La cara de Harry cambia drásticamente y se tensa en la silla.
-¿Subdirectora? -yo asiento-. Es imposible… Tu padre me dijo que si él moría yo tendría un buen ayudante… pensé que se refería a que yo podría elegir a mi compañero.
-Pues ya ves... yo tampoco me esperaba este trabajo.
Él se toca el labio inferior con el dedo mientras me mira fijamente.
-Podríamos llegar a un acuerdo -dice sin dejar de mirarme a los ojos. Un escalofrío recorre mi cuerpo.
-¿A qué clase de trato?
-Te compro las acciones de la empresa. Tú no tendrás que trabajar y yo podré elegir a mi ayudante.
-No -digo negando con la cabeza para enfatizar mi respuesta.
-Te pago lo que me pidas -yo niego de nuevo.
-Podría venderte cualquier cosa menos algo que mi padre me dejo antes de morir -digo muy seria-. Si me lo dejo a mí, significa que él quería que yo trabajase aquí.
-¿Estas segura? -pregunta él alzando una ceja.
-Segurísima
-Tu misma… Pero tienes que saber que mi oferta siempre va seguir en pie, así que, si cambias de opinión me lo dices
-De acuerdo -digo tras unos segundos de silencio incomodo-. Ahora que hemos dejado las cosas más o menos claras, deberías darme la llave de la casa de mi padre
-¿Disculpa?
-Mi padre me dejo en el testamento su casa también, pero decía que tu tenías la llave -Harry hace una mueca.
-La tiene Louis -dice en un susurro.
-¿Perdón?
-Tu padre y el mío compartían casa. Cuando mi padre murió me fui a vivir a su casa, pero me di cuenta de que tu padre, a pesar de haber pagado parte de la casa, no estaba casi nunca.
-Un momento -digo interrumpiéndole-. La casa que mi padre me ha dejado, ¿es compartida contigo? -él asiente con calma y yo ahogo una exclamación.
-Conmigo y con Louis
Dejo de respirar unas milésimas de segundo. Esto tiene que ser una broma...
-Louis sería el subdirector si yo no estuviera, ¿verdad?
-Sí
El día no puede estar dando más vueltas...
Primero conozco a los dos hombres más sexis que he visto en mi vida y ahora ellos quieren mi puesto de trabajo. ¡Ah! Y que no se nos olvide… voy a compartir casa con ellos.
-Lo siento, pero no pienso vender mis acciones y que sepáis que no voy sola a la casa
-¿Perdón? ¿Aparte de meterte en nuestra casa te traes a alguien?
-Perdona que mi padre no durmiera allí y pudieras vivir juntitos pero esa casa es mitad mía y si quiero me llevo a alguien, ¿está claro? -al no recibir ninguna respuesta doy la conversación por terminada levantándome de la silla. Él se levanta de un brinco.
-¿Dónde vas?
-A ver mi nueva casa… ¿me das las llaves? -pregunto a la vez que extiendo mi mano hacia él.
-Solo hay dos copias, pídesela a Louis
-Está bien. Envíame la dirección a mi correo -antes de que pueda rechistar le doy una tarjeta con el correo apuntado. Josh me ha preparado para imprevistos como este. Él lo coge atónito y yo le doy una sonrisa hipócrita-. Un placer
Dicho esto me giro y salgo del despacho. Miro el reloj. Un cuarto de hora, bastante bien… Alzo la cabeza y veo al rubio y a Louis "peleando". Pongo los ojos en blanco y me dirijo hacia ellos.
-Hola -me saluda Niall al verme-, ¿necesitas ayuda del secretario?
Louis le pega un codazo y me mira sonriente.
-¿Qué tal? -pregunta dulcemente-. ¿Te fue bien? -él es amable y simpático pero no puedo dejar engañarme. Él quiere mi puesto, aunque aún no sepa quién soy. Estoy segura de que cuando lo sepa su actitud cambiará drásticamente.
-Sí, estupendo… tienes que darme las llaves de tu casa -digo lo más firme posible. Niall abre los ojos exageradamente y a Louis se le abre un poco la boca.
