🌺: Reproducir "Love is a bitch" de TwoFeet mientras leen para mejor experiencia (opcional).
Miércoles, tercer día de exámenes.
Taehyun se había mantenido un poco apartado de sus mayores, para dejarlos que estudien con tranquilidad. Solían verse en los descansos, y él podía notar el cansancio en sus ojos, sabía que estaban haciendo un enorme esfuerzo por mantener sus calificaciones y graduarse.
Por su parte, él pasaba tiempo con Kai, almorzaban juntos, iban al centro comercial e incluso varias veces se habían quedado a dormir en casa del otro. Aunque sus sentimientos por Huening estaban intactos, e incluso, floreciendo con más fuerza, ciertamente él no había tocado ese tema. No quería forzar al menor o hacerlo sentir incómodo, él podía esperar todo el tiempo que fuese posible, y si Huening lo rechazaba, aprendería a vivir con eso.
—¡Tae, conseguí tu batido! —Kai corrió hacia la mesa en donde estaba, con dos batidos en sus manos y una enorme sonrisa en sus labios.
Kang sonrió también, mientras recibía la bebida, admirando lo precioso que lucía su menor cuando se hallaba feliz. No podía explicar la satisfacción que se instalaba en su corazón cuando los bonitos labios de Huening se curvaban en esa expresión tan etérea como lo era su sonrisa, y como sus ojitos se volvían chiquitos. Le daban ganas de guardar al menor en una cajita y no sacarlo nunca, cuidarlo allí de todo mal.
—Kai. —Murmuró, llamando la atención del mencionado.
—¿Hmm?
—Te quiero.
Las mejillas del menor se pintaron de un suave rosa, y volvió a sonreír, tomando la mano del mayor por sobre la mesa.
(💌)
El cielo ya estaba pintado de profundo azul oscuro, con pequeñas estrellas brillando sobre el manto oscuro. A su lado, Huening traía puesta su pijama y ya se encontraba dormido.
Se permitió admirar las largas pestañas del menor, y sus labios rosados, su expresión tan tranquila. Taehyun en esos momentos retratar la expresión tan preciosa del menor, quería guardar ese momento para siempre. Suspiró. El sentimiento aflorado de amor creciendo con más fuerza en su pecho, viéndose incapaz de reprimirlo por más tiempo, sentía como si fuese a explotar en papelitos de colores.
Definitivamente Taehyun pensaba que el amor era una completa perra.