Elioth
Una semana más tarde...
Salimos al fin del infierno, no he comido nada en una semana, necesito una gran hamburguesa con papas fritas en mi ser, observo a mi hijo que está en mis brazos.
Campeón ¿Quieres comer hamburguesas? - pregunto y asiente con una sonrisa en el rostro.
Si quiero papá - dice recostando su cabeza sobre mi hombro.
Elioth, el doctor te hablo de una buena alimentación por ahora, no pueden comer nada pesado - me regaña mi madre y ruedo los ojos.
No me ruedes los ojos, jovencito - dice pellizcando mi brazo y me quejo porque estira después mi oreja.
Mamá, no hagas eso frente a mi hijo - me quejo varias veces como un niño pequeño, escucho la risa de mi pequeño lo cual me tranquiliza,vaya le gusta que a su padre le reprendan.
Creo que sé lo que tengo que hacer mamá - admito y ella me mira confundida.
Que tienes que hacer? - pregunta interesada.
Voy a volver con ustedes y mi hijo a nuestra ciudad pero antes tengo que hablar con mi pandilla para mudarnos ahí porque no les dejaré solos - hablo y ella me mira.
No tienes que hacer eso, Elioth - dice
Pero lo quiero hacer, quiero estar junto a ustedes y no alejarme de mi familia - admito.
Vamos a la casa entonces - dice
Pero antes vamos a irnos a comer unas ricas hamburguesas - digo como un niño pequeño y rio junto a mi hijo al escuchar las quejas de mi madre.
Horas más tarde...
Llegamos a la casa, mi hijo mira la casa y se queja porque quiere bajarse, le pongo en el suelo y comienza a recorrer la casa, escucho grito y quejas de la pareja que habita aquí y río a carcajadas de nuevo.
Tienes que acostarte hijo, recuerda que recién saliste de una operación importante y mi nieto también tiene que descansar - dice mi mamá recordándome de mi herida y asiento.
Tienes razón mamá - digo suspirando y ella me da una sonrisa.
Llamaré a un taxi para que me lleve al hotel ¿De acuerdo? - dice y asiento.
Minutos más tarde...
Mi madre se ido al hotel, volverá a la tarde con mis hermanos y la pandilla del Sur. Estoy con mi pequeño en mi pieza, no tenemos sueño así que estamos viendo una película infantil el Rey León me siento identificado y creo que Dante también.
Sabes papá, nunca más estaremos lejos los dos - dice mirándome.
Nunca estaremos lejos hijo - afirmó.
Tengo hambre - informa .
Vamos a comer algo - digo. El se baja de la cama con sumo cuidado y se va hasta la cocina, niego varias veces la cabeza y sonrío.
Definitivamente es un Rahman
***
Continuará....
Cada vez más se acerca el final ¿Quieren capitulos extras?