De las cenizas brota un verdor de esperanza. Una joven pueblerina crece en un hogar donde se ve forzada a crecer muy a prisa; mientras crecía se daba cuenta de que tenía ciertas cualidades que otras personas veían con malos ojos: su curiosidad por obtener respuestas, una relación armoniosa con el bosque oscuro y a sus habitantes como viejos amigos. Después de un encuentro fortuito con una de las criaturas más temidas de todo el bosque oscuro, su nombre se hizo conocido por todo lo alto y bajo entre las criaturas mágicas, incluyendo en las tierras enemigas. Por su parte un rey, suficientemente longevo para haber combatido en varias guerras, pero suficientemente conservado como para ser de admiración por las jóvenes debutantes de su corte; se aquejaba, pues cada día, sin falta, sus recuerdos terminaban cuando se marchaba a dormir, y al despertar se encontraba con las ingratas escenas de su dormitorio mancillado por sangre, sin propietario a la vista, aún viviendo en una tierra rica en médicos más que capaces, chamanes, brujos y brujas, hechiceros, elfos y cuanta criatura hábil fuese con la magia, no podían darle una respuesta de lo que le ocurría por las noches. En una época, dos tierras dejaron vestigios de miedo y temor pero basta fortuna en un reino, mientras que en el otro dejó pobreza pero espíritus más fuertes comparados a previos a la guerra; en donde en un reino la magia convive en armonía con la ciencia, mientras que en el otro, la voz de la fe y la doctrina convertía en ceniza cualquier cosa que se atreviese a dudar de sus dioses; dos criaturas que nunca debieron haberse conocido, fueron entrelazadas por decisión de las nornas para poner fin a una guerra que tenía más que cansados a los dioses. *Actualizaciones los lunes por la noche*