A medida que transcurrían los sofocantes días de verano, Yixing y Junmyeon a veces regresaban a la piscina. Junmyeon incluso le había pedido a Yixing su número para poder enviarle un mensaje y avisarle cuando fuera allí. Obviamente, Yixing se lo dio y dijo que si a todas sus propuestas. Esas veces Yixing pudo traer sus bañadores y una camiseta extra. También había dejado de preocuparse por meterse en problemas. Si Junmyeon tenía una llave eso quería decir que estaba bien, ¿no?
Sin embargo, dado que sus encuentros sucedían principalmente durante la noche, Yixing tuvo que escabullirse de su casa. Ese día que llegó tarde sus padres no estuvieron muy de acuerdo con que Yixing estuviera en la calle a esas horas de la noche. Y ya que Luhan aún estaba de viaje no podía usarlo como excusa. No tuvo más remedio que escabullirse. Se sintió como un pequeño rebelde al hacer eso, y después de seguir las reglas toda su vida fue refrescante hacer algo atrevido. Claro, también se sintió mal de ocultar esto de sus padres, pero no había nada de qué preocuparse. Tenía a Junmyeon a su lado, con suerte nada malo les sucedería.
Por otro lado, en el trabajo no hubo un día en que no hablaban sobre cosas sin sentido o significativas. Ya hasta bromeaban juntos, compartiendo chistes internos entre ellos. Alimentaros aún más animalitos callejeros, inclusive en los fines de semanas. Junmyeon sonreía y frecuentemente se reía más junto a él, haciendo que el corazón de Yixing se agitara constantemente. Pero todavía seguía siendo serio con los clientes (pero si dejo de gritar o mostrar su enojo). Este cambio en actitud hizo que Yixing se sintiera más especial de lo que probablemente era para Junmyeon.
En fin, había sido uno de los veranos más memorables de su vida. No obstante, todas las cosas buenas llegan a su fin. Y para decepción de Yixing, el retorno a la escuela estaba a la vuelta de la esquina.
Así comenzó la última semana de agosto y su última semana de vacaciones. Ese lunes, Yixing había ido feliz al trabajo, pero también un tanto triste. Junmyeon y él ya no pasarían tanto tiempo juntos. Su tristeza aumento cuando al llegar se enteró que Junmyeon no había asistido porque estaba enfermo. Ahora también estaba preocupado.
Los días sin Junmyeon en el trabajo, se sintió totalmente preocupado y distraído. Más de una vez mezcló el pedido de un cliente o dejó caer las cosas. No podía evitar preguntarse qué había pasado. ¿Estaba bien Junmyeon? ¿Tenía algo serio? ¿Y si estaba sufriendo? ¿Se repondría? No ayudaba que Junmyeon tampoco contestará sus llamadas o mensajes de texto.
Para el viernes, Yixing ya había tenido suficiente. Necesitaba ver a Junmyeon para confirmar que todavía estaba vivo. Pero su mayor inconveniente era que no tenía idea donde vivía Junmyeon, quien seguía sin contactarse. ¿Qué debía hacer? Bueno, Yixing de alguna manera convenció a su jefe para que le diera la dirección... ¡era por su bien! ¿Qué tal si algo le hubiera pasado a Junmyeon? Alguien tenía que ir allí y comprobarlo. Además, Junmyeon necesitaba cobrar su último salario. Así que, Yixing yendo a visitarlo para recordarle era una buena idea. Afortunadamente su jefe no le preguntó nada más.
Después del trabajo, se fue en bicicleta lo más rápido que pudo hacia la casa de Junmyeon. Y si, estaba ubicada a solo cuatro cuadras de la de Yixing. Jadeando, se paró frente a la puerta y tocó el timbre. No vino nadie. Llamó a la puerta. No hubo respuesta. Golpeó una y otra vez hasta que básicamente estaba tocando el timbre y llamando el nombre de Junmyeon todo al mismo tiempo.
La puerta se abrió de repente, haciendo que Yixing casi se caiga de espaldas.
—¡Dejen de molestar! —gritó Junmyeon enojado. Tenía los ojos hinchados, al parecer no había dormido en días. Su cabello rojo estaba hecho un lio y todavía estaba en pijamas. No se parecía en nada a Junmyeon.
—Junmyeon —dijo —. ¡Gracias a Dios que estas vivo! Estuve tan preocupado por ti.
