One shots. (FUTBOLISTAS).

By lovelifeRM_

24.6K 515 122

Historias cortas sobre futbolistas. Podéis dar ideas de nombres de futbolistas. :) More

You don't know nothing about me. (Marco Reus)
Unexpected surprise. (Xabi Alonso)
Love me forever. (Toni Kroos)
Restricted love. (James Rodríguez)
I was born to love you (Manuel Neuer).
Give me another chance (Bastian Schweinsteiger).
Nota.
You can come to me. (Mario Götze).
You Make Me. (Isco Alarcón)
Thanks For Choose Italy. (Álvaro Morata)
AVISO IMPORTANTE!
CONCURSO.
GANADOR CONCURSO.

Don't hurt me. (Cristiano Ronaldo).

2.5K 60 6
By lovelifeRM_

Por fin la última caja guardada y todo en su sitio.

Acababa de terminar de acomodarme en mi nuevo apartamento. La empresa me había trasladado a Madrid después de toda una vida trabajando en Valencia.

Era una médica de la empresa Sanitas. Llevaba solo un par de años como médica pero me gustaba lo que hacía y estaba cogiendo experiencia.

La idea que me propuso la empresa de venirme a Madrid me resultó muy atractiva para aprender y mejorar como médica.

Mi hermano Víctor estaba ayudandome con la mudanza, pero se tenía que ir pronto para continuar su trabajo en Valencia, era cocinero y su restaurante tenía bastante éxito.

-Tengo que irme ya, Ruth.-Dijo Víctor abrazándome.

-No me abandones.-Dije haciendo un puchero.

-Sabes que no puedo hacer nada.-

-Lo sé, cuidate mucho enano.-En realidad él era mayor que yo, pero le llamaba así porque le molestaba.-Ven a visitarme.-

-Eso no lo dudes, no te olvides de que tienes una familia en Valencia.-Dijo riendo.

-Claro que no tonto.-Dije acompañandole a la puerta.

Nos despedimos con un gran abrazo.

Estaba muy unida a mi hermano, lo peor de mudarme aquí es tener que estar tan lejos de él.

Fui a darme una ducha para prepararme para ir al hospital.

Me puse una falda de tubo negra hasta por encima de las rodillas junto con una blusa azul cielo y con unos tacones de aguja negros.

Deje suelto mi pelo marrón oscuro, era ondulado y me llegaba hasta por debajo del pecho.

Me maquillé ligeramente con corrector y algo de rímel, mis ojos eran grandes y de color avellana.

Cogí mi bolso y monté en mi coche para llegar hasta el hospital.

Después de que el encargado me enseñase el lugar y me explicase las cosas más importantes, me dio mi horario y comprobé que me tocaba una revisión de capacidades físicas a un grupo deportivo junto con todos mis enfermeros.

Fui hasta la consulta para revisar los expedientes médicos.

Tenía que hacer el chequeo de pretemporada para el Real Madrid de fútbol. Vaya, no me lo esperaba.

No entiendo mucho de fútbol, pero son un equipo muy importante.

Empecé a revisar los expedientes de cada uno. Solo tenía que hacer las típicas pruebas para asegurar de que se encuentran en perfectas condiciones.

A los pocos minutos fueron entrando junto con el encargado.

-Bueno chicos, aquí es. Os presento a la Dra. García, ella es la que dirigirá las pruebas médicas y la que os ayudara en cualquier problema que os surja. Os dejo en buenas manos.-Dijo el encargado y se fue.

-Encantada.-Contesté. Los enfermeros empezaron a colocar a los jugadores en distintas zonas.-Bueno, sentaros por ahí. Iré empezando uno por uno para que no haya tanto escandalo.

Ellos asintieron y cogí los expedientes para llamarles. El primero fue Sergio Ramos.

Avisé de que entrara y así fueron pasando todos. Con las típicas pruebas, análisis de sangre, pruebas de resistencia, la tensión, etc.

El último al que llamé fue Cristiano Ronaldo, vaya iba a ser médico de uno de los mejores futbolistas del mundo.

-Por favor, sientate ahí para hacerte el análisis de sangre.-

-Claro.-Dijo sentandose en la camilla. Yo me di la vuelta para preparar la prueba de resistencia mientras el enfermero le sacaba sangre. Sentía su mirada clavada en mi nuca.-¿Por qué no me sacas tú la sangre?-Preguntó apartando el brazo, a lo que el enfermero frunció el ceño.

