El chico de cabellera negra cayó al suelo inconsciente. Pues había recibido un disparo en la cabeza por su ahora ex pareja.
El Rubió reía sin dejar su sonrisa de lado. Había cometido su plan.
"Un inútil en el piso". Pensó.
Y eso era lo único que el quería ver, aún ser inferior a él morir sin tener idea de que nunca había sido amado. Eso era de gozarlo.
¿Dónde quedó lo romántico?
¿En los besos que se dieron?
¿En su primera cita?
No, claro que no.
Eso estaba en las rosas blancas que el rubio dejaba en el charco de su víctima y ahora, pareja muerta.
Si el mundo fuera como está pareja. Todos morirían en manos de sus supuestos "amores".
Fin.
"Agradecemos que hayan visto esto"
Se agregó de voz de fondo mientras los créditos comenzaban a aparecer.
Parecía que el disco estaba fallando, pues se congeló la pantalla mientras la música cruda de los violines seguía sonando.
—¡Porquería! .—Soltó Dilan exaltado, tirando una gran cantidad de palomitas de maíz de la mano.
Alexis miro el escenario de forma divertida, y se dispuso a soltar pequeña risa burlona mientras se acercaba un poco, rodeando el cuello de Dilan con sus brazos.
—Oh vamos... No estuvo tan mal. —dijo intentando aligerar la situación.
—¡¿No estuvo tan mal?! .—dijo casi escupiendo la comida que tenía en la boca. Tragó todo de una y volvió a hablar—. La narración era un asco. ¡Esta es la última vez que compró películas baratas a un pinche mendigo!
Se cruzó de brazos mientras soltaba un suspiro y inflaba las mejillas.
—Creí que debía ayudarlo... —gruño—. Ojalá le valga de algo esos 30 dólares.
Alexis al ver esa situación sonrío divertido. No imaginaba lo lindo que era cuando hacía sus berrinches.
—Ay, Dios. Te ves muy adorable. —rio sin parar de reír. Dilan solo atinó a darle un codazo mientras se tapaba el rostro con las manos—. ¡Hey! .—mencionó sonriendo fingiendo que eso le había dolido—. Oye, cariño.. .—dijo más calmado. Mirándolo de forma más seductora—. ¿Qué te parece si... .—comento tocando sus piernas—. Dejamos la película...
¿Y hacemos a hacer otras cosas? .—comento dejando de tocar sus piernas y acariciando la cadera de su novio. Dejando en sorpresa a Dilan.
Dilan se ruborizó, y enseguida le dió un golpe en el brazo, se agachó y quitó el brazo de Alexis de su cuello, alejándose un poco.
—¡Hoy no! .—dijo casi de inmediato al separarse—. Por favor Alexis... .—dijo ligeramente nervioso. Haciendo su mejor intento para ocultarlo.
—¡Oh vamos! .—menciono Alexis, mostrando decepción en su rostro —. Desde que volvimos del viaje solo nos hemos concentrado en los exámenes... —agregó mientras intentaba volver a acercarse a Dilan—. Y debido a los trabajos no hemos tenido tiempo de estar juntos. ¿No podemos divertirnos un poco? .—comento mientras poco a poco intentaba acorralar a su novio, quien ya tropezaba con el límite del sillón en el que se encontraba.
Dilan se mantuvo casi estático. Realmente deseaba eso, pero el tiempo y el lugar le estaban jugando una mala pasada.
Alexis aprovechaba la cabeza casi confundida de su novio, así que apenas lo tuvo cerca, le plantó un besó en los labios. Algo que hizo caer a Dilan de inmediato, quien hasta ese punto golpeó ligeramente su cabeza sobre el sillón.
Alexis aprovechando esa vulnerabilidad, enseguida hizo el beso algo más intenso. Moviendo sus labios y metiendo su lengua dentro de él, intento convencer de ir más allá.
Dilan haciendo un largo intento de separarse de vez en cuando, logró decir algunas palabras entre sus desesperados jadeos
—Por favor... Ah... ¡Yo-! Mngh.. .—Aún con la oportunidad de hablar, el regresaba de nuevo a ser devorada por Alexis, quién sentía que estaba apunto de ganar—. M... Mi ... Mamá... Ella- ah... —dijo casi en un gemido largo—. ¡Volverá! .—grito perdiendo casi todo el aire que tenía.
Al encontrar la manera de librarse de su acalorada prisión, lo empujo de golpe de encima suyo. Poniendo sus pies sobre el estómago de Alexis
Respirando agitado, intento incorporarse.
—¡Ella vendrá más tarde! .—afirmo completamente rojo.
El otro ya en el suelo, se levantó y sobó su cabeza la cual había topado con el frío piso. Pues el empujón que le dio Dilan lo sacó del sillón.
Analizo la situación alzando una ceja, y mirándolo más incrédulo que adolorido.
—¿Tu mamá? .—soltó mientras se levantaba del suelo—. ¿No me habías dicho que ella no volvería dentro de una semana?
Dilan se puso muy rojo enseguida.
—Te... Te mentí .— titubeando, revelando la verdad—. Creí que si te decía que mi madre solo trabajaría unas horas solo para cubrir a alguien... Tú... No... vendrías...
Alexis vió a su pareja muy adorable como para enojarse por una mentira como esa.
—Yo hubiera venido de todas formas. Extrañaba verte. .—dijo esbozando una sonrisa, para luego acercarse a abrazarlo—. Aunque sinceramente estoy un poco decepcionado de no poder hacer nada. Realmente extrañaba sentirte.
Alexis volvió a sentarse y a rodearlo con sus brazos nuevamente.
Dilan se puso aún más rojo y se acercó lentamente a besarlo en los labios.
—Te parece si solo hacemos... Una ronda. .—soltó apenado mientras se sujetaba nerviosamente la camisa que tenía puesta. Alexis sonrió con victoria.
Se acercaron nuevamente, besandose con la misma profundidad mientras uno de los dos intentaba desvestir al otro.
Estaban sin la necesidad de separase. Ambos querían volver a hacerlo.
—A... Alexis... Yo-o... Mngh.. .—dijo casi gimiendo entre los labios.
Pero repentinamente el sonido del timbre hizo su aparición.
Alexis no se detenía aún con eso, pero Dilan le puso una pausa a su intensa situación, poniendo su mano entre los labios de Alexis, intentando aclararle la cabeza sobre el sonido que nuevamente volvía a aparecer.
Alexis suspiro pesadamente aun con la mano de Dilan entre sus labios. Eso le había dado un escalofrío a Dilan, pero estaba consciente de lo que pasaba, habían sido interrumpidos.
Desde la puerta se oía como la golpeaban con fuerza.
Parecía que el tocar el timbre y molestarlos no era suficiente.
—¡Dilan! ¡Abre la puerta! .—se oyó detrás de la puerta con desespero—. ¡Oye!... ¿Qué haces tú aquí?... —entre quejidos de molestia, se oyó como los pies de alguien eran arrastrados— ¡Vete de aquí, Chock!
Era obvio que se trataba de nadie más y nadie menos que el amigo de Dilan que ahora parecía acompañado por su otro amigo.
—Ash... .—soltó Alexis algo decepcionado mientras se levantaba de encima de Dilan.
—Tengo que atender... .—soltó apenado y algo molesto.
Dilan se levantó lentamente del sillón mientras se intentaba arreglar la ropa.
Si algo no toleraba de si mismo era ver que cara ponían cuando lo veían de esa forma después de un encuentro íntimo con Alexis.
Se dirigió hacia la puerta descalzo y la abrió intentando respirar hondo para lo que se venía.
Destras de esta se mostró a Chock y Rayan en una posición de lucha. Era obvio que aún no se llevaban del todo bien, pero por suerte no era tan grave.
—¡Ilan! .-grito de antemano Chock. Alzó las manos con la intención de recibirlo con un abrazo pero Rayan con rapidez se puso enfrente suyo.
Chock hizo una cara de desconcierto. Mirándolo seriamente.
—Fui su amigo primero, así que yo lo abrazo antes .—dijo Rayan sonriendo con Victoria mientras se volteaba a abrazar a Dilan.
—Hola Rayan y Chock. .—soltó apenado mientras Rayan colgaba de su cuello con la intensión de no soltarlo. Haciendo muecas de burla a Chock—. Veo que les va muy bien con su nueva amistad...
