Blaise

By SaylaTrack

493K 47K 5K

Libro 4 de Bestias Puesto #1 en bestias 😍❤️ 06/05/19 Primera publicación: 24/04/19 More

Corine
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
CAPÍTULO 22
Capítulo 23

Epílogo

26.5K 2K 292
By SaylaTrack

—Seis meses después—

¿Quién podía dejar su vida acomodada para vivir en medio de la selva? Pues, Corine. La joven morena se había ido a vivir a la selva junto a su pareja.

Y desde hacía tres meses, trabajaba en un hospital ambulatorio, que poco a poco iban reformando y capacitando, para que las personas que vivían a los alrededor de allí, pudieran recibir atención médica en el momento.

Muchos pueblos vivían lejos del asentamiento. Y algunos tenían hasta dos días de viaje para poder llegar al hospital. Es por eso que la morena había propuesto trabajar allí, aunque fuera de forma ambulatoria.

Junto a ella, había una enfermera, un odontólogo, y un técnico en diagnóstico por imágenes, quién se encargaba de realizar radiografía y ecografías.

Corine solía atender diez horas en el hospital, todos los días, al igual que el resto de los especialistas. Y sabía que era muy sacrificado, pero hasta que buscarán más profesionales, ella había aceptado el reto.

Estaba hablando con la enfermera, cuando vio entrar a una joven mujer morena, cargando a una niñita en brazos. La bebé había cumplido hacía poco el año y medio.

—Atok (hola) Corine, Atok Vivian —saludó la joven madre, de diecisiete años.

Era la última mujer que Zato había tenido, con quién había concebido a la pequeña Zany. Nubkia era la joven que se había enamorado de él, esperando a que regresara.

Y cuando el moreno lo había hecho, la había aceptado... Tal vez por el simple hecho de verla tan joven y esperando a un bebé.

—Atok Nubkia —sonrió Corine, tomando una de las manitos de la bebé—. Atok Zany'nishi (hola pequeña Zany)

Nubkia había llevado a su hija a su control del año y medio, y con él, a que la vacunarán también. Blaise le había dicho que ellos en la isla no sufrían de enfermedades.

Y aquella era cierto, pero con la llegada de los humanos, para prevenir cualquier tipo de percance, habían optado por un calendario de vacunación.

Miró como la joven madre entraba junto a la enfermera a un consultorio, y sonrió suavemente... Quizás en algún momento, ella también tendría la dicha de tener un bebé.

***

"Lloró al escuchar a su hijo nacer, y más aún lloró al ver al pequeño. No porque no lo amara. Fue verlo y sentir ese amor verdadero, a primera vista, y saber que nada de lo que había vivido hasta ese momento, se comparaba con lo que había sentido al ver a su hijo por primera vez.

Lloró por saber lo que vendría al momento de que su familia lo conociera. Lloró porque se sentía sola, desamparada. Sin saber a dónde ir, o a quien acudir.

Y el primero en conocer a su hijo, fue su hermano, que al verlo, observó desconcertado a su hermana... Ese bebé no podía ser hijo del muchacho que ella había dicho.

—Es... Negro —le había dicho, al ver al pequeño, acurrucado en los brazos de la pelirroja—. ¿Con quién mierda te metiste, Fleur?"

Había intentando por meses comunicarse con Corine, pero no lo había conseguido. Lo único que le habían dicho, era que ella vivía en la zona salvaje, dónde no tenían comunicación, más que por teléfono de tubo.

Y si ella necesitaba dejarle un mensaje, podía hacerlo con ellos, que se lo pasarían.

¿Y como diablos Fleur le iba a decir a esas personas como si nada, que ella tenía un bebé de Zato? Fleur necesitaba hablar personalmente con él.

Observó a su bebé dormir, y le acarició suavemente la espaldita. Se había ido de Francia, ya no tenía el apoyo de su familia, y como podía, se las estaba arreglando para trabajar y cuidar a su pequeño hijo.

***

—Mi amor.

—¿Hm? —murmuró el rubio con los ojos cerrados, acariciándole la espalda y el cabello.

Ambos estaban en la cama, Blaise abrazándola a él. Eso era lo mejor de volver ambos del trabajo, poder estar juntos.

—¿Crees que en unos meses podamos comenzar... Con el tratamiento?

—¿Qué tratamiento? —le preguntó mirándola.