-Eso es trabajo de los enfermeros.-Dije extrañada, qué mas daría que se la saque el enfermero.

-Quiero que me la saques tú, me sentire más seguro.-Dijo serio.

-Esta bien, si insistes.-Dije rodando los ojos. Accedí para no perder más tiempo.

Le saqué la sangre y le di un cacho de algodón para que apretase en el pinchazo.

-Ahora la prueba de resistencia.-Dije señalando el aparato.-Ya sabes cómo va ¿no?- Él asintió y se quitó la camiseta. Yo me acerqué para ponerle los cables y no pude evitar fijarme en su trabajado torso de futbolista. Ya había visto a los demás futbolistas sin camiseta pero él estaba mucho mejor, parecía un dios griego.

-¿Te gusta lo qué ves?-Dijo con una sonrisa arrogante.

Yo ignore su comentario y continúe colocandole los cables.

-Si querías verme sin camiseta solo haberlo dicho y yo me desnudaba para ti a solas encantado.-Dijo y me guiñó un ojo.

-Yo solo hago mi trabajo.-Contesté indiferente. Sus bobadas de futbolista engreído no me iban a molestar.-A correr.-Dije dando al botón que encendía la máquina.

-Bueno, y como estas trabajando... ¿Qué te parecería quedar conmigo esta noche? Hay una fiesta y no tengo acompañante.-

-No, gracias. De momento creo que solo tendremos una relación médico paciente.-

-Oh venga.-Siguió insistiendo mientras yo le ignoraba.

-Ruth, ¿puedes terminar tú con la última prueba? Es que tengo que salir antes.-Me dijo el enfermero.

-Claro.-Contesté mientras miraba que prueba quedaba. Mierda. Quedaba la medición de la masa muscular. En pocas palabras, tenía que medir todas las partes del cuerpo de Cristiano mientras él hacia fuerza. Genial.

-¿A si que te llamas Ruth?-

-Sí. Y ahora flexiona que tengo que medir tu masa muscular.-Dije cogiendo la cinta de metro.

-Ahora no puedes pasar ni un minuto lejos de mi cuerpo.-Dijo sonriendome.

-¿Podrías dejarme hacer mi trabajo?

-Si vienes conmigo a la fiesta de esta noche.

-Te he dicho que no.-

-¿Sabes esa lesión que tengo en el tendón de la rodilla?-Yo asentí.- Pues haré que me hagan venir todos los días a que la revises si no aceptas.-Dijo.

-Dios. Esta bien, iré.-Dije cansada.

-Te paso a buscar a las 8.-Sonrió con autosuficiencia.

-No, mejor dame la dirección y nos encontramos allí.-

-Eres un hueso duro de roer. Está bien.-Dijo mientras escribía la dirección en un papel.- Ponte guapa.-Dicho esto salió guiñandome un ojo. Yo solo rodé los ojos.

¿En dónde me había metido? Ahora tendría que ir a esa maldita fiesta.

El resto del día paso normal y cuando salí del trabajo fui a casa para cambiarme, tenía pocas ganas de ir a la fiesta pero así Cristiano me dejaría de molestar. Iría un rato, me tomaría una copa y me iría.

Me puse un vestido negro de manga larga, con la espalda descubierta y que me llegaba hasta medio muslo. Tenía perlas blancas al rededor del escote y de la apertura en la espalda.

Con unas cuñas negras y hice algunos tirabuzones en mi pelo.

Me puse sombra de ojos transparente, rímel, base y un poco de brillo labial.

Cogí mis cosas y salí hacia la fiesta, miré el papel con la dirección que me había dado Cristiano, estaba a una media hora de aquí.

Seguía sin entender por qué un futbolista tan famoso como Cristiano Ronaldo me había invitado a esta fiesta, a mí. Pero bueno, no creo que sea tan horrible.

Estaba montandome en el coche cuando mi móvil sonó, tenía un whatsapp.

Era de un número que no tenia guardado y decía:
''No tardes en venir, preciosa. Adivina quien soy ;)''

Contesté "Cristiano ¿verdad?"

Contestó "Muy lista"

Contesté "¿Cómo conseguiste mi número?"

