Lars Loud, él séptimo hijo de la familia Loud, es un chico fácilmente opacado por sus hermanos. La soledad y la agonía lo atromentan constantemente, y su única manera de escapar de el mundo que él tanto odia, es mediante la escritura o mediante extrañas conexiones con la muerte, tema en el cual se vio interesado desde el momento en el que nació. El deprimido niño, a pesar de aquello continua viviendo. Y a pesar de continuar con su monótona y, según él, despreciable vida, sus pensamientos se ven repentinamente modificados luego de conocer a una persona que era del tipo que él mismo se prometía nunca interesarse. Esa pecosa, generará emociones inexplicables para el gótico, lo que lo hará someterse a experiencias que él nunca pensó que podría atravesar durante su vida.