Pov Lissa
Mi papá es la mejor persona del mundo. Siempre está al pendiente de mí y aún así es excelente en su trabajo. Admiro su fortaleza, a pesar de todo lo que hemos pasado juntos el nunca se a derrumbado, nunca a dejado de reír. En la temporada que estuve un poco depresiva por la inesperada llegada de aquella enfermedad, junto con la cereza del pastel que es mi actual ceguera, yo le preguntaba lo siguiente:
"¿Por qué a pesar de todo lo que haz pasado no dejas de sonreir? Mi mamá murió, yo enferme, estuve en coma y ahora estoy ciega, ¿Porque?"
Mi papá muy pacientemente, ya que era la quinta vez que le preguntaba eso, contestó:
" ¿Por qué?, bueno...no le voy a dar el gusto a la vida o el universo de tirarme por cosas que tienen solución. Aunque se puede decir que yo sufrí mucho toda mi vida, eso no es verdad, no en mi cabeza, no en mi realidad. Tuve bellos momentos después de todo. Como cuando vi por primera vez tu bello rostro, verte crecer, triunfar en mi trabajo, verte crecer nuevamente y admirar en lo que te haz convertido. Ama la vida, Lissa. Solo es una"
Era la primera vez que su respuesta me habría los ojos, o bueno, lo poco que quedaba de ellos. Por favor sean serios porque juro que está vez no fue un chiste. Como dije, el me abrió los ojos, pero los abrí por que yo decidí ya hacer un cambio en mi vida.
Es el hombre más maravilloso del mundo. Mi madre era muy suertuda.
Cuando estaba en el suelo antes de que mi papá me abrazara, Russel se avalanzo a mi, mientras lo acariciaba el lamía mi rostro.
- Ahora apresurate, Lissa. Llegaremos tarde- mi cara era de incredulidad. Me levanté.
- Que gruñón eres. Dije ser fuertes no hacer como si nada hubiese pasado- los dos reímos.
- No seas grosera conmigo, conejita- apretó mi nariz.
- Auch, ¡Oye!, No hagas eso. ¿Acaso quieres dejarme sin nariz?- ecuche que abrió la puerta del auto.
- Sube, exagerada.
- ¿Y si me lastimaste mi nariz? Es mejor que me lleves a la casa a descansar un poco.
- Ahora- la última "a", fue alargada un poco, eso significa que está comenzando a perder la paciencia. Hice un puchero, comencé a buscar el asiento del auto.
Al llegar a la universidad Piper y Catherine me abrazaron con mucha fuerza, estaban preocupadas. En mi momento de estupidez me pregunte ¿Donde diablos lo vieron?, hasta que recordé que en este tipo de cosas las redes sociales son las número uno.
- Tranquilas, estoy bien. ¿Lo ven?- me separé un poco- sigo sin ver- ellas comenzaron a reír.
- En verdad no puedo contigo, Lissa- Piper sorbió por la nariz, si, lloro un poco, es igual de sentimental que yo.
Como siempre me acompañaron a mi aula. Iba a sentarme cómodamente pero un el sonido más desesperante del mundo se escucho.
- Hey- era André- ¿cuántos dedos hay?- reí y me crucé de brazos.
- Al igual que en mi mano, cinco. Aunque depende de cuantos bajes- me encogí de hombros.
- Si- el río un poco. Es algo raro en el, normalmente soltaría un bufido- oye- asentí con cabeza para darle a entender que prosiguiera- fuiste muy valiente, casi pensé que te perdíamos. Eres fuerte, niña sin vista- me quedé sin palabras no sabía que contestarle, nunca pensé que el sería capaz de al menos decir "gracias", lo juzgue un poco mal y eso que ya lo conocía.
Cuando estuve a punto de contestarle el profesor entro al aula, interrumpiendo mi intento de agradecimiento.
- Buenos días- saludo el profesor.
- "Buenos días"- contestamos al unísono.
- Tardes- dijo bromista, André. El profesor solo carraspeo su garganta.
- Joven O'Neill, creí que había faltado. Qué bueno que esté aquí presente, pero si no quiere que diga que usted no se presentó a la clase, es mejor que calle.
- Lo siento- lo dijo un poco arrepentido.
- Bien, espero y ya estén listos para el concurso de la siguiente semana- ay, Dios. Lo había olvidado...pero ya tengo una solución...el puente- espero y ya tengan como mínimo la idea de lo que harán.
Que vergüenza, el tan solo hecho de pensar que Peter verá su cuadro ahí y
no solo eso, agregándole el hecho de que la idea para el concurso es "Lo que amo" y ¡NO SOLO ESO!...¡ASI SE LLAMA EL CONCURSO!. Tierra porfavor tragarme para que después me regurgites en China.
En la universidad el tiempo se va volando, es más rápido que Spiderman. No digo que no sea difícil o una carga pesada pero cuando es lo que amas aprendes a sobrellevarlo.
Spiderman...dije que hoy lo vería. Aún no se qué darle...¿Que podría gustarle? más bien que necesita, tiene todo lo que cualquier humano normal pediria, "poderes".
Mmmmmm....se la pasa de edificio en edificio, y tal vez no coma mucho, le haré una buena comida, yo creo que es lo que cualquier persona trabajadora pediría...a excepción de mi papá, el lo que menos quiere después de cocinar por 5 horas es comer.