Contestó "Tengo contactos ;)"

Contesté "Como no"

Y después de eso deje el móvil en mi bolso. Comencé a conducir hasta la fiesta. Llegué a los veinte minutos. Hacía un poco de frío y no tenía ninguna chaqueta, pero tampoco pensaba quedarme mucho tiempo.

El lugar era una mansion gigante, sería de algún futbolista. Había bastante gente por todos lados, vi a los futbolistas del Rel Madrid que había revisado por la mañana. Todos en la fiesta eran famosos.

Me acerqué hasta la entrada pero unos guardaespaldas me cortaron el paso.

-Su nombre, por favor.-Dijo uno de ellos.

-Ruth García.-Dije, aunque sabía que mi nombre no iba a estar en la lista.

-Lo siento, pero su nombre no está en la lista. No puede pasar.- Dijo el otro gorila.

Un brazo se posó al rededor de mi hombro.

-Está conmigo chicos.- Esa voz, ese acento portugués. Cristiano estaba rodeándome con sus brazos.

-Perdonenos señor Ronaldo, no lo sabíamos.-Se disculpé uno de ellos.

-No tiene importancia.-Dijo Cristiano. Y el guardia nos dejó pasar.

-Me has hecho esperar, preciosa.-Dijo sonriendome.

-No me dijiste una hora.-Dije soltandome de su agarre.

-No importa, mereció la pena la espera. Estas guapísima.-

-Tu tampoco estás mal.-Cristiano iba vestido con una camisa blanca y unos pantalones negros. No iba nada mal.

Entramos a la casa, mejor dicho, a la mansión y Cristiano me llevó hasta la barra.

Pidió por los dos y el camarero nos sirvió.

-¿Qué es?-Pregunté agarrando la copa.

-Pruebalo, te gustará.-Dijo bebieno de su vaso.

Probé el liquido extraño que por cierto estaba delicioso, y enseguida ya había tomado tres copas más.

-¿Bailamos?-Me dijo un chico de más o menos mi edad, bastante guapo y musculoso, pero nada comparado con el dios griego que tengo a mi lado.

-Lo siento, está conmigo.-Dijo Cristiano poniendo una mano en mi cintura.

-No veo que te haga mucho caso.-Dijo el chico.

-Sí, ahora mismo ibamos a bailar.-Dijo Cristiano agarrandome y llevandome a la pista de baile.

-Oye, ¿y si quería bailar con ese chico?-Me quejé.

-¿No prefieres bailar conmigo?-Dijo poniendo sus manos al rededor de mi cintura para bailar.-Todo el mundo quiere.

-Seguro que él no es tan egocéntrico.-Dije rodando los ojos.

-Eres mi pareja ¿recuerdas? Yo voy a bailar contigo no otro.

-¿Por qué no viniste con Irina?-Pregunté curiosa.

-Irina y yo tenemos una relación que es puro marketing, además yo no soportaría estar con una modelo de verdad. Sí, son muy guapas pero no soportaría ver a mi novia en las revistas semidesnuda y con otros tíos.-Dijo mientras bailabamos.

-Oh, ya veo. Desde fuera no parece una relación falsa. Los futbolistas simpre soléis salir con modelos.-

-Yo prefiero a otras, médicas por ejemplo.-Dijo giñandome un ojo.Yo rodé los ojos.-¿Tú tienes novio?-Preguntó.

-No. Me acabo de mudar aquí desde Valencia y no conozco a mucha gente.- Contesté.

-Soltera y sin compromiso, me gusta.-Sonrió.

-Vamos a beber algo.-Pedí haciendo pucheros.

-Vamos.-Dijo acompañandome sin soltar su mano de mi cintura. Nos sentamos en la barra y pidió bebidas.- ¿Qué te parece si para conocernos mejor nos vamos haciendo preguntas? Yo te hago una pregunta y después otra y en cada cosa en que coincidamos bebemos un trago.-

-Está bien, será divertido.-Dije riendo.- Empiezo yo. ¿Tienes algún tatuaje?-

-No, no me parece bien marcar mi cuerpo de esa forma. Además yo dono sangre y no vale para todo el mundo si tienes tatuajes.- Yo asentí y él al ver que no bebía alzó las cejas.-¿Tienes tatuajes?-Preguntó.

-Tengo uno.- Reí por su cara de asombro.

-¿Dónde?- Preguntó curioso.

