Querido Joshua:
Hola, si soy yo, tu exnovio.
No, no es una muy mala broma.
Te estoy enviando un mail casi un año después desde que nos dejamos de ver, mi error, claramente.
Creo que ni siquiera esperabas que te respondiera o quizás siquiera recuerdas haberme dejado una carta. Por eso estoy aquí, escribiéndote. Aunque no estoy seguro de que uses este mail aún, eso espero. Si lo recibes es por algo o eso quiero pensar.
Me demoré un poco en escribirte a pesar de que lo hice muchas veces, pero nunca lo envié, como las tantas que marqué tu número, pero no terminé por llamarte. Por miedo, creo. Porque había mucho que debía hacer por mí. Mejorar, quizás.
Si te hubiese respondido hace meses atrás, hubiésemos terminado en lo mismo de siempre. Arrastrándote a mis desequilibrios y confusiones, y tu tomándolo todo sin reclamo.
Tampoco sé si quieras una respuesta después de todo, pero creo que si dejaste un montón de preguntas sin responder, es porque las esperas.
Sí, te amé. Aunque no de la manera que hubiese querido amarte, no te amé de la manera más sana que merecías, pero lo hice. No solo amé al Jeonghan que crecía y que se volvía una mejor persona a tu lado. Amé a Joshua Hong por completo y sin reclamos. Amaba tu esencia tan pura, tus valores, tus errores, la pasión con la que te entrega a las cosas que amas, tu aroma, tu cuerpo, te amé entero, cada fibra de ti la consumí. Te absorbí por completo, mientras yo me entregaba a medias sin darme cuenta. Y ese fue el principal de los problemas que se nos avecinaban.
Cuando te dejé sin explicaciones fue porque tenía terror de que dejaras de amarme algún día, solo pensar en eso me hacía sentir un ataque de pánico. ¿Qué iba a ser de mi sin ti? Porque también estaba cansado de perder personas en mi vida, pero aun así, lo podía apostar todo con tal de no perderte a ti. Hubo un día en que estábamos discutiendo, por alguno de mis arrebatos injustificados, alguna escena de celos quizás. Ese día me miraste diferente, con una mezcla de cansancio y decepción, un botón de alerta despertó en mi y pensé ''llegará el día en que esta rutina lo va a saturar y se irá para siempre'' y ese se transformó en mi principal miedo. Entonces como adivinaste, sin pensar y de impulso me fui. No sé muy por qué, pero lo hice de la manera más cruel posible. Mientras tú me demostraste que eras capaz de soportar eso y más. De alguna manera eso llenó mi ego tan escaso de amor que te llevé a limite, te hice desearme a lo lejos y que incluso fueras hasta mí, para después decirte que no eras suficiente cuando era todo al revés. Te fallé de la peor manera. Sin embargo, todo aquello le hacía bien a mi inestabilidad.
Cuando volví, la mirada a la que tanto le temí estaba observándome. Pero más allá de eso vi una profunda tristeza en ti, que fue provocada por mí. Caí en cuenta del gran error que había cometido, por primera vez en mi vida asumí internamente un error. Entonces supe que lo estaba haciendo de la manera equivocada y debía intentar arreglarlo aun así fracasara. Cuando volví retomé mis terapias y mis medicamentos en silencio sin contárselo a nadie, por miedo a fracasar otra vez, quizás. Pero pensar en ti me daba fuerzas. Tu sabes que cuando iniciaba mis terapias, todo se volvía paz y caos al mismo tiempo, por eso no te pedí elegir, ni te dije que te amaba, aunque estaba muy seguro de sentirlo. Porque en ese tiempo entendí que tu me hacías bien a mí, pero yo a ti no y pedirte permanecer era continuar dañándote.
Empecé a sentir los cambios muy lentos y el darme cuenta de que ese Jeonghan comenzaba a gustarte nuevamente, me dio fuerzas para continuar y dejar mis miedo. Lamentablemente la vida me demostró otra vez que no está a mi favor. Para tu tranquilidad, hoy ya no me veo como una víctima, porque la vida que me tocó es lo que tenía que ser y en el presente soy responsable de elegir lo que quiero que sea para mi. Sin embargo, la muerte de mi mamá volvió a remover un montón de fantasmas y necesitaba cerrar esa etapa. No pude ir a su funeral, aunque me arrepentí por completo un mes después, volví a elegir mal como de costumbre.
En el tiempo que me fui, fue para cerrar algunas etapas que jamás debí abrir. No estuve en Seúl durante esos meses, fui a despedirme de quien debía y luego a intentar reconstruirme por el mundo.
