Nubes grices amenazaban con derramar cientos de lágrimas junto con ella, como si fueran las únicas capaces de acompañarla en su dolor. Una escurridiza gota salada se atrevió a escaparse de sus ojos al pensar en que toda su vida fue una mentira. Tantas veces le repitieron que era una chica especial, única, que se lo terminó creyendo. ---------------------------------- ♡Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Thomas Astruc.