Change my mind |4|

81 8 3
                                    

Change my mind/Cambiar de parecer/Changer d'avis

De Gambito cambiando de parecer.

Gambito sabe que algo está por ocurrir, ha escuchado a escondidas las reuniones de Magneto y ha visto a sus amigos alistarse para la batalla de manera imperceptible, disimulando en los entrenamientos, como si con eso pudieran evitar que los demás se den cuenta.

Rogue no sabe, porque ella es una X-MEN y su líder, Charles Xavier, no aprende a no cegarse por su amor hacia Erick, creyendo que el hombre hará lo correcto y no se irá de su lado.

Pero Magneto ha cambiado y el cajún, que se mantiene a su lado, solía creer que sus convicciones eran lo que lo motivaban. Quizá lo fuera, hasta la llegada de la sureña a su vida.

Con las risas disimuladas, las tomadas de mano a escondidas y esas miradas cómplices cuando no hay nadie cerca.

Ella llegó, rápida y letal, como si siempre hubiera pertenecido a su lado y le entregó todo, incluso la confianza, como si no conociera su historial. Cambiando su forma de pensar, cambiando su mundo y convirtiéndole en alguien mejor.

A Rogue no le había importado las estafas en sus manos y las mentiras en su boca. Rogue le amó desde el inicio como nadie y ahora él podía advertirle, aprender a ser valiente y dejar de esconderse.

—Nunca me sentí así antes— dice él, recostado en el techo de la Mansión X junto a ella, observando la copa de los árboles que rodean el lugar.

—Yo tampoco— responde ella sonriendo.

Al final de la noche, suelen decirse adiós. Aun cuando siguen viéndose desde lados opuestos a la hora de pelear.

—Puedes volver mañana— se despide Rogue al ver los primeros tonos claros del cielo.

Gambito asiente en automático, pero su cuerpo se tensa al pensar en dejarla sabiendo del peligro. Su corazón se detiene un momento, pero su cerebro, rápido como el de los ladrones, le da una nueva alternativa.

Ya está pensando en la casa floreada de su hermano, esa cercana a la frontera francesa, cuando toma la mano de ella.

—O puedes venir conmigo, chérie.

—Remy...

Écoutez-moi s'il vous plaÎt. Hay algo que está por venir, algo malo para los mutantes. Sé que no hablamos de ellos cuando somos nosotros, pero Magneto está tramando algo grande.

—¿De qué estás hablando?

Gambito duda, consiente de su código de honor, pero finalmente se lo cuenta todo: los nuevos reclutas, los planos de los centinelas modificados y las infiltraciones en el gabinete presidencial.

Sabe que lo hace porque la duda de amarla se ha ido y sabe que ella es real, pero se siente entre enojado y orgulloso al verla apretar sus guantes y fruncir el ceño. Sabe lo que dirá. También sabe que él tendrá que cambiar de parecer, suprimir sus instintos de huida y adaptarse para hacer lo correcto.

—Debemos luchar, proteger a los nuestros. Hacer por otros lo que nadie hizo por nosotros— sentencia ella.

Se levanta con elegancia y le tiende la mano a él, porque nunca fueron realmente enemigos y si la guerra se avecina, deben preparase para luchar contra lo que intente separarlos.

Gambito acepta la mano, casi resignado.




Écoutez-moi s'il vous plaÎt: Por favor, escuchame.

La sudiste et le voleur [Rogue x Gambit]حيث تعيش القصص. اكتشف الآن