos en sus labios.

-Una estabilidad emocional... un padre para Kaan... que siempre fuiste tú, pero quería una figura masculina para él, alguien que me acompañara en su crianza diaria... y claramente tú no estabas cerca todo el tiempo...

-Entiendo...

-Una persona que compartiera mis alegrías, mis rabias y mis momentos tristes... una persona que me esperara en casa y que me hiciera feliz...

-Bueno, creo que sin proponértelo... lo has conseguido... ¿verdad?

-Es lo que siento... por eso me obligo a pensar que debería recordar esta casa con nostalgia, pero que es necesario seguir adelante y proyectar hacia el futuro contigo...

-Así es...- dijo y la apretó entre sus brazos.

Sehrazat se separó para mirarlo y sonrió. Él besó sus labios con ternura y por un rato estuvieron en silencio...

Segundas oportunidadesWhere stories live. Discover now