Junmyeon lo miro mientras jadea como si recién se dio cuenta quien estaba allí. Cerró la puerta en la cara de Yixing. —¡Lárgate, Zhang! —gritó desde adentro.
Yixing apoyó la frente contra la puerta, poniéndose ansioso. ¿Cómo podría dejar a Junmyeon así? —¡No! No hasta que me digas por qué faltaste al trabajo esta semana —. Yixing siguió tocando y llamando la puerta. Dijo cosas como que, si Junmyeon estaba herido, si deberían ir al hospital. Esperaba que Junmyeon confiara en él y abriera la puerta. Yixing solo quería acompañarlo.
Eventualmente Junmyeon se rindió y abrió la puerta ligeramente. Yixing agarró la manija y empujó la puerta, entrando. Se quito los zapatos y puso su mochila en el suelo. Nervioso, siguió a Junmyeon hasta la sala de estar. Junmyeon tomo asiento en uno de los sillones, Yixing se sentó en el sofá cercano. Al echar un vistazo alrededor, Yixing notó que no había muchos muebles o decoración, solo los sillones y el televisor que colgaba en la pared. Pero en un rincón noto que había ¿un corral para perros? De cualquier manera, dentro había algo de heno, cuencos y cajas, pero no ningún animal alrededor.
Al principio esperó pacientemente a que Junmyeon hablara. El silencio permaneció por un rato. Por lo tanto, Yixing decidió dar el primer paso. —Junmyeon, ¿qué paso? ¿Estás bien?
Junmyeon soltó un suspiro. Todavía no miraba a Yixing. —¿Por qué quieres saber?
—Porque me preocupo por ti.
Resoplando, Junmyeon preguntó: —¿Por qué te importaría?
Obviamente porque Yixing todavía estaba enamorado de él, y nada le haría más feliz que verlo bien. Sin embargo, Junmyeon nunca preguntó si aún le gustaba a Yixing, y Yixing nunca levantó el tema por miedo a que Junmyeon se alejara.
—¿Por qué somos amigos? Los amigos se preocupan el uno por el otro. Y yo me preocupo por ti.
—¿Lo somos realmente?
—¡Si! Yo pienso que si... ¿y tú?
Hubo otro silencio en donde Junmyeon siguió pensando mientras Yixing lo miraba atentamente. Hasta que finalmente Junmyeon levanto la cabeza, encontrando la mirada de Yixing y entrecerrando los ojos.
—Todo lo que te cuente ahora, se quedará aquí. Si tan solo una palabra sale, eres hombre muerto.
Yixing nunca creyó en las amenazas de Junmyeon, sin importar lo intimidante que podía sonar. No obstante, al parecer Junmyeon le diría algo significativo y personal. Y Yixing podría ser un poquito despistado, pero nunca traicionaría su confianza. Ey, hasta ahora no le había dicho a nadie que Junmyeon fue Junhee. —Junmyeon, nunca le contaría a alguien si tu no quieres que lo haga. Lo prometo —. Extendió su dedo meñique, pero Junmyeon no pareció captar la indirecta, o tal vez lo ignoró deliberadamente.
Junmyeon cerró los ojos y habló finalmente. —Sabes, cuando cumplí once años me regalaron un pequeño conejo. Como que crecimos juntos, él mucho más rápido por supuesto. La semana pasada cayó enfermó, supongo que debido a la vejez y todo eso, pero... Él murió.
Yixing jadeó. Le sorprendió saber que Junmyeon había tenido una mascota ya que nunca lo había mencionado, ni siquiera mientras alimentaban a los gatos y perros callejeros. Ahora entendía quien debió haber sido el ocupante del corral. Y al parecer Junmyeon había apreciado al animalito tanto que tuvo que faltarse al trabajo. Una parte del corazón de Yixing se rompió al oír que el conejito había muerto. De alguna manera intentó imaginar cómo se sentiría. Jean-Henri podría ser tan solo una tarántula, pero Yixing estaría tan triste si su amigo muriera. Se puso de pie. Quiso ir i darle un abrazo a Junmyeon, sin embargo, eso no sonaba como una bueno idea. En su lugar fue a arrodillarse junto a él.
—Lamento mucho escuchar eso, Junmyeon.
