EMILIACO 🏳️‍🌈. #Wattys2019

By MVedle

1.1M 51.8K 41.8K

Durante el rodaje de la novela MMT+F, Joaquin Bondoni y Emilio Marcos interpretan a una pareja homosexual. Al... More

CAPÍTULO 1
CAPÍTULO 2
CAPÍTULO 3
CAPÍTULO 4
CAPÍTULO 5
CAPÍTULO 6
CAPÍTULO 7
CAPÍTULO 8
CAPÍTULO 9
CAPÍTULO 10
CAPÍTULO 11
CAPÍTULO 12
CAPÍTULO 13
CAPÍTULO 14
CAPÍTULO 15
CAPÍTULO 16
CAPÍTULO 17
CAPÍTULO 18
CAPÍTULO 19
CAPÍTULO 20
CAPÍTULO 21
CAPÍTULO 22 (Parte 1)
CAPÍTULO 22 (Parte 2)
CAPÍTULO 23
CAPÍTULO 24
CAPÍTULO 25
CAPÍTULO 26
CAPÍTULO 27
CAPÍTULO 28
CAPÍTULO 29
CAPÍTULO 30
CAPÍTULO 31
CAPÍTULO 32 (parte 1)
CAPÍTULO 34
CAPÍTULO 35
CAPÍTULO 36
CAPÍTULO 37
CAPÍTULO 38
CAPÍTULO 39

CAPÍTULO 33

22.5K 1.3K 1.5K
By MVedle

Joaquin: 

Desperté creyendo que la comprometedora situación de hace unas horas fue un simple sueño húmedo. Pero no había tal erección en mis pantalones, y unos pesados brazos rodean mi cintura. Los reconocí de inmediato.

Nuestra despedida fue mágica, o al menos lo fue para mí. Aclaró que tener sexo ésta noche o más bien, durante ésta etapa en mi vida, no estaba en mis planes. Pero deseaba a Emilio, y puedo pensar que al menos por una noche fue mío. No era María quién estuvo entre sus brazos, su nombre no estuvo presente en sus palabras... Era como si no existiera.

Será difícil apartarme de él después de esto, pero estoy cansado de soportar la humillación de solo ser el premio de consolación cuando pelea con ella. Ser el único pendejo que lo ama tanto que está dispuesto a hacer lo que sea con tal de verlo sonreir.

La estupidez y el amor van de la mano. En mi defensa puedo decir que estuve enamorado; comprendiendo demasiado tarde que el amor siempre debe ser mutuo... No de tres, ni de uno, solo de dos. Porque a pesar de haber intentado presentarle la mejor versión de mí, él nunca lo valoró, pues siempre posicionó a ella por encima de mí en la escala de las personas importantes en su vida. Sientiedome insignificantes junto a ella, o al menos eso es lo que me hacía sentir.

Hoy renunció a el amor que algún día sentí por él. Estoy cansado de luchar en vano. Perderé la batalla, es mejor que me dé por vencido. Y entiendo que está es la primer parte de una vida llena de decepciones, pues Emilio no fue la primera ni la última persona que me decepcionará, y supongo que ésta no será la única vez que mi corazón esté roto. Mi vida apenas comienza.

Quizá despiertes y creerás que seguiré siendo el idiota que estará esperando por ti. Pero ese idiota ya se habrá ido y no habrá nada que puedas hacer para solucionar todo el daño que me has hecho.

Los rayos de sol entraban por el ventanal cubierto por largas cortinas blancas. Iluminaban la habitación con una luz tenue; permitiéndo que mi vista admirara cada detalle dentro de ella; como las medallas de Emilio, algunas cuantas fotos de pequeño junto a su familia... Todo perfectamente ordenado.

El el suelo permanecía los pans y boxers de Emilio, entonces recordé que nuestros cuerpos están desnudos y a la par del otro. Todas las imágenes, sensaciones y caricias llegaron a mi como un balde de agua helada. Aún podía sentir las manos de Emilio recorriendo mi cuerpo y besando cada centímetro.