***
Autor: "Desde está perspectiva, narrará de vuelta Dilan, es raro que yo lo intenté hacer"
—¿Por qué de la nada vinieron? .—mencioné algo nervioso, volteando hacia atrás para ver a Alexis, quién estaba desarmando el control, quitando las baterías y volviendolas a poner.
Tenía unas extrañas manías cuando estaba ansioso. Una de ellas era destruir cosas.
Algo curioso enrealidad, pero era divertido verlo de esa manera.
—¡Vinimos a visitarte! .—contestó Chock con esmero, mientras sonreía casí corriendo a abrazarme, sin importarle la presencia de Rayan.
Realmente había olvidado lo cariñosos que eran conmigo, pues aunque seguía viendo a Rayan y a Chock en la escuela, ya no nos juntábamos como siempre debido a los trabajos.
Al final del día, muchas cosas cambiaron, como nuestros salones.
Voltee a ver a Alexis, pidiendo algo de ayuda, pues ya estaban comenzando a darme todo su peso encima.
Alexis noto mi cara de sufrimiento y se dirigió a hablar.
—Chicos, creo que Dilan necesita algo de aire. —comento de manera serena—. Suficiente tuvo con que yo se lo quitará. —dijo antes de comenzar a sonreír de forma coqueta.
Rayan levanto la vista hacía mí algo incómodo, haciéndome la cara de: "Dios, que asco" y lentamente se empezo a alejar con las manos en el aire. Quien sabe que haya pasado por su cabeza.
Chock no entendía que pasaba y sonriendo hizo lo mismo.
—Dilan, no tengo problema con las cosas que hagas con él, pero por favor, que no lo mencioné como si nada. .—dijo Rayan limpiando sus manos en sus pantalones.
Rodé los ojos sobre su comentario he hice una seña para que pasaran.
Rayan y Chock entraron a empujones debido a sus ganas de competir. Pero debido a mis sutiles miradas, pasaron sin que alguien saliera herido.
Alexis se levantó y saludo a cada uno aún cuando se veía algo incómodo. Su rostro no era sutil cuando algo le fastidiaba; no esforzaba en lo más mínimo hacer creíble su sonrisa.
Aunque después de todo yo estaba de acuerdo con él en algo. Nos interrumpieron en medio encuentro.
—¿Y bien? .—dije cerrando la puerta detrás de ellos—. ¿Cuál es el plan?
Alexis miró algo confundido mis palabras. Me hizo un gesto de que dijera bien que tramaba.
Rayan y Chock quienes se dirigían al sillón voltearon para ver a que me refería.
—¿Sale una orgía? .—dije sonriente.
—¡¿QUÉ?! .—dijeron Alexis y Rayan al mismo tiempo. Sus rostros no podían estar más desenfocados después de escucharme decir eso.
—¡Claro! .—dijo Chock sin entender la situación. Rayan y Alexis voltearon la cabeza hacia él con incomodidad y terror—. ¿Qué?
Me dispuse a reír después de ver eso. Hace mucho las bromas no salían de mi de esa manera. Realmente extrañaba tener a todos juntos para disfrutar de nuestro encuentro.
—Oh, Dilan... No bromees así .—dijo Alexis pasando su mano por su rostro con suma frustración—. Casi me da un infarto.
Rayan asintió a su afirmación. Por primera vez estaban de acuerdo en algo.
—Ni que me lo digas a mi. Que asco imaginar estar en esa situación. —dijo mientras se retorcía de asco—. Iugh.
—¿Esta mal eso de la orgía? .—dijo Chock algo curioso mientras se quitaba su polera y se la amarraba en la cintura.
—Solo diré que no es un juego. —dispuso a responder Rayan antes de pensar en matarlo. Se notaba que intentaba estar tranquilo por mi—. Así que no lo andes mencionando por ahí.
—Claro. —contesto Chock mientras se acercaba hacia Alexis, sentándose junto a él—. ¿Te gusta destruir cosas? .—agregó apuntando hacia el control remoto echo trizas. Tendría que comprar otro con mis ahorros.
—Depende de la situación. —mencionó encogiéndose de hombros—. Aunque disfruto más rompiendo traseros. —hizo una pausa—. O... trasero. —dijo mostrando una sonrisa burlesca. Era evidente que se refería a mi.
Yo solo me sonroje mirando el piso. Notando como mis pies seguían descalzos. A lo que me acerqué al sillón donde debajo estaban mis sandalias.
—¿Podríamos no hacer chistes sexuales por un instante? .—Intervino Rayan—. ¿Pueden pensar en el heterosexual del grupo por una vez?
—¿Eres heterosexual? .—dijo Alexis algo sorprendido—. Siempre imagine que veías a Dilan con otra cara. —mencionó tocándose la barbilla. Estaba ligeramente intrigado ante las palabras de Rayan.
—Dilan es como mi hermanito menor de otra madre. Además solo he salido con mujeres. ¿No se me nota lo varonil? ¿O es porque el aire gay está por toda la cuadra?. —dijo algo divertido ante su propia respuesta.
—Ya se te pasará. —mencionó Alexis ocultando un pequeña carcajada—. Es solo que no has probado una buena verg‐
—¡Oh, diablos! ¡cállate! .—grito casi exaltado Rayan. Tapándose los oídos—. ¡¿Qué nadie en esta casa, es gay?!
—Yo soy bisexual... —dijo Chock levantando la mano.
Los chicos quedaron en un pleno silencio. Incluso Rayan no esperaba una respuesta como esa.
Se destapó los oídos poco a poco mirando a Chock con ligero asombro.
—Sigues siendo gay para mi. —afirmó Rayan—. Nadie se enamora tanto tiempo del mismo tipo. —mencionó sutilmente refiriéndose a mi.
Chock solo se sonrojo, obviamente sus sentimientos por mi seguían ahí y era el único de la casa que no sabía de mi actual relación.
—Chicos, ¿Por qué no mejor evitamos esta conversación? .—mencione algo inquieto.
Aún cuando esperaba las preguntas de Alexis sobre mi, el solo me sonrió y asintió a mi petición, sabía que Chock sentía cosas por mi, pero sabía que eso no era un problema en nuestra relación. Él realmente ya estaba evitando ser tan compulsivo en estas situaciones y agradecía eso con toda mi alma.
Rayan también entendió la situación y se dispuso a sentarse al lado de Chock.
—Deberiamos aprovechar un poco el día de hoy para disfrutarlo todos juntos.—dijo mientras miraba a Alexis y a mi—. Ya después el fin de semana será libre para ustedes y su "trabajo" .—menciono con repulsión, pero quiso ser sutil para nuestro amigo.
Yo me sonroje y Alexis estaba conforme con la propuesta, a lo que solo atinó a sonreír.
Chock mantuvo su cabeza agachada mientras ponía sus manos entre su rostro. Pero se notaba que sus orejas estaban evidentemente rojas.
—¿No quieren ir al cine, chicos? .—dijo Chock con la voz algo nerviosa sin poder mirarme—. ¿O prefieren ir a mi casa de campo?
Me quedé intrigado y todos miramos a Chock con sorpresa. Excepto por Alexis quien parecía que sabía más del tema.
—¿Tienes casa de campo? .—dijo Rayan acercándose. Chock solo asintió sin levantar la cara—. ¿Podríamos ir ahí a jugar retos, no creen chicos?
Chock sacó la cabeza casi de inmediato. Estaba sonriente, le fascinaba la idea.
Alexis y yo nos miramos para coordinar si estábamos de acuerdo con eso.
—Yo también tengo casa de campo. —murmuro Alexis intentando notar que estaba al mismo nivel que Chock—. Pero mis tíos andan viviendo ahí, así que esta bien si vamos a la tuya, Chock.
Que ambos estén casi en la misma situación se debía a que todos estudiábamos en la misma escuela privada. Ellos eran algo ricos y populares. Aunque rayan se ganó su fama por si mismo y yo, solo era yo.
—Entonces esta decidido. —agregó Rayan—. Compremos unas latas y vayamos para allá.
Rayan se levantó de golpe y Chock le estaba siguiendo el paso, hasta que Alexis tomó del cuello a Rayan y a Chock lo tomó del brazo, jalandolos hacia su dirección.
—Esperen. —afirmó. Haciendo que todos se tensen—. Aún hay cosas por aclarar.
—Alexis... —dije casi quejándome por su actitud.
—Dejame hablar. —mencionó Alexis haciendo que los dos se sienten de nuevo. Yo solo lo miré algo enojado intentando ver que tramaba—. ¿Dónde queda tu casa exactamente, Chock?