-¿Las llaves?
-Sí, Harry me ha dicho que hay solo dos copias y que te las pida a ti.
-Bueno... -dice buscándolas en el bolsillo-, ten.
-Muchas gracias -digo cogiéndolas antes de que cambie de opinión-. Chao
P.O.V Louis:
-¿¡Estás loco!? -chilla Niall cuando las puertas del ascensor se cierran.
-¿Por qué? ¿Qué pasa? -pregunto con el mismo tono de alerta total que acaba de utilizar.
-¡¿Que qué pasa?! -él respira hondo, al parecer, tratando calmarse-. ¡Le has dado las llaves de tu casa a una desconocida!
-Pero… ____ no es una desconocida.
-¿A no? -pregunta él alzando una ceja. Maldigo por lo bajo y me dirijo al despacho de Hazza. Abro la puerta sin picar.
-¿Quién es? -no puedo evitarme sorprender ante su tono de voz apagado.
-Soy yo Hazza
-¡Lou! -Harry se levanta de la silla y en unas cuantas zancadas esta junto a mí-. Lo ha fastidiado… -dice antes de abrazarme con todas sus fuerzas.
-¿Quién ha fastidiado qué? -pregunto estrechándole con mis brazos. Es un poco difícil de consolar al ser más alto que yo pero difícil no es imposible.
-____
-No te entiendo Harry -deshago el abrazo y junto nuestras frentes- ¿Puedes explicarme que te pasa? -él suspira abatido.
-Acaba de venir una chica…
-____ -interrumpo.
-Sí… ¿la conoces?
-Sí, te venía a decir que…
-¿Sabes cuál es su apellido? -pregunta interrumpiéndome ahora él. Yo niego confundido. ¿Qué más dará su apellido?-. ____ Williams
Eso me deja más confundido aún.- ¿Es la hija de George?
-Sí
-¿Y... qué hace aquí?
-George le dejo sus acciones en herencia, le dejo tus acciones Lou -yo respiro hondo mientras pienso en lo que me ha dicho.
-Joder...
-Sí, joder
-¿Por eso me ha pedido las llaves? -él asiente lentamente.
-Su padre también le dejo la casa en herencia, así que la vamos a tener que compartir con ella
-Vaya lío... -murmuro pellizcando el puente de mi nariz.
-Bueno, a ti al menos no te ha parecido la chica perfecta…
-¿Y si te digo que sí? -Harry abre los ojos sorprendido.
Él y yo somos pareja a escondidas hace 3 años. No somos gais, somos bisexuales. Alguna vez hemos intentado meter a una chica en nuestra relación, pero tenemos un problema enorme… no tenemos PARA NADA el mismo gusto. Cuando a mí me gustaba una chica a él no y viceversa. Por eso es tan sorprendente que ambos nos sintamos atraídos por ____.
-¿Enserio? -yo asiento con pesar-. ¿Y nos tiene que gustar casualmente la chica que tiene tus acciones?
-El destino no podía habernos fastidiado más…
-En realidad…
-¿Hay más?
-Sí… Viene acompañada a la casa -un gruñido se escapa de mis labios sin poderlo evitar.
-¿Podemos salir más pronto del trabajo? -él asiente con una sonrisa pícara.
-Por supuesto, tenemos que deshacernos de alguien…
-.-.-.-
-¿Y ahora qué? -pregunta Harry cuando llegamos a nuestra casa.
Hemos salido una hora antes del trabajo para conocer al nuevo inquilino, aunque las ganas anormales de volver a ver a ____ pueden haber influido un poco en la decisión. El único problema es que aún no han llegado.
-Tenemos ventaja, ¿no crees? -él me mira y hace una sonrisa pícara de esas que tanto me gustan.
-¿Qué podemos hacer para que ese estúpido nos deje campo libre para poder convencerla de que venda tus acciones?
-No lo sé Hazza… es que en realidad no sabemos nada de ella.
-Eso es cierto…
-Pero podemos distanciarla de su amiguito -digo sonriente por la idea.