El despertador marca las 7:46am. Tomé la mano de Emilio, acariciando su relieve con la yema de mi dedo pulgar. La aparte de mi con el suficiente cuidado para no despertarlo.

En cuanto me puse se pie, un dolor en trasero se hizo presente. Comprendo que está sucediendo... El pene de Emilio no es nada pequeño, y me arrepiento de no haber sido yo el activo.

Caminé hacia la ducha, debía quitar sus sucios fluidos de mi cuerpo, el primer paso para que él salga de mi vida. Convirtiéndose en lo que nunca debió dejar de ser... Un compañero de trabajo.

Rogué que al salir del baño Emilio siguiera dormido. Afortunadamente así fué. Las sábanas cubren solo una parte de su cuerpo, dejando al descubierto su torso y una de sus piernas.

Hice el menor ruido posible al vestirme. Lo que menos quiero en estos momentos es mantener una conversación acerca de lo que sucedió hace rato.

Una parte de mí desea quedarse y esperar a que él despierte, besarlo una última vez y hablar como gente razonable. Pero Emilio no es una persona razonable, usará el poder que tiene sobre mi para convencerme de darle una nueva oportunidad, y yo voy a acceder. Esta vez es diferente, hemos cruzado una delgada línea, y tengo miedo a lo que pueda pasar si permanecemos juntos.

Debo salir de este lugar no sin antes dejar todo claro... Lo llamaré en el camino, o voy a escribir un mensaje de texto ¿Un WhatsApp? Mierda, todo implica una respuesta de su parte, o como yo la llamaría "una manipulación". Miré al rededor buscando una señal divina...

Encima de la mesita de noche había una par de agendas y lapiceros. Arranqué una de sus hojas y escribí la nota que daría fin a todas sus suposiciones.

Me acerqué a él. Dando un último vistazo a su cuerpo desnudo. Acaricie su mentón.

—Sé feliz Emi, gracias por todo —besé su frente, para después bajar a sus labios y depositar un último beso en ellos.

Salí de la evitación, bajé cuidadosamente las escaleras, suplicando no cruzarme en el camino a el señor Osorio, también espero que no haya escuchado mis gemidos por la noche.

Llegué a casa, con la esperanza de seguir con mi vida como si él no hubiera estado presente en ella. Inconscientemente lleve mis manos a mis labios, acariciando el borde de estos...

—¿Joaquin estás bien? —la voz de mi hermana se escucha desde el otro lado de la puerta de mi habitación.

—¡Déjame en paz Renata!

—Solo quería saber si estabas bien, pero ya no hay pedo.

Ella no tiene la culpa, Joaquin. Sabes que necesitas una abrazo y un hombro en dónde llorar. Renata siempre estará a tu lado, es tu compañera, tú familia...

Corrí a abrir la puerta. Ren está a solo unos metros a punto de entrar a su habitación, con dos vasos con leche.

—Te necesito —supliqué con lágrimas en los ojos.

Ren se acercó, llevando su cabecita a mi pecho, me entrego uno de los vasos y rodeó mi cintura.

—¿Es por Emilio? —entró a mi habitación, sentándose al borde de mi cama.

—¿Tan obvio es?

—¿Pelearon?

—No, nada de eso —esbocé una sonrisa al recordar lo sucedido—. Lo dejé ir...

—¿Terminaron?

—Nunca comenzamos, nada de eso fue real. Él está con María y debo respetar su relación ¿Me das un abrazo?

Ren me tomó entre sus brazos, soportando mi llanto hasta quedarme dormido.

Emilio:

Aún no puedo creer que dormí con Joaco. Fue la sensación más maravillosa que he experimentado en toda mí maldita vida. Me negaba a separarme de él mientras dormía, por lo tanto sostuve su cuerpo toda la noche. De vez en cuando despertaba para admirar su perfectas facciones y percatarme que ésta vez había algo especial en él, algo que me hacía quererlo más de lo normal.

