Las Mazmorras, 06 de Abril de 2023:
-Te quieres apurar, Kunzite.-Decía una joven pelinegra bastante nerviosa.-Sabes que si nos descubren nos van a expulsar y nuestros padres nos mataran.-Agregó la chica mirando el oscuro pasillo por si alguien se aproximaba.
-Tranquilízate Esmerald, nadie nos descubrirá.-Le respondió Kunzite, una joven rubia de ojos azules.-¿Dónde demonios están los cabellos de unicornio?-Preguntó histérica mirando el armario del profesor de pociones.
-Los encontré.-Gritó una chica rubia con mechones verdes saltando de alegría.
-Cállate, Onyx.-Le susurraron las otras.
-Perdón.-Se disculpó Onyx soltando una suave risita.
Sus amigas rodaron los ojos, Onyx nunca cambiaría.
-¿Por qué Amethyst no fue a la reunión?-Preguntó Esmerald un poco extrañada al no haber visto a su amiga.
-Porque tenía...-Comenzó Onyx pero no pudo terminar la frase ya que el maullido de una gata negra atrajo su atención y la de sus amigas.
-¿Hay alguien ahí, preciosa?-Se escuchó la voz áspera del conserje y segundos después el ruido que hacían sus zapatos al chocar con el piso.
-¡Demonios!-Maldijo Kunzite cerrando el armario suavemente y conjurando el hechizo que tenía antes de que ellas llegaran.
-Vamos.-Les susurró Esmerald a sus amigas caminando hacia el lado contrario al que el hombre se dirigía, las tres caminaron sin hacer ruido y al dejar de escuchar las pisadas comenzaron a correr en dirección al séptimo piso.
El camino se les hizo un poco difícil ya que Peeves estaba haciendo de las suyas en los pasillos llamando la atención de los prefectos que tenían ronda en ese lugar, en conclusión estuvieron escondidas esperando unos 20 minutos para poder pasar.
Después de eso les tomó otros minutos llegar al retrato de Bárnabas el Chiflado, Onyx abrió la puerta de la sala de menesteres y las tres jovencitas entraron encontrándose con cinco chicas que las esperaban.
-¿Los consiguieron?-Preguntó una joven castaña de ojos verdes que estaba acostada en el piso, ella respondía al apodo de Aquamarine.
-Si.-Contestó Esmerald apoyando su cabeza en las piernas de la castaña y luego agregó.-Pero Aníbal casi nos atrapa con esa estúpida gata que tiene.
-Al parecer a todos los conserjes de Hogwarts le gustan los gatos.-Comentó una pelirroja distraída.-Papá me dijo que el antiguo conserje, creo que se llamaba Filch, tenía una gata con la que se casó y tuvo muchos hijitos.-Siguió la joven logrando que sus amigas se rieran.
-Pero tu tienes una mala relación con tu papá-Aseguró Kunzite extrañada al escuchar lo que había dicho su amiga.
-Así es pero eso lo dijo cuando yo tenía 5 años.-Respondió la pelirroja a la que llamaban Topaz.
-Antes de que entraras en Slytherin y nos conocieras a nosotras.-Siguió Aquamarine.
-Exacto.-Confirmó la chica mirando a Kunzite y Onyx sentarse en el sofá.-Mi vida cambio completamente.-Dijo Topaz con una leve sonrisa.
-¿Para bien o para mal?-Preguntó una pelimorada apodada Fire Opal.
-Obviamente para bien.-Aseguró la pelirroja.-Además si no hubiera entrado en Slytherin jamás las hubiera conocido y Las Precious Stones no existirían.-Contestó Topaz mirando a sus amigas con una hermosa sonrisa.
-Cierto.-Concedió Fire Opal abrazando a Topaz mientras sus amigas sonreían.-Siempre supe que tus familiares eran idiotas pero ese día descubrí hasta que punto.-Sus amigas soltaron una carcajada incluida la pelirroja.
-Igual los extraño después de todo son mi familia...-Una pequeña lágrima rodó por la mejilla de Topaz.
Fire Opal que estaba más cerca la volvió a abrazar, sus amigas se miraron entre sí, ellas sabían que no podrían sobrevivir ni un solo día separadas de sus padres.
-...Pero mis padrinos me han ayudado mucho.-Siguió Topaz separándose de Fire Opal y tratando de sonreír.-Además las tengo a ustedes.
-Y nunca te dejáremos sola.-Aseguró Kunzite siendo apoyada por sus demás amigas.
-Gracias, hermosas.-Les agradeció Topaz sonriendo.-Las quiero mucho.