"Con que de eso se trataba... " pensé, entendiendo la actitud de Alexis.
Chock sonrió algo avergonzado cuando todos miramos hacia él.
—No queda lejos. —mencionó—. Esta por la playa. Es la zona más preciosa que existe y sin contar la vista y.... —se quedo mudo al notar la cara de intriga de todos, pero continuo—. Es el único lugar que no tiene vecinos... Dios, no me vean tanto. —dijo cubriendose la cara con las manos.
Aún cuando era igual de alto y fornido que Alexis, era excesivamente tímido en lo que respecta.
—Bien, entonces iremos. Esta será una buena reunión de amigos—dije, esperando a que Alexis los soltara de una buena vez—. Suena de maravilla. ¿No creen?
Alexis agitó la cabeza en modo negación.
—Dilan, olvidas algo. —mencionó Alexis girando su cabeza indicandome con ella hacia una mesita que tenía encima la foto de mi madre.
—Oh, Dios. Tienes razón. Necesito pedirle permiso. —mencione dándome un golpecito en la cabeza por la impresión—. Chicos, no se muevan, llamaré a mi mamá, ahora vuelvo.
—Como si pudiera...—dijo Rayan como niño regañado—. Alexis, sueltame. No me iré a ningún lado.
Solté una risa al escuchar eso provenir de la boca de Rayan.
Fuí a la cocina casi corriendo en busca del teléfono de la casa.
Note como apenas me fui ellos comenzaron a platicar casi en susurros, pero estaba más intrigado en lo que diría mi madre que no les presté atención.
Esperaba que mi madre al menos contestara desde la oficina de su trabajo. Ya que no usaba su celular personal en cuanto empezaba su jornada de trabajo.
Marque el número y lo puse en mi oreja, escuchando un pitido y luego la voz de esa técnica robot que menciona las ofertas del mes.
—Contesta... mamá.—dije algo inquieto.
Después del último día en la que casi terminó enterrado, mi madre debía saber a dónde iba, con quienes y con cuantos. Solo para evitar cualquier accidente y no sorprenderse en cuanto vea la casa vacía.
Después de unos minutos sonó y me contestaron.
—Buenas tardes, hospital Santa Cruz. Es Susan al habla. ¿Emergencia o algún incidente? .—se escucho en tono despreocupado del otro lado del teléfono.
Me intente incorporar, poniéndome derecho y hablando directo al grano.
—Hola ma. —dije algo nervioso—. ¿Qué tal el trabajo?
Del otro lado del teléfono mi madre soltó un fuerte suspiro.
—¡¿Estas lastimado de nuevo?! .—gritó de corrido.—. ¿Por qué llamas directo al hospital? .—dijo casi sin aire— ¿Debo mandar una ambulancia hacia allá?
—No, no. Estoy bien. Solo quería pedirte permiso para salir con mis amigos hoy y pasar la noche en casa de campo de uno de ellos. ¿Qué dices? .—mencione algo inquieto. Mi madre sólo alegó a suspirar de tranquilidad.
—Dilan... Se que esto no ha sido lo mejor para ti. Pero salir luego de ese incidente. ¿No temes estar metiéndote en problemas? .—mencionó—. Estoy preocupada por ti.
—Mamá. Estaremos bien. Es solo por hoy. ¿De acuerdo? .—dije intentando sonar seguro—. Te llamaré apenas llegue al lugar y mandaré mi ubicación.
Mi madre suspiró del otro lado del teléfono.
—Tengo la corazonada de que esto acabará mal... —respondió casi inquieta—. Pero esta bien, después de todo no puedo encerrarte toda tu vida en la casa. Ve cariño, espero te diviertas...
—Gracias mamá.
—Si ocurre otro incidente no duden en llamar aquí.
—No te preocupes. Te amo. Adiós. —Dije colgando sin esperar su respuesta, pues ya la estaban llamando del otro lado.
El tiempo era limitado en su trabajo en cuanto a llamadas y necesitaban el teléfono del hospital activo para verdaderas emergencias.
Ya conforme con el echo de que tuve permiso. Di media vuelta hacia los chicos.
Me detuve de golpe al verlos demasiado tranquilos. Rayan estaba con las piernas cerradas y jugando con sus dedos. Mientras que el resto de chicos imitaban la acción.
—¿Paso algo? .—dije entre cerrando los ojos mientras me cruzaba de brazos, intentando descifrar que estaban tramando.
—Nada. —dijeron casi al mismo tiempo.
Chock parecía querer decirme. Tenia los labios sellados, a lo que empezaba a inflar las mejillas mirando de un lado a otro.
Rayan y Alexis querían verse serenos, pero lo miraban casi con odio por si soltaba alguna palabra.
—Chock... —susurre y él me miró con la cara nerviosa—. Si me dices que es lo que traman, te daré una recompensa. .—El solo volteo hacia el piso, se notaba que los estaba pensando—. Que te parece... —agregue mirando a todos lados—. ¿Unas barras de chocolate de esa marca que ya no existe?
Chock volteo enseguida y soltó todo el aire que tenía acumulado.
—¿¡Rica Deca!? .—dijo casi estallando de felicidad. Yo asentía —. ¡Dios, eso ni mis abuelos lo consiguieron! ¿Lo dices enserio?
Me acerqué hasta el estante de la cocina y abrí una de las puertas de esta, sacando una caja de chocolates. Estaba algo pesada y aunque me costaba cargarla aún podía moverme.
Eran míos y aunque en parte me dolía no verlos de nuevo. Seguramente iba a valer la pena entregarlos.
Me acerqué de nuevo a los chicos, quienes ahora sostenían de brazos a Chock. Él solo seguía sonriendo mirando hacia mi dirección.
Cuando me notaron de nuevo, lo soltaron dejando toda su ropa arrugada.
Chock apenas notó la caja, fue corriendo hacia mi y la sostuvo sin problema en su hombro. Después de todo era muy fuerte.
—¿Y bien? .—mencione mientras intentaba ver que me diría Chock—. ¿Qué están planeando ustedes tres?
Chock comenzó a abrir la caja y sacó uno de los chocolates.
Deshaciéndose de la envoltura se puso a comer mientras miraba a todos algo incrédulo.
Todos estaban en un silencio absoluto.
—Alexis... .—dijo Chock mientras seguía comiendo—. Alexis dijo que no le molestaba la idea de la orgía, siempre y cuando ninguno te la metiera.
Alexis y Rayan casi pierden la compostura. En especial Alexis quien abrió los ojos de golpe, parece que esa conversación solo debía mantenerse como un simple chiste. Pero Chock había revelado esa indiscreta información.
—¡Alexis! .—grité. Mirando como su cara se empezaba a poner roja de ira y vergüenza.
—¡Diablos Chock, no se refería a la conversación de Rayan y de mí! .—contesto Alexis tapándose la cara. Tenía la fortuna de tener a Chock en medio mientras ambos platicaban—. ¡No íbamos a cogerte entre los tres! ¡No lo permitiría!. —agregó molesto, y se dirigió a mirar a Chock con molestia—. ¡La conversación de los tres Chock! ¿No recuerdas lo que acordamos? ¡El plan! .—enfatizó quitando sus manos hacia adelante con severidad. Se quedó mudo de nuevo al revelar lo que estaban ocultando.
Ahora Rayan era el único en el asunto, pues miraba a Alexis y a Chock como si hubieran dictado ser culpables todos juntos.
Chock siguió mirando la reacción de Alexis. Parecía que entendía por fin.
—Oh, ¿Hablas del plan A de que si Dilan toma demás lo amarramos a una silla y le tapamos la boca? .—agrego masticando lo último que quedaba del chocolate—. Y del pan B donde le quitamos el alcohol a los tragos, ya que si se emborracha seguramente puede ser un problema. Pero que igual lo íbamos a amarrar por si se negaba ¿Hablas de eso?
Ahora Rayan y Alexis se tensaron. Rayan se quedó en la misma posición que Alexis, tapándose la cara con sus manos.
—¿Qué ustedes qué? .—dije mirando a todos. Estaba atónito.
¿Qué diablos planeaban hacerme? Pensé, mirando a aquellos que debería confiar.
—Tú dile... —mencionó Rayan.
Ahora ambos parecian estar siendo cómplices de un crimen.
