Mi mitad imprevista. [#Wattys2015]

Capítulo 10.

Era martes, y como habíamos quedado la semana pasada Kyle y yo, le estaba ayudando con el alemán. Mañana tendría que hacer una exposición oral sobre los folios que tengo ahora mismo en la mano, así que le estaba ayudando a traducirlo. 

—Ahora intenta decir el último párrafo tú solo. 

Él asintió, y como pudo empezó a hablar. Estábamos en el sofá de mi habitación, yo tumbada, y el sentado en el sitio opuesto al mío. Tenía las piernas encima de su regazo y estaba con la cabeza apoyada en un cojín. A el no parecía molestarle, ya que no se quejó cuando me coloqué así.  

—...um erfolgreich zu sein —terminó el de hablar. 

—¿Ves? El alemán no es tan dificil. 

El sonrió y se enderezó un poco en el sofá. Pensé que le molestaban mis piernas, pero cuando fui a quitarlas el negó con la cabeza y las mantuvo en el mismo sitio. 

—Supongo. Sólo que asusta ver venir el alemán. 

—Pero si se tiene una profesora tan buena como yo, todo puede salir bien —reí. 

—Claro, lo que te ayude a dormir por las noches —se burló. 

El me agarró los papeles que tenía en las manos y empezó a releerlos. En ese momento, mi móvil, que estaba en la mesa sonó avisándome de que me había llegado un mensaje. Violet no sería, ella directamente llama, Axel no tiene mi número, Kyle está aquí y a James lo tengo bloqueado. Con el ceño fruncido cogí el móvil. 

Era Jeremy, el chico del supermercado. Hace unos días le había mandado un mensaje diciendo que tenía la siguiente semana -es decir, esta- libre por las tardes, y él me respondió diciendo que ya me avisaría. 

Básicamente, en el mensaje decía que que tal me venía hoy para quedar. 

"Me viene perfecto hoy por la tarde, ¿te espero en mi residencia? x"

Obtuve como respuesta un simple "por supuesto". Dejé otra vez el móvil y miré a Kyle, que me observaba con curiosidad. Su ceja alzada como diciendo "cuéntamelo". 

—¿Por qué me miras tanto? ¿Quieres una foto? —Me levanté del sofá para sentarme recta, casi a su lado. 

—No gracias, no quiero tener pesadillas —volvió los ojos al papel. 

—Más bien tendrías sueños preciosos. Quizás hasta húmedos. 

—Ni que fueras Mila Kunis. 

—Pues la gente dice que tenemos cierto parecido ¿sabes? —repliqué con tono divertido. 

Últimamente casi nunca veía a Kyle, sólo por los pasillos y nos saludábamos con una pequeña sonrisa. Sólo he pasado mucho tiempo con el una vez, y es esta. Creo que no vivir en la misma casa y no vernos las caras constantemente nos ha venido bien. Ya no tiene esos cambios de humor tipo "ahora te pido favores pero ten cuidado que después te echo una mirada que te hielo".

—Claro, os parecéis en lo blanco de los ojos. 

—Exacto —dije. 

El soltó una carcajada para después poner cara de pensativo.

—¿Quién era el del mensaje?

—¿Cómo sabes que era un chico?

—No lo sabía, pero ahora sí. 

Ahogué un grito. Obviamente falso. Por dentro estaba medio riéndome.

—¡Oye! ¡Ese truco es mío! —me quejé.