Un Sorprendente Verano

DHAraya द्वारा

23.8K 3.1K 66

Un Sorprendente Verano Sinopsis Que un chico deba pasar las vacaciones con sus padres no es raro. Que no le a... अधिक

Un Sorprendente Verano
Prólogo
Capítulo 1: Comienzan mis dulces vacaciones.
Capítulo 2: El pueblo Estrella Azul.
Capítulo 3: La chica de la gorra negra.
Capítulo 4: Coincidencias.
Capítulo 5: Más que curiosidad.
Capítulo 6: Mi plan, llamar su atención.
Capítulo 7: La chica que no puede oír.
Capítulo 8: Avergonzado.
Capítulo 9: ¿Amigos?
Capítulo 10: El lugar secreto.
Capitulo 11: Solos en el agua.
Capítulo 12: Confesiones.
Capítulo 13: Una noche de baile
Capítulo 14: No solo el primer beso.
Capítulo 15: Clases.
Capítulo 16: El regreso al Cometa
Capítulo 17: Tentaciones
Capítulo 18: Solos en mi casa.
Capítulo 19: Mi pequeño hermano.
Capítulo 20: Mensajes.
Capítulo 21: Discusión
Capítulo 22 : Echándola de menos.
Capítulo 24 : Una primera vez.
Capítulo 25 : Deseo contenido.
Capítulo 26 : Entre mis brazos.
Capítulo 27: Decisiones.
Capítulo 28: Dudas ante un problema.
Capítulo 29: Se terminaron...las vacaciones.
Capítulo 30: El principio del fin.
Capitulo 31: Perdida en la oscuridad del río.
Capítulo 32: La espera.
Capítulo 33: Verdades.
Capítulo 34: El despertar.
Capítulo 35: Verdades II.
Capítulo 36: Todo se terminó.
Capítulo 37: Ya es tiempo de que regrese a casa.

Capítulo 23 : Dulce reconciliación.

538 80 2
DHAraya द्वारा


Era ya de noche cuando le envié un mensaje a Laura, eso había sido todo el tiempo que soporté sabiendo que estaba molesta conmigo. Si por mi hubiera sido, habría ido a su casa para hablar, pero como dijo Derek, eso solo le causaría problemas.

Ella no me contestó, treinta minutos después le envié otro.

K: No vas a hablarme.

Ese sí lo contestó.

L: ¿Debería?

Suspiré.

K: Tenemos que hablar de varias cosas.

K: Por favor.

L: Sobre qué cosas.

Quería verla, no contarle lo que había descubierto a través de un mensaje. Como pasaron los minutos suspiré.

K: Sobre lo que sientes por mí.

Nada.

K: Sobre lo que yo siento por ti.

Tampoco hubo respuesta.

K: Y sobre eso de ser novios, y por qué no me gusta que Derek hable contigo.

Un minuto después contestó.

L: Cometa.

Eso me hizo levantarme enseguida de mi cama. Me vestí tan rápido como pude y llegué a mi automóvil. En cosa de minutos ya estaba en camino hacia el cometa.

En él observé la fila de gente que esperaba su turno para entrar. Rayos, pensé, iba a tener que esperar demasiado.

—Oye, Kay —me llamaron. Busqué la fuente de la voz y observé al mismo guardia de la otra noche. Me llamó con una mano y me acerqué —¿qué haces aquí chico?

Hice una mueca interna.

—Estoy buscando a Laura, ¿está dentro? —probablemente sí.

—Sí, hace rato que está aquí.

—Ah —murmuré. Había venido sola.

—Es raro verla aquí entre semana —miré al guardia—, ¿Qué paso? ¿Discutieron?

—Algo así —negué—. Oye, podrías dejarme entrar, tengo que hablar con ella en serio y si espero toda esa fila —la apunté —cuando entre ella ya se habrá ido.

Alzó una ceja y miró a su compañero.

—¿Qué piensas? —él me observó de pies a cabeza.

Esperé.

—No sé, no sé —dijo su amigo—, debería esperar como todos.

—Por favor hombre, en verdad debo verla —los miré a ambos, casi suplicando.

El primer guardia suspiró.

—Está bien, solo porque es ella, entiendes —asentí enseguida —adelante —dijo mientras empujaba

la puerta con su mano.

La música me golpeó como siempre y entré.

—Gracias —les dije a ambos antes de entrar.

