RETO WINTERIRON IS LIFE "LOVE SONGFICS"
RETO #5 CANCIÓN QUE TE PONGA TRISTE
PD: No cumplí con el Reto#4 (canción de tu artista favorito) ya que la canción corresponde a la misma del Reto#2.
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Ningún ser puede estar solo toda su vida, siempre habrá un punto en que la necesidad de contacto será tan fuerte y dolorosa que comenzaras a implorar sin pensar en las consecuencias.
Tonto el que no entienda...
Ahí estaba él, de nuevo, bajo aquel resplandor azul en medio de tanta oscuridad constituida no por la noche en sí, sino por los frondosos árboles que solo dejaban la luna a la intemperie del cielo.
Cuenta una leyenda...
-Undebel aquí estoy, de nuevo ante ti, implorando por mi...- Rezo aquel joven omega bajo los encantos de su Dios.
Que una hembra gitana
Conjuró a la luna hasta el amanecer...
-Mi corazón está incompleto, mi alma rota, necesito el consuelo de un amor eterno...- De rodillas, sollozaba.
Llorando pedía
Al llegar el día
Desposar un calé...
-Sé que tu mi señor me acompañas, que no estoy solo por completo, pero en verdad deseo a mi otra mitad, no tengo padre, no tengo madre y mi juventud pasara a otro plano con el pasar de los años. Mi condición dicta que más frutos eh de dar y así más de uno a ti te veneraran...- Silencio, el bosque se sumió en un silencio absoluto donde ni los grillos cantaron, pues el mensaje solo era escuchado por aquel joven gitano con los dotes de la creación.
Tendrás a tu hombre piel morena...
Desde el cielo habló la luna llena.
Pero a cambio quiero
El hijo primero
Que le engendres a él...
Pobre de aquel omega, que de su belleza exótica confía, por ser gitano creía que aquella petición no vendría con letras pequeñas en el contrato con su Dios.
Que quien su hijo inmola
Para no estar sola
Poco le iba a querer...
El pobre omega castaño, de belleza exótica por ser gitano, había estado tan solo pero no por mucho tiempo, el pobre desesperado pidió e imploro ante todo su Dios poderoso que al fin un alfa llegase a su vida y que una marca no solo en su nuca, sino que también en su corazón tenía que dejar.
Luna quieres ser madre
Y no encuentras querer
Que te haga mujer...
Pobre de aquel omega, jamás pensaría que Undebel le escribiría letras pequeñas en el contrato, cuando encontró aquel alfa durante sus compras en el mercadillo. Como cuento de hadas para el niño que tanto anhela, aquel hombre castaño de larga melena cruzo manos con él, ambos tratando de tomar una manzana, como aquella que condeno a Adán y Eva, la condena del omega comenzó.
-Hola...-
-Hola, disculpa... Escoge tu primero...-
-¡No! Eh... Después de ti por favor...- El castaño menor se sintió intimidado y su voz lo delataba, aquel desconocido de misteriosa aura le llamaba la atención, con ojos tan azules como el resplandor de aquella noche.
-Oye no porque sea un alfa significa que me imponga ante ti...- Dijo ofendido el castaño mayor.
-¡NONONO! Yo eh... ¡Perdón!- Se dio la vuelta, pero al intentar huir su mano fue sostenida por otra de piel tersa, que juraba provoco un ardor extraño contra su piel.
-Jajaja era broma, no quise asustarte... Me llamo James Barnes...- Ante el nerviosismo del pequeño, decidió calmar sus ánimos con un dulce beso en el dorso de la joven mano.
Aquel acto dejo al chico con un sonrosado rubor que poco o nada le faltaba para parecerse a aquel fruto rojo que rozo los dedos de ambos al principio. –Yo... Soy Anthony, Anthony Stark...-
Dime luna de plata
Que pretendes hacer
Con un niño de piel, Ah, ah...
El gitano no podía negar, que aquel joven ser le llamaba la atención, tantos años de andar tras omegas sin control, de cama en cama vagando lujurioso, debería sentar cabeza con algún ejemplar con una belleza tan mística como el joven omega gitano. Fue desde ese día, que sin dejar un día, su cortejo se hizo a ceder, poco no fue el tiempo, en que aquel gitano cayó ante su lucifer.
