Te Arreglaré. (#Fix You 1)✔️(Editando)

Capítulo 21: No puedo quererlo.

Capítulo dedicado a:

******

Capítulo 21: No puedo quererlo.

Helena...

Cristián y yo llegamos totalmente empapados a la tienda donde conseguiremos lo que necesitamos para la fiesta de la Señora Dana.

Y tal vez sea una locura aparecer así; pero no podemos perder el tiempo regresando a casa para cambiarnos de ropa primero.

-¿Por qué exactamente en el mundo, no vinimos en tu coche?-le pregunto a Cristián mientras trato de exprimir un poco de agua de mi ropa, antes de entrar en la tienda.

-No lo sé, simplemente comenzamos a caminar, y me olvide por completo de el, ni siquiera me di cuenta de que el cielo estaba nublado-me responde mientras pasa sus manos por su cabello para apartarlo de su rostro, lo que lo hace lucir extremadamente sexy, cosa que no debería estar pensando.

-Bueno, ambos tenemos la culpa por esto. Es una suerte que conozca al chico que trabaja aquí, de lo contrario jamás nos permitirían entrar en estas condiciones-le digo tratando de ignorar mi anterior pensamiento y empujando la puerta para poder entrar.

-Hola Sebastian-lo saludo en cuanto lo veo.

-¡Helena!-exclama sorprendido acercándose a mi para abrazarme.-¡Cuánto tiempo sin verte!

-Un siglo-le respondo con una sonrisa mientras le devuelvo el abrazo y me admiro de nuevo por la tranquilidad y simplicidad con que siempre toma las cosas.

-Pero vamos entra, te traeré una toalla, no quiero que te resfríes-me dice soltándome.

-Ya te deje todo mojado y manchado-me quejo mirando su camisa.

-Es solo ropa Helena, está bien-me responde y entonces escucho como Cristián se aclara la garganta.

-¿Quién es tu amigo?-me pregunta Sebastian mirando extrañamente a Cristián.

-Él es Cristián-le respondo apenada, haciéndome a un lado para que pueda acercarse.- Y él, es Sebastian.

-Un gusto-se dicen al mismo tiempo pero puedo sentir cierta hostilidad en las palabras de ambos.

-¿Y qué es lo que los trae aquí?-nos pregunta Sebastian mientras comienza a caminar hacia la parte trasera de la tienda.

-Necesitamos muchas cosas para decorar y tú eres el indicado para vendernos eso-le respondo mientras tomo la pequeña tolla que me ofrece.

-¿Qué es exactamente lo que estas buscando?-me pregunta mientras le extiende otra toalla a Cristián sin siquiera mirarlo.

-Tendremos una fiesta de cóctel, algo sencillo. Será en el jardín trasero de su casa-le explico señalando a Cristián.-Pero necesito algo que sea elegante y sofisticado.

-Entonces viniste al lugar indicado-me indica mientras comienza a caminar hacia donde se encuentra lo que necesitamos.

-¿Has pensado en algún color en especial?-me pregunta Cristián mientras seguimos a Sebastian.

-Sí; dorado, negro y blanco, ¿qué te parece?- le pregunto mirándolo con expectación.

-Si tu consideras que se verán bien, yo creo que son perfectos-me responde mirándome con la misma intensidad de antes.

-Entonces ve por allá a buscar manteles blancos-le ordeno alejándome con urgencia de él.

-¡Epa! ¿Adónde vas tan rápido?-me pregunta Sebastian cuando choco contra él.