—No, hazlo tú. —contesto Alexis mientras su cara no dejaba de seguir roja—. No puedo verlo a la cara después de lo que le dijo Chock.
Luego de un silencio incómodo en la que solo se escuchaba a Chock quitando las envolturas. Rayan decidió tomar compostura del asunto.
—Bien... .—agregó Rayan rompiendo el silencio—. Escucha Dilan. —agregó frotándose el cuello—. Alexis y yo sabemos que el alcohol siempre te hace decir verdades, pero también hace que actúes compulsivamente. .—dijo frotando sus manos y mirándome directamente—. No me gustaría que de un momento a otro, te andes subiendo encima de Chock pensando que es Alexis por el parecido.
—Quee... .—dije enfatizando las última letra. Intentando sonar completamente ofendido—.
Yo nunca sería capaz de- . —antes de terminar de decir algo Rayan me miró incrédulo—. Ay, tienes razón. Lo peor es que lo olvidaría...
—Por eso creíamos que tal vez estaba bien sujetarte con una cuerda. —dijo Alexis sin levantar la cabeza.
Mire a todos casi sin imaginar que planeaban someterme como si fuera un viejo adicto al alcohol.
—Chicos, en alguna parte de su "asombroso plan" .—agregue encomillando mis dedos—. ¿Acaso se les ocurrió preguntarme? Tipo, Dilan solo tomaremos nosotros y a ti te daremos un vaso de leche porque te mareas rápido. —mencione intentando fingir la voz de todos.
Alexis levantó la cabeza y con Rayan compartieron miradas. Eso no se les había ocurrido. Estaba seguro.
Luego de un momento intenso pero rápido de miradas, ambos volvieron a verme.
—Tienes razón... lamentamos esta situación. Debimos pensar en ti también. —dijo Alexis pisándole el pie a Rayan esperando que el también responda por sus actos.
Rayan se quejó y me miró con la misma cara de culpabilidad.
—Perdón... —dijo frotandose el pie.
Ambos como última acción giraron hacia Chock, esperando que el también pida disculpas.
—Oigan yo no sugerí el plan. Yo dije que lo mejor era darle un jugo, pero ustedes quisieron protegerlo como un niño. —dijo Chock sutilmente ofendido—. Igualmente discúlpame Dilan por no decir nada al inicio.
Solté una ligera carcajada. Esto era algo divertido.
Sin decir nada, me acerqué y me senté en medio de ellos. Chock me acompañó dejando la caja a un lado y sentándose al lado de Rayan.
—Vamonos a divertirnos un rato. Olvidemos esto. —mencioné abrazandolos.
Estaba algo feliz de que por fin estén más unidos entre ellos. Aún si eso incluía someterme en una silla, ya los perdonaría con el tiempo.
La intención es lo que cuenta, ¿no?
****
Quede casi perplejo en cuanto llegamos a la playa. La zona era un lugar privado, y si no fuera porque conocían a Chock y a Alexis nos hubieran llevado bajo arresto por allanamiento.
Era como un pequeño departamento de dos pisos y con con enormes ventanas que se abrían en dirección hacia el mar.
Chock tenía razón, la vista era preciosa.
Como amaba la playa y el aire que hacía paso en nuestros alrededores. Hace mucho no sentía esa sensación de paz y serenidad.
Y para disfrutar más de eso cerraba los ojos con más calma.
Nota del autor:
A mi ni me gusta la playa o el mar. No saben el esfuerzo que hice pensando en el lado positivo de ese lugar jsjs
—Si que tenemos amigos que se cagan en dinero. —dijo Rayan dándome un codazo de forma divertida. Yo solo volteé a verlo con una ceja levantada, sabia que estaba pensando en mencionar alguna tontería—. ¿Qué? No les pediré dinero. Pero un par de préstamos no estarían mal.
—Rayan, suenas como un político justo ahora. —dije empujándolo a la arena. El solo sonrió.
Chock al escuchar la conversación se nos acercó y miro a Rayan de forma muy seria.
—Yo no tengo dinero. —dijo Chock obviamente ofendido—. Mis tíos son quienes la tienen. Esto es solo un préstamo.
Eso último lo dijo algo inquieto mirando hacia el sol. Parecía que intentaba evitar detalles del asunto. Yo me incomode un poco y me convencí de no profundizar más, así que me dispuse a ayudar a Rayan a levantarse, sin antes hacerle un ademán de no hacer preguntas innecesarias a Chock.
—¿Nos mostrarias el lugar Chock? .—dije tomándolo del brazo.
Él enseguida estalló en una sonrisa, iluminandose nuevamente mientras sus mejillas se sonrojaban.
Alexis ni se inmutó, solo se dispuso a cargar las botellas de cerveza que estaban metidas en una hielera. Pero pude notar que eso le había molestado, porque enseguida rompió el mango de la hielera. Aún con eso, fue el primero que se metió dentro de aquel lugar cargando las cosas.
—¡Bien, chicos! Les mostraré el lugar. —dijo haciendo un ademán de que todos lo siguiéramos.
Ese lugar tenía tres habitaciones, dos habitaciones en el segundo piso junto con un baño, y la sala estaba en el primero, junto con una cocina y una habitación pasando un pasadizo, y un baño agregado dentro de un clóset.
Todos nos subimos al segundo piso, pues era muy amplio.
Alexis había dejado las botellas de cerveza casi tirandolo y luego me miro con una sonrisa.
Algo malo iba a pasar, estaba seguro que eso no era una buena respuesta.
Chock se sentó en piso de madera mientras hacia palmadas a su costado, para que me sentara junto a él, le hice caso y me senté. Alexis se sentó al otro lado, junto a mi.
Estaba nervioso y no sabía porque.
Rayan abrió la hielera y sacó tres latas de cerveza y un te helado de hierbas.
Le dio una cerveza a cada uno, menos a mi.
Me dio esa bendita lata de hierbas.
—¿Enserio? .—me queje apretando la lata—. ¿Por si acaso no pudiste traerme un abre latas? Este anciano no sabrá cómo abrirla sin ayuda.
Rayan y Alexis me miraron con severidad.
Entendía que habíamos quedado en algo, pero siquiera una lata de gaseosa hubiera sido mejor que esto.
—Ash, no importa. —dije dejando la lata a un lado—. A la próxima busquen algo mejor para beber.
Rayan también nos acompañó sentándose, poniéndose en medio de Alexis y Rayan. Los tres hacíamos un círculo.
Cada uno se miraba entre sí, para saber cuales eran las propuestas para comenzar el juego.
—¿Cuántas latas de cerveza hay? .—pregunte.
—Doce latas. .—dijo Alexis poco confiando. Seguramente pensaba que planeaba beber algo.
—No voy a beber tranquilos. —mencione pensando que podríamos jugar—. ¡Oh, ya se! .—dije emocionado—. Siempre quise jugar esto.
Todos me miraron atentos.
Incluso Chock que ya estaba bebiendo por adelantado, a lo que Rayan le dio un golpe en el hombro mientras abría su lata junto con Alexis.
—Yo nunca nunca... —mencione y enseguida Rayan y Alexis se tensaron—. He prendido fuego a un auto.
Rayan me miró confundido, creo que esperaba una respuesta más fuerte de mi parte.
En el caso de Chock solo dejó su lata en el suelo, esperando con una sonrisa a ser el siguiente en hablar.
Cuando voltee a ver a Alexis, el se puso a beber de una.
Rayan, Chock y yo estábamos sorprendidos.
—¿Qué? .—dijo titubeando mientras se secaba la boca—. Oigan solo era un niño. Paso hace mucho.
—Vaya, lo maniático lo tienes desde siempre al parecer. — se burló Rayan.
Alexis solo hizo una mueca de fastidio.
—Tenia una niñera que me incomodaba por... —hizo una pausa hablando casi a lo bajo, a lo que no escuchamos que dijo— Así que le quemé el auto. —término por decir mientras dejaba la botella en el piso—. Ella no estuvo en el auto. —dijo encongiendose de hombros.
Tenía cierta angustia en preguntar si le preocupaba haberle hecho eso o que si realmente quería dañarla y no pudo como imaginaba.
—¡Bien! .—dijo chock sacando la incomoda conversación de nuestra cabeza, haciendo que voltearamos a verle—. ¡Es mi turno!
—Cuanto a que dice que nunca ha besado a nadie. —dijo Rayan hacia Alexis a lo que el solo soltó una carcajada.
