Y es que fue tan fácil creerte cuando decías o hacías cosas tan bellas por mi.
Bien, comenzaré explicando que conocí a esta bella pero peligrosa mujer en un momento de mi vida donde yo era muy frágil. Ella me rescató de mi hoyo de depresión; y es que si pudieran ver como sonríe, camina, te escucha y baila; cualquiera de ustedes se enamoraría de ella.
Tenía conmigo los gestos más amables y era detallista conmigo sin razón alguna. Estaba rodeada de puras buenas personas, su familia era maravillosa, una niña de "bien", de casa; que no gastaba su tiempo en fiestas, alcohol o amistades banales. Y les juro que si lo creí; duramos 2 meses saliendo y lo supe: "es ella la indicada", pensé.
Inició la relación y absolutamente todo fue mágico; cuando llevábamos 3 años y 7 meses de relación, por casualidad, leí un mensaje de su mejor amiga que decía: "pues ya te ha durado demasiado tu capricho con él, aparte ya te tengo una nueva víctima".
Sí, "él" era yo. En fin; jamás me había dado motivos para revisar su celular, nunca sospeché de alguna infidelidad o algo parecido. Pero sin duda alguna, el mensaje de su mejor amiga me dejó más que intrigado; encontré el momento perfecto para indagar más sobre el tema. Y lo hice, revisé la conversación con su mejor amiga:
Ella empezó a andar conmigo por una apuesta con su mejor amiga; eso no es todo, en los textos con su amiga se refería a mi como: "mi obra de caridad". Y lo peor es que ambas estaban planeando la ruptura de nuestra relación, que llevaría 3 meses más, ¡3 meses más, maldita sea! Y le era tan fácil expresarse como si no sintiera absolutamente nada por mi, como si yo fuera un auténtico desconocido, parte de su brillante juego donde se dedica a destrozar corazones.
Así que "Jaque Mate". Destrocé a la reina de las mentiras, su absurda y dolorosa farsa. Terminé con ella, y aunque aún no me quedan claro el '¿por qué?'; no me interesa saber más del juego de ajedrez en el que yo era un simple peón acorralado por una falsa reina.
Frase:
"Bien dicen que nunca se termina de conocer a una persona, pero yo te conocí más de lo que quisiera haberlo hecho; dejaste claro que de humanidad y corazón... no tienes ni un gramo".