Claro que yo también te voy a echar de menos y no entiendo por qué tú tienes más cojones que yo a decirlo, aunque quizás no se trate de "tener cojones" sino de que lo sientes. Y punto. Y no pasa nada. Tampoco tiene por qué dar tanto vértigo expresar un sentimiento, que la culpa la tienen los dramas románticos pero qué interiorizados están. Venga, chica, que tampoco es tan difícil.