Una pecosa niña se deslizaba nerviosa sobre un grupo de niños, todos de su misma edad y estando igual de nerviosos que ella, se encontraba hasta el final de la cola (todo por ser muy baja) y a su lado se encontraba su nuevo amigo (que era igual de bajito que ella), su largo cabello de pelirrojo intenso llamaba la atención de todos, pero lo que pareció una disputa al principio de la fila atrajo la vista de los demas.
Solo pudo notar una cabellera desprolija, otra cabeza pelirroja y una cabeza muy rubia, todos eran chicos pero no les presto atención por que tiempo después varios fantasmas se deslizaban desde las paredes, todos soltaron un grito incluso su nuevo amigo retrocedió unos pasos, pero la pelirroja solo quedo fascinada y maravillada, le pareció que hablaban pero no alcanzo a percatarse de su conversación.
Jamás había visto un fantasma, de echo jamás había escuchado algo relacionado con la magia, como le había dicho a Neville venía de un orfanato, un lugar en el que no solo la habían maltratado si no que la habían juzgado por ser distinta a los demás niños; ahora sabía que eso que la hacía distinta era la magia, ella era una bruja y por lo que le dijo Minerva al recogerla en el orfanato, era una gran y legendaria bruja.
La puerta se abrió y volvió aparecer la profesora Mcgonagall indicando a todos que se arreglaran y formaran una fila para después entrar al gran comedor, no sabia ni por donde mirar todo era tan fascinante que parecía un sueño, habia cuatro grandes mesas donde se encontraban diferentes alumnos, su amigo se dio un tropiezo con sus propios pies y ella lo ayudo a estabilizarse pareció que nadie lo noto puesto se encontraban hasta detrás de la fila, levanto la cabeza y vio el cielo estrellado mas hermoso que habia visto en su vida acompañado por unas cuantas velas, se dijo mentalmente que descubriría aquel encantamiento para colocarlo en su dormitorio, y después toda la fila paro y la chica pudo notar que colocaban un taburete en medio del comedor, luego la estricta profesora saco un sombrero y un pergamino, y nombro al primer estudiante.
Se puso nerviosa en ese instante ¿Que pasaba si no quedaba en ningún lado? y ¿ Si decidían volver a mandar al orfanato? que tal que tropezaba o se caía del taburete, aquel asiento parecía viejo y frágil, estuvo tanto en sus pensamientos que no se percato de que ahora pasaba su amigo para su selección, le dedico una sonrisa y susurro un "suerte", el pequeño niño temblaba como gelatina, pero logro subirse en el taburete, Cassidi pensó que eso era algo bueno ahora se sentía mas confiada, el sombrerero tardo unos segundos pero por fin grito Gryffindor, su amigo salio corriendo sin darse cuenta que llevaba todavía puesto el sombrerero todos rieron incluso ella misma y gracias a Neville se sintió mucho mejor, vio como la casa de los leones lo recibia con aplausos y palmadas en la espalda y desde ese momento quiso pertenecer a esa casa, después siguieron nombrando a chicos y ella recordó algo, no seria la única nombrada con su apellido, por fin conocería a su hermano, en cuanto lo nombraran sabría de la persona que le hablaron tanto, por fin vería a alguien de su familia, no le toco esperar mucho puesto que poco después nombraron a la persona que tanto anhelaba.
- Harry Potter- se escucho por todo el gran salón, los murmullos empezaron y un chico delgado y bajito se acerco al taburete, Casidi apenas logro ver su rostro, puesto todos se habian acercado y ella era muy baja para poder ver sobre las cabezas pero no se decepciono, espero con impaciencia la respuesta del sombrerero y rezo al cielo que le tocara en la misma casa que su hermano, después de unos segundos que le parecieron eternos el sombrerero grito:
- Gryffindor- y los aplausos de esa casa no se hicieron esperar, el chico que Casidi reconoció como uno de los que tenia una disputa hace apenas un rato, se dirigió a su futura casa con una sonrisa en el rostro que reventaba alegría.
Memorizo su rostro y supo que no eran para nada parecidos pero el simple hecho de ver sus ojos la reconforto y la lleno de confianza, se hizo un escándalo que a Casidi le divirtió incluso escucho a dos gemelos que gritaban desde la mesa "tenemos a Potter" y celebraban como ningún otro, la profesora Mcgonagall pidió silencio y volvió a abrir su pergamino lista para nombrar al siguiente alumno en ser seleccionado, Casidi supo que seria ella y Harry supo que vería por primera vez a su hermana ambos estaban nerviosos pero anhelaban lo mismo, estar juntos de ese momento en adelante.
Y una vez mas se escucho la voz de la profesora pronunciando el siguiente Potter.
- Casidi Potter- con nerviosismo camino entre los restantes chicos, tratando de dejarse pasar hasta llegar a la profesora, el único problema es que todos la miraban y susurraban por lo que tardo unos segundos es llegar a su destino, mientras tanto desde la mesa de los leones un chico de gafas y ojos verdes esperaba que aquella pequeña niña que se movía con dificultad llegara hasta el taburete para poder verla, primero vio un cabello rojo intenso y algo enmarañado, alguien de baja estatura y cuando se sentó en el taburete sus ojos se conectaron y por primera vez miraba su rostro, era pálida, tenia pecas esparcidas por la nariz y mejilla, tenia unos hermosos ojos café avellana que también lo miraban con alegría y lo único que tenia de parecido a él eran las gafas, lo ultimo que vio fue una sonrisa antes de que el sombrerero le cubriera el rostro y una voz provoco que dejara de mirarla.
- ¿Es tu hermana?- pregunto su nuevo amigo Ron.
- Si - contesto, para después regresar a verla impaciente por la respuesta de su casa.
- Es linda- volvió a comentar Ron, sin acordarse que hablaba de la hermana de su amigo.
Harry lo miro de reojo, y estuvo apunto de comentar algo pero luego noto que la mayoría de los alumnos seguían murmurando cosas de ese estilo.
- Es mona ¿verdad?-
- No se parece a Harry-
- Su pelo es hermoso-
Luego escucho lo único que le importaba en aquellos momentos, al sombrerero gritar la respuesta
-Gryffindor-
Casidi estaba retirándose el sombrerero pero en ese momento en vez de ver el gran comedor vio el techo de su habitación, noto lo oscuro que estaba, y que su respiración estaba agitada, su corazón palpitaba con rapidez, coloco la mano en la cama y se impulso para quedar sentada, sus pies colgaban por la cama y notaba el sudor frió salir de su espalda y rostro, se llevo una mano a la frente y respiro con lentitud, tenia claro que habia despertado de un hermoso sueño en el que recordaba su selección, sintió que su cabello se erizaba y las lagrimas se deslizaban hasta perderse en las mantas, era la primera vez que soñaba algo hermoso y no una pesadilla, soñaba a sus amigos con vida y no muriendo y agonizando enfrente de ella, pero supo que incluso soñar algo tan lindo era peor que las pesadillas, se deslizo fuera de las cobijas y avanzo despacio a su baño, en pocas horas empezaría su primera clases y como sabia que no conciliaría el sueño decidió darse un baño.
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Historia Terminada. Capitulo corregido