Al primer lugar que me acerqué fue a la barra. El chico rubio estaba allí y al verme alzó una ceja.

—¿Dónde está? —no necesitaba ser más específico.

Él me observó largos segundos antes de apuntar la pista de baile.

—Está donde siempre —asentí y me alejé rápidamente.

Cuando la vi me detuve.

Laura llevaba una blusa a cuadros larga y apretada, una minifalda negra y brillante y unas botas hasta un poco más debajo de su rodilla. Tragué. Tenía la impresión que desde hacía días no la veía, y ahora me pareció incluso más hermosa que antes.

Ella me vio cuando solo me faltaban dos pasos para llegar cerca, se detuvo y me observó con intensidad. Me detuve a escasos centímetros de distancia.

—Habla conmigo —pedí.

Arrugó su frente un segundo, pero luego asintió. Me indicó que la siguiera y caminamos hasta el rincón más alejado del lugar, uno donde la música nos permitía comunicarnos sin gritar. Ella se apoyó en la pared y esperó.

La observé varios segundos, armándome de valor. No era fácil decirle a alguien lo que uno siente.

Recordé a varias chicas que se me habían declarado y me pregunté si en verdad alguna de ellas había sentido algo real por mí, algo como lo que yo sentía por Laura.

Al mirar sus ojos dejé de pensar en lo que podía pasar, o lo que no podía pasar. Simplemente levanté mis manos y tomé su rostro, la afirmé suavemente y me acerqué un poco. Aunque sentí la tensión de su cuello no me alejó, simplemente siguió observándome.

—Lamento si te herí con mis palabras esa tarde —no dijo nada, solo siguió observándome. Supe que ella no me haría esto más fácil.

Acaricié su mentón con mis pulgares y continúe.

—No debí asumir que eras mi novia sin siquiera preguntar qué pensabas o sentías por mí, pero con todo lo que ha pasado entre nosotros simplemente creí que era así —volví a tomar aire —lo lamento.

Algo de la tensión desapareció en ella al oírme, solo que siguió callada.

—Tenías razón, estaba celoso —entrecerró los ojos y por fin me dirigió la palabra.

—¿De qué?

—De lo bien que te llevas con Derek, probablemente se debe a que no sé qué es esto que tenemos, o como dijiste, que sientes por mí—me encogí de hombros—además sigo pensando que le gustas.

Laura volteó sus ojos.

—Digamos que lo que dices es cierto, —ella tomó mis manos, pero no las alejó de su rostro —el problema con eso es que yo no tengo esa clase de sentimientos hacia él.

Algo dentro de mí se relajó al oírla, podía haber sido una posibilidad.

—Entonces, ¿qué somos? —pregunté, alzó una ceja.

—Depende.

—¿De qué?

—De lo que sientas por mí.

Sonreí un poco al oírla.

—¿No depende de todo lo que hemos hecho? —pregunté con ironía.

Se encogió de hombros.

—Digamos que me dejé llevar por el momento, pero ya no—nos observamos a los ojos.

—¿Qué sientes por mí? —pregunté expectante.

Sonrió suavemente.

—Debo decirlo primero.

—Claro, no sabes que es de caballeros dejar que primero hablen las damas —soltó una suave risa.

—Está bien —murmuró, luego tomó mi rostro como yo sujetaba el suyo —me gustas Kay, mucho—me tensé, no quería solo gustarle. Tomó aire suavemente y continuó —bueno, a decir verdad, creo que me enamoré de ti.

Con eso sí sonreí, tanto, que me sentí como un jodido loco. Ella siguió observándome, esperando.

—¿Qué tan enamorada? —insistí.

—No puedo compararlo con algo, nunca antes había estado enamorada —si hubiera podido hubiera sonreído aún más.

—¿Y cómo sabes que lo estás?

—Debo estarlo si pienso en ti todo el día, si permito que me toques como nadie lo ha hecho —rio entre dientes—, sí quiero que lo hagas.

—¿Te gusta que te toque? —gruñó y golpeó mi vientre con su puño, me quejé un segundo.

—Basta de preguntas, ahora es tu turno.

—¿Si? —alcé una ceja, me imitó.

Ella se acercó a mi rostro y justo antes de que nuestras bocas se encontraran se alejó.

—Yo vine aquí para bailar, y eso voy a hacer—dio un paso hacia el lado y se alejó de mí como si nada y caminó hacia la pista de baile.

