¡Lista para mi primer día en la preparatoria!
Me levanto de la cama ansiosa, hoy era el día. Me baño y visto rápidamente, para salir de mi casa luego de que mis padres me desearan suerte.
Cuando llego frente a la preparatoria los chicos ya estaban ahí, por lo cual me detengo al lado de Farkle, quien me saluda con un suave beso en la comisura.
Las chicas entran a su modo, mientras yo me siento extremadamente pequeña ante todo un nuevo mundo.
Vamos subiendo las escaleras cuando Farkle se voltea hacia mi.
— ¿Sabes? Me alegro que estemos juntos ______, tengo una sensación que describiría como...— Lo interrumpo.
— ¿Atascado?.— Me pego a el, mirando sus preciosos ojos.
— El que Farkle encuentre a ______ me hace saber que el universo tiene orden y nuestra existencia no es solo una coincidencia.— No podía sentirme más feliz, Farkle era tan tierno y- — Hola, lindas coincidencias.— Me volteo y veo a unas tres chicas con un estilo parecido al mío detrás.
— ¡Hey!.— Lo golpeó suavemente en el hombro.
— ¡Yo creí que eran tu!.— Intenta excusarse.
— ¿Ah si?.— Miró detrás suyo, donde un lindo chico de cabello negro, piel pálida y estilo gótico me sonreía coqueto.— Hey, chico emo- — Intento acercarme coqueta hacia el cuando Farkle me toma del brazo para acercarme a él.
— Ouh no.— Me retiene.— Ella es mía, amigo.— Le dice al chico, el cual solo ríe.
— Está bien, está bien.— Alza sus manos inocente.— Solo quería presentarme, me gusta tu estilo, — me sonríe, a lo que le devuelvo la misma, admirando sus colmillos afilados— Soy Demon, encantado.— Me extiende su mano, yo correspondo. El toma mi mano y la lleva a sus labios, dejando un suave beso, a lo que yo suelto una risita. Escucho a Farkle gruñir a mi lado.— Tengo que irme, nos vemos, linda señorita y chico.
Solo puedo reír cuando Farkle imita con voz aguda el "linda señorita".
— Hmm, preciosa coincidencia, ¿no?.— Lo molesto.
— No tengo idea de que sea en español, pero se que no es bueno.— Frunció su ceño adorablemente.
— Así que mejor ninguno de los dos tiene casualidades, ¿hmm?.— Le pregunto tocando su hombro, a lo que el asiente rápidamente para luego acercarme y besarme, a lo que lo correspondo apasionadamente.
Nos tuvimos que separar cuando una marea de estudiantes comenzó a empujarnos, yo cayendo contra una linda chica mayor, a lo que me sonrojé rápidamente y me pegue a la columna que estaba cerca, y de alguna manera, Farkle resultó sobre una lámpara.
Sip, este lugar será nuestro.
.
.
.
De un momento a otro dos chicas y un chico de último grado estaban enfrentando a Lucas, Riley y Maya, obligándonos a ir al agujero de la escalera, a lo que rápidamente me dirijo allá, no queriendo problemas.
— Hazlo.— Le dice el chico a Farkle, que seguía en la lámpara, a lo que este salta de ella, y yo me acerco rápidamente a asegurarme que esté bien.
— Lamentó que estemos aquí.— Lucas se disculpa cuando los de último año se van.
— No es tu culpa Lucas.— Le dice Farkle.
— No puedes protegernos.— Le dice Zay, yo solo puedo ver la cara de frustración del rubio.
— Lo hacia.— Se lamenta.
— Pero hey, en la secundaria. Aquí todos son mayores, y más experimentados, es lógico que nos cueste adaptarnos, y que no puedas protegernos de ellos no significa que seas mal amigo, o débil, ellos simplemente están a otro nivel.— Trato de reconfortarlo, acercándome a él para abrazarlo y obligarlo a que ponga su brazo sobre mis hombros.— Seguirás siendo como mi hermano mayor.— Lo miro sonriente, logrando que sonría un poco.
.
.
.
Y luego de un par de lecciones, y algunas discusiones más, con Farkle decidimos salir del hueco e ir a explorar la preparatoria.
