Hola Ldelibro :>
¿Qué tal?
¿Todo bien?
¿Todo correcto?
Y yo que m- que NO, no me alegro :))
Espero que no todo bien Ldelibro, exijo mi maldito dinero. OsEa, si vas a resubir mi historia hazlo bien y al menos corrige las faltas de ortografía ¿no? Ni eso puedes hacer bien unu.
Y quiero mi dinero, el amor de Len junto con un Matsuda y Uni real y también helado. Pero bueno, entiendo que no puedas darme a Ppoiyo, Uni ni el amor de Len porque él ama a Rin y las bananas, pero el helado y el dinero sí puedes, no tienes excusa así que ExIjO mi maldito dinero porque lo puedes hacer maldita aberración, y si no me lo das me indigno y Elmo irá por ti para cagarte a golpes con piñas, chanclas y sillas por hijo de p3rra.
Si vas a resubir las historias de los demás hazlo bien tío dale dinero a los demás y deja créditos, que me re caga que no puedas ni corregir las faltas ortográficas de nuestras historias. A la próxima esfuérzate más que quedas como flojo y un p1nch3 3nf3rm0. Ósea re mal. Me encabr0nas pvto.
Deja de estar acosando a los demás para robar historias y apropiarte de ellas, encima a menores tío, ya es el colmo.
Bueno, antes de que me enfade del todo, gracias a todas esas personitas que siguen leyendo esto, casi llegamos a las 2k muchas gracias a todos uwu
Y antes de empezar sólo pondré una cosa más.
Huevos.
Sí, huevos.
H
U
E
V
O
S
Es lo que te falta maldito c4brón, cobarde de m13rd4, hijo de la rep3rra, hijo de la re contra pvta, me cag0 en tus mu3rt0s maldito c4brón que no reparte dinero, helado, chocolate, ni créditos, y que ni siquiera corregir palabras puede. Vago de m13rd4.
Niños, niñas, chicos y chicas, decir este tipo de cosas está mal unu.
Pero, cuando se trata de Ldelibro y personas que dicen que el Rilen es una mierda, decir esto está bien, es mas, está genial :>
Es un consejo que os da AKARI, AKARILENLOVE no Ldelibro, no, os lo da AKARILENLOVE. Apréndanlo uwu.
#alamierdaLdelibro
Mejor empieza a leer para resubirlo como siempre haces hijo de tu puñete-
-Bueno, yo mejor me voy a casa -avisó Seeu, aún sonrojada- nos vemos chicos.
-Chao -dijeron otra vez al mismo tiempo los rubios. Así fue como la de cabellos alargados se marchó a su casa, dejando a una parejita sola.
-Bueno... ¿Ahora qué? -preguntó la rubia, ya que no se le ocurría ningún tema de conversación con Len.
-Pos a comer helado -respondió seguro- venga, ven -dicho eso, tomó a su amiga de la mano con delicadeza para entrar en la heladería y pedir los helados- Perdone -dijo, intentando llamar la atención del que estaba en el mostrador.
-Dígame -contestó cortante un chico, cabello rojo y era bastante alto, parecía tener unos 18 años.
-Un helado de fresa y otro de limón -pidió la oji-azul, algo tímida, con la mirada baja. Siempre le dió vergüenza hablar con desconocidos.
-Claro señorita -contestó, mientras les entregaba los helados del sabor que pidió la menor, sólo que, cuando le dió estos a la rubia, le dirigió una mirada llena de interés, como si fuera a coquetearla, seguido de eso le guiñó el ojo derecho. Esto lo notó Len enseguida, no hace falta decir que los celos lo invadieron ¿Verdad?
-Perdone señor, pero ella no tiene ningún interés en usted -dijo, Rin lo miró extrañada.
-Chico, ella no ha dicho nada -exclamó un poco molesto el pelirrojo.
-La conozco demasiado bien -contestó- ¿Y usted? -le preguntó indignado.
-No, pero no puedes decidir por ella -le comentó mientras miraba los ojos de la menor. El rubio miró a Rin, para luego mirar al suelo, el heladero desconocido tenía razón, no podía escoger por ella, por algo tenía voz, para poder utilizarla, no para que hablaran por ella.