Mire cómo Chock miraba de un lado a otro intentando pensar en que decir, imaginaba que nunca había jugado algo así.
—Yo nunca nunca, he cambiado mi imagen para impresionar a alguien. —dijo mirando de reojo a Rayan. Era evidente que sabía de que hablaba.
Rayan fue el primero en beber algo molesto.
La verdad era que el desde que empezó la secundaria tenía esos ánimos de verse impresionante para las chicas. Eso incluía pesas y perfumes.
Alexis fue el siguiente que bebió de la botella.
Eso sí me había impresionado por lo que me quedé viéndolo.
—Es interesante como tu cara no solo se fija en mi sonrisa. .—dijo Alexis sonriente dirigiéndose hacia mi.
Yo solo me puse a beber del té que tenía en las manos y de golpe tragué con molestia.
Sabia horrible, era algo muy amargo. Mire la etiqueta y mencionaba que tenía más de una hierba que ayudaba en la salud.
Toda esa basura junta sabía feo.
—¿Desde cuándo? .—pregunto Chock algo curioso.
—¿Eh? .—dije mientras dejaba la botella en el piso.
—¿Desde cuándo te planteaste cambiar para impresionar a alguien? .—agrego Chock.
Alexis se puso igual de curioso a mi respuesta.
La verdad yo nunca me arreglaba, era muy lento en la moda del día y no usaba productos para la piel, pero aún así, solía arreglarme el cabello o depilarme las cejas.
—Desde secundaria. —dijo Rayan algo divertido—. Se metió a un gimnasio un par de meses para ganar músculos. Pero no duró tanto en cuanto su cuerpo no mostraba resultados. Era muy flacucho
Realmente quería callarlo de una, pues era vergonzoso que digan eso de mi.
—Baje de peso. —le corregí intentando no verme más tonto—. Al menos me veo atractivo sin echarme un kilo de gel para el pelo. —dije intentando no titubear—. O sin recurrir a mostrar el pecho cada veinte minutos con alguna chica. —termine diciendo muy sonriente.
Rayan se sorprendió, quedando con la boca abierta muy indignado.
—Bueno chicos. —intervino Chock—. Que les parece que si para evitar más problemas, todos nosotros podríamos..
—Es mi turno entonces. —dijo Rayan algo fastidiado—. ¡Yo nunca nunca me he puesto a llorar porque la persona que me gustaba fue de fiesta en el extranjero!
Yo bebí de mi lata con severo fastidio y lo rete con la mirada.
—Bien.. creo que ya es mi turno. —intervino Alexis intentando ver la situación de forma divertida.
Me levanté de golpe para mirar a Rayan. Sin dejar que Alexis. terminara de hablar.
—¡Yo nunca nunca he besado a la mejor amiga de mi novia solo para saber si eran hermanas! ¡Pedazo de idiota!
Rayan se levantó de igual forma y comenzó a beber con agresividad.
Para luego dirigirse hacia mi con enojo. Estábamos cruzando límites de confidencialidad.
—¡Sabes que! ¡Yo nunca nunca he sufrido y llorado en silencio estando enamorado de alguien que nunca me ha correspondió!
La habitación se quedó en silencio. Rayan no había formulado bien su pregunta. Pues yo ya había sido correspondido por Alexis desde hace un tiempo.
—Yo creo que no lo pensé bien. —dijo Rayan intentado volver a sentarse.
Alexis solo me sujetó intentado que me sentara de nuevo.
A lo que Rayan me miró entendiendo que ya era hora de parar, pues habíamos venido a divertirnos, así que intentamos cada quien, calmarse.
Aunque mientras intentabamos volver a tener compostura, escuchamos como bebían desesperadamente de una de las latas.
Chock terminando su botellas la dejo aún lado. Y sin decir nada se acercó a la hielera y agarró seis latas más a las que una a una fueron acabadas con rapidez.
—Hey, Chock. —dijo Rayan apartando algunas latas— El juego terminó. —agregó algo incómodo —. Se suponía que solo íbamos a tomar un poco.
Chock apenas terminó una de las latas, se levantó, agachando la cabeza mientras sostenía las tres latas que aún no había abierto.
—Lo siento... —dijo con la voz echa un nudo—. Iré a la cocina a por más tragos, chicos.
Enseguida levanto el rostro muy sonriente. Mientras se marchaba muy energético abriendo la puerta de la habitación y cerrandola de nuevo detrás de si mismo.
Apenas escuchamos que había dejado la habitación por los pasos en las escaleras, nos dispusimos a hablar.
—Vaya... .—dije algo triste—. ¿Crees que él estará bien? .—mencione dirigiendome hacia Rayan.
—Yo que sé. Ese no es mi problema. —contesto Rayan tomando lo que quedaba de su lata—. Ve a consolarlo si quieres.
Alexis me sujetó y me hizo sentar en sus piernas mientras miraba a Rayan con molestia.
—Él que lo hizo sentir mal, fuiste tú por no pensar bien en que decir. —pronuncio Alexis dirigiéndose a Rayan—. Siquiera ve a ver si no le da un coma por meterse tantas latas.
—¡Pero soy un asco consolando gente que no sea Dilan! .—contesto casi gritando—. Y creo que para ni eso sirvo.
—Rayan... —dije intentando que el haga caso a mi sugerencia—. No puedo ir yo porque eso solo le dará expectativas altas.—dije casi rogando—. Por favor solo inténtalo.
Rayan me miró seriamente y mirando a otro lado solo aplastó su lata y la tiró al suelo. Levantándose de nuevo, aún cuando hace un instante se había sentado por fin.
—Bien. Pero si lo empeoró no me lo saques a la cara. —mencionó apuntandome con el dedo mientras abría la puerta con fastidio. Pero antes de irse volteo hacia mi y Alexis—. Y Dilan, no hagan nada sucio en casa ajena. Esto no es el campamento.
Y sin más, cerró la puerta casi asotandola.
Nota del autor: Desde aquí lo narrará Rayan para que sepan bien el chismesito que está por venir.
¿Por qué diablos debo consolarlo solo porque ande enamorado de Dilan? Pensé.
Ese idiota ya me había generado molestias desde que llegó.
Intentaba ser amable con él hasta el final del día para no verlo nunca más, ya que se iba a acabar el año y dijo que se iría tal y como prometió, pero no esperaba que tuviera que andar de niñero tras de él.
Empecé a bajar las escaleras intentando encontrarlo con la mirada.
—¡Chock! —grité a lo bajo intentando que me contestara.
Como la cocina estaba cerca a la escalera me dirigí a ver hacia ella.
Lo único que noté fue un vaso roto y trozos de vidrio caídos. Y la pequeña nevera estaba abierta.
¿Qué mierda acaba de pasar? Pensé mirando el ligero desorden.
Dirige mi mirada hacia la sala y solo estaba la televisión prendida en un canal de noticias.
Esto parece una muy horrible película de terror... Una en la que uno murió.
Rodee los ojos algo molesto.
—Diablos... —dije mientras estiraba mi cara con fastidio—. Más le vale no estar muerto o nos correrán a todos de aquí.
Me acerqué a la sala y me dirigí al pasadizo y abrí la puerta, había una habitación extra que nos había mostrado Chock al inicio del recorrido.
Estaba esperando que capaz ese tipo aparezca ahí dentro tumbado en la cama, pero nada. La habitación estaba vacía.
Realmente me estaba preocupando un poco, si este tipo se fue a morir esto sería un grave problema.
Mire a todos lados intentado entender dónde diablos se escondía.
Mire de bajo de la cama y en la ventana por si hubiesen habido cuerdas para salir del lugar como un prófugo.
Realmente me estaba rindiendo.
Hasta que decidí patear al aire y me topé con una lata vacía.
Luego note que habían un par de latas más a un lado del armario.
Recordé que el idiota ese nos había explicado sobre el detalle del armario.
Imagine que estaba metido en el baño de adentro.
Así que abrí la puerta del armario.
El baño era algo grande.
Por lo que no lo note a primera vista.
El rastro de botellas ahora estaban cerca a la tina, donde escuché sollozos y note como una botella de cerveza caía rodando hacia mis pies.
Era evidente que estaba metido en la tina del baño.
Por lo que me acerqué a deslizar la cortina.
El escenario era algo agrio.
Realmente siempre le había deseado el mal a esta persona a cada instancia de su vida. Pero verlo ahí con los pies cerca a estómago sosteniéndose de si mismo para no derrumbarse;y con la mirada perdida y con los ojos y cara rojos he hinchados de tanto llorar. Diablos, este sujeto la estaba pasando fatal.
