Otro día más en la vida de Xiao DeJun.
Despertaba gracias a la alarma programada a las seis y media de la mañana.
El castaño estiraba su cuerpo para poder despertar completamente.
---- Bella, Buenos días.. - acarició la cabecita de la cachorra - vamos a desayunar..
Ambos bajaron las escaleras y un nudo se formó en la garganta de DeJun.
---- ¿ya te tienes que ir? - preguntó en un susurró - llegaste apenas ayer..
La madre del chico volteó y se acercó a paso lento hasta su hijo.
---- lo sé... Trataré de volver lo antes posible, ¿de acuerdo? - acarició las mejillas del muchacho frente a ella - cuida la casa, tus notas y come bien, ¿entendido?
---- claro.. - se alejó de su madre y bajó la mirada - a-adiós..
---- nos vemos pronto, Junnie.
Y así fue como su madre salió de la casa, dejando un silencio sepulcral y unas inmensas ganas de soltar aquellas lágrimas que retenían sus gatunos ojos.
DeJun limpió sus ojos y caminó a paso lento hasta la cocina. Bella seguía sus pasos con notable preocupación en sus ojitos.
---- pensé que seguirías dormido..
Xiaojun se dio la vuelta y se encontró con Yixing, el jardinero, sonriendo con amabilidad.
---- Me gustaría poder dormir.. - bromeó mientras reía, tratando de ocultar la realidad -
---- apenas comienza el año, DeJun...tendrás que esperar un poco para las vacaciones. - el jardinero pasó por su lado y revolvió su cabello - ten un buen día.
---- Igualmente.. - susurró -
Tomó la Bolsa con alimento de Bella y le sirvió en su platito dorado.
La perrita comenzó a comer su desayuno y Dejun comenzaba a recién preparar el suyo.
Una taza de café con leche y 2 tostadas con mermelada de ciruela. Con eso iría bien.
Mientras ponía azúcar al café, revisaba su celular.
Su preceptor le había mandado un mensaje ayer y no lo vió.
Preceptor Lu:
Lamento molestarte aún en vacaciones, DeJun...
Pero quería desearte un buen comienzo de clases, esperemos que este año sea mejor que el anterior.
Descansa, pequeño. ¡Hasta mañana!
Su preceptor era tan atento y amable con él.
Lu Han, siempre se preocupaba por DeJun, por su estado de ánimo y por sus problemas.
Decidió contestarle:
Espero que así sea, Gege...
También tenga un buen comienzo de clases.
Y siguió con su desayuno.
No tardó más de veinte minutos en acabarlo.
Bella estaba afuera con YiXing y XiaoJun fué a su cuarto para poner su uniforme.
---- todo irá mejor, solo es cuestión de pensar en positivo.. - se dijo a sí mismo frente al espejo - ojalá así sea..
Miró la hora: siete y cuarto.
Corrió al baño y cepilló sus dientes, acomodó su cabello y salió de su habitación.
---- ¿listo, DeJun? - preguntó su chofer, ZiTao -
---- e-eso... creo. - intento sonreír - se hará tarde..
Ante eso, Tao tomó las llaves y fué a la puerta principal para salir.
---- cambia esa cara, pequeño - pelizcó su mejilla Suho, el portero - ten un excelente día, Junnie.
---- igualmente, Hyung.. - sonrió de lado -
Subió al auto y soltó un entrecortado suspiro.
Los nervios comenzaban a comerlo de a poco.
¿Y si todo era igual o incluso peor? ¿Soportaría un año más?
Sus dedos jugaban con las correas de su mochila y sus ojos se cristalizaban mientras miraba por la ventana.
---- si no te sientes bien, avísale a tu preceptor e iré a buscarte, ¿si?
XiaoJun solo atinó a asentir y seguir pensando.
Realizó aquellos trabajos de ansiedad que había encontrado en Internet.
Primero, debía buscar cinco cosas y enfocarse en cada una de ellas.