-D-disculpe pe-pero mi n... mi mejor amigo tiene razón -miró con tristeza al mayor, Len la miró estupefacto ¿En verdad tenía razón? ¿No la cagó? El pelirrojo se enojó un poco.
-Perdonen a mi amigo, está desesperado -interrumpió una chiquilla de cabellos rosados, sorprendiendo a los tres- en compensación llévense esos helados gratis -intentó compensar con amabilidad, los dos chicos aceptaron sin ninguna queja para luego salir del local y dirigirse a un parque. El camino era incómodamente silencioso.
-Entonces... ¿Realmente no querías hacer algo con ese tío? -preguntó con inseguridad el rubio mientras tomaba su helado, el cual se iba derritiendo un poco.
-Claro que no, cualquiera de las intenciones que tuviera me dan miedo -dijo la de cabellos dorados para luego dar una lamida a su helado de fresa- con la única persona que quiero tener intenciones de algo es contigo -confesó para luego seguir con su helado. Un sonrojo se apoderó de las mejillas de Len.
-¿C-cómo? -volvió a preguntar estupefacto, creyendo haber escuchado mal.
-B-bueno, ya sabes. Sólo quiero hablar contigo, quedar contigo y abrazarte en las quedadas de amigos -¿Escucharon eso? Otra alma que fue a la friendzone. A pesar de ello él no se rendiría, pero dolió lo que dijo.
-Entiendo -respondió algo triste. Dolía tanto ilusionarse tontamente. Lamió el helado de limón.
-¿Ocurre algo? -preguntó confusa, pues, repentinamente su amigo cambió de humor. Tiró el helado en un cubo de basura. Helado murió.
F por el helado
-No -soltó un suspiro.
-Lencito -habló tiernamente Rin, este se sonrojó levemente, otra vez- Sé que mientes -dijo con sinceridad, mirando esos ojos que se iban cerrando. Para ella eran hermosos.
-No lo hago -respondió serio mientras lamía su helado, ensuciándose torpemente.
-Sí lo haces -dejó de caminar, Len copió la acción.
-No, no lo hago -contestó mientras se terminaba el helado y a la vez miraba a la menor.
-Sí lo haces -el rubio terminó finalmente el helado, entonces con la mano limpió los desechos de helado que había en su rostro. Serio, miró a su amiga.
-¿Y qué si lo hago? ¿Y qué si estoy mintiendo? ¿Qué pasa si me atrevo a mentirle a alguien como tú? -empezó a preguntar, más para sí mismo que para la rubia, la contraria simplemente no comprendía del todo lo que estaba diciendo.
-¿Entonces admites que me estás mintiendo? -preguntó algo enojada, no estaba acostumbrada a que su crush le mintiera, odiaba las mentiras, a pesar de que ella alguna vez había mentido.
-Sí, lo admito -respondió serio, aún con su mirada fija en ella.
-¿Por qué? -cuestionó- no sueles mentirme -susurró, mas lo escuchó el más alto.
-No te lo voy a decir -dijo cortante, cosa que a la rubia le dolió un poco, él le contaba todo a ella y ella a él ¿Por qué ahora no?- pero no es la primera vez que te miento -confesó, realmente parecía una discusión de una pareja, lástima que no era así, porque esa discusión se convertiría en algo más fuerte, tal vez en una pelea.
-¿En qué más me has mentido? -preguntó alzando un poco la voz, estaba entre enfadada y curiosa, pero más enojada que lo otro.
-En que para mi eres mi mejor amiga -respondió aún con ese tono cortante acompañado de una mirada azulada fría y seria, la menor quedó en shock ¿Cómo que le había mentido en eso? ¿Qué pasaba con la amistad que tienen los dos desde hace años? ¿Qué está pasando aquí Doctor García?
-¿C-cómo? -preguntó con un nudo en su garganta, notaba que iba a llorar en cualquier momento.