Salí de mi impresión un segundo después. Llegué tras ella enseguida y tomé sus hombros. La giré y atraje hacia mí. Apoyó sus manos en mi pecho.

—Ahora es mi turno —alzó una ceja.

Me parecía un tanto extraño hablarle en ese lugar, la música retumbaba dentro de mí y una parte de mi cerebro estaba pensando que ella no escucharía lo que tenía que decirle, obviamente deseché la idea enseguida. Ella podía oírme bastante bien.

—Te amo —solté, sin pensarlo o meditarlo, simplemente lo dejé salir.

Ella se congeló enseguida, me observó a los ojos largo rato hasta que sonrió. Luego tomó mi cabeza con sus manos y me acercó a ella para besarme, le devolví el gesto enseguida. Solo que la besé unos segundos, quería estar a solas con ella así que tomé su mano y comencé a caminar hacia la salida.

No me detuvo, solo me permitió guiarla hasta mi automóvil. Al verlo me miró alzando una ceja.

—Tenía prisa —le dije y abrí la puerta del copiloto para que entrara. Luego llegué a su lado y conduje.

—¿Dónde vamos? —preguntó.

Solo le contesté cuando me detuve en una luz ropa.

—Solo quiero estar a solas contigo.

Asintió y miró hacia el frente, observé su perfil varios segundos hasta que se giró a verme, alzó una ceja.

—Vamos al lago —murmuré y conduje.

Una hora después estábamos caminando hacia el lago Estrella Azul. Jamás había visitado este lugar de noche.

Tomé su mano y nos acercamos al viejo sauce. Empujé sus ramas hacia un lado para que pasara primero, la seguí y observé sentarse en una raíz.

Aunque estaba oscuro la luna llena nos estregaba suficiente luz como para estar cómodos.

Me acerqué a ella y pasé una de mis piernas sobre la raíz, me senté y me miró.

—¿Es verdad lo que dijiste? —preguntó suavemente.

Asentí y se acomodó en la raíz para quedar más en mi dirección, me acerqué a ella.

—Sí, lo es —tomé su rostro —te amo.

Sonrió suavemente y le devolví el gesto. Justo antes de besarla le oí decir.

—También te amo —por eso la besé con mayor intensidad.

La acerqué lo más que pude y aun así no me era suficiente. La quería pegada a mí, tanto, que no pudiera diferenciar su cuerpo del mío. Sus manos viajaron por mis brazos hasta mi cuello donde me rodearon. Yo la imité y rodeé su cintura con los míos.

Minutos después nos alejamos.

Observé el rostro de Laura sonrojado, sus labios rojos e hinchados, sus ojos brillantes. Sus dedos recorrieron el contorno de mi mandíbula, me estremecí cuando su otra mano acarició mi cuello.

Volví a atraerla hacia mí para besarla con más calma, ternura. Me dediqué a acariciar sus labios, besar sus mejillas. Quería protegerla, mantenerla entre mis brazos para que nunca nadie la hiriera.

Deseaba tenerla cerca mío por el resto de mi vida. Me sentí sumamente en paz con ella tan cerca, pero también muy asustado.

Esa chica me tenía en sus manos, en sus pequeñas y cálidas manos.

Sonreí contra su cabello cuando me abrazó por mi cintura. Así que así sesiente el amor, pensé un segundo, así de aterrador y maravilloso.

पढ़ना जारी रखें

आपको ये भी पसंदे आएँगी

INEFABLES 》 KiVi Bianca द्वारा

किशोर उपन्यास

32.9K 1.3K 22
¿Que pasaría si te sintieras completamente atraída por la prima de tu nueva compañera de trabajo? Descubre la historia de Chiara una artista emergent...
LA CHICA PERFECTA Vhdz3 द्वारा

किशोर उपन्यास

93.7K 5.3K 156
Valentina una chica con una vida normal hasta que el divorcio de sus padres cambiaría su vida por completo volvería los próximos años en los peores d...
Una Conquista Famosa Lena Mesias द्वारा

किशोर उपन्यास

679K 78.3K 35
Cassie Harper es una amante del chisme que tiene una sola regla desde que le rompieron el corazón: No volver a enamorarse. Así que crea un plan perfe...
16.5K 2.6K 32
Mr. Encantador es uno de los autores más populares de Wattpad. Escritor de novela juvenil romántica, tiene casi un millón de seguidores en la platafo...