Llevaban seis meses teniendo sexo sin protección... Corine ya había aceptado que Blaise era el del problema.

—Para tener un bebé ¿Tú quieres?

—Y si comenzamos un tratamiento ¿Crees que podamos tener un bebé?

Sonrió, y le dio un corto beso en los labios, asintiendo con la cabeza.

—Sí, creo que podríamos tener más de un bebé ¿Te gustaría?

Miró hacia arriba, pensándolo. Le gustaba la idea de poder tener un hijo con ella, pero eso supondría menos tiempo que él tendría con Corine.

La morena levantó una de sus manos, y acarició suavemente una de sus orejitas, escuchándolo ronronear.

—Mi amor ¿Quieres o no?

—En un año.

—¿Un año?

—Sí, quiero disfrutar un poco más de nuestro tiempo a solas. Con tu trabajo, y el mío, apenas podemos tener tiempo a solas. Y con un bebé, menos tiempo tendríamos.

Sonrió y se subió arriba de él, para besarlo. Acariciando suavemente su cabello, bajando hacia su rostro ambas manos, para tomarlo. Blaise la tomó de las caderas, y las acarició, guiando sus manos hacia su trasero, para apretarlo.

—Eres muy celoso —le dijo en un tono travieso, dándole besos cortos.

—No, sólo que llevábamos muy poco tiempo juntos, como pareja, y quiero disfrutarte un poco más. Quiero tener un hijo contigo —le dijo sincero, acariciándole una de sus mejillas—. Pero luego de que tengamos nuestro tiempo a solas. Ni siquiera nos hemos presentado frente a Kanat'ma.

La morena sonrió suavemente, y volvió a besarlo, antes de darle besos cortos en el rostro y el cuello.

—Ya quiero que Kanat'ma nos de su bendición. Y, ya he practicado las palabras que diré.

—¿Sí? —sonrió Blaise, observándola.

¿Cómo podía amarla tanto? Era imposible de creer que pudiera sentir algo así por una humana, por una mujer. Era imposible de creer, que en alguien tan pequeño y frágil como ella, podría encontrar su compañera de vida.

Había imaginado que si alguna vez, decidía tener una compañera, iba a ser una mujer fuerte, grande, peligrosa, que pudiera enfrentarse a él, si las cosas se salían de control.

Pero no, su compañera era una pequeña humana dulce, tierna, terca, sí, fuerte también, pero a su manera. Una mujer inteligente, decidida y sencilla, con un corazón enorme, que hacía su trabajo con una pasión impresionante.

Pequeña y tierna, su Tisy.

—¿Qué pasa? —le preguntó Corine, al ver como la observaba.

—Que te amo, Tisy.

Al escuchar aquello, lo besó una vez más, abrazándolo a ella, sintiéndose tan emocionada, tan feliz.

—Yo también te amo, mi amor —le dijo entre besos.

Era la primera vez que lo escuchaba, que él se lo decía, y realmente lo había sentido. Blaise la amaba, y aunque ésta era la primera vez que se lo decía, en meses de relación, él se lo demostraba con actos.

Sí, podían esperar un poco más para ser papás. Éste era el momento de ellos, para estar juntos.

...

🌷FIN🌷

Amores míos, gracias por acompañarme una vez en otra de mis historias, y sí, es extraño que termine primero la historia 4 antes que la 3 jajaja pero ya saben cómo soy uwu
¡Igual no se preocupen! Esta noche termina Sashie, y quizás comience con Zato ❤️

¡Nos vemos en una próxima historia! Y como plus hermoso, tierno y bello, la imagen de uno de los protagonistas del libro 5 ❤️


Continue Reading

You'll Also Like

7K 733 17
La dejaron por muerta, pero Mia no estaba realmente perdida hasta que su Alfa la encontró. Ninguna mujer viaja voluntariamente a los Bosques de las...
98.5K 8.7K 29
Eliza Jones y Stella Lambert son el prototipo de: "personas correctas en el momento equivocado", pues sus vidas habían coincidido en preparatoria, cu...
64.4K 3.4K 52
Eva, una talentosa fotógrafa en ascenso, y Jase, un apuesto modelo, se cruzan en una fiesta caótica donde Jase, tras beber en exceso, cuenta con la i...
72K 4.3K 15
LIBRO TRES DE LA SAGA ÁMAME. Summer ha estado enamorada de Nikolai desde que tiene memoria, ella siempre ha estado consciente de que nunca pasaría a...