~Confuso~
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POV Narradora
- ¡Kageyama! Buenos días -
- Hola -
- ¿Qué tal? -
- Bien -
- ¿Hoy entrenarás también? -
- Sí, dentro de poco tendremos un partido contra Nekoma -
- ¿Puedo ir a verlos? -
- Supongo -
- ¡Kageyama! ¡(T/a)! -
- Ah, buenos días Hinata, ¿qué tal? -
- Bueno, más o menos -
- ¿Y eso? -
- Dentro de poco tenemos un examen de inglés y bueno, sabes que no se me da muy bien -
- Me estás pidiendo que te ayude a estudiar, ¿no? -
- Sí, por favor -
- Claro, no hay problema con ello, ¿tengo que ayudarte a ti con algo Kageyama? -
- No -
- Bueno, si quieres ayuda siempre me tendrás a mí - giró la cabeza hacia el frente. - Allí está Emiko, nos vemos chicos -
La chica peli (c/p) corrió al encuentro de su amiga y en cuanto el pequeño peli naranja vio que ya había desparecido antes sus ojos, le pegó en el brazo al más alto.
- ¿¡Por qué me pegas idiota!? -
- Tú también tienes problemas con los exámenes, ¿por qué no le pediste ayuda? -
- No quiero pedirle ayuda, ella es molesta -
- (T/a) no es molesta -
- ¡Sí lo es! Se pasa a mi lado todo el día y no me deja en paz, lo entenderías si te pasara -
- No, yo agradecería que estuviese todo el día a mi lado, al menos le gus... olvídalo, nos vemos después -
- ¿Qué quiso decir? -
[...]
- Pensé que era más difícil, pero esto es realmente fácil, será fácil ayudarte -
- Que bien, empecemos entonces -
(T/n) le empezó a explicar a su amigo todo el tema, desde como eran los verbos, como se formaban, etc. A veces tomaban descansos, pero rápidamente seguían. Hinata estaba emocionado porque estaba entendiendo las cosas y le estaba gustado practicar.
- Oe Hinata, ¿por qué no estás en el entrenamiento? - se quejó Kageyama entrando a la clase ya vacía de la chica.
- Kageyama, el entrenamiento empieza.... ¡Ya ha empezado! ¡me he distraído! -
Se levantó exageradamente veloz y recogió todas sus cosas, desde libretas, libros, bolis, lápiz y goma y los guardo en su mochila. Salió de la clase corriendo, pero paró repentinamente y volvió hacia atrás.
- ¡Gracias por ayudarme (T/a)-chan! -
- Claro, si quieres podemos seguir mañana - él asintió y volvió a salir apresuradamente.
El otro chico se dio la vuelta y empezó a caminar hacia el gimnasio, pero solo dio un paso ya que la voz de la chica lo paró.
- ¡Kageyama! -
- ¿Qué quieres? -
- Yo... compré esto para ti, espero que te guste -
Era un llavero que tenía un vaso de leche en él.
- Ah - lo cogió y se giró para irse.
- Creo que debo de dejar de intentarlo -
- ¿Por qué? Puede que sea así, tal vez debas esperar -
- No creo que sea así, al menos con los chicos no lo es -
- Bueno, no se que decirte por ahora vallamos a mi casa a estudiar -
La pequeña asintió hacia su mejor amiga, recogió sus cosas y la siguió. En el camino, hablaron de diferentes cosas desde tareas, salidas, entre otras cosas, hasta que por fin llegaron.
- Hermano, ¿qué haces aquí? -
Su hermano siempre está en los entrenamientos de voleibol y no suele llegar hasta tarde, así que lo sorprendió verlo allí.
- Me hice daño en la muñeca y me han obligado a no jugar - dijo Iwaizumi con simpleza.
- Podrías habérmelo dicho Hajime -
- Lo siento, la próxima vez lo haré -
- (T/n)-chan y yo vamos a estudiar -
- Está bien, por cierto, hola (T/n) -
- Buenas Iwaizumi-senpai -
El chico giró la cabeza rápidamente hacia la tele y (T/n) vio una sonrisa juguetona en la boca de su amiga, lo que la confundió.
- Estaremos en la habitación por si necesitas algo -
Su hermano solo murmuró y Emiko cogió la muñeca de su amiga para disponerse a subir las escaleras rumbo al lugar de estudio.
Estuvieron estudiando de todo un poco, aunque los descansos, las bromas y las desconcentraciones por charlas, no tardaron es aparecer.