Cuando llegué a casa de nuevo me encontraba sola, no me molesta ya que la mayoría de las veces mi papá está conmigo. Me propuse a cocinar para lo de esta noche. Estoy muy nerviosa, no sabía porque hasta que recordé aquel papelito que decía: "Entrada". Suspiré pesadamente...tengo una idea, algo mala...pero es una idea.
Pensaba angustiada mientras mi tarde solo se basaba en buscar los maldito brailles correctos para cada condimento.
•~•~•
El momento había llegado, estaba sentada a la orilla de mi cama con un boul en mi regazo y mis piernas estiradas mientras las sacudía de una manera continua gracias a lo ansiosa que me siento. Una de mis manos está en mi boca, tal vez mi manía de comerme las uñas ya no exista pero sigo metiendolas a mi boca cada que tengo una emoción o sensación muy fuerte.
Mi corazón latía tanto que podía escucharlo en mis oidos- "PLAC"- se escucho un golpe, este provenía de la ventana.
-¡Agh!
¿Quién diablos es?
Pov Peter.
Lissa cuando decide hacer algo lo logra, así como logro convencerme. Aunque ella solo necesita sonreír para convencerme de saltar de un puente, es perfecta simplemente perfecta.
Ahora necesito vestirme para ir a su ventana, se que ella no verá si tengo el traje o no pero... prefiero estar prevenido. Cualquier cosa puede pasar.
Me dediqué a abrir la puerta con mucha delicadeza ya que si ella me escucha muy probablemente venga a saludar. Si, si yo sé que no verá nada pero entienda me un poco, el susto nadie me lo quita. Me acerqué a su ventana y al intentar colgarme de esta me golpee en la ventana causando que, de una mentalidad extraña, quedara de cabeza.
- ¡Agh!- mi cabeza no tiene la culpa de mi torpeza. Vi como comenzaron a abrir la ventana, la cara de Lissa salió de esta. Obviamente al no ver que yo estaba ahí ella quedó a unos centímetros de mi rostro.
- ¿Spiderman?- pregunto con miedo.
- No- enarco una ceja- el hombre araña- sonrió.
- Que bueno que viniste, pensé que me dejarías plantada- cruzó sus brazos.
- ¿En verdad piensas eso de mi? Porfavor, eres una gran amiga de Peter, claramente era una obligación el venir- asintió- bueno...¿Nos quedaremos aquí o...?
- ¿O...?- me imitó.
- ¿O quieres dar un paseo?- su cara cambio a una de angustia, parece que no le trae buenos recuerdos el columpiarla en mi telaraña- tranquila nada te sucederá.
- Es que no solo es eso- no había notado el boul que tenía en sus manos, el cual abrazo a su cuerpo- lo que hice para ti terminara hecho un desastre- qué linda.
- No te preocupes, yo lo comeré como sea que esté. Yo como de todo- se lo pensó- anda tengo mi mano extendida desde hace punto cinco segundos.
- No te vayas a cansar araña- sonaba muy bien cuando ella lo decía- ella también subió su mano un poco más a la izquierda de donde estaba y yo la tomé.
Con un poco de esfuerzo su cuerpo salió por completo de la ventana, en verdad no sé cómo fue que lo hicimos. Con un brazo la tenía cargada estilo princesa mientras ella se aferraba a mi y a su boul.
- ¿Estás lista?- sentí como nego- 4...3...2...- salte desde el techo- ¡1!
La lleve a la cima de un edificio, quería mantenerla alejada de cualquier conocido. Al llegar la senté en un lugar para que no sintiera miedo ya que ella sabía muy bien que no nos encontrábamos en el suelo.
La comida que había hecho para mí era un spaghetti con queso, sabía excepcional o sabe ya que aún sigo en los últimos bocados.
- Es lindo estar aquí contigo- dijo ella, yo solo hice un sonido de duda ya que tenía la boca llena- vaya no mal pienses lo digo porque me gusta hacer amigos, es que desde que llegué aquí mi vida dio un giro muy grande. La vida ya no es para nada aburrida, bueno si antes no lo era ahora menos- solo me quedé mirandola- ¿Puedo preguntarte algo?
- Adelante.
- ¿Te has enamorado a primera vista?- no supe que contestar- por qué si es así, entonces asi podrias comprenderme mejor.
- Acaso...¿Estas enamorada de alguien?- mi pecho dolía, mi corazón latía muy lentamente. Ella asintió.
- Creo que si- parecía nerviosa.
Ay no.
- Y...¿Puedo saber quién es?- ladeó su cabeza un poco.
- Supongo que si- le gustará alguien de su universidad. Aún peor, ¿ Le gustará Spiderman?. No, no somos la misma persona si nos referimos a este tipo de temas- ¿Prometes no hablar nada?- me amenazó con su dedo- porque tal vez lo conoces, bueno...lo conoces.
- Tranquila, lo prometo. Dilo cuando estás como...- me interrumpió.
- ¡ESTOY ENAMORADA DE PETER!
Sip, esa no me la veía venir.
Explicación:
Finales, me dio Tifoidea :'v, entre a clases de violín. Pero esta semana subiré doble lo juro. Bueno los dejo con este capítulo dedicado a todos ustedes mis lector@s. L@s amo gracias por seguir aquí a pesar de todas mi promesas rotas 💕💕💕😍😍😍
Hasta luego! Besos!💕