-Nosotras también te queremos mucho, Topaz.-Dijo la voz de una joven desde la puerta, todas voltearon y se encontraron con Amethyst, una chica rubia bastante guapa.
Topaz le sonrió.
-¿Tu no deberías estar tirando con Liam?-Le preguntó su prima, Diamond, con una sonrisa pervertida.
-Debería pero Scorpius y Aarón lo fueron a buscar porque McGonagall necesitaba hablar con Los Wolfs.-Dijo Amethyst fastidiada acostándose en un sillón y cerrando los ojos preguntó.-¿Consiguieron los ingredientes que faltaban para la poción?
-Si.-Contestó Ruby que había estado callada, se paró y fue a buscar las cosas que faltaban, ninguna sabía si la poción funcionaría pero lo iban a intentar.-Aquí esta todo.-Ruby dejó las cosas en el piso y sus amigas se sentaron en este formando un gran círculo.
-Bien, comenzemos.-Dijo Onyx recibiendo un asentimiento por parte de sus amigas.
Estuvieron unas dos horas realizando esa poción hasta que finalmente lo lograron, ahora la pregunta era si funcionaba o no.
-Bien esto ya esta listo ahora hay que dejarlo reposar hasta que se vuelva de color rosado.-Dijo Diamond.
Las demás asintieron viendo como Diamond ponía la poción en un pequeño frasco.
-¿Qué hacemos para matar el tiempo?-Preguntó Ruby tratando de no quedarse dormida.
-Ni puta idea, hermanita.-Respondió Kunzite jugando con su cabello.
-Juguemos adivina la canción.-Propuso Onyx emocionada, las demás se rieron y asintieron
-Yo empiezo!!-Gritó Fire Opal asustando a Ruby que estaba a punto de irse con Morfeo.-Lo siento, Ruby.-Se disculpó la pelimorada, la mencionada solo sonrió un poco adormilada tranquilizando a su amiga.-Bien... "Sabes que me muero por ti cada vez que me hablas así pero tengo dueño aunque de noche contigo sueño. Contigo yo me he vuelto loca, loca y cuando tu me miras mi corazón explota..."-Fire Opal cantó esa pequeña parte de la canción y miró a sus amigas.
Las chicas se miraron pero ninguna respondió ya que no sabían la respuesta.
-A mi me suena conocida pero no logro recordar que canción es.-Se quejó Aquamarine haciendo un tierno puchero.
-Ninguna sabe.-Dijo Diamond suspirando frustrada, ella amaba la música y no recordaba esa canción.
-Creo que esa parte de la canción te representa mucho, Fire.-Le dijo Amethyst captando la atención no solo de la pelimorada si no de todas sus amigas.
-Explícate.-Exigió Esmerald sin entender a la rubia.
-Fire esta de novia con Christopher pero ella esta enamorada de Donovan.-Explicó Amethyst logrando que la pelimorada se atragantara y sus mejillas adquirieran un tono rosado.
Las chicas se rieron y apoyaron a la rubia.
-Bueno tienes razón.-Dijo Fire Opal suspirando.-Estoy enamorada de Donovan pero él ni caso me hace.
-Pero él si esta enamorado de ti.-Aseguró Topaz mirando a su amiga.
Fire iba a responder pero la interrumpieron.
-Lamento interrumpir pero la poción ya esta lista.-Dijo Diamond mostrando el frasquito con la poción rosada adentro.
-Mejor nos vamos, ya es tarde.-Dijo Kunzite mirando a su hermana dormida sobre las piernas de Topaz.
Las demás asintieron y comenzaron a ordenar todo mientras Topaz despertaba a Ruby.
-¿Nos dirás cómo se llama la canción?-Preguntó Aquamarine muriéndose de la curiosidad.
Fire Opal se rió.-Adivinen.-Fue lo único que dijo la joven con una gran sonrisa.
Aquamarine gruñó audiblemente causando la risa de sus amigas.
Las nueve jovencitas salieron de la sala de menesteres y caminaron hacia la sala común de Slytherin.
Sala común de Gryffindor:
-No vamos a poder subir, Hugo.-Decía Jackson por enésima vez mirando al pelirrojo.
-Por favor Jackson es la única forma de que mi mamá me deje volver a jugar Quidditch.-Pidió el pelirrojo arrodillándose frente a su amigo y haciendo un puchero agregó.-Sabes que nunca he sido bueno en los estudios y ella me advirtió que no podía volver a reprobar otro examen.
-Yo creo que Hugo tiene razón, es lo mejor que podemos hacer además yo también reprobé.-Dijo Marcus apoyando al pelirrojo.