-Lo que has escuchado -dijo con sinceridad- no te considero mi mejor amiga y jamás lo serás -dijo, le dolía decir eso, sin embargo, era la verdad, pero más le dolía ver la cara de Rin, a punto de derrumbarse enfrente de él.
-Pero... he sido tu mejor amiga por años -habló a pesar de las lágrimas que estaba a punto de derramar.
-Lo sé -contestó serio- y no me gusta, es más, lo odio -parecía que lo decía en serio o tal vez sí lo decía de verdad- odio que seas mi mejor amiga.
-¿Entonces por qué sigues conmigo? -le gritó, llamando la atención de algunas personas que paseaban por ahí- ¿Por qué simplemente no te largas de mi vida para siempre y me dejas? -preguntó con su voz casi quebrada, escapando lágrimas cristalinas de sus ojos celestes que perdían el brillo, Len se estaba enfadado o quizás ya se había enfadado y es por eso que apretaba sus manos, formando un puño con ambas.
-Porque no puedo dejar a la persona que amo sola contra el mundo -le contestó con enojo, mas esa mirada fría y el tono borde no desaparecía en ningún momento- te amo -confesó con un sonrojo en sus pómulos y sus ojos cerrados con fuerza, pero luego los abrió, mirando a su pequeña rubia, la cual no era suya, esta se encontraba sonrojada por aquella confesión con sus ojos abiertos a más no poder, con algunas lágrimas saliendo de ellos, realmente pensaba que él la odiaba, sus dos manos se situaban tapando su boca- lo hago desde hace tiempo -dijo aún con el sonrojo- desde hace mucho -susurró- y no te quiero como mejor amiga, odio ser tu mejor amigo y no ser tu novio, ¿vale? -comenzaba a desesperarse, en verdad quería que Rin fuera su novia, que pena que no podía serlo- Y Tal vez sea egoísta por querer tenerte para mi y que otra persona no te toque, que tú no gustes de alguien más y que sólo gustes de mi -suspiró, intentando calmarse, cosa que no funcionaba muy bien, desvió la mirada- Y ahora que lo pienso mejor, sí soy egoísta -confesó - pero es que sólo te quiero a ti y no a otra chica. Te lo repetiré otra vez -simplemente la miró fijamente, haciendo sonrojar levemente a la rubia- odio ser tu mejor amigo y sí, he mentido, he mentido en lo de que te considero mi mejor amiga, porque no es así, te considero como la persona que me gusta, la que me vuelve loco, te considero la persona que más amo en este mundo, mi persona favorita, la persona por la que cada día lucharía y la defendería en todo -suspiró, tragó saliva y continuó hablando- la única que hace que este corazón -señaló su órgano latente- lata más y más rápido. Te juro que no hay nadie más como tú que haya hecho que me ponga tan nervioso por alguna estupidez que sin querer haya hecho. Sí eres mi mejor amiga -cogió las manos de la susodicha, haciendola sonrojar más- pero, no te considero como una -ablandó su mirada- porque tú me gustas, me encantas -confesó con sus mejillas invadidas por un rojo carmesí muy notable mientras que una sonrisa débil aparecía junto con unas lágrimas. ¿Que de dónde había sacado el valor para decir todo esto y en público? Ni siquiera él lo sabe, así que es una pregunta sin repuesta querida persona.
-L-len... -susurró, él aún tenía sus manos agarradas con firmeza, fue entonces cuando alguien interrumpió esa bonita e inesperada escena. Una chica de cabellos rubios y brillantes como el sol atados en una coleta alta llamó al más alto.
-Len, querido -habló con una voz melosa, haciendo que el rubio rompiera el agarre que él mismo había formado. Definitivamente, Rin comenzaba a no gustarle esa chica, que, por alguna razón le resultaba familiar- habíamos quedado hoy -le informó a Len- ¿O acaso no lo recuerdas? -le preguntó con una voz inocente algo fingida. El más alto miró sus ojos ámbar.
-Neru, que yo sepa habíamos quedado en tu casa ma- -le interrumpió la susodicha.
-No, era hoy la quedada -corrigió para seguido coger la mano del contrario con cariño. A Rin, por alguna razón, no soportaba aquello.