Su mochila: era color verde, con un llavero en forma de hueso con el nombre de Bella grabado en él, colgando de uno de los cierres principales. Una botella de agua estaba guardada en el bolsillo izquierdo y en el derecho, estaba guardado un paquete de pañuelitos descartables.
Se dió cuenta de la marquita de acrílico azul que había en uno de los bolsillos. Su amigo YangYang había hecho eso, cuando iban a la misma escuela.
YangYang..sí que extrañaba a ese chico.. Extrañaba sus locuras y cómo alegraba sus días.
Sus ojos se aguaron cuando cayó en cuenta de que su mejor amigo estaría por comenzar sus clases en Alemania.
Sorbió su nariz y cambió de objeto.
Sus manos: sus manos eran delgadas y sus dedos largos. No tenía anillos, solo un brazalete de plata que compartía con YangYang.
No habían raspaduras o heridas.
Sus uñas estaban normales, nunca se mordería las uñas. Su padres se darían cuenta de que algo pasa y él no sabría cómo explicar que es lo que tiene.
---- Llegamos, DeJun.. - avisó Tao - ¿estás listo?
Puede que Tao no supiese que es lo que siente realmente DeJun, pero sabe que no le gusta que eso le pase al menor.
Muchas veces fingió no escucharlo llorar por la madrugada, no escuchar el piano ser tocado de una forma muy triste, no haber visto sus ojos afilados llenarse de lágrimas cuando era criticado o corregido por algo.
Eso cambió cuando una noche. Esa noche cuando DeJun salió de casa con una fuerte tormenta y se sentó en el patio, dejando que el agua golpeara su cuerpo.
Por la ventana vió como el cuerpo de aquel muchacho de trece años temblaba y ocultaba su cabeza entre sus piernas.
Lo vió tan vulnerable, tan necesitado de contención y cariño que no pudo evitar sentir empatía por el chico.
Desde ese día, Tao es quien puede pasar horas y horas escuchando lo que quiera decir DeJun, y si Xiao quiere solo compañía y no decir siquiera una palabra, ZiTao estaría a su lado.
---- C-Creo... - respondió el adolescente - nos vemos luego, gracias por traerme.
XiaoJun caminó a la entrada de la escuela rápidamente y fué a la dirección a pedir su horario.
---- Disculpa, ¿eres nuevo?
Giró la vista hacia la persona que parecía hablarle.
---- ¿A-A m-mí? - susurró -
---- Sí, a tí - el pelinegro sonrió -
---- no lo soy.. - bajó la mirada -
---- Oh, genial... Entonces.. ¿Podrías ayudarme a encontrar el Salón D3?
DeJun revisó su horario y, si era lo que pensaba, compartirían clases.
---- ¿t-tienes l-literatura a la pri-primera hora?
Algo que sorprendía a DeJun es que el chico no se hubiese burlado por como hablaba. Por más que tratara de estar tranquilo, su voz se entrecortaba.
---- así es, literatura por dos horas.
---- Tambien yo.. - trató de sonreír - Va-Vamos.
XiaoJun caminaba lentamente hasta el aula que correspondía y de vez en cuando, saludaba a algún profesor si se lo cruzaba por el camino.
---- mi nombre es Wong GuanHeng, pero es más fácil Hendery.
El corazón de XiaoJun comenzó a latir rápidamente y mordió sus labios.
---- Xiao DeJun.. - levantó un poco la mirada y se encontró con una bonita sonrisa, perteneciente al pelinegro. -
---- ¿puedo sentarme a tu lado en clases? - volvió a hablar Hendery -
Nadie nunca le había preguntado eso. Nadie había sido tan amable en estos tres años..
"¿Qué se supone qué diga? ¿Cómo se supone qué reaccione?"
---- tomaré eso cómo un sí. - Hendery miró a sus costados - eres muy tímido..
"Oh, no.. Ya vendría algo malo."
---- me caes bien, podríamos ser amigos, ¿no?
Hana ingresaba a aquella nueva institución.