Junmyeon no dijo nada, solo lo miro inexpresivamente.
—¿Cómo se llamaba?
—Señor Bigotes —murmuró Junmyeon.
Tristemente Yixing sonrió al escuchar el nombre. "Señor Bigotes" parecería más apropiado para un gato, pero tal vez Junmyeon tenía sus razones.
—Tenía unos bigotes muy largos —agregó Junmyeon, encogiéndose de hombros y respondiendo la pregunta no formulada de Yixing. Sonrió otra vez.
Luego no dijeron nada por unos momentos. Yixing nunca había lidiado con la muerta por ahora, porque no sabía como consolarlo. Hizo un puchero mientras trataba de pensar en que decir para animar a una persona.
—Solíamos jugar juntos en el jardín, comer y tomar siestas. Era tan esponjoso y suave. Mira —dijo Junmyeon repentinamente. Sacó su teléfono y le mostro su fondo de pantalla. Junmyeon sostenía al conejo junto a su cara. El Señor Bigotes fue un conejito gordito con pelaje marrón y orejas caídas, muy adorable. Era tan lindo y esponjoso como había dicho Junmyeon.
—Debido a mis trabajos de medio tiempo, últimamente lo descuidé un poco y en su mayoría fue cuidado por mi vecina. Desearía haber pasado más tiempo con él y mostrarle toda mi apreciación. Lo voy a extrañar un montón.
Oh no. Yixing vio como la cara de Junmyeon se puso bastante triste. —Sé que lo harás. Pero siempre lo tendrás aquí, Junmyeon... En tu cerebro donde están almacenados todos tus recuerdos de él —dijo Yixing mientras apuntaba su frente.
Después de mirarlo con incredulidad, Junmyeon se echó a reír ante ese comentario. Yixing estaba feliz de escuchar su risa, aunque sea por un momento. Cuando la risa cesó, Junmyeon dijo: —Debes pensar que soy patético, ¿no?
Al instante, Yixing sacudió la cabeza. —¡No! ¡Por supuesto que no, Junmyeon! Suena a que realmente apreciabas al Señor Bigotes.
—Lo hice. Era más que mi mascota. Básicamente fue lo más parecido que tuve a una familia.
Tras oír eso Yixing abrió los ojos de par en par. Había acertado, este conejito había sido muy importante para Junmyeon, ¿pero decir que fue su única familia? Definitivamente había mucho que Yixing todavía no sabía sobre Junmyeon. —¿De qué hablas?
—No tengo padres.
—¿Qué?
Junmyeon resopló. —Sí, ese mismo año que me dieron al Señor Bigotes, mis padres se divorciaron. Mi madre me abandono para irse quién sabe dónde. Bueno, me quede a vivir con mi papá. Pero era como si él nunca estuviera aquí. Siempre me dejaba con niñeras, solo aparecía para regañarme por la mierda en que me metía —. Soltó un suspiro. —Así que finalmente me dejó solo cuando cumplí dieciséis.
Esto no podría haber sucedido, ¿cierto? ¿Qué las madres no suelen estar ansiosas por estar con sus hijos? ¿Cómo podía haber abandonado a Junmyeon así? ¿Por qué lo hizo? Y su padre, ¿Cómo pudo cometer el mismo error? Increíble. Yixing sacudió la cabeza. —¿Qué? ¿Por qué se fue?
—Porque encontró una nueva esposa, y supongo que era una gran molestia para ella y su nueva vida en su nuevo apartamento. Así que me dejo a vivir aquí. Intentó contratar a alguien para que me "cuidará" pero me negué. Puedo cuidarme solo, lo he estado haciendo por un largo tiempo. Él solo viene a verme para dejar algo de dinero u otras cosas.
Algunas personas no merecían tener hijos. ¿Cómo podía alguien abandonar a sus propios hijos? ¿Cómo podían dejarlos solo? Todas las cosas que Junmyeon le contó, lo hicieron sentir enojado y abatido. Al mismo tiempo, pudo entender a Junmyeon un poco mejor. Así que al crecer Junmyeon no tuvo a nadie en quien confiar, nadie que le mostrara amor y aprecio. ¿Qué tan solo debió haberse sentido? Quizás su actitud grosera y rebelde se debía al abandono de sus padres. Tal vez solo quería que alguien se preocupara de él alguna vez. Y tal vez por eso el Señor Bigotes había sido su única familia.