-Pero- -iba a decir algo de no ser por la oji-mostaza. Acercó su cara a la del contrario para darle un beso en la mejilla, cerca de sus labios. La rubia deseaba darle una patada a la chica.
-No digas nada Lencito, te vienes a mi casa -dijo, mirando a la oji-zafiro- Adiós Rin -se despidió, agitando su mano izquierda de un lado al otro, con una voz algo neutra. Tenía algo que no le gustaba a Rin. Luego entrelazó sus dedos con los del rubio. Se iban alejando los dos y la menor no hacía nada, para este momento las personas que se habían quedado para escuchar la "pelea" que tuvieron los dos amigos ya no estaban en este instante. La pareja cada vez se alejaban más y más, la de ojos cual zafiro seguía parada, aún con las lágrimas saliendo de sus orbes que no tenían el brillo de siempre, aquel líquido seguía rodando por sus mejillas hasta caer al suelo. Estaba triste, puede que incluso más de cuando se fue de su casa por el tema de Rinto, su hermano.
Se sentía mal pero confusa a la vez, su mejor amigo le había confesado que gustaba de ella desde hace ya un tiempo. Y se notaba lo enamorado que estaba por ella, decidió sentarse en un banco del parque del cual estaba muy cerca para pensar.
Todas aquellas situaciones, ahora tenían sentido.
~♡~
-Quería ver a Rin -habló el rubio, haciendo que la rubia se sorprendiera por lo que su mejor amigo dijo ¿Era enserio?
-¿A mí? -preguntó sorprendida. El contrario asintió con la cabeza repetidas veces.
-Sí -afirmó con una pequeña sonrisa apenas notable- ¿Cómo estás? -preguntó preocupado por su mejor amiga.
-Algo cansada, pero quitando eso bien -dijo, quitando importancia a su estado.
-Me alegro -dijo sonriendo con esa sonrisa que, extrañamente, le empezaba a gustar mucho a Rin, por algún motivo, los pómulos de está se volvieron de un rosado fácil de notar, mas Len no lo notó por su ceguera y porque tenía los ojos cerrados.
~♡~
-¿Por qué te acercas? -preguntó la menor con un poco de curiosidad y nerviosismo a la vez en su voz, esta se encontraba sentada en el sofá del salón.
-Para... hacerte... -hizo una pausa para poder posicionar sus dos manos en la barriga de la rubia, esta se sentía bastante nerviosa ahora que las manos de su mejor amigo se encontraban en una parte de su cuerpo que, digamos, era un punto débil más que tenía- ¡cosquillas! -exclamó con emoción para luego hacer lo que dijo. Provocarle cosquillas en la tripa de la más baja.
-Ajajaja -reía sin descanso alguno, Len al escuchar esas risas sonreía y Rin lo notó, con el paso del tiempo comenzaba a gustarle más esa sornisa blanquecina que poseía el rubio, a saber por qué- Len.... Jajaja Par-para -suplicaba mientras no paraba de soltar risas por lo que hacía el rubio.
-Nop -este quería seguir escuchando la risa de su mejor amiga, le encantaba oír aquella risa, para él era como una melodía agradable. Hacía tiempo que no la escuchaba reírse tanto y extrañaba eso, de verdad que le enamoraba la risa de la contraria.
~♡~
El rubio puso la película y una vez comenzó, este se sentó, en el cómodo sofá que tenía, al lado de la menor. Al paso que avanzaba la película él cogía un puñado de palomitas para comerlas una por una, Rin hacía lo mismo, pero cuando iba a coger por segunda vez las palomitas, su mano rozó con la del oji-zafiro, ambos se sonrojaron levemente.
Para el mayor, tocar la piel de su mejor amiga, lo hacía tan feliz, aunque fuera accidentalmente, hacía latir tan rápido a su corazón. Aparecía un leve sonrojo en sus mejillas que por suerte la rubia no notó en ningún momento, él estaba muy contento por esos roces.... Que pena que para la rubia esto no fuera más que un simple roce.... O eso pensaba ella... Porque, algo extraño para esta es que su corazón empezaba a latir un poquito más rápido de lo normal al sentir roces con la mano de su mejor amigo. Algo simple y sin importancia. Pero si fuera algo sin importancia... ¿Por qué esos roces le sacaban una sonrisa?