Había tocado su piel, había estado dentro de él, siendo el primer hombre que miró su rostro de placer, escuchando sus gemidos y su nombre dentro de ellos. Joaco fue mío, y espero que lo sea para siempre. Lo quiero a mi lado todos los días de mi vida, quiero cuidarlo, amarlo y tratarlo como lo merece.

La intensa luz me obligó a abrir los ojos con dificultad. Necesito abrazar a mi niño, besarlo, darle los buenos días o ¡Ya sé! Lo despertaré con un rico desayuno en la cama, a él le encantan todos esos detalles románticos de las películas. Haré que está mañana sea perfecta para Joaco, gracias a que él me regaló la noche perfecta.

Giré mi cuerpo, para lograr abrazarlo, pero mi brazo cayó en el desierto colchón. Joaco no está.

—¡Mi amor! ¿Joaco en dónde estás? —me levanté en dirección al baño, sin importarme mi desnudez.

La puerta está abierta, la luz apagada, obvio no está ahí. Su ropa ya no está, sus zapatos tampoco... Ni siquiera su mochila. En cambio hay una hoja doblada en cuatro partes en una de las cabeceras. En su superficie está escrito con tinta negra "Emilio".

Sonreí, amo lo romántico que es. Me sentí como un pequeño niño cuando se emociona al abrir un regalo. Salté a la cama y estiré la carta para comenzar a leer su contenido...

"Emilio... Espero que hayas comprendido que lo que sucedió ayer fue una simple despedida, para descargar toda la tensión acumulada.

Me necesito alejar de ti y necesito que lo entiendas. Por favor no me busques más, si no es relacionado a nuestro trabajo.

Mentiría si te dijera que dormir contigo no fue especial... Pero debemos olvidarlo, por nuestro bien. No quiero causarte más problemas en tu noviazgo, quiero que seas feliz junto a ella, por favor respeta tu relación si es que en verdad la amas tanto como dices.

Lo "nuestro" fue un error, desde el momento en que me besaste en la playa. No pienso seguir soportando tu confusión, merezco ser feliz y estoy seguro de que esa felicidad no es a tú lado. He sufrido demasiado para seguir con esto.

Lamento mucho que esto no haya salido como tú lo esperabas. Pero sé que pudiste poner algo más de tú parte, al igual que llegar a ser la persona más perfecta para mí, pero tú estupidez rompió barreras. Y no sabes lo difícil que es para mí separarme de él chico que más he amado.

—Joaquin"

Lo perdí... Lo perdí. Esto debe ser una broma pesada. No puede estar pasando esto, no ahora.

Busque mi celular dentro de la bolsa de mis pantalones que usé ayer, marqué el número de Joaquin y espere a que contestará.

—Mi amor ¿Es una broma? Por fa no juegues conmigo de esa manera —respondí con un incontrolable llanto.

—Emilio, soy Renata. No creo que sea prudente que hables con él ahora, está muy mal y...

—Ren, pásamelo por favor, necesito hablar con él —tomé mis rizos con fuerza.

—Lo siento, pero no creo que sea posible...

—Ren... ¿Ren? ¡No! —el sonido de la llamada finalizada terminó de romper mi corazón.

Tiré mi celular a la cama. Recogí el mameluco que Joaquin había usado, lo lleve a mi rostro con fuerza, tratando de contener mi llanto ¡Soy la persona más pendeja! Joaco tiene razón, yo pude haber hecho algo más.

Creí que sería meramente imposible que algo así sucediera, nunca la idea de perder a Joaquin y que me doliera tanto se me cruzo por la mente. Justo en este momento deseo estar a su lado, ansió uno de sus preciosos abrazos, necesito que me hable y diga que todo estará bien, que vamos a luchar juntos, porque esto no puede terminar así.

Absolutamente toda esta habitación me recuerda a él. Me dí un baño rápido y salí de ahí.

En el comedor está mi papá desayunado un par de huevos revueltos, acompañado de un jugo de naranja.

—¿Tan temprano? Vengan a desayunar o ¿Joaquin sigue durmiendo? —preguntó después de darle un trago a su jugo.