—Realmente son unos padres terribles —dijo Yixing.
Junmyeon soltó una carcajada. —Oh si tan solo fuera todo, Zhang.
—¿Hay más?
—Hace dos años mi madre intento ponerse en contacto conmigo, como si nada hubiera pasado. Como si no hubiera ignorado mi existencia y llamadas durante los últimos años. Ni siquiera se molestó en explicar porque se fue, o porque demonios tenía otro niño con ella. Trató de disculparse y quería que viviera con ella, pero que gran mierda. ¿Por qué ahora? ¿Para qué me encargue del mocoso? Así que me negué. Aun intenta disculparse de vez en cuando, pero que se vaya a la mierda —. Junmyeon se encogió de hombros.
—Oh.
—Y mi papá tuvo suficiente de mis idioteces el año pasado. Dijo que ya no me daría dinero hasta que empezara a ser "bueno". Pero por lo menos paga las cuentas de la casa y la escuela. Después, a principios de año me dijo que tenía que mudarme cuando me graduara porque iba vender la casa. Pero su increíblemente amable esposa le hizo darme otra opción.
—¿Lo hizo? ¿Qué es?
—Si logro ingresar a la universidad y "arreglar" mi vida, pues considerarían ayudarme a pagar las cuotas y podría quedarme a vivir con ellos —. Junmyeon se rio con amargura. —Obviamente no lo dice en serio porque de ninguna manera entraré, y ellos lo saben. Solo se están burlando de mí.
—¿Cómo puedes estar tan seguro de que no pasaras?
—Mis calificaciones son mediocres. Pero ¿realmente crees que puedo pasar el examen de ingreso? ¿El examen más difícil de todos? Además, ya tengo otro plan.
—¿Un plan? ¿Qué piensas hacer?
—Tengo un tío que vive en otra ciudad, maneja una empresa de construcción. Dijo que me ayudaría a conseguir un lugar donde quedarme y enseñarme a trabajar en obras de construcciones, garantizándome un empleo. Estaré más estable que viviendo aquí. Así que he estado trabajando para ganar dinero y poder mudarme allí una vez que me gradué.
No. El corazón de Yixing dolió. ¿Junmyeon se iba? No. No. Negó con la cabeza. Eso no podía suceder. Junmyeon debía quedarse aquí, tenía que quedarse aquí con Yixing. Incluso si Junmyeon nunca lo vería de la misma forma que Yixing, quería que Junmyeon se quedara. Yixing tendría suficiente con solo verlo. ¿Qué sería de Yixing sin él? Si tan solo... ¡La solución estaba justo en frente de sus ojos! Junmyeon tenía que aprobar el examen de ingreso a la universidad. Es posible que no pueda calificar para una de las mejores universidades, pero otro lugar podría considerarlo. Yixing se puso de pie. —¡Yo te ayudaré!
—¿Con qué?
—¡Aprobar el examen de ingreso!
Junmyeon se echó a reír. —¿Estas bromeando? No hay manera en el infierno de que pueda pasar eso. No me he preparado para eso desde que... No lo sé. Y quedan como dos meses y medio.
—Pero yo lo he hecho todo este tiempo. Y sé que puedo ayudarte, Junmyeon. ¡Esto sería bueno para ti! Quiero decir, ¿realmente quieres trabajar en obras de construcciones? ¿Es eso lo que quieres hacer?
—No lo sé. Pero sé que no tengo ni una posibilidad de pasar ese examen. Y necesito un trabajo para sobrevivir. Estás perdiendo el tiempo, Zhang —. Junmyeon también se puso de pie, —Vamos, ya es hora de que te vayas. Quiero estar solo.
Yixing tomó el brazo de Junmyeon. —No puedes solo rendirte, Junmyeon. Yo-
—¿No escuchaste? No puedo y no lo haré. ¡Deja de insistir!
—Presiento que nadie te ha dicho esto antes, pero creo en ti. Te he visto en el trabajo, aprendes rápido a pesar de que son cosas prácticas. Confió en que puedes hacer esto, Junmyeon. Y me asegurare de ayudarte a estudiar. Todos los días, no me importa si no tengo tiempo libre, te ayudaré —. Yixing le dio su sonrisa con hoyuelos. Sinceramente si creía que Junmyeon podría hacerlo, si tan solo él pudiera creer en sí mismo. —Puedes contar conmigo, te prometo que estaré allí para ti.
