Segundas oportunidades

Capítulo 8

Sehrazat se distrajo mirando los mensajes en su móvil. Habían llegado hacía un rato y su reunión estaba pactada para dentro de media hora. Sentía satisfecha porque de esa manera tendría el resto de la tarde y la cena para compartir con Onur... y el resto del tiempo hasta volver en el vuelo para luego del mediodía...

Sonrió al ver un mensaje de Onur, en el que le repetía que no se demorara y sintió una mano en su hombro y al girar se encontró cara a cara con Miguel Sosa, su jefe en Barcelona, el hijo de su querido Manuel, su mentor y amigo...

-Miguel...- dijo sorprendida y el hombre sonrió y se sentó frente a ella.

-Sehrazat...

-Pero... ¿tenías que venir también? Yo... estoy aquí porque...

-Se por qué estás... yo pedí que te llamaran... quería hablar contigo...

-¿Y la reunión con el cliente?

-La tuve yo en el almuerzo...

-No entiendo nada...-dijo y su sangre de congeló cuando él apoyó su mano sobre la suya...

-¿De verdad no entiendes? ¿no te imaginas por qué querría hablar contigo?

-Si es para reprocharme la relación que supuestamente tuve con tu padre...

-No es eso... he elegido creerte... aunque no puedo asegurar que mi padre te viera solo como a una amiga...

-Si no era así, él nunca me dio muestras de otra cosa...

-Pero no vine a hablar de eso...-dijo y acarició su mano con suavidad.

Sehrazat lo miró a los ojos, evidentemente él enviaba señales que ella prefería no interpretar...

-He venido porque necesito decirte lo que me pasa...

-Miguel...- empezó a decir ella y él colocó un dedo sobre sus labios para que lo dejara continuar.

-Desde que te fuiste, he contado los minutos para que vuelvas... estoy en una encrucijada... porque las cosas te han ido bien y si respeto los deseos de mi padre, debería ponerte al frente de nuestra empresa en Estambul... pero por otro lado, no soporto la idea de no volver a verte...

Sehrazat abrió los ojos con incredulidad. No se imaginaba ninguna de las dos cosas que acababa de oír. Y la más importante era la que la ligaba a su país y que podía darle una salida para decidir seguir adelante en caso de que su relación con Onur se mantuviera...

-¿No me dirás nada? - le preguntó él y ella rescató su mano con suavidad.

-Con respecto a ambas cosas... no tenía idea... evidentemente es genético el hecho de disimular lo que les pasa...

-¿Entonces? ¿Acaso tengo alguna esperanza de que me des una chance?

-Miguel... no se qué decirte... la verdad es que no quisiera herirte... pero es que... me reencontré con el papá de Kaan... y decidimos darnos una segunda oportunidad...

-¿Están juntos?

-Estamos intentándolo...- dijo y se mordió el labio para no sonreír demasiado, le causaba un poco de pena la situación...

-Entiendo... entonces te vendrá bien hacerte cargo de la empresa en Estambul...

-¿Tú crees que podría hacerlo bien?

-Mi padre lo creía... y yo te miro y te creo capaz de cualquier cosa...- dijo y miró hacia abajo con tristeza- es una lástima que no me haya atrevido antes a hablarte de lo que siento... ¿quieres que cenemos esta noche, para despedirnos?