Acompañe a Farkle hasta los laboratorios, pero todos los chicos parecen de dos metros, por lo cual salimos rápidamente de ahí.
Luego nos encontramos a Lucas, Maya, Riley y Zay, todos en crisis.
Creo que no ser buena en nada por fin tiene un lado bueno, no tengo con quien compararme.
.
.
.
— Todo es culpa tuya.— Entramos todos al aula de historia, donde el señor Matthews nos veía confundido.
— Am... ¿que sucede?.— Cuestiona.
— Todo salió mal amigo, necesitamos culpar a alguien.— Le informa Zay, mientras yo solo veía divertida.
Hasta ahora mi experiencia de preparatoria había sido: Chicos y chicas lindos, un lindo chico dark y ver a mis amigos en graciosas crisis.
Si, yo estaba bien.
— Yo solo estoy viendo el mundo arder.— Todos me miraron mal.
— Tenemos grandes problemas Matthews.— Le dice Maya.
— Arréglelo señor.— Le ordena Lucas.
— Bravo...— Aplaude el señor Matthews.— Estupenda interpretación. ¿Comenzamos de nuevo?.
— Estupendo, ¿cual será la diferencia?.— Inocente Riley.
— Solo que esta vez, yo quiero hacerlo primero.
— Por supuesto, en cinco, cuatro, tres...— Maya cuenta.
— ¡Tu lo hiciste!.— Acusa a Riley.
— Yikes.— Se sorprende la castaña.
— ¡Yo estaba bien en secundaria! ¡Podía seguir ahí para siempre, hablando de lo que yo quisiera! ¡Y ustedes creían todo lo que yo decía!.— Nos señala.— ¡Pero tenían que traerme aquí! ¡Ahora tengo que enseñar cosas!— No pude evitar reír por lo bajo.— ¡No es por eso que estoy aquí!.
— ¿Nos preparaste?.— Le pregunta Riles.
— ¿Que?.— Pregunta el señor Matthews confundido.
— ¿Nos preparaste para esto?.— Vuelve a cuestionar la castaña.
— No somos importantes Matthews.— Afirma Maya.
— Nos hizo sentir importantes.— Reclama Lucas.
— No nos preparo para ser no importantes y no sabemos qué hacer.— Ahora habla Farkle.
Me acerco a él lentamente.
— Claro que eres importante, y sobretodo para mi, niño bonito.— Trato de hacer que se sienta mejor.
— ¡Pero ya no somos reyes!.— Reclama Maya.
— Los mayores si lo son.— Afirma Riley.
Y cuando me di cuenta, estábamos de nuevo en el hueco, con el señor Matthews mirándonos.
Y luego, en otro segundo, solo éramos Riley, Maya y yo, todos los demás se habían ido enojados.
— Las quiero, chicas. Y cualquier cosa que necesiten llámenme, pero quiero disfrutar de mi adolescencia.— Les di una sonrisa de disculpa y me aleje.
.
.
.
Ahora mismo me encontraba sentada en un pasillo de la preparatoria escuchando música, cuando una persona se sienta a mi lado.
— Hey.— Demon me saluda.
— Hola, Demon.— Le saludó devuelta.— Y oye, me encanta tu nombre.
— Diría lo mismo, pero no me has dicho el tuyo.— Me dice, a lo que suelto una risa.
— _______.— Me presento.
— ¿Y tu noviecito?.— Me pregunta, sacudiendo su cabello. Sexy.
— Uhm, digamos que tuvimos algunos problemas con nuestros amigos.— Miro a mis botas.
— Claro, primer año siempre es difícil. Pero estarán bien, no te preocupes.— Pone su mano en mi rodilla en apoyo.
— Gracias.— Le respondí.— Y perdón si mal interpreto las cosas, pero digamos que con Farkle... tenemos algo, así que no estoy interesada en algo más.
Me sonrojo al escuchar que ríe.
— No te preocupes, cuando dije que solo quería ser tu amigo era verdad, digamos que juego más para el otro bando.— Lo miro sorprendida pero en un segundo lo miro sonriente.
— Genial.
Y ese día me fui a casa con un nuevo amigo, y mi corazón un poco roto al ver a Riley llorar.
——————————————————-
Perdón por subirlo tan tarde pero acabo de terminarlo ;)