~♡~
-Está bien -miró su otra mano, llevaba puesto un reloj y vió que aún le quedaba tiempo, el justo para llegar a su escuela, entonces, se sorprendió al saber que la contraria no soltaba su mano- Hem... R-rin -llamo nervioso, con un leve sonrojo en su rostro.
-Dime -respondió la menor.
-¿P-podrías so-soltar mi muñeca? -preguntó muy nervioso, no estaba acostumbrado a que hiciera contacto con la pequeña rubia, y si llegaba a ternerlo, se ponía muy nervioso, tal vez demasiado- tengo el tiempo justo para irme -se excusó, parcía más una excusa para salir de aquella situación incómoda y agradable a la vez, pero, era verdad lo que decía.
-Oh... claro -respondió un poco avergonzada por lo que pasó ¿En serio aún sostenía la mano de su amigo? Que vergüenza... al final obedeció a lo que su amigo le dijo y soltó su mano.
~♡~
-¡Rin! -gritó el oji-azul, seguido se lanzó directo hacia la rubia para poder abrazarla, apoyó su cabeza en el cuello de ella. Estaba alegre de que despertara, luego de unas 2 horas apróximadamente. Esta correspondió nada más notar 2 brazos rodearla.
El rubio se separó un poco-¿Me contarás que te pasó hoy? -preguntó, aunque parecía más una súplica que una pregunta, pero bueno. Miró directamente los ojos zafiro de la menor y puso una cara de cachorro, a la que esta no se resisitía nunca, cosa que sabía perfectamente el mayor.
-B-bueno -tartamudeó ¿Por qué le parecía tan adorable ver esa faceta del rubio?- si pones esa cara -suspiró pesadamente- está bien -el rubio la abrazó, otra vez, emocionado. Al fin sabría lo que le ocurrió a la chica.
-Gracias -agradeció mientras se separaba del abrazo- ahora cuéntame -casi ordenó.
Muchos minutos más tarde
-¿Otra vez Aoki? -preguntó enojado, no lo podía creer, en verdad que esa chica le sacaba de sus casillas y eso era difícil tratándose de Len.
-Sí -afirmó nerviosa, de repente se fijó en algo, la mano derecha de Len iba pareciéndose más a un puño, entonces cogió justamente ese puño con sus dos manos- pero no importa -le dijo para intentar calmar los impulsos que le vinieron de pronto al rubio, al mismo tiempo le proporcionaba caricias, el contrario tenía un sonrojo en su rostro, le gustaba aquellos toques que le ofrecía la menor, pensando en eso, al final dejó de apretar su mano, la oji-zafiro notaba que la ira en él iba disminuyendo. Claro que fue ahí cuando pensó en lo que había dicho su amiga.
-¿Cómo que no importa? - preguntó ofendido, claro que importaba, importaba mucho- Rin.... por culpa de eso te desmayastes. Puede ir a peor. -contestó algo decepcionado y enojado por la respuesta de la pequeña, pero al menos ya estaba más calmado- Y no quiero que vaya a peor -confesó un poco sonrojado.
-Lo sé pero -la rubia dejó de hablar para analizar lo último que dijo, enseguida comenzó a darle más de un sentido a lo que dijo su mejor amigo- e-espera... ¿Qué? -preguntó algo sorprendida y bastante sonrojada, creyendo haber entendido la indirecta. El mayor comprendió lo que había dicho indirectamente y en su cara creció un sonrojo increíble, se tapó con su otra mano. Pensó en una excusa buena.
-Sí... somos.... amigos -cómo le dolió decir aquello- mejores amigos -le dolió aún más decir eso- y no quiero que te pase algo -confesó con una pequeña sonrisa.
