03.03.19. Elías
No logro superarte,
Pero es que siquiera tengo ni la más mínima intención de hacerlo.
Gozo de tu recuerdo
y de los bonitos momentos
que pasan por mi cabeza
de forma tan repentina.
Luego me destrozo
al saber que no estás conmigo
abrazándome,
calmando mis penurias.
Sigo cavando
un sin fin de recuerdos preciosos
llenos de sonrisas
que sé que luego provocarán que me desmorone.
Pero ahí estoy,
buscando en la tierra
hasta que mis uñas sangren,
algo que desgarre más mi corazón.
En lugar de llenar ese pozo
que yo mismo provoqué,
con algo que valga la pena.
Pero es que para mí,
tú vales la pena.
Tal vez jamás querría olvidarte.
Ahora no quiero.
Lo digo en serio.
Tenerte en mi mente es hermoso,
claramente antes de que las lágrimas comiencen
a derramarse por mis mejillas.
Tal vez jamás vuelvas a mi vida.
Pero aquí estaré yo;
acumulando el amor incondicional
que tengo para dar,
y guardándolo
sólo por si algún día decides pasar por esta puerta.
Aquí te esperaré
el tiempo que haga falta.
Mientras me tomo una tacita de café
y pienso en cada beso que me dabas
y en la calidez que me brindabas con tus abrazos.