—Chock... —dije tocandole el hombro. Él solo puso su cabeza sobre uno de sus brazos.
—¿Vienes a burlarte de mi? .—respondió con la voz casi irreconocible.
Estaba algo molesto ante su respuesta, pues no planeaba quedarme a darle un discurso emotivo, pero la verdad intenté respirar hondo y comprender la situación.
—Se que estas así por Dilan. —mencione y enseguida el se sostuvo con fuerza y comenzó a llorar de forma muy baja.
Realmente no sabía que hacer. Miraba a todos lados intentado buscar una respuesta.
—Escuchame. Se que esto duele. Duele demasiado, pero... —dije intentando pensar en alguna frase que haya escuchado en internet—. Puedes ver a otras personas, él no es el único en el mundo. Si el te ha rechazado, lo mejor sería gustar de otra persona.
Él siguió en su llanto, esta vez sosteniendo su boca para no gritar.
Me senté a su lado pensando en algún método de alivio.
Mire la botella de cerveza que había bebido y tomé un poco de ella.
Él se cubrió la cara y aún llorando hizo señas de que le pasara la botella. Se la pasé sin problema, mirando de que no planteara tirarmelo.
Bebiendo con dificultad intento incorporarse de nuevo.
Esta vez parecía listo de decir algo.
—Se que esto me hace daño... . —dijo destapando sus manos de su cara. Mostrando un semblante completamente roto.—. ...Pero lo amo.
Yo no sabía que decirle. Esto realmente estaba traspasando mis límites de entendimiento.
—Chock. .—dije frotando mi cuello—. ¿No deseas hablar de esto?
Él solo volteo a verme con una sonrisa.
—¿Cómo se que no lo usarás para burlarte después?
Tenía un punto, yo si era capaz de hacerlo. Pero no era momento para sinceridad.
—Bien, si no quieres hablarlo. No hay problema. —respondi fingiendo estar ofendido—. ¿O al menos un abrazo estaría bien?
Él no dijo nada, solo miro sus rodillas. Supongo que estaba pensando seriamente de que decía la verdad.
—Si, estaría bien. —dijo haciendo espacio en la tina.
Me acerqué a él.
Era algo incómodo el espacio. Pero abrí los brazos para que el se recostara en mi hombro.
Estaba preparándome mentalmente para esto, pues la persona que odiaba ahora estaría llorando en mi hombro. Intente imaginar que se trataba de Dilan.
El aunque éramos de misma altura que yo se acercó, se recostó en mi hombro.
Empezó sollozando débilmente y luego siguió a casi gritar de dolor.
Intente darle palmaditas en la espalda esperando que eso hiciera alguna diferencia.
—¿Hay algo de malo en mi? .—dijo mientras un llanto le acompañaba.
—No, eres muy atractivo para las chicas y algunos chicos por alguna razón. —respondi mientras le acariciaba la cabeza. Por dentro me estaba muriendo, esto no era parte de mis planes. Él solo siguió llorando—. ¡Pero hey! Calma, eres más que eso, tienes una gran personalidad.
Él solo siguió el llando. No sabía cómo liderar con esto.
Supongo que no me quedaba más que otra que escucharlo mientras estaba en silencio.
—Dilan... —dijo con un sollozo mientras su voz sonaba un poco más clara—. Él era lindo cuando era un niño. —dijo casi en un susurro, pero al estar cerca de mi, lo lograba escuchar—. Él me acompañó cuando mi padre murió... pues la verdad mi familia se caía a pedazos desde que nací.
Yo acaricie su cabeza. Esta vez estaba teniendo una perspectiva diferente sobre el asunto.
—Cuando me fui de aquí luego del fallecimiento de mi padre, prometí volver a aquí, para encontrar a mi amigo. —se sostuvo de mi por un instante, pero luego se soltó—. Pero él había cambiado. Su forma de ser... él se volvió hermoso para mí. Su sonrisa se volvió algo que me hizo darme una razón de vivir.
Empezó a sostenerse nuevo esta vez su fuerza empezó a hacer aparición.
—Hace un tiempo perdí a mi madre... —dijo mientras su voz se volvía a quebrar—. Y yo tengo que irme a la ciudad, pero no quiero irme, él es lo único que existe ahora... Quiero quedarme con él... —dijo sollozando.
Antes de abrir la boca, el solo siguió llorando con pena.
—Él no me ama... lo sé. —agregó mientras se soltaba de mí.
Agacho la cabeza mientras sostenía la botella que tenía entre sus manos. Al rato escuché algo crujir. Y antes de pensar siquiera, le quité la botella.
La mire y esta estaba agrietada.
El tipo si que era fuerte cuando estaba en tan mal estado.
—Escucha, Chock. —mencione y el solo se encorvo mientras sostenía su rostro con las manos.—. Se ninguna mierda de lo que diga te hará pensar diferente. Pues al único que escuchas es a Dilan.
Él solo se quitó las manos del rostro mientras me miraba de reojo.
—¿Por qué diablos te lamentas? Hay gente tan maravillosa como tú en todo el mundo. —dije apuntandolo—. Se que nadie será como Dilan, pero no digo que busques a alguien parecido. Sino que encuentres a alguien que de verdad te valore. Si Dilan no ve quién eres enrealidad, es un idiota y si que lo es. Pero es hora de que te levantes y sientes cabeza sin importar que pase. Disfruta lo que queda del día, porque mañana no habrá un después. ¡Yo viviré mi infierno, tu el tuyo y así sucesivamente! Igualmente al final del día alguien maravilloso llegará, así como tú en la vida de Dilan.
Él solo me miró sorprendido y algo incrédulo ante lo que dije.
Pues después de tanto insulto y golpe, él no creía que fuese capaz de pensar algo positivo sobre él.
Sonrío de reojo mientras se limpiaba las lágrimas con su camisa.
—¿Soy tan maravilloso como dices? .—dijo mientras comenzaba a soltar una risita.
—Oh, vamos, espero esto no se te suba a la cabeza. —mencione cruzandome de brazos.
—¿Y qué hay de lo atractivo? .—agrego levantándose mientras comenzaba a reír—. ¿También lo soy para ti?
—¡Entonces si me escuchabas bastardo! .—grite mientras le daba un empujón, sonriendo mientras el se resbalava.
Antes de hacer algo Chock se cayó al piso y en vez de agarrar las cortinas se sostuvo de mi. Haciéndonos caer al mismo tiempo.
—¿Esto se suponía que era parte de tu plan de consuelo? .—escuchamos de fondo.
Me levanté de a pocos encima de Chock, él sólo se había tapado el rostro, imaginaba que no quería que nos diéramos un cabezazo.
Cuando distinguía bien de quién se trataba. Era Dilan.
Él estaba con la polera de Alexis y estaba más que rojo. Estaba seguro que los idiotas habían aprovechado para revolcarse en el piso.
—Maldita sea Dilan, ¿qué te dije? .—agregue levantándome de Chock, quien al oír el nombre de Dilan me empujó de nuevo hacia la tina.
Chock se metió dentro sin importarle que yo intentaba salir, y deslizó las cortinas.
—¿Qué crees que haces? .—le susurre molestó—. Harás que Dilan crea que andamos de teniendo sexo.
Chock al oír eso, volteo a verme sonrojado, era la primera vez que se ponía de esa forma.
Parecía que hasta se le había olvidado que decir.
—Yo solo.... no quería que Dilan me viera con esta cara. —dijo titubeante—. Yo... este... no sabía que la situación se veía de esa forma.
Menciono mientras se alzaba la camisa. Ahora se la estaba quitando.
Él tipo estaba más en forma que yo. Ahora estaba molesto, no sabía si quería competir o algo parecido, pero lo que sea que planeara, me irritaba ahora.
—Diablos, ¿Ahora qué haces exhibicionista? .—dije quejándome—. Un poco más y me muestras los huevos.
Cuando terminó de quitarse la camisa dio un brinco de impresión ante mi comentario.
Por alguna extraña razón sus reacciones me parecían divertidas.
Se me acercó apenado con la camisa entre las manos sin decirme nada.
—No te me acerques o te pateo. —amenace. Aunque antes haya terminado en el tópico no iba a perder contra alguien más suave que Alexis—. ¡No, no, no!