-Por favor, Jackson.-Le suplicaron ambos chicos poniéndose de rodillas ante él con una mirada de cachorro.
El rubio rodó los ojos y contó hasta cien mentalmente, los conocía lo suficiente a ambos para saber que no lo dejarían en paz si no los ayudaba.
-Esta bien.-Accedió Jackson mientras miraba como el pelirrojo y pelinegro sonreían.
Marcus y Hugo abrazaron al rubio y se dijieron a las escaleras que daban a la habitación de las chicas, intentaron subir pero al llegar a la mitad estas se transformaron en un tobogán, el cual los dejó al pie de las escaleras otra vez.
-Marcus tu eres el mejor en esto así que maravillanos con tu magia.-Dijo Hugo parándose al lado de las escaleras.
El pelinegro sacó su varita y conjuró el hechizo que su padrino le había enseñado para esas ocaciones.
-Ya podemos subir.-Los tres pudieron subir las escaleras sin ningún contratiempo, al llegar al final vieron un pasillo con siete puertas, en las cuales había una pequeña inscripción en la cual estaba escrito el curso.
-Bien, busquen las habitaciones de las chicas de séptimo.-Les dijo Hugo mirando cada una de las puertas.
-Es por aquí.-Aviso Jackson entrando por una puerta que daba a otro pasillo más pequeño que el anterior.
-¿Con quién comparte habitación tu hermana?-Preguntó Marcus mirando a Hugo.
-Duerme sola.-Contestó el pelirrojo con un poco de envidia en su tono de voz.
-Es esta.-Susurró Marcus parado frente a una puerta con un pequeño letrero que decía, "Rose Weasley", en letras doradas.
Hugo abrió la puerta lentamente para no hacer ningún ruido y asomó su cabeza, dentro de la habitación se podían divisar muchos muebles y un armario grande pero lo que más resaltaba era la cama que estaba en el centro de la habitación, está tenía las cortinas cerradas así que creyeron que estaba dormida, por lo cual entraron sin provocar ruido alguno.
Los tres caminaron hacia la cama de la joven y abrieron el baúl que había a los pies de esta.
-Accio Giratiempo.-Conjuró Marcus, segundos despues vieron un resplandor dorado dirgirse a la mano del joven.-Listo.
-Será mejor irnos de aquí antes de que despierte.-Dijo Hugo mirando asustado como la cama de Rose se movía.
Los tres salieron rápidamente de la habitación y bajaron a la sala común.
-Vamos al aula de Transformaciones, ahí será más fácil.-Jackson soltó un suspiro.
-Tienes razón.-Concedió Hugo apoyando al rubio.
Los tres salieron de su sala común y se dirigieron al aula de Transformaciones.
Aula de transformaciones:
-Entonces, ¿Qué mierda vamos a hacer ahora?-Preguntó Nymph fastidiada mirando a sus amigas.
-Ni puta idea, se suponía que ese hechizo no debía fallar.-Kraken bufó enojada.
-Pero podemos crear otro hechizo.-Propuso Sphinx con una sonrisa y tratando de calmar a Kraken.
-Ninguna de nosotras sabe crear hechizos.-Les Recordó Fairy mirándolas un poco decaída.
-Pero yo lo podría intentar.-Dijo Sphinx con una sonrisa gigantesca.-Mi papá me enseñó como hacerlos pero no se si funcione.
-Inténtalo pero trata de que no le pase nada al libro.-Pidió Dríade mirando asustada a su amiga, la última vez que Sphinx había tenido un libro entre sus manos este terminó carbonizado.
-Esta bien.-Dijo Sphinx suspirando.
La joven tomó su varita y comenzó con su trabajo pero no era tan fácil como ella creía en un principio ya que en ninguno de sus intentos logró si quiera poder abrir el maldito libro.
-¡Maldita sea!-Gritó la joven histérica y enojada.-¡Reducto!-Volvió a gritar apuntando a un florero logrando que este quedara reducido a pequeños pedacitos.
-Cálmate, Sphinx.-La tranquilizó Nymph mirando a sus amigas, las cuales estaban asustadas por el repentino cambio de humor de su amiga.-Reparo.-Conjuró apuntando a los restos del florero, el cual quedo como nuevo en menos de dos segundos.
-Lo siento.-Se disculpó Sphinx sentándose en el piso.
-Yo quiero intentar.-Dijo Fairy parándose y sacando su varita.
Sin embargo no pudo decir nada más ya que la puerta se abrió de golpe y por ella entraron Hugo, Jackson y Marcus que se callaron al instante en que las vieron.
-Salgan de aquí.-Les pidió Dríade tranquilamente aunque por dentro los quería sacar a patadas.-Nosotras llegamos primero.