-Me toca preguntar a mí.-Reí y él se quejó.- ¿Con cuántas chicas has salido en serio?-

-En serio, sin contar a Irina, dos.- Yo levanté la copa y bebí por lo que él hizo lo mismo. Yo también había tenido dos relaciones serias.

-¿Dónde tienes el tatuaje?- Preguntó impaciente.

-Al final de la espalda, en la rabadilla.- Dije mientras pedía más bebida.

-Muy sexy.-Dijo bebiendo de su copa.

-No puedes beber ahora, tú no tienes un tatuaje ahí.-Me quejé.

-Necesitaba beber algo después de esa información.-Sonrió pícaro y levantando las cejas.

-Estúpido.-Le di un ligero golpe.-¿Te preocupa lo que la gente piense de ti?-

-Para nada, siendo tan famoso todo el mundo está pendiente de lo que haces y lo que dices, hay mucha presión pero no puedes condicionar tu vida por ello, los famos también tenemos derecho a tener nuestra vida, a equivocarnos y a disfrutarla.- Dijo sintiendo lo que decía.

Yo bebí de mi copa.

-¿Por qué bebes? Tu no eres famosa.-Se río.

-Lo sé, pero estoy de acuerdo contigo.-Reí porque él todavía se estaba riendo, se notaba que el acohol nos empezaba a afectar.

-Entonces está bien. ¿Te parezco atractivo?-

-Sí, eres un futbolista, con todo el deporte que haces normal que lo seas.- Me sonrió y bebió de su vaso.

-¿Por qué bebes?-

-Yo también estoy de acuerdo contigo.-Dijo riendo.

-Egocéntrico.-Dije sonriendo.

Seguimos bebiendo hasta que empezé a estar bastante borracha y después de haber bailado con Cristiano, me sacó de la pista y me llevó hasta mi coche. Él no parecía estar nada borracho, hacía ya mucho rato que había dejado de beber, por lo que supongo que estaría bien.

-¿A dónde vamos?-Dije quejandome.- Yo me quiero quedar en la fiesta.-

-No Ruth, estás borracha y debes ir a casa a descansar.- Dijo cogiendome las llaves del coche del bolso y abriendole para que me montara.

Me puso el cinto y condujo hasta mi casa, menos mal que le pude indicar bien donde vivía.

Subimos las escaleras del apartamento, Cristiano me agrraba para que no me cayese.

Abrió la puerta de mi casa y entramos dentro.

-Ve a darte una ducha, te sentirás mejor.-Dijo Cristiano acompañandome hasta el baño.

Yo asentí y antes de entrar al baño me puse de puntillas y besé a Cristiano, él me agarró de la cintura y correspondió el beso con más pasión y yo jugué con su pelo, nos separamos y entré al baño a ducharme.

No sabía por qué había hecho eso, pero la verdad que no me arrepentía pero si que estaba un poco avergonzada.

Salí de la ducha y me di cuenta de que no tenía ropa para ponerme así que me sequé y me puse el albornoz.

Fui hasta mi cuarto a por la ropa y vi a Cristiano que estaba tumbado en mi cama, cuando me vio se levantó y acercó a mí, yo estaba parada al lado de la puerta.

Me agarró la cara con las manos y me besó con necesidad, yo le correspondí y estuvimos besándonos un largo rato.

*****

Comenzé a desabrochar los botones de su camisa hasta que se la quité, él me agarró y yo salté envolviendo mis piernas en su cintura.

Siguió besandome hasta que me tumbó en la cama.

Dejé besos por todo su cuello y torso y él me volvió a besar y metió una mano debajo de mi albornoz y comenzó a acariciar mis muslos.

Yo desabroché su pantalón hasta que se quedó en ropa interior, el desabrochó mi albornoz y comenzo a repartir besos por todo mi cuerpo, acarició mi zona femenina y yo gemí tirando del elástico de sus boxers, se los quite y él me besó con mayor intensidad.

Separó mis piernas y entró dentro de mí.

Comenzó a embestir, primero lentamente y cada vez más lento hasta que los dos llegamos al climax y caímos en los brazos de morfeo.

****

A la mañana siguiente me desperté con un terrible dolor de cabeza y unos brazos rodeando mi cintura.

Me giré y vi a Cristiano a mi lado, todos los recuerdos de la noche anterior me golpearon en la cabeza.

Él dormía plácidamente, yo comencé a moverle para que despertara.