De un salto salí de la tina y note como Dilan estaba en un estado de confusión máxima.
—Aquí entre nos, tú te vez más como activo. —dijo Dilan intentando hacer la situación más agradable, pero eso solo me enojo.
—Solo no hables. —dije mientras miraba la ropa con la que venia—. Él tipo de allá se puso como loco .—dije moviendo mis brazos de un lado a otro—. Y yo realmente estoy cansado de juntarme con tus amigos homosexuales.
Dilan se notó obviamente ofendido, pero antes de decirme algo, comenzo a gritar acercándose a agarrar mi brazo.
—¡Estas herido! .—gritó mientras su rostro de pena volvía a enojo—. ¡Prometiste que no se harían daño!
—Pero no nos peleamos... .—dije mirando hacia mi brazo.
Ahí fue cuando note que tenía un corte en el brazo
Y no fue hasta que lo vi que empecé a sentir algo de ardor y picazón.
Resulta que cuando caímos Chock y yo al piso, me tropecé encima de la botella, donde mi brazo aplastó el vidrio, dejándome un corte.
No era muy grave, pero era lo suficientemente grande como para generar molestias.
—Fue un accidente. —dije mientras recordé que Chock se había quitado su camisa, acercándose a mi con ella entre sus manos—. Él solo quiso ayudarme al parecer.
—¿De verdad? .—dijo algo incrédulo.
Ahora le debía una disculpa a Chock, pero no podía dejar que Dilan viera que ando con corazón de pollo enfrente de él.
—Es la verdad. Por favor déjanos solos. —Dilan solo me miró sorprendido—. ¡Para hablar! .—grite—. Mierda, no todo en esta vida es romance o sexo. Necesito ayudarlo con los problemas que tiene ahora. Por favor sube arriba, prometo que todo esta bien.
Dilan sin decirme nada se dirigió hacia la puerta y la cerró detrás de ella.
Voltee hacia Chock quien solo deslizó las cortinas en cuanto escuchó más lejos a Dilan. Aún seguía con su camisa entre sus manos y con el torso desnudo.
—Oye... lo siento. —dijo
frotándose los brazos—. Nunca quise arruinarte este año.
—Gracias. —dije mientras me acercaba a él.
—¿Eh? ¿No estás molesto?.—consulto entrecerrando sus ojos.
Solo me acerqué y le preste mi abrigo que tenía conmigo.
Él se lo puso algo confundido mientras me entregaba su camisa.
—Ya sufriste suficiente. —comente mientras mientras iba hacia el lavamanos a limpiarme la herida—. Aprovechemos el verano, amigo.
Él instintivamente comenzó a sonreír y luego a sollozar.
Esta vez parecía que estaba más feliz que triste.
Salió de la tina y aún cuando me estaba limpiando el brazo, llegó hacia a mi y me abrazó.
No quería quejarme, tenía que darle al menos unos minutos para que disfrutara la situación.
Aún cuando olía a alcohol, su perfume caro andaba opacando ese mal olor.
Eramos de la misma altura así que solo recargue mi cabeza en su cuello, esperando a que se sienta conforme, pero mientras tanto le daba palmaditas en la espalda.
—Si me voy, al menos podré saber que te tengo a ti. —dijo Chock con la voz algo quebrada.
Un hueco empezó a crecer en mi pecho, sentí culpa al instante.
Se que hablaba de ser amigos, pero sentí que sus palabras se sentían diferente en mi cabeza.
Sentí extrañeza. Supongo que estaba acostumbrado a sentirme necesitado por Dilan y ahora, de alguna extraña forma también por Chock.
—Vendré a visitarte, amigo. —dijo Chock separándose. Yo solo me quedé congelado.
Otra vez estaba pasando.
El único problema con el que lideaba diariamente y la razón de porque no tenía tantos amigos. Me gustaba cuando dependían de mí como una esperanza.
A Dilan ya lo había perdido en cuanto Alexis entró a su vida de modo de relación; pero si lo pensaba bien, ahora Chock necesitaba a alguien porque estaba solo, ese alguien podía ser yo.
Sabia que esto sería un problema tarde o temprano, pero lastimosamente mi familia nunca quiso que fuera a terapia.
Me quedé pensando vagamente en mis problemas intrafamiliares, hasta que note que Chock se lavaba la cara y se dirigía hacia la puerta.
—¡Espera!. —grite sosteniéndolo, alzando el brazo que estaba herido.
Él se volteo algo confundido.
Haciendo una mueca de sorpresa.
Me puse incómodamente nervioso, y solo pensé en alguna idea rápida. Me sostuve del brazo y finji dolor a lo que Chock se me acercó preocupado.
—¿Es mi culpa, verdad? .—dijo algo apenado. Mientras sostenía mi brazo.
"Yo fui quien lo pateó y él se siente mal". Pensé algo divertido.
—Hey estamos a mano si me ayudas. Es todo. —dije mientras veía como ayudaba a limpiar la herida.
Realmente tenía que decirle algo.
—Dijiste que te irías a la ciudad, ¿verdad? .—comente intentando ocultar mi sonrisa.
Él solo respiró profundo.
—No hablemos de eso ahora. —mencionó rebuscando en una mesita que estaba en un rincón del baño—. Que seamos amigos ahora de verdad, no significa que me sienta bien de hablar de ciertos temas.
Su voz animada y casi infantil se convirtió en una seria. Un semblante diferente de alguien a quien comparaba con Winnie Pooh, grande y inocente.
—Lo que quería decirte .—mencione mirando como sacaba una vendas y se acercaba hacia mi—. Era sobre que...
—Dijiste que sufrí demasiado, por favor hablemos de otra cosa. Tengo hasta hoy día nomas. —comentó seriamente mientras vendaba mi brazo.
Crugi los dientes, esto debía ser una maldita broma.
Este tipo estaba haciéndose el honorable aún cuando quería darle opciones.
Así que simplemente lo mencioné de corrido con molestia entre mis palabras.
—¡Iré a vivir a la ciudad, porque la universidad a la que quiero ir está ahí!
Chock al terminar volteo a verme. Su semblante serio se fue desvaneciendo.
—¿Enserio? .—dijo incrédulo.
—Así es. —mencione casi confiado—. Así que tendremos que aguantarnos por mucho más de lo que crees.
Él solo se me abalanzó en un abrazo.
Podía simplemente visualizar que una sonrisa estaba dibujada en su rostro.
—Creí que eras lo peor de este mundo, pero ahora me alegra tener el tiempo de poder verte.
Esto era divertido.
Si ahora íbamos a ser amigos de verdad las bromas no iban a estar demás.
—Ajá, yo también te amo. —dije burlón mientras lo apartaba.
Note como su sonrisa se disipaba y mostraba una de sorpresa.
Su cara estaba sonrojada.
—Hey, es solo una broma. Tomalo más a la ligera, desde ahora estaremos pasando más tiempo de calidad. —dije mientras mi cara de desagrado aparecia—. Vaya que nunca pensé en esto, pero ahora tendremos que hablar más sobre nuestros intereses. —mencione encongiendome de hombros—. Todo sea para conocernos mejor y llevarnos bien. Aunque tomará mucho tiempo. —agregue mientras habría la puerta—. Hay que irnos, seguramente los chicos deben estar divirtiéndose sin nosotros.
Chock solo me devolvió una sonrisa mientras miraba el piso. Su cara hinchada ya no lo estaba más y ya ni parecía haber llorado, pero aún así agachaba la cabeza.
Antes de dar un paso más. Me detuve. Haciendo que Chock chocara conmigo.
Me volteé para tocarle el pecho, eso lo sorprendió a lo que solo se puso rojo. Este tipo era realmente extraño.
Aunque lo único que pensaba era que seguramente Dilan se encontraba en una situación comprometedora.
—Mejor quedate aquí. —dije intentando ocultar mi enojo—. Veré si los chicos no hicieron un desorden arriba. Si no hay ningún problema, te llamaré, ¿de acuerdo?
Chock solo trago saliva asintiendo.
Me retiré cerrando la puerta detrás de mi mientras escuchaba como Chock susurraba algo a lo bajo.
***
Estaba enfado.
Esos dos hicieron un desorden enorme. Y ni que contar las cosas que ví en cuanto entre a la habitación.
Jamás me quitaré esa imagen de mi mejor amigo siendo sometido.
Tenía suerte que Chock no podía oír nada desde donde estaba. Porque sino toda su infancia moriría.