¿Por qué por un momento ella se ilusionó? ¿Por qué pensaba que se refería a otra cosa? Y lo más preocupante ¿Por qué se desilusionó cuando dijo "amigos"? A ver, lo eran y le encantaba serlo pero, que lo diga de esa manera, como marcando la palabra disimuladamente, eso ya no le gustaba tanto.
Preguntas aparecían.
¿Lo peor?
Sabía que no iban a ser respondidas.
Puede que nunca...
Lo que no sabía es que esa respuesta pronto llegaría
~♡~
Cada día que pasaba, su dolor disminuía y eso le gustaba.
Estaba a unos pasos por "recuperarse".
Al fin podría amar a otra persona y encontrar su otro extremo del hilo rojo sin que una cabellera rubia se tope en su mente.
Ah no.
Hay una cabellera que sí se cruza habitualmente en su camino.
Len.
Su mejor amigo.
¿Por qué de pensar en Rinto pasa a pensar en Len?
De su hermano a su mejor amigo
¿Por qué?
Ni esta lo sabía, como siempre.
Pero, quizás en un futuro lo sepa.
Pero el futuro ya llegó.
Y por eso comenzó a comprender aquellas escenas tan bonitas y raras a la vez que tuvieron los dos.
Ahora era cuando comprendía las indirectas que sus amigas le daban.
~♡~
Aquella indirecta en el colegio por parte de su amiga Lenka
-Es verdad, ya tienes a Len -dijo, susurrando lo último, pero claramente la rubia se enteró de aquello, no estaba tan sorda, su rostro se convirtió en un tomate, en uno más rosado que rojo.
-¿Q-q-qué? -preguntó atónita sin entender mucho, mas ahora lo comprendía.
-Nada... -contestó para luego guiñarle uno de sus zafiros.
~♡~
Y
cómo no, aquel día que estaba triste por haber hablado con la chica de cabellos turquesas.
-Todas las noches que no estaba yo, él lloraba en casa -el rubio la abrazó, poniendo la cabeza de esta en su pecho. La menor puso sus manos en la espalda de este. Ella podía escuchar los latidos del oji-azul, los cuales iban bastante rápido. Claro, ella no sabía por qué iba a tanta velocidad.
Pero, ahora ya lo sabe.
-Hey. Tranquila -dijo Len acariciando sus cabellos dorados, la intención que él tenía era que su amiga dejara de llorar y se calmara, notaba como la respiración de la contraria disminuía- ¿Quieres que te diga algo? -le preguntó con voz suave, la menor asintió.
-Sí -pidió la rubia. El mayor se acercó a su oído, provocando un escalofrío en ella, aquella acción era extraña por parte de él.
-Que le den -le susurró con un tono gracioso. La oji-azul soltó una pequeña risa. Ese tono siempre le hacía reír y Len lo sabía.
-Sí, que le den -repitió ella riéndose bajo. Él amaba su forma de reír.
-Bueno, vámonos -dijo el rubio rompiendo el abrazo, ppr alguna razón la rubia quería que ese abrazo siguiera y nunca la soltara- pero antes... -y sin completar su frase, pasó sus pulgares por las mejillas de la menor para limpiarlas y quitar las lágrimas saladas. Provocando que en estas cambiaran su color blanco pálido a un leve tono carmesí.
-Gracias len -agradeció la pequeña contenta.
-No es nada Rin -dijo mientras le mostraba una sonrisa. Una muy bonita sonrisa. Según Rin.
~♡~
R
ecordó otra indirecta por parte de su amiga y hermana de su amigo, Seeu.
-Pero mi hermano será tu novio -dijo, haciendo que en la pequeña Rin crezca un gran sonrojo.
-Seeu -llamó, parecía molesta.
-¿Si? -luego de que respondiera en una pregunta, esta recibió un golpe en la cabeza- ¡Au! -se quejó en voz baja, ese golpe no fue muy fuerte, pero igualmente dolió un poco- ¿Eso por qué? -preguntó, bastante indignada.
-Por decir cosas que no deberían de importarte -contestó, ahora la más alta en estatura tenía claro que la rubia estaba molesta.
-Pero si llegáis a ser pareja, serías mi cuñada -dijo con una sonrisa en su rostro.
