Conociendo a los merodeadores (Sirius Black Y Casidi Potter)

Capitulo 27

- James no se por que tanta insistencia en que venga a esta hora -

- Ya te dije que necesito tu ayuda -

- ¿Con que? - Casidi paro y James deseperadamente la volvió a tomar de la mano para arrastrarla - Estaba dormida James y ni si quiera se que hora es -

- Como las 11 de la noche -

- ¿Por que me levantas un viernes a las 11 de la noche? ¿y por que me llevas a tu habitación? -

- Tenemos un problema - James paro, dio media vuelta y la miro - Bueno de echo dos - y siguió caminando.

- ¿No podemos resolverlo mañana? -

- No -

Casidi callo y se dejo arrastrar por su padre sabiendo que era tan terco que no lo haría cambiar de opinión, la verdad era que Casidi ya se encontraba dormida en su habitación cuando la lechuza de James apareció por la ventana y no dejo de picotear el cristal hasta que alguien le abrió (que fue Lili estando harta) inmediatamente esta se fue a la cama de ella y la picoteo hasta que esta despertó y tomo la carta de James que decía muy brevemente algo de un problema y que lo viera en la sala común enseguida, muy a su pesar hizo caso ya que la lechuza no parecía querer irse de la habitación hasta que esta fuera con su dueño, lo encontró caminando de un lado a otro en la sala y en cuanto la vio la tomo y la arrastro escaleras arriba, para caminar ambos a el cuarto de el.

Cuando entraron a simple vista no parecía ver algo diferente o algún problema, pero cuando Casidi vio que James se dirigía a la cama de Sirius vio que este estaba rodeado de sus amigos por consiguiente se imagino que tenia algo que ver con el, se subió la bata de dormir y se acerco lentamente, vio a Peter preocupado, a Remus quien parecía triste y a James que se colo en cunclillas a lado de la cama del pelinegro y en un susurro bajo dijo que Casidi se encontraba en la habitación, vio que Sirius parecía dormido, con las mantas hasta la cabeza pero cuando escucho su voz supo que algo estaba pasando.

- Te dije que estoy bien cornamenta, no tenias por que traerla - dijo Sirius tratando de aparentar normalidad pero su voz fue rota y triste.

- ¿Que sucede? - pregunto, James le dio una mira a su amigo y luego a ella.

- Canuto, ¿Casidi puede ver la carta?- el nombrado tardo en contestar pero desde las cobijas asintió, James tomo una carta de la mesita de noche del pelinegro y se la paso a ella quien la desdoblo con cuidado y ante la mira de todos empezó a leerla.

Era un pergamino breve con letra muy fina, elegante y hermosa, decía que Alphard Black había fallecido apenas unas horas atrás, recordó que el hombre era el tío de Sirius y que era al único familiar (a parte de Regulus y Andromeda madre de Nymphadora) que quería, recordó que el Sirius de sus tiempos le dijo que el hombre había sido una salida a su soledad en la casa de la ancestral familia Black, que lo quería como un hijo y que lo trataba con cariño, que ambos odiaban las ideologías de la pureza de la sangre ademas de que el le heredaría toda su fortuna, supo entonces por que el chico se encontraba de esa forma, dejo la carta en la mesita de noche y se acerco a James quien la miraba con esperanzas.

- ¿Sirius? - el chico solo se movió, no sabia como podía ayudar y creía que era la menos adecuada para una situación como esa.

Lo que necesitaba Sirius era la compañía de las personas a las que quería como los merodeadores o incluso su hermano haci que sin saber que mas hacer Casidi coloco su mano sobre su cabello (el cual era lo único que sobresalía de la manta) lo acaricio con dulzura, sintiendo su suavidad, el chico descubrió un poco su rostro y vio sus ojos, estaban sin brillo como los recordaba en el futuro supo que era por la reciente noticia pero también noto que no había rastro de lagrimas y que Sirius trataba de aparentar fuerza, ver de nuevo esos ojos afecto mucho a Casidi recordó a el Sirius adulto y como este le decía lo que había pasado y sentido con las muertes de su familia incluida la de su padre, recordó una frase que le dijo una noche que estaban hablando solo ellos dos.