Capítulo 14.

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—Así que vas a actuar en la obra —dijo Violet llevándose la taza de café a la boca.

Yo asentí. Dejó la taza en la isla de la cocina, pero la mantuvo entre sus manos.

—Con mi hermano —continuó.

Yo volví a asentir. Ella hizo una mueca de asco.

—¡Os vais a tener que besar! ¡Que asco! Ugh, ugh —empezó a hacer sonidos de arcadas.

—¡Violet! —dije riendo avergonzada.

—¡Oh dios, tú quieres besarle! —dijo tapándose los ojos y sacudiendo la cabeza.

—¡Yo no quiero besarle! —exclamé sonrojada— Pero si quiero actuar tendré que hacerlo.

—Claro, excusas.

Yo rodé los ojos y bebí un poco de agua. No solía tomar café ni nada para el desayuno. Llevaba una hora hablando con Violet sobre cómo ayer nos cogieron a los dos. Ayer su hermano no le contó nada, así que cuando fui a su casa para recogerlos para ir a la universidad y saqué el tema me hizo sentarme inmediatamente y contárselo todo. Se vio sumamente sorprendida al imaginarse a su hermano como actor.

Hacía unos minutos que Kyle se había ido arriba a ducharse, así que pudimos hablar tranquilamente sobre preparaciones de boda, las cuales Violet las tenía ya bastante planeadas. Demasiado.

—Una boda en la playa quedaría muy bonita, pero el vestido se llenaría de arena, y odio profundamente la arena —murmuró ella pensativa.

—¿Y por qué no una en una iglesia normal y corriente? Muchas bodas quedan bonitas ahí —propuse.

—No lo sé, yo quiero algo al aire libre.

—¿Por qué no dejas esto de las preparaciones a alguna agencia de bodas?

—¿Y que me roben el dinero? No creo —se negó rotundamente.

—Pues pídeselo a tus padres. Tendrán que contribuir algo en la boda de su hija.

Ella en ese momento se mordió el labio y miró hacia abajo, a sus manos. Empezó a jugar con sus dedos mientras silbaba y me imaginé lo que pasaba.

—¿No les has dicho nada a tus padres sobre la boda?

—No es tan fácil. Si mi madre se entera le da un infarto. O peor; primero mata a Axel y luego le da un infarto.

Recordé que a la madre de Violet no le caía bien Axel, igual que yo. Nos tenía a los dos en el punto de mira.

—Pero tu eres su hija y tendrán que comprenderte.

—Le dijo la sarten al cazo —se burló.

—Le dijo la sartén al cazo —la imité con voz aguda.

Violet agarró un pequeño trozo de pan y me lo lanzó. Lo esquivé y le tiré la galleta que ella se estaba comiendo junto al café. Ella se tiró hacia abajo y la galleta voló hacia un Kyle que recién entraba por la puerta. La agarró al vuelo y se la comió.

—Hmm, está rica, gracias muñeca —me guiñó un ojo.

—De nada, ojalá te atragantes —sonreí hacia el.

Kyle sonrió, obviamente sin tomárselo en serio. Yo no lo dije en serio. Antes a lo mejor habría querido que se atragantara de verdad, pero ahora no era algo que deseara.

—Bueno, ¿nos vamos? —dijo Violet levantándose de su asiento.

Yo asentí y agarré mi bolso. Bajé hasta la calle sacando las llaves de éste mientras esperaba a que los dos hermanos vinieran para que nos fuéramos ya. Kyle, que todavía llevaba el pelo mojado de su ducha salió el primero, sacudiendo su pelo como si fuera un perro, haciendo que algunas gotas me cayeran en la cara.

Mi mitad imprevista. [#Wattys2015]Where stories live. Discover now