Su cabello corto por los hombros y de un bonito color rubio con hebillas de flores acomodando algunos cabellitos sueltos, se ganaba miradas. Su mochila color amarillo llamaba la atención, además de los llaveros que golpeteaban contra los cierres.
No era extremadamente alta, pero aún así.. Era poco "común" ver a una chica con esa altura. Sus ciento setenta centímetros, le gustaban.
Sus ojos cafés divagaban por los pasillos y los tableros, en donde habían afiches y listas de quién sabe qué.
Buscaba la dirección hace ya un rato.
Su madre la dejó en la puerta y siguió su camino al trabajo, Hana nunca había visitado aquella escuela y ¡podría llegar tarde a su primera clase!
— Oye..
Se paró frente a un muchacho alto de cabello negro y piel levemente bronceada.
— Uh..¿sí? - se volteó a verla -
— ¿sábes dónde está la dirección? - preguntó mientras tomaba las riendas de su mochila - no sé dónde está y... Debo buscar mi horario.
Ese chico se le quedó mirando durante unos segundos y luego asintió.
— vamos.
Hana comenzó a seguirlo. Miraba los alrededores, su coreano aún no era muy bueno..así que su cerebro se exprimía por entender aquellos signos.
— eres nueva, ¿no es así? - volteó un poco su rostro para poder observar a la chica detrás de él - tienes cara de haber visto un sapo.
— ¿se nota mucho?
se tomó el atrevimiento de adelantar sus pasos y tomar el brazo del muchacho.
— realmente estoy nerviosa, ¿a qué curso vas? ¿cómo te llamas?
Él la miraba con extrañeza. Esta chica era muy, demasiado, simpática y muy...rara.
Las chicas no solían ser así, menos con él. ¿era así de confianzuda con todos?
— Wong Yukhei, tercer año. ¿y usted, niña? ¿segundo grado?
Hana tardó en comprender y luego rió.
— ¿seguro que estás en tercero? creo que hay un asilo a unas calles de aquí. - señaló con su dedo hacia la derecha y sonrió - puedo llevarlo si quiere, no sería bueno que se pierda.
la sonrisa en los labios de Yukhei, se fue borrando. ¿ella se burló de él? ¿esa pequeña chica, se burló de él?
— chistosa. - respondió entre dientes - pero no respondiste a la pregunta, enano.
— también tercero, según lo que tengo entendido.
— ¿te tendré que soportar en clases? - bufó -
Hana golpeó el brazo de Yukhei y volvió a reír.
— ¿no te cansas de hablar? - preguntó Yukhei mientras se recostaba en la pared -
— hmmm, no.
— bien, tenemos tres minutos para llegar al aula.
el chico, empezó a caminar hacia las escaleras.
— ¿vendrás? - preguntó parando su caminata y mirando hacia atrás. - puedo dejarte en el jardín de infantes, si quieres.
— se ve que aprendiste a ser gracioso. - Hana trotó hasta llegar a su lado y acomodó su mochila - vamos, palmera.
— ¿palmera? mucha confianza, niñata.
— shh, silencio.
ambos adolescentes llegaron al aula. Los alumnos ya estaban en sus asientos y el profesor estaba por ingresar.
— ¿tarde desde la primera clase, Wong?
— fui un buen alumno, uno muy bueno a mi parecer, y ayude a esta nueva alumna a llegar hasta nuestra tan querida aula. - sonrió al finalizar - ¿verdad, nueva?
— a-ah, sí. Lee Hana, ingresé este año, no conocía el instituto, perdón por la tardanza, no volverá a suceder.
— bienvenida, señorita Lee. espero que se acostumbre a nuestras instalaciones. - sonrió levemente el profesor - pueden pasar, presentate a tus compañeros, Lee
los muchachos pasaron y antes de que Yukhei se fuese a su lugar, Hana tomó su brazo.
— guárdame lugar, estaré pegada a tí como pulga hasta que hable con otras personas. - susurró hacia el chico -
¿Hana era así de directa siempre? Yukhei sonrió disimuladamente.