-Y eso que importa, nosotros la queremos ocupar también.-Le dijo Hugo mirando con asco a las cinco chicas.
Nymph estaba a punto de saltar sobre Hugo para enseñarle como debía tratar a una mujer pero una mirada de Kraken bastó para que tranquilizara sus instintos asesinos hacia el pelirrojo.
-Salgan de aquí, idiotas.-Les gritó Sphinx perdiendo la poca paciencia que había recuperado.
Pero el grito de Sphinx no mejoro mucho las cosas ya que se empezaron a gritar entre todos.
-¡Basta!-Gritó Onyx desde la puerta del aula y todos se callaron.-Todo Hogwarts se enteró de que están peleando.
-Lo sentimos.-Se disculpó Fairy bajando la cabeza al igual que sus amigas.
-¿Por qué pelean?-Preguntó Ruby que ya estaba totalmente despierta gracias a los gritos que escuchó antes de llegar ahí.
-Ellos quieren ocupar el aula pero nosotras llegamos primero.-Explicó Dríade mirando con odio a los tres Gryffindor.
-Si eso es verdad ustedes deben irse.-Dijo Topaz apuntando a Hugo, Jackson y Marcus.
-Yo no recibo ordenes de una serpiente rastrera y traicionera como tu.-Escupió Hugo mirando con odio y asco a su prima, Topaz.
Topaz iba a contestar pero no pudo ya que se escuchó un pequeño ruido, el Giratiempo se había caido de la capa de Marcus por suerte no estaba roto.
-Accio.-Conjuró Diamond apuntando con su varita al Giratiempo que en menos de un segundo estuvo en su mano.
-Devuélveme eso.-Le gritó Hugo al ver como Diamond miraba atentamente el pequeño objeto dorado.
-¿Por qué tienes el Giratiempo de Rose?-Preguntó Kraken mirando a su primo que en ese momento estaba pálido.
-Eso a ti no te importa.-Respondió Hugo abalanzándose sobre Diamond para quitarle el Giratiempo pero ella con sus rápidos reflejos logró esquivarlo, claro que el Giratiempo y la poción, que llevaba en su bolsillo, no tuvieron la misma suerte.
La poción se estrelló en el suelo y todo el liquido cayó sobre el Giratiempo que estaba quebrado.
Las Precious Stones se miraron sorprendidas pero su asombro aumento al ver como las piedras que llevaban en su cuello comenzaron a brillar intensamente.
-Esto no es bueno.-Avisó Kunzite mirando a sus amigas y luego les advirtió a todos.-No hagan ningún tipo de magia.-Pero ya era muy tarde porque Fairy, queriendo entrar al libro, había conjurado un hechizo logrando que el brillo se volviera más intenso que antes. Segundos después las piedras desprendieron un humo plateado que los envolvió a todos y los hizo desaparecer.
Hogwarts, 06 de Abril de 1996:
-¿Dónde mierda estamos?-Preguntó Esmerald haciendo una mueca ya que se había golpeado la cabeza cuando el humo plateado los dejo caer.
-Estamos en Hogwarts, obvio.-Respondió Jackson como si fuera lo más obvio del mundo.
-Por si no lo recuerdas, cuando nos envolvió el humo plateado estábamos en el aula de Transformaciones y ahora estamos cerca del lago.-Espetó Esmerald mirando a Jackson.
-Es verdad.-Concedió Fairy haciendo una mueca de dolor.
Todos se pararon pero su sorpresa fue mayor cuando vieron a muchos chicos y chicas sobre el pasto a unos pasos de distancia de ellos.
-Esto esta mal, muy mal.-Dijo Ruby mirando horrorizada a los jóvenes que permanecían en el pasto sin moverse.
-¿Por qué lo dices?-Preguntó Driade extrañada.
-Es algo obvio primero estamos fuera de Hogwarts, segundo están mis hermanos y primos ahí.-Dijo Kunzite apuntando a los jóvenes que yacían en el suelo aún sin moverse.-Y tercero la tumba de Dumbledore no esta donde debería estar.-La rubia apuntó el lugar en donde debería estar pero no había nada.
En ese momento todos se comenzaron a despertar y pararse hasta que se dieron cuenta de que ninguno estaba en su habitación.
-¿Dónde estamos?-Preguntaron todos al mismo tiempo.
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Hola preciosuras, cómo están???
Bueno esta es la primera historia que escribo, espero les guste y eso...
Cualquier cosa solo comenten con toda la confianza del mundo.
Eso pues... nos vemos y disfruten que la vida es bella.
Bye 💞