-Cristiano despierta.-Él solo se movía y hacía ruidos de no querer levantarse.-Vamos, voy a llegar tarde al hospital y tú tendrás entrenamiento.-Dije levantandome y vistiéndome.

-¿Qué hora es?-Preguntó Cristiano sentandose en la cama.

-Las 7:45-Respondí. Él se levantó corriendo y comenzo a vestirse.

-Mierda, llego tarde al entrenamiento. Tengo que irme.-Dijo cuando acabó de vestirse.- Adiós.-Dijo y me dio un beso en la mejilla.

-Adiós.- Dije sonrojandome.

Cristiano se marchó y yo seguí preparandome para ir a trabajar, todavía tenía un poco de tiempo. Tenía una resaca horrible, como médica sabía que no debía tomar tanto alcohol pero bueno, no suelo beber demasiado.

No tenía hambre, pero si no comía algo no podría tomarme el ibuprofeno o me destrozaría el estómago, por lo que me tomé unos cereales.

Salí de casa y cogí mi coche y en un cuarto de hora ya estaba en el hospital.

Entré en mi consulta y me puse mi bata banca, estuve atendiendo pacientes toda la mañana.

El enfermero entró en mi consulta.

-Ya están aquí los lesionados del Real Madrid.-Dijo.

-¿Era hoy?- Dije cansada, lo había olvidado por completo. El enfermero asintió.-Está bien, que pasen.- Para mi suerte no eran muchos, pero uno de ellos era Cristiano, por lo que no pude evitar ponerme nerviosa después de lo de anoche.

Primero paso Di María, con él tardé poco ya que no era gran cosa y además me dijeron que no le tratase demasiado ya que se marcharía del club.

Le dije al enfermero que mandase entrar al siguente, yo estaba colocando sus expedientes cuando sentí unas manos rodeando mi cintura.

-Buenos dias Dra. García.-Dijo Cristiano en mi oído. Después me dio la vuelta y me besó dulcemente.

-No hagas eso, estoy trabajando.-Dije soltandome de su agarre. Él río y yo me froté la frente por el dolor.

-¿Tienes resaca eh?-Dijo riéndose.

-¿Cómo es que tú no?- Pregunté levantando una ceja.

-Porque yo no me emborraché, paré mucho antes que tú. Soy deportista, debo cuidarme.-

-Haces bien. Gracias por hacer que llegará sana y salva ayer a casa.-Dije avergonzada.

-No fue nada, me lo pase muy bien.-Dijo guiñandome un ojo y acercandose a mí para besarme. Yo le seguí el beso que fue lento y dulce.

Estuvimos besándonos un rato largo cada vez más intensamente, nos separamos.

-Creo que debería revisarte esa rodilla.-Dije indicándole para que se sentara.

-Sí, ya no me duele tanto. Lo estoy trabajando mucho.- Me dijo estirando la pierna.

Le estuve revisando la rodilla y dandole indicaciones de como cuidarla bastante rato.

El enfermero entró con Jesé a la consulta.

-Perdone Dra. García pero si no atiende ya al señor Jesé me temo que no habrá tiempo suficiente después para atenderle y el Real Madrid quiere que le atendamos lo máximo posible debido a su grave lesión.-Dijo el enfermero.

-Claro, ya fue suficiente con el señor Ronaldo por hoy.-Dije mirando a Cristiano, él asintió.- Vaya pasando.-Le dije a Jesé que entró y se sentó en la camilla.

Cristiano salió de la habitación pero antes paso por mi lado.

-Ah, y bonito tatuaje.- Me dijo al oído y me giñó un ojo.

Yo sonreí y me puse a examinar a Jesé. Sufrió una grave lesión de rodilla en Marzo y le tuvieron que operar, por lo que estuve bastante tiempo con él.

Después tuve una hora libre y fui a la cafetería a por un café.

Allí estaba Cristiano con los demás futbolistas.

Me senté en una mesa a beber el café y Cristiano me sonrió, yo le devolví la sonrisa.

Jesé se me acercó y se sentó conmigo en la mesa.

-¿Puedo sentarme?-Preguntó.

-Claro.-Respondí.

-Quería saber si podría venir al hospital a consultarte dudas, es que soy jóven y tengo miedo de que la lesión arruine mi carrera.-

-Claro, ven cuando quieras, pero avisa a mi consulta antes, tus sesiones ocupan tiempo. Y no te preocupes por la lesión, es muy poco probable que sea tan grave como para que no puedas jugar más.-Le respondí.