—No, él se fue muy temprano —carraspeo— Yo también me tengo que ir, necesito ver a mi mamá —me acerqué a darle un beso en la mejilla—. Te veo después, te amo.

Salí de la casa, tomé el primer taxi que ví. Marqué el número de mi mamá, la necesito tanto.

—¿Bueno? ¿Qué pasó mi amor? —contestó con su característico acento cubano.

—Mami ¿Estás en casa? —sorbí la nariz.

—Si, si, si ¿Estás llorando mi amor? ¿Qué tienes cachorro? —su tono de preocupación llegó.

—Llegando te cuento ¿Va? Ya voy para allá.

—¿Estás bien? ¿Qué pasó? —elevó la voz.

—No te preocupes, necesito de tus consejos.

Bajé del taxi, el chófer me miraba con angustia, ya que, había llorado todo el camino en la parte trasera del coche.

Fuí directamente a la habitación de mi mamá. Dí solo un par de golpes y ella atendió, consolando mi llanto entre sus brazos.

Me llevo a la cama, y como a un niño pequeño me recostó en sus piernas, acariciando mis rizos mientras decidía «No pasa nada mi amorcito, el amor llegará cuando deba hacerlo».

—¿Por qué siempre tengo que arruinar todo? Soy un puto pendejo, la cagué horrible y ahora lo perdí.

—¿Estamos hablando de María o de alguien más?

—¡No! —negué molesto— Yo... —tragué saliva— Estoy hablando de Joaquin Bondoni.

Mi mamá cubrió su con sus manos a manera de sorpresa.

—¿Enserio? ¿Pero él te corresponde? Mi amor ¿Desde cuándo sientes esto? —interrogó emocionada.

—No sé, pero estoy enamorado de ese wey y me mandó a la chingada —le entregué la carta.

—Ay no mames, con cartita y todo —respodió enternecida, y comenzó a leer su contenido— Entonces hubo algo entre ustedes, y ayer... De eso hablaremos después —el semblante de mi mamá cambio.

Solo asentí con la cabeza.

—¡Yo no te eduqué así, pendejo! Tú estás en una relación con la niña esa, que a pesar de que me caiga de la patada, merece respeto. Esta bien que no estabas seguro de que sentías por ese muchachito, pero ahora entiendo que a él le gustabas, y con tal de tenerte pues hizo lo que hizo.

—Ya lo sé, y soy un pendejo. Mamá necesito a mi Joaco. No sé qué hacer para solucionarlo.

—Antes que nada ¿Qué sientes por María?

—La quiero demasiado, pero ya no es como antes. Nunca había sentido algo similar a lo que siento por Joaquin, a él lo amo, y no me cuesta decirlo. Pero el miedo al que dirán cegó mi mente...

—Termina a María, y si lo amas como dices tú puedes reconquistarlo, hazle la luchita. Demuestrale que te importa.

—Mami, te amo —la abracé— Pero... Mi papá...

—De ese wey no te preocupes, aquí tienes mucha madre para defenderte.

⚫⚫⚫⚫
¿Les gusta Joaco de perra pasiva inacanzable? 😂
Gracias por seguir leyendo ❤️.




  

Continue Reading

You'll Also Like

19.8K 2K 52
"¿Me permite su currículum?" "¿Qué? Ah, sí." Le tendió la hoja. "Tenga." Emilio tomó la hoja, manchando un poco sus dedos de tinta roja. Frunció el...
256K 18.1K 35
Con la reciente muerte de su padre el duque de Hastings y presentada en su primera temporada social, Annette empieza a acercarse al hermano mayor de...
495K 50.8K 127
La verdad esta idea es pervertida al comienzo, pero si le ves más a fondo en vastante tierno más que perverso. nop, no hay Lemon, ecchi obviamente, p...
26.8K 3.2K 12
En mitad de una fiesta, Harry sin querer admite haber tenido un "sueño salvaje" con Louis Tomlinson, el chico misterioso de su pequeño pueblo. A part...