-Cállate -murmuró avergonzada al pensar en ello. Luego de esa "discusión" ambas bajaron y llegaron al salón, donde se encontraban Len y la desconocida pelirrosa sentados, hablando. A nuestra rubia, sin quererlo, empezó a sentir un poco de celos al ver a su mejor amigo hablando con otra pero, ¿Qué pasa con ello? Se preguntaba a sí misma. El chico puede hablar con quien quiera, tiene derecho, se decía a sí misma.
Empezaba a pensar ahora en los momentos que tal vez se sintió algo celosa por Len, seguía sin saber el porqué se sentía de esa manera.
¿En un futuro sabría lo que siente?
~♡~
Miles de preguntas pasaban por la cabeza de la pobre Rin.
¿De qué hablaba la pelirrosa con él? ¿Por qué se reía?
¿Qué clase de relación tienen si hace nada estaban peleando?
~♡~
En fin salgamos ya- comentó Len pero, al ver mejor a la rubia, su cara se tornó de un leve rojo. Enseguida sonrió- te ves muy bonita Rin -dijo con su sonrisa.
-Gr-gracias -tartamudeó la nombrada, las otras dos chicas sólo se pusieron a chillar como las fangirls que son, gritando Rilen es real y el oji-azul trataba de callarlas, Rin sólo reía de la situación , aunque no lo pareciera, era bastante cómico la escena.
~♡~
Ahora entendía el porqué Seeu y Uni a veces los molestaba a los dos con lo de que hacían una bonita pareja, lo del shippeo Rilen, inventado por la rubia de cabellera larga.
Espera, si eso fue hace poco, es más, fue ese mismo día.
Estaba mal por no haber notado el amor que el rubio sentía hacia ella.
¿Cómo no notarlo?
Era bastante lógico ¿Verdad? A lo mejor ella era mala a la hora de notar ese tipo de cosas, al fin y al cabo, nunca se le dió bien aquello, no sabía detectar lo lógico, al menos no en el afecto mutuo que se tenían las personas. Como Lenka dijo una vez, ella no era tonta, tan sólo era ingenua en algunos temas. Y eso era verdad, no es estúpida tan sólo torpe en el amor, a lo mejor por eso nunca sospechó nada sobre lo que sentía su mejor amigo hacia ella.
-Debería de irme de aquí -murmuró la rubia por lo bajo para comenzar a andar, quería estar ya en la casa.
.
.
.
.
.
.
Hola otra vez.
Y ahora, tengo que decir que ya estoy mejor, me he organizado y creo que podré subir más seguido esta historia, tal vez un capítulo por semana, no es seguro pero intentaré que sea así, claro, si hay personas que siguen leyendo esto XD -aparte del pvto de Ldelibro-
Y de ser así, muchas gracias a todos aquellos que leen, votan y comentan en esta historia que lleva dos años sin acabar, se merece un final y lo van a tener antes de octubre, lo juro tío, las personas que lean y a las que les guste esto, os prometo que voy a acabar esta verga. Luego de acabarla probablemente la edite, el principio está fatal.
Muchísimas gracias a todos los que siguen leyendo esto a pesar del tiempo que tardo en actualizar, en serio, gracias por tenerme paciencia y esas weas.
No se me ocurre nada más que no sea joder :^
Oh bueno sí, son unos chamacos y chamacas pervertidxs :'v
¿Por qué?
Por esto
Son unos guarros y guarras unu
Unas semanas trabajando en esa cosa para que tenga esos hermosos vistos :'3
Estoy feliz por eso uwu
Si les gustó digan si quieren más cosas de ese estilo, y tal vez si hay muchos comentarios apoyando esa idea haré una historia aparte que trate sólo de eso XD
Pero claro, depende de ustedes, no voy a hacer lemmons (limones jsjsjs ahre no) para que luego tenga pocos comentarios y vistos.
Y si alguien sabe algo de lo que puse en un principio, sobre lo de Ldelibro, por favor, difundan.
En fin, ahora sí que no tengo nada más que decir, así que bye!