Volví cuando supe que te habías ido. No lo creí para serte sincero, porque egoístamente jamás te visualicé lejos de nosotros. Tu más que nadie sabes que eres la imagen de la estabilidad en un grupo de chicos tan desquiciados. Pero lo lograste y de alguna manera estaba triste pero feliz de que también estuvieras viendo por ti. Volví porque necesitaba verlo con mis propios ojos y era real, no estabas.
Creo que el principal mensaje de estas palabras es agradecerte por dejarme, si, creo que finalmente hicimos algo bien y lamentablemente fue dejarnos. No quiero que suene frio, pero no estábamos en un momento donde ninguno se sumara.
Y también gracias por existir, y amarme tanto como para cargar conmigo y toda mi familia en tus hombros por tanto tiempo.
Me tomaré el atrevimiento de decir que jamás en la vida encontraré un ser humano como tú, no soy más que un afortunado de que aparecieras en ella. Me enseñaste a darme cuenta de que todo lo malo que me tocó se compensó con tu presencia y si, estoy siendo muy cursi, pero mereces saberlo finalmente.
Gracias por enseñarme amar y ser el único hombre al que amaré por siempre.
En todo este proceso de sanación que estoy llevando, comprendí también que, para amar debo amarme. Si ese cliché que oímos hasta el cansancio, pero era cierto. Cuando comencé a verme como una persona con valor, todo a mi alrededor adquirió un brillo especial, ese que no pude disfrutar en ti.
Mentiría si dijera que no me arrepiento y día a día no creo historias en donde todo fuese diferente, pero no me aferro a eso, porque sé que, aunque no pudimos amarnos sanamente, sin todo lo que pasamos no me hubiese transformado una mejor versión de mi mismo. Y lamento profundamente haberte arrastrado a ti también.
De corazón espero que seas feliz, porque lo mereces más que nadie en este mundo.
Debo darte por fin, un perdón que no está demás, aunque es demasiado insignificante para compensar todo lo que hice. Aun así, lo siento mucho Joshua.
Y bueno, no existe una fórmula mágica que nos haga sentir mejor porque el dolor es parte de esta vida que no tocó vivir. Pero creo que para perdonar lo malo y conservar ''las maravillosas, pero pequeñas y buenas historias'' se debe reconstruir el significado que tenemos de todas nuestras grandes historias y si quizás el día de mañana podemos ver todo como producto de nuestro crecimiento, podremos volver a mirarnos a los ojos ¿No lo crees?
Se que estas al tanto de todo lo que pasa aquí, del otro lado del continente, pero déjame a mi contártelo un poco desde mi perspectiva. Tu partida también removió a los demás. De alguna forma caímos en cuenta de que la vida que estábamos llevando era demasiado conformista y carente de matices. Estábamos aceptando con demasiada convicción la resignación a la vida que nos tocó y por suerte sin que estuvieras ahí para darnos una frase sensata, cada quien tuvo que aprender a usar sus propias herramientas para crecer. También se dieron cuenta de que, si ambos pudimos cambiar, todos lo necesitábamos.
Seungkwan dejó de dar pena y finalmente encontró una pareja que lo ama. Estoy tan aliviado por Vernon. Y no extrañaría que te llegase una invitación de boda pronto, porque no deja a ese chico respirar en paz.
Mi primito nuevo director de Pledis de día, novio del chico de las orejas grandes por las tardes y cantante de bares por las noches.
La parejita feliz continua igual, tuvieron un hijo perruno horrible que se parece a Mingyu, del que estoy seguro Wonwoo odia más que a mí.
Y por último y menos importante la rata sin personalidad que nos abandonó. Después de que te fuiste creo que ya no le quedaron razones para respirar el aire de esta ciudad porque ya no lo compartiría contigo y partió a china siguiendo al chino bueno, ese flaco de la cafetería. Creo que finalmente te superó y espero de corazón que tengan muchos roedores y sean felices.
Y yo bueno, continuo mi camino de terapias y todo eso que está en proceso, pero gracias a esto me animé a escribirte para que podamos darle cierre a esta etapa y una despedida un poco más digna. Este Mensaje te aparecerá con un montón de peso porque enviaré un par de cosas más. Es una extensa lista de video que llevan como título ''Rec'' que son básicamente momentos nuestros y también algunas fotos que tenía guardadas. Que espero sean de ayuda en ese perdón que tanto deseabas en tus últimas palabras y puedas recordar el por qué nos amamos algún día.
No me queda más que despedirme y desearte lo mejor del mundo.
Adiós, te amo y que nos volvamos a ver.
- REC 21 ⏪▶️⏸⏩⏏️