Hijo de la luna...
Bajo las estrellas, en matrimonio unieron sus almas, una más que rota y la otra corrompida mola. Pero entre sus caricias, y total malicia, una marca iba aparecer.
-Ah... James...- La extensión de su cuello era lamido por aquella húmeda lengua que succionaba las gotas de sangre que se deslizaron al momento de su mordida.
-Antoshka...- Jadeo el mayor, sus manos se aferraban posesivamente contra su cadera, la fricción entre sus pieles provoco el endurecimiento del macho que, sin pudor alguno, no aguanto más y se introdujo de golpe contra su omega. –Mío...-
-¡AAAAH!- La penetración sin lubricación era muy dolorosa para un omega que sin su celo, no era excitado perfectamente, su quejido fue silenciado con la mano del mayor que, furioso, le abandono para darle vuelta y cruzar miradas con el menor.
-Ca... llate...- Gruño, fue entonces cuando pudo notar, que bajo la luz de la luna y las estrellas de testigo, pudo ver un poco de verde tan toxico como la hiedra, en los ojos de aquel al que juro amor eterno. –Eres mío... Y más vale que ¡NO! Hagas... Nada... ¡NADA! Contra eso...- Balbuceo, su instinto alfa lo dominaba fácilmente.
-¿Ja James?-
-Abre las piernas...- El omega obedeció, su cuerpo temblaba ante el tacto tan aferrante de su alfa, quien no se inmuto en dejarle tantas marcas como pudo con sus garras y dientes, la mayor de todas había quedado dentro de su vientre.
-¡AH AH JAMES AH YA AH!- Su cuerpo se sacudía contra el frio pasto que lo albergaba contra espalda, su alfa le penetraba sin consideración alguna, su posesividad era demasiada ¿Así habrá tratado a todo omega en sus manos? Algo dentro del joven castaño no quería saber la respuesta.
-¡AH ANTHONY!- Grito fuertemente ante el clímax de su cuerpo, derramando su semilla en la lastimada entrada de su lloroso omega.
-¡JAMES!- Gimió el menor, aferrándose a la espalda de su pareja, hace varios minutos que el había sucumbido ante su excitación, donde el mayor tenía su tórax manchado. Sintió como este regulaba su respiración, besando la maltratada piel de su clavícula donde ya había dejado varios chupetones que no eran suficientes. Algo en el cielo le decía, que su Dios veía y se burlaba de él.
[9 MESES DESPUÉS]
Había sido difícil pero ahí estaba en sus brazos, aquella hermosa e inofensiva criatura descansaba contra su pecho, moviendo su cuerpo inquieto por verse entre la luz por primera vez.
-Mi niño...- Sollozo el omega con criatura en brazos, su más anhelado deseo estaba ahí, pero aquel primero no. El alfa del que se enamoró le veía desde el marco de la puerta, juzgándole con aquel ceño fruncido que no pretendía desaparecer desde el momento en que su cuerpo expulso al fruto de lo que llamo amor.
De padre canela nació un niño
Blanco como el lomo de un armiño
Con los ojos grises
En vez de aceituna
Niño albino de luna...
El gitano salió de aquella habitación en donde el parto se había efectuado hace unas horas, donde el omega solo lloraba en silencio ante aquel al que le entrego mente, corazón y alma, pero que ahora solo le reprochaba indiferencia alguna. –Te tengo a ti... Es lo que importa...- Beso la blanquecina cabecita de su pequeño, aspirando el dulce aroma a flores que su casta omega exhalaba. –Mi pequeño Pietro...-
Maldita su estampa
Este hijo es de un payo
Y yo no me lo callo...
Las teorías no se hicieron esperar en el pueblo, todos veían con malos ojos a aquella familia con aquella criatura de cabellos canosos y piel tan blanca como la nieve, Aquel gitano era señalado como un alfa sin honor, que obviamente fue engañado por su pareja, sin saber que lo fue, pero no por un hombre sobre la tierra, sino el mismísimo Undebel, que esperando sobre su luna el poco los iba a favorecer. Mientras tanto el joven omega, ahora madre que solo imponía, amor para su pequeño ser.