— ¿qué ya no lo eras? - murmuró cerca del rostro de la chica - pulga rubia.
finalmente, lo dejó ir y se acomodó en el medio de la pizarra. Otro chico había a su lado, quien sonreía hacia ella con suavidad.
Era bueno saber que no sería la única nueva en el curso.
— ella es su nueva compañera, espero que sean buenos alumnos y no se comporten mal, que sean amables con ella y convivan bien durante este año y los que siguen.- el profesor se sentó en su escritorio y miró a Hana - preséntate.
— oh, sí..amm..- sonrió amablemente - Mi nombre es Hana, tengo quince años y..es mi primera vez en corea, hablando el idioma y asistiendo a una escuela aquí..espero llevarme bien con ustedes y pasar un buen año. - finalizó con una pequeña reverencia y su sonrisa se amplio un poco -
— bienvenida, nuevamente, toma asiento donde quieras.
ella obedeció al profesor y se encaminó al lado de Yukhei.
Luego, el chico comenzó a presentarse frente a todos.
Solo logró escuchar el principio, ya que Yukhei llamó su atención.
— pulga. - sonrió de lado Wong - ellos son Mark y...Chenle - señaló a unos chicos detrás de su asiento
— ¿Chenle? - rió levemente la chica - es tierno..
— Zhong Chenle - sonrió mostrando sus brillantes dientes - ese es mi nombre
— ¿China? - preguntó Hana con asombro -
— así es.
— eso es asombroso...- dirigió su mirada al muchacho al lado del tailandés - Hola..
— hola. - respondió seco -
— oh, es tímido.- habló Chenle - sé amable con Hana...
— dije "hola", ¿qué más quieres? - contestó de mala manera -
— uy, guarda tus garritas, gatito. - Chenle pellizcó la mejilla de Mark - es un poco arisco..
— ya veo..no es un problema. - sonrió Lee - espero que nos llevemos bien en el futuro, Mark..
— ajá..
La clase de Filosofía acabó y tocaba el receso.
Por más que Yukhei tratara de ocultarlo y fingir que no, le agradaba estar con Hana. Ella era diferente y le resultaba cómodo hablar con esa chica.
— Vamos al comedor, ¿vienes pulga?
— Déjame arreglar esto y voy.
Comenzó a acomodar sus cuadernos y cartuchera sobre la mesa. Una vez arreglado, se puso de pié bajo la atenta mirada de Chenle, quien al notar su mirada le sonrió, y emprendieron camino.
Hana iba caminando lentamente mientras contaba el dinero y lo volvía a guardar, cuando un lápiz chocó con sus zapatos.
Se agachó a tomar el útil Escolar y se enderezó nuevamente para visualizar al dueño.
Leyó en una parte del lápiz "Xiao DeJun" Junto con una huellita de perrito a su lado tallado.
— ¿DeJun? - llamó en voz alta -
Su vista dió con un banco ocupado por dos personas. Un pelinegro y otro castaño.
El pelinegro sonreía levemente en su dirección mientras que el castaño mantenía sus ojitos fijos en el suelo, abiertos por la sorpresa y su mano extendida al suelo.
— Oh...¿eres tú?
Se acercó a paso lento hasta el grupo y extendió el lápiz.
— supongo que esto es tuyo..- sonrió y volvió a verlo - Soy Lee Hana..
— Wong KunHang y él es XiaoJun.. - el pelinegro habló - un gusto conocerte, Hana.
— ¡Hana!
Era Yukhei quien la llamaba.
— ¡apúrate o me voy!
— dame un segundo, gritón. frunció su ceño en dirección a su compañero de Banco - bien..debo irme, un gusto hablar con ustedes.
Hana se tomó la tierna libertad de tomar la mano del castaño y dejar el lápiz en ella, Y luego se despidió con una sonrisa.
— Bonito detalle el de la huellita. Me gusta.