-Lou, ¿esto es para comprar las acciones o para quedarnos con ____? -buena pregunta.
-No lo sé... Aunque se me acaba de ocurrir una magnífica idea
P.O.V ____:
-¿Estas segura de que es aquí? -pregunta Josh mirando el edificio sin parpadear.
Saco rápidamente mi móvil y releo el correo que me ha enviado Harry horas después de salir del edificio.
.____.____.
Para: ____ Hope Williams
Fecha: 17/07/13
Hora: 12:53 am
Querida ____,
Te adjunto el mapa para llegar a nuestra casa, espero que no te pierdas y llegues sana y salva.
.____.____.
Miro el mapa de nuevo y, efectivamente, estamos en nuestro nuevo hogar.
-Sí Josh, es este -ambos miramos el enorme rascacielos que tenemos enfrente. Nada más y nada menos que en el famoso y caro barrio de Manhattan.
-Wow -dice él tras unos segundos de completo silencio.
-¿Vamos? -él asiente energéticamente y salimos del coche.
La puesta de sol luce preciosa a esta hora. Después de que Josh me saque de mi ensueño con un pequeño empujón me meto las llaves en los vaqueros para tenerlas a mano.
Cuando voy a coger la maleta más grande, Josh, me la quita de las manos-. Ya llevo yo esta
-Gracias Josh -digo sonriente.
Entramos y subimos al ascensor. Nuestro piso es nada más y nada menos que el ático. ¿Qué les ha dado a estos chicos con tener los últimos pisos de los edificios? Tardamos una eternidad en llegar arriba.
-¿Hola? -pregunto al abrir la puerta. Nadie contesta.
-¿Puedo entrar? -me pregunta Josh. Miro su cara de apuro mientras mantiene la maleta entre sus brazos y me aparto para que pueda pasar- ¿No hay nadie? -pregunta después de dejar las maletas.
-Parece que no -dicho y hecho. Louis y Harry aparecen de repente.
-Hola -saluda Louis con voz alegre.
-Hola -digo yo sonriendo extrañada. Es así contigo porque quiere tus acciones, no lo olvides. Todos nos quedamos en silencio y recuerdo que aún no se conocen entre ellos-. Perdón… este es Josh -digo señalándolo-, y ellos son Harry y Louis
-Llámame Lou por favor -dice esbozando otra sonrisa.
-Pues él es Lou -digo rectificando.
Josh va hacia ellos y les estrecha las manos. Yo me acerco también con la misma intención pero Harry me sorprende con dos besos condenadamente lentos y sensuales. Lou no se queda atrás. Cuando acaba de saludar a Josh me acerca a él cogiéndome de la cintura y me da un beso en la comisura de los labios. Me quedo literalmente tiesa como un palo.
-¿Hay cena? -pregunta Josh sacándome del trance.
-Sí, hemos pedido unas pizzas -contesta Harry sonriente.
-Pero antes tenemos que enseñaros la casa y vuestros cuartos -dice Lou-. Josh, ven conmigo que te enseño el tuyo -juro que veo como antes de desaparecer con Josh, Lou, le guiña un ojo a Harry.
-¿Vamos? -asiento y Harry me lleva en dirección contraria.
-Qué grande es esto -comento mirando el lugar.
-Sí, es muy grande -murmura distraído. Nos paramos en frente de una habitación enorme.
-¿Es mía?
-Sí. ¿Josh tiene que dormir contigo? -pregunta antes de irse y dejarme a solas.
-¿Perdón?
-Me refiero a que si estáis juntos -no puedo evitar soltar una carcajada. Él espera a que acabe de reír.
-Solo es mi mejor amigo… y abogado
Él suspira y antes de irse dice-: Instálate. A las 10 en punto reúnete con nosotros en el salón para cenar.
P.O.V Harry:
-¿Y...? -pregunta mientras esperamos a que vengan a cenar.
-No son novios -él hace un baile extraño con los brazos-, pero es su abogado.
-¿¡Su abogado!? -yo asiento-. Joder... ¿Entonces, seguimos con el plan?
-Por supuesto