Junmyeon lo observaba con ojos muy abiertas, mientras su boca estaba abierta. Ni siquiera alejo la mano de Yixing de su brazo. Después desvió la mirada. —Tus padres no querrían tener a alguien como yo en su casa. Soy una plaga, todos huyen de mí. Y no es de extrañarse, no soy exactamente un ángel como tú.
Yixing sacudió la cabeza. Para él si lo era. A pesar de todo, Junmyeon era un ángel, ángel con algunas faltas. —Yo no hui de ti. No sé sobre mis padres, pero incluso si lo hicieran, pues... ¡vendré aquí! Podemos estudiar juntos en tu casa. Vivo solo a cuatro cuadras, ¿recuerdas?
Junmyeon se rio con cariño. —¿Piensas encontrar cualquier forma para que diga que sí?
Yixing asintió. —Claro que sí.
Finalmente, sus miradas se encontraron. Yixing le sonrió cálidamente.
—Si vienes a mi casa, también puedes jugar con mi tarántula. A Jean-Henri no le importan los extraños.
—Sin ofender, pero no quiero sostener a esa cosa peluda. Es asqueroso.
Fue ofensivo, pero Yixing había dejado de prestar atención a esos comentarios. Todos parecían decir lo mismo de Jean-Henri. Nunca pudo entender por qué la gente le tenía miedo a la tarántula linda y dulce, quien también era un gran oyente. Aun así, Yixing se rio y respondió: —Mi oferta tentadora no funciono. Pero está bien, te entiendo. Nadie aparte de mi familia se atreve a sostener a Jean-Henri.
Permanecieron en esa posición por algún tiempo. Yixing sosteniendo el brazo de Junmyeon, no dispuesto a dejarlo ir hasta que acepte.
Eventualmente Junmyeon cerró los ojos y suspiro. —Está bien, Zhang. Hagámoslo.
Yixing volvió a sonreír tan brillantemente que todos sus hoyuelos aparecieron. —¿En serio?
—Sí.
—¡Si! ¡Vamos a aprobar este examen! Ya verás.
Junmyeon le devolvió la sonrisa, viéndose tan hermoso, tan encantador, que Yixing casi olvido como respirar. Soltó su brazo y lo miró jadeando. En ese instante, Junmyeon se escapó, subiendo por las escaleras y dejando a Yixing allí, quien todavía estaba en estado de shock.
Cuando Yixing recuperó sus sentidos, no supo que hacer. Supuso que Junmyeon debió haberse sentido avergonzado después de esa sonrisa cariñosa, que tuvo que escaparse. Yixing camino al pasillo y comenzó a ponerse los zapatos. Junmyeon apareció momentos antes de que Yixing abriera la puerta.
—¡Espera, Zhang!
Yixing se dio la vuelta. —¿Sí?
—Toma. Esto te pertenece.
Agarró el sobre que Junmyeon le estaba ofreciendo. Al echar un vistazo, vio que era algo de dinero. —¿Huh? ¿Esto es mío?
—Es tu sueldo del mes pasado.
—¿Me lo estas devolviendo?
—Sí... Lamento eso. En realidad, me la pase divertido ese día. Así que, no es necesario.
—Pero en realidad si lo necesitas, ¿verdad? Tu papá ya no te da dinero. ¿Qué pasa si necesitas ropa o zapatos nuevos? ¿Comida?
Junmyeon le mostro una leve sonrisa. —Tengo dinero ahorrado. Como te dije, he estado trabajando a tiempo parcial durante un tiempo. Y mañana iré a la cafetería a cobrar mi último pago. Está bien.
De mala gana, Yixing guardo el sobre en su mochila. No quería ofender a Junmyeon ofreciéndoselo otra vez. —Bueno, ¿nos vemos el lunes?
Junmyeon asintió.
—¿Y vas a estar bien? Ya sabes, con lo del Señor Bigotes y todo lo demás.
Una mirada cariñosa y nostálgica se formó en el rostro de Junmyeon. —Si, creo que sí. ¡Adiós, Zhang!
Nota de autora
Estos últimos días tuve tiempo extra para traducir lo más que pude jeje. Gracias otra vez por el apoyo 🥰💖