-Está bien, muchas gracias.-Me dijo sonriendo.

-De nada, para eso estamos los médicos.-Reí.

Él se marchó con sus compañeros y vi que Cristiano estaba con el ceño fruncido.

Se marcharon de la clínica y yo volví a mi trabajo.

Por fin acabó mi día y pude volver a casa.

Me cambié y me puse una camiseta de tirantes y unos shorts para estar más cómoda.

Estuve tumbada en el sofá desde que llegué.

Tuve que levantarme ya que alguien había llamado al timbre.

Abrí la puerta y ahí estaba el portugués que me volvía loca, y es que no puedo negar lo que Cristiano causaba en mí.

-¿Qué haces aquí?-Pregunté.

-Vine a verte.-Me sonrió y depositó un pequeño beso en mis labios.

Le invité a pasar y nos sentamos en el sofá, Cristiano no paraba de jugar con mi pelo mientras que veíamos la tele.

-¿Qué te dijo Jesé en la cafetería?-Preguntó Cristiano.

-Nada, simplemente está preocupado por su lesión.-Contesté.

-No me gusta que coquetee contigo.-Dijo serio.

-No coquetea conmigo.-Me quejé.

-Sé que lo hará.-

-¿Por qué te molesta? ¿Estás celoso?-Dije acercándome a él para besarle y él atrapó mis labios y me besó mas intensamente.

-Sí, me pongo celoso.-

-¿Por qué? No somos nada.-

-Sí somos.-

-¿Qué somos?-Dije levantando una ceja.

-Digamos que tú eres mía y yo soy tuyo.-Dijo y me besó.

-Me gusta.-Sonreí.

Cristiano se levantó del sofá y tiro de mi brazo para que le siguiera.

Me llevó hasta mi habitación.

-¿Qué quieres?-Pregunté divertida.

-Vamos a dormir, ayer nos fuimos a dormir muy tarde.-

-¿Dormir?-Pregunté riendome.

-Sí, dormir.-Me sonrió pícaro. Yo me reí.

Él agarró mi trasero y me acercó a él para besarme y después de varios minutos de intensos besos me tumbó sobre la cama.

No sabía cómo pero en mi nueva vida en Madrid había acabado en una relación extraña con Cristiano Ronaldo, solo esperaba no salir herida de esto.

-Por favor, no me hagas daño.-Susurré en su oído.

*

*

*

*

Hooolaaa bebeees. Esperoo que les guste el nuevoo caaap, queria decirles que agradezco mucho sus sugerencias y que me inspiran mucho pero que demomento hasta que llege a los 10 one shoots publicados los haré con los que yo tenía en mentee, si alguno coincide con sus peticiones mejoor, despues de los 10 tengooo una sorpresaa paraa ustedees y ya luegoo comenzaree con las sugerenciaas. Muchas graciaas por votaar y comentaar.  Leees amoo. Voten y comenteen ♥♥♥ xoxo

Continue Reading

You'll Also Like

48.9K 9.1K 40
Cassiopeia Polaris, melliza de Draco y princesa de la familia Malfoy - Black, vuelve a Inglaterra luego de estudiar dos años en Durmstrang, pero.. po...
201K 25.6K 120
𝐅𝐀𝐊𝐄 𝐂𝐇𝐀𝐑𝐌 || 𝙴𝚕 𝚎𝚗𝚌𝚊𝚗𝚝𝚘 𝚎𝚜 𝚎𝚗𝚐𝚊ñ𝚘𝚜𝚘, 𝚢 𝚌𝚘𝚗 𝚜𝚞 𝚋𝚎𝚕𝚕𝚎𝚣𝚊 𝚑𝚊𝚛á 𝚚𝚞𝚎 𝚝𝚎 𝚊𝚛𝚛𝚎𝚙𝚒𝚎𝚗𝚝𝚊𝚜. Teen Wolf...
209K 11.7K 102
Segunda parte de One Shots - Selección Mexicana La primera parte se encuentra en mi perfil más de 100 One Shots Pequeñas historia de tus futbolistas...
404K 26.5K 97
Todas las personas se cansan. Junior lo sabía y aun así continuó lastimando a quien estaba seguro que era el amor de su vida.