Los días pasan uno tras otros, mi trato con Sylvie ha mejorado un poco más pero siento que ella todavía guarda un rastro de desconfianza hacia mi, todavía se mantiene con la guardia en alto cuando le pregunto por su pasado, a veces solo me dice "mi antiguo amo disfrutaba de o irme gritar de dolor" "Anteriormente era azotada todos los dias entre otras cosas" y termina la conversación diciendo "lo siento pero no tengo más que decir, recordarlo es muy doloroso." Entiendo que sea doloroso pero como puedo aliviar aunque sea un poco su dolor si no me permite conocerla, en serio me gustaría hacer un poco más sin embargo mientras Sylvie no me permita acercarme creo que será imposible.
Los días siguen su curso voy a trabajar, ayudó con los deberes del hogar aunque Sylvie me diga que eso le corresponde a ella, a veces salgo con sylvie a comer al pequeño restaurante de la excéntrica Nephy y........también a la tienda de ropa de la srita. Aurelia, siempre que me ve me pone realmente nervioso, siento como si sus ojos vieran más allá de mi, en verdad detesto ir allí pero no puedo dejar que Sylvie solo tenga un cambio de ropa. He estado teniendo días tranquilos, no monótodos y aburridos como antes sino por el contrario es una tranquilidad que ya había olvidado que si quiera existía.
Un día me levante temprano para ir a trabajar y me encontré con Sylvie en la recepción.
Sylvie: Coff coff*toser......buenos días amo, lo siento creo que cogido un resfriado.-dijo con la cara roja.
Ella tosio antes de saludarme, tenía una apariencia terrible, más pálida de lo normal, su cara estaba roja, no era necesario ser doctor para saber que ella no se encontraba nada bien; puse mi mano sobre su frente definitivamente tenía una fiebre muy alta, se veía tan indefensa y parecía que estaba buscandome.
Doctor: Vamos Sylvie.-le dije tomandola de la mano.
Sylvie: coff coff*tos......¿A dónde amo?.-pregunto tosiendo.
Doctor: Por supuesto que te irás a la cama, te prepárate una comida caliente e iré por medicina al consultorio, así que por favor espera un momento.-le hable suavemente.
Sylvie: No...no se preocupe por mi amo....no es necesario....que.....coff coff *tos.-ella tosio más fuerte.
Doctor: Lo siento Sylvie pero esto no está a discusión.-le hable esta vez con un poco más de seriedad.
Sylvie:............................-no dijo nada y sólo asintió.
Después de que acosté a Sylvie le puse un paño húmedo en su frente, preparé una sopa de pollo, en lo que la sopa se enfriaba me fui rápidamente a mi consultorio por la medicina que necesitaba, no quise decir nada enfrente de Sylvie pero su condición no era buena aunque fuera sólo un resfriado la fiebre era demasiado alta y es de suma precaución.
Regrese lo más rápido que pude, tomé un poco de aire antes de entrar a la cocina, coloque un poco de sopa en un plato y lo lleve a la habitación de Sylvie junto con su medicina. Estaba dormida, la fiebre había subido aún más, retire el paño y la levante ligeramente.
Doctor: Sylvie despierta, aquí está tu medicina, vamos.-use nuevamente el tono suave.
Sylvie entre abrió sus ojos, le di la medicina poco a poco, después la alimente con la sopa aunque sólo comió un poco. Le recoste otra vez, moje el paño nuevamente y lo puse en su frente.
Han pasado varios días y la salud de Sylvie no ha mejorado mucho, he hecho todo lo posible para poder aliviarla pero aún tiene la fiebre alta, su cuerpo era débil antes de llegar aquí y sólo un resfriado común había sido suficiente para debilitarla tanto. Estaba apunto de cambiar el paño que se había secado cuando ella despertó, me miro directamente a los ojos y habló.
Sylvie: Lo siento amo...por todas estas molestias.....en el pasado ya había tenido resfriados pero nunca habían durado demasiados.-pronuncio susurrando.
Doctor: No te disculpes, te prometo que pronto estarás bien, así trata de dormir un poco.-le cambie el paño de la cabeza.
Sylvie cerró los ojos y se durmió, no puedo permitir que siga actuando de esa manera dada sus bajas defensas, pude darme cuanta que la voz de Sylvie expresaba ansiedad y dolor que no podía ocultar.
He pasado todos estos días cuidando de Sylvie pero hoy he decidido que está noche me quedaré a su lado ya que la fiebre es más alta de lo que fue en días anteriores y temo por su vida, estoy dispuesto hacer todo lo que esté en mis manos para salvarla.
Las horas pasaron a través del reloj, la oscuridad y la soledad de la noche absorbieron todo ruido, sólo la respiración de Sylvie rompía todo el esquema, mis párpados pesaban y sin darme cuenta ya los había cerrado y el suelo se apoderan de mi hasta que un triste sollozo me saco de mi letargo.
Sylvie: Lo siento......lo siento....amo.....yo no más......por favor....se lo suplico......umh......umh......perdóneme......perdóneme...por...existir....lo siento....-las lágrimas corrían a través de sus mejillas.
Al escuchar esos lamentos sentí que mi boca quedó seca, un sentimiento desagradable recorrió mi pecho y sentí unas ganas inmensas de vomitar pero en vez de eso me senté a lado de Sylvie, cualquiera diría que ella sólo tiene una pesadilla pero creo que en realidad es sólo su pasado que se repite a través de sus sueños.
Yo quite el paño de su frente y acaricie su cabeza.
Doctor: tranquila, no pasa nada...estarás bien, aquí estoy...estoy aquí para ti.-mis malestares se callaron un poco al susurrar esa palabras hacía Sylvie.
Poco a poco se expresión se fue suavizando y sus lamentos desaparecieron. Ahora sabía por que no me hablaba sobre su pasado, por que sentía esa hostilidad por su parte, por que su expresión fría nunca cambiaba.
Los días siguieron pasando y las noches de pesadillas de Sylvie también, lo único que podía hacer era acariciar su cabeza y decile que todo estaba bien.....soy un fracaso.
Estaba profundamente dormido cuando el ruido de unos pajarillos que cantaban me despertaron.
Doctor: Maldición....me quedé dormido.-refunfuñe.
Me levanté de golpe cuando me di cuenta que Sylvie no se encontraba en la cama.
Doctor: Sylvie......-sentía que mi pecho era oprimido.
Entonces la dulce voz de la pequeña me tranquilizó enseguida.
Sylvie: Buenos días, amo, ya me siento mejor.-dijo entrando a la habitación.
Me acerqué rápidamente a ella, al parecer se encontraba bien, puse mi mano en su frente, la fiebre se había ido, es un gran alivio.
Sylvie: Me disculpo por las molestias, ahora podré ayudarlo con los deberes domésticos y en todo lo que necesite.-habló sería como de costumbre.
Doctor: Lo siento Sylvie pero no dejaré que hagas eso, si quieres puedo permitirte que me ayudes a mi pero eso que tu te hagas cargo de todo está descartado, puedes sufrir una recaída y no aceptaré una negativa como respuesta.
Sylvie se quedó en silencio unos segundos antes de hablar.
Sylvie: Amo.....muchas gracias.-sonrió como la primera vez que la lleve al restaurante de Nephy.
Sentí que su agradecimiento era sincero, creo que estos días han cambiado un poco a Sylvie y...... también a mi, creo que hay algo que debí hacer, algo que debo hacer.
Los días seguirán pasando hasta ese día.
Espero que les guste, nos vemos en el próximo capítulo.
Teaching feeling no me pertenece todo el crédito es para ray-k.