- Hola chicas, aquí os traigo la merienda -
- Gracias mamá -
- Gracias -
- Por cierto, me alegra verte (T/n), ¿qué tal estás? -
- También me alegro de verla, estoy muy bien, gracias por preguntar Iwaizumi-san -
- Ay, pequeña, ¿cuántas veces te he dicho que me llames por mi nombre? -
- Ay sí, lo siento -
- Bueno, yo me voy chicas, seguid estudiando -
[...]
- Oh, hola Iwaizumi-san -
(T/n) fue a dejar la bandeja con los platos en el fregadero, pero se encontró con la rara imagen de un Iwaizumi fregando la losa.
- ¿Dónde te lo dejo? -
- Déjala aquí al lado -
- Bien, ¿dónde están los vasos?-
- Allí arriba, ¿crees que puedas llegar? -
- Sí, claro -
(T/n) intentó primero abrir la puerta, lo que le costó un poco pero al menos el pequeño pomo se encontraba en la parte baja. Ahora falta coger el vaso que se encontraban en parte trasera.
- ¿Por qué no pueden poner los vasos delante? ¿Qué pasa con la personas pequeñas? - pensó la chica oji (c/o) después de intentar coger un vaso varias veces.
Y es que, (T/n) media 1'60 y que el armario midiese dos cabezas más que ella, no era gracioso.
De repente, notó como alguien la alzaba bastante alto, sorprendiéndola en el acto.
- ¿I-i-iwaizumi-sempai? -
- Coge el vaso anda -
Rápidamente y con todo la vergüenza del mundo, cogió el vaso.
- Ya puedes bajarme -
Él le hizo caso quedando frente a frente mientras se miraban a los ojos. Él se acercaba, ella no reaccionaba, estaba en shock.
- ¡(T/n)-chan! - la voz de Emiko los hizo separar agresivamente y ella apareció sin ver nada. - Tu madre acaba de llamar diciendo que debes volver a casa -
- Gracias por avisar, cogeré mis cosas y me iré -
Ella cogió sus cosas y en poco tiempo se marchó despidiendo a la familia Iwaizumi.
- ¿Ella... sigue enamorada de Tobio? -
- Sí, de hecho, mañana piensa declararse, pienso que debes ir a buscarla -
- ¿Por qué? -
- Ya lo entenderás -
[...]
- ¿Estás segura de lo que vas a hacer? -
- No, pero... no puedo aguantar más. Necesito decírselo -
- Bueno, yo no estaré para consolarte -
- ¡Que mala eres Emiko-chan! -
- Era broma, era broma, ¿cuándo lo haras? - preguntó aunque se lo imaginaba.
- Cuando acaben las clases -
El profesor entró y el recreo acabó, empezando ahora la clase de matemáticas, la cual tanto amaba Emiko.
[...]
- Date prisa, tengo entrenamiento -
- Me gustas Kageyama, se que no puedes corresponderme, pero... ¿me darías una oportunidad? -
- ¿Cómo lo voy a dar una oportunidad a la persona que odio? -
¿Odio?
- ¿Me odias Kageyama? -
- Sí, eres demasiado molesta, no me dejas en paz -
- Ya veo -
- Tengo que irme -
Kageyama cerró la puerta y (T/n) no pudo más que derrumbarse en el suelo y empezar a llorar.
La puerta volvió a abrirse, pero ella solo se limitó a lo suyo. Pensó que tal vez sería alguien que venía a reirse de ella. Pero que confundida estaba.
- (T/n) -
- ¿Iwaizumi-sempai? -
- Déjame enamorarte. Se qué en aquellos tiempos no te hacía mucho caso, pero ahora eres lo más importante para mí -
- Hágalo sempai, por favor - le rogó con todo el dolor del mundo.
Mientras, Kageyama escuchaba detrás de la puerta y notaba como se le estrujaba el corazón y se preguntó por qué le dolía tanto. Negó y bajo para ir al gimnasio.
Los días consecutivos, (T/n) no se acercó a él para nada, así que Kageyama podía estar feliz, ya no lo molestarían, pero... que equivocado estaba. Deseaba que lo "molestara", pero ya era demasiado tarde. Confundió el amor con odio y por eso, se quedó sin ella.
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Primero quiero disculparme porque tarde bastante en publicar, lo siento es que no sabía que escribir.
Segundo, ¿os gusta la portada? Decidí cambiarla porque.... sí.
Tercero, tardé bastante no solo porque no sabia que escribir, también porque de ahora hasta que termine este libro publicaré capítulos los domingos.
Y por último y no más importante, muchísimas gracias por el apoyo🤗, ya somos casi 10k, así que como recompensa haré una maratón de 5 capítulos seguidos, aunque a lo mejor tardo un poco si no se que escribir o no tengo mucha inspiración, ténganme paciencia😅.
⭐Recuerden votar si les gustó⭐
~Nos vemos~