Al mediodía del último día de octubre de 1989, 43 mujeres de todo el mundo dieron a luz. Una hecho nada inusual, sino fuera porque ninguna de esas mujeres estaba embarazada al comenzar el día. Reginald Hargreeves, un multimillonario excéntrico, quiso adoptar a todos los bebés de esos que le fuera posible. Consiguió siete,pero eso no significa que no haya más por ahí.