Crugia los dientes mientras escuchaba a Alexis darme su versión del caso.
No saben lo incómodo que es oír de la boca de otra persona que mi amigo es demasiado sexy cuando se agacha.
Quisiera golpearlo, pero luego de lo que pasó la última vez solo me quedaba gritarle intentado hacerle entender que un maldito aprovechado y que debería buscar un hotel.
Nota del autor: De nuevo volvemos a la narración habitual de Dilan.
Me sentía avergonzado y como un niño regañado estaba a un rincón.
Aunque estaba más enojado con Alexis por dejarme seducir por sus encantos.
Y hablando de él, Alexis solo estaba discutiendo con Rayan sobre los que pasó en la habitación mientras que yo solo me intentaba parar para hablar más seriamente sobre el asunto, pero no duró mucho pues caí al piso rápidamente.
Otra vez, demasiado rudo.
Alexis se giró a ver si estaba bien y yo solo le sonreía.
—¿No pueden estar calmados la próxima vez? .—dijo Rayan obviamente fastidiado—. Por suerte ya tienen los pantalones puestos y sus respectivas ropas.
Quise quejarme por su actuar. Pero enseguida el idiota de Rayan me hace callar con la mirada.
—Llamare a Chock y más les vale que no haya ningún otro rastro de semen en la habitación. —sostuvo con molestia mientras se dirigía a la puerta y se iba a donde estaba Chock.
—La próxima vez, lo haremos un montón de veces en mi casa y si es posible en la piscina. —dijo Alexis sonriendo picaramente.
Yo solo lo patee. No tenía ni una pizca de vergüenza por hacerlo en casa ajena.
—Yo también te amo, gatita. —dijo algo adolorido.
Lo miré con ira contenida y luego volteé hacia otro lado cruzado de brazos.
Al rato de un momento escuchamos pasos de algunas personas subiendo la escalera. Era evidente de quienes se trataba.
En cuanto Rayan abrio la puerta, mostró a Chock quien saludaba con la misma felicidad que antes, estaba más que destellando con una sonrisa.
Note de reojo que traía el abrigo de Rayan. Eso era nuevo.
Alexis quien me estaba acompañando arrodillandose, se levantó de golpe.
—Debes estar bromeando. ¿Tuviste sexo con él? .—dijo Alexis obviamente enfadado—. ¿Por eso te quejaste con nosotros? ¿Para ocultar las cosas que hiciste?
Chock quien estaba sonriente, enseguida se puso a sonrojar.
—¡¿Por qué diablos piensas algo como eso?! .—grito Rayan obviamente indignado.
—El trae tu chompa. —exclamó Alexis—. ¡Dudo que el de cabeza fría hayas sido tú, así que lo más probable es que tu fuiste el que dio el trasero primero!
Rayan se indignó.
—¿Qué mierda pasa contigo? .—gritó Rayan—. ¡¿Por qué diablos imaginas que sería el de abajo?!
Esto era algo demasiado divertido.
Nunca pensé ver a Rayan quejarse por la posición en la que iba a estar en una relación.
—¡Chock podrá ser grande y adorable como un peluche, pero es obvio que un salvaje si te agarra! .—dijo Alexis.
Estaban debatiendo de una forma ridícula.
Chock solo se sentó en silencio mientras su cara parecía arder.
Me acerqué a él para intentar calmarlo.
—Hey, calma. Solo están jugando. —dije dando palmaditas a Chock, quien me miró algo sorprendido.
—Perdón, pensé que eras Rayan. —dijo mientras miraba el piso—.
Ahora él y yo somos buenos amigos. —agregó eso último con esa sonrisa mientras se iluminaba nuevamente aún cuando se oía a Rayan y Alexis debatir de fondo.
—Diablos pierdete. —dijo a lo último Rayan, ya algo cansado—. Simplemente me cedio su camisa para limpiar mi sangre y se quedó sin ropa. Y le preste mi chompa. Él y yo solo somos amigos.
Alexis sonrió con malicia.
—Oh, si. Amigos. —mencionó haciendo un ademán muy sugerente metiendo su dedo de entre un círculo—. Amigos demasiado íntimos.
Rayan solo enfureció pero ya estaba harto de pelear por lo que simplemente se sentó al lado de Chock, quien al notar su presencia levanto la cabeza y sonrió.
Antes Chock solo se ponía amistoso conmigo, pero parecía que de verdad estaba siendo diferente con Rayan.
Todo parecía estar diferente ahora.
Me acerqué a Rayan y lo abracé.
—No me toques.. no sé que habrás hecho con esas manos. —dijo algo incómodo intentando dibujar una sonrisa en su cara.
Yo solo me comencé a reír.
Mientras lo molestaba con más abrazos.
Chock hizo lo mismo y se puso a abrazar a Rayan.
Luego Alexis se acercó y me abrazó.
Estábamos unos minutos juntos, disfrutando de la compañía del otro.
—Chicos, me voy a quedar sin aire. —dijo Rayan intentando moverse.
—Cállate, pronto iremos a la universidad y quien sabe que deparará el futuro para nosotros. .—dije sujetándolo de la polera que tenía—. Hay que seguir disfrutando de estar un momento más así.
—¡Si! .—dijo Chock pegándose más a Rayan.
De un momento a otro el abrazo se estaba volviendo más pesado por lo que me tuve que mover.
Note como Chock seguía pegado a Rayan. Y aunque evidentemente estaba incómodo, aceptaba el abrazo cerrando los ojos. Aún no podía creer cuanto habían progresado juntos.
—¿Crees que deberíamos dejarlos solos?.—bromeó Alexis.
Yo solo me reía mientras le negaba con la cabeza.
Pero de inmediato el estómago de Rayan comenzaba a gruñir.
La verdad ya estaba anocheciendo y aún no habíamos cenado.
—¿Pedimos una pizza?.—dijo Chock mientras miraba a Rayan con necesidad de aprobación.
Eso sí que era nuevo.
—Mejor hay que pedir un buffet. —aprovecho a decir Rayan algo divertido.
—Rayan... —dije mientras lo juzgaba con la mirada.
—¿De qué sirve tener un amigo con dinero si no te puedes aprovechar de él? —bromeo Rayan mientras Chock se alejaba para darle un codazo, pero de inmediato volviendolo a abrazar.
Alexis se paró para hacer una llamada al repartidor mientras Rayan y Chock lo seguían gritándole como querían su porción.
Creo que estaba disfrutando de esta situación.
Un momento más de amigos. Un último día antes se separarnos.
El último día de felicidad antes del desastre...
Porque digamos que finales felices no existen.
Y menos aquí.
Todos sonreímos sin saber que lo peor aún no llegaba.
Disfrutemos mientras podamos, ¿no?.
—¡Ayudame Dilan! .—gritó Rayan en cuánto Alexis y Chock lo comenzaron a sujetar—. ¡No quieren que pida pizza con piña!
Yo solo solté una carcajada.
"Inolvidable" pensé, mientras iba hacia ellos.
Nota del autor:
Muy buenos días, tardes o noches.
Ya le di un final a esta historia la cual ha avanzado mucho conmigo.
Se que habrán posibles errores, pero digamos que la prisa me hizo dejar de lado esos pequeños detalles.
Empecé esto como una simple experimentación, y la verdad nunca pensé que llegaría a interesar a más de una persona.
Hice esto a los 14 años y ya actualmente tengo 19.
Como pasa el tiempo, ¿eh?
Realmente no sé esto habrá cubierto sus dudas como quisieran o quitado esas intrigas.
Ya que en lo personal, yo necesitaba dejar ir esto de una vez por todas. Todo inicio tiene un final. Y como esta fue mi primera historia, quería concluirla.
Aún no se si esto tendrá continuación en cuanto a Rayan y Chock. Pero cualquier detalle (aunque tarde años) planeo volver para hablar sobre eso.
Actualmente como notarán no soy muy activo por este medio, pues me dediqué a mi verdadera afición, que es dibujar.
Tengo cuenta de Instagram por si desean seguirme.
@Zombie_paint
Realmente agradezco todo el apoyo hasta ahora.
Enserio no saben lo feliz que me hizo que algunas personas lo hayan seguido leyendo, pues es una de las principales razones de porque volví a escribir este final.
Les dejo mis dibujitos actuales sobre cada personaje.
Nos leemos pronto. Cuídense. Los amo.
Alexis:
Rayan:
Chock: (ahora con pequitas)