Luna quieres ser madre
Y no encuentras querer
Que te haga mujer
Dime luna de plata
Que pretendes hacer
Con un niño de piel, Ah, ah...
Sin pensar que su esposo, aquel alfa que le juro amor eterno, que impregno su estampa sobre su cuerpo, en toda su piel dejaría una marca de no merecer.
Hijo de la luna...
-¡JAMES BASTA!- Los gritos del omega se escuchaban por toda su habitación, su desesperación era más con el llanto de su hijo en cuna, donde no dejaba de escuchar los insultos y jadeos dolorosos de su joven madre a quien no dejaban de penetrar sin consideración alguna.
-¡AH! ¡DIMELO!- Sus uñas se clavaron sobre la cintura, pedazos de piel ya habían quedado en ellas donde no aceptaba separarse de la irritada entrada de su omega. -¡¿QUIÉN FUE EL HIJO DE PUTA?! ¡DIME ANTHONY! ¡¿CÓMO OSASTE DESHONRAR NUESTRO MATRIMONIO?! ¡PROFANASTE NUESTRO LECHO CON UN AMANTE Y ENCIMA DISTE A LUZ A UN MALDITO BASTARDO!-
-¡BASTA POR FAVOR JAMES!-
Gitano al creerse deshonrado...
Era inútil, por más que el joven gitano le dijera a su marido que todo fue un error, este no escucharía razones con la venda en sus ojos, su ceguera ante los malditos celos impedirían que, su criatura pura fuera comprendida como un sacrificio a su deseo.
Por más que eyaculara dentro suyo este no cedería ante su dominio alfa, aquel que llamaba bastardo era su todo, mientras que el ya no era nada, no sería humillado ante tal acto.
-¿Ja Ja James?- Titubeo, al verle de regreso en el marco de su puerta. –No... ¡NO NO! ¡PIEDAD!- Intento arrastrarse lejos de él, a donde su bebe seguía llamando por su madre, sin saber que esta iba perecer.
Se fue a su mujer cuchillo en mano...
-¿De quién es el hijo? ¡Me has engañado fijo!-
Y de muerte la hirió...
Una vez que atravesó el corazón de su omega, tomo al bebe que ahora en luto despedía a su madre, donde su aroma se esfumaba del aire, en un adiós.
Luego se hizo al monte
Con el niño en brazos
Y allí le abandonó...
En solo unas horas el pueblo lo supo, como el joven omega, de exótica belleza gitana, había sido asesinado por su esposo, donde todos buscaban al criminal y al niño, pero con ninguno jamás pudieron dar.
Luna quieres ser madre
Y no encuentras querer
Que te haga mujer
Dime luna de plata
Que pretendes hacer
Con un niño de piel, Ah, ah...
[...]
-El hombre aprende a rezar, pero nunca a creer en realidad...- Dijo, dejando una rosa blanca sobre aquella tumba, de exóticas hierbas puestas y hiedra alrededor.
Hijo de la luna...
-¿Qué haces Logan?- Pregunto curioso el dulce niño omega, que con el viento en cara despeinaba la melena blanca.
-Nada...- Dijo sin emoción alguna en su grave voz.
-¿Por qué venimos aquí?- Mayor y menor cruzaron miradas, una tan fría e incomprendida que el hombre extrañamente alababa en él, y otra tan plateada y brillante donde reflejaba la inocencia misma que su madre, en paz descanse.
Y las noches que haya luna llena
Será porque el niño esté de buenas
Y si el niño llora
Menguará la luna
Para hacerle una cuna...
-Solo... Quería saludar a alguien...-
-Oh...- Bostezo cansado. -¿Ya nos vamos?-
-Si...- Aunque joven e inquieto, sabía que el joven omega no era tonto, los ojos llorosos lo delataban, y aunque no gustara de ver a su madre en aquel estado final, sabía que el trato estaba hecho y ahora podía descansar en paz, porque la Luna, su Dios, Undebel o Logan, como quieran llamarle, tenía lo que quería con su protegido de blanco celestial.
Y si el niño llora
Menguará la luna
Para hacerle una cuna.