Narrador omnipresente
Apenas llegaron, Jesse y Daniel, se estacionaron. En la entrada de la disco había una larga fila de personas en espera pero al ser Jesse un cliente frecuentado, pasaron de largo la fila y el guardia los dejo pasar después de haberlos saludado. Cuando entraron encontraron un pasillo oscuro, pasaron por el hasta llegar al lugar donde todo estaba iluminado con luces oscuras pero luminosas, frente a ellos estaba la pista de baile, del lado derecho estaba una barra grande con bebidas y dos bartender, a unos metros de la barra unas escaleras que dan al segundo piso, del lado izquierdo estaban los sillones y mesas.
-¡Vamos!-grito Jesse a Dany y se dirigieron al lado izquierdo y se sentaron en un sillón con una mesa pequeña en el centro.
Un joven trabajador de la disco se acerco a ellos.
-¡¿Que desean?!-grito ante la fuerte musica.
-¡Tequila!-contestó Jesse mientras Daniel miraba a su alrededor.
Los amigos se miraron un momento. En pocos minutos llego el mismo joven y dejo una botella de tequila, un plato pequeño con limones y dos vasos pequeños con sal. El joven se retira y los chicos se sirven la bebida en dos vasos de vidrios pequeños.
-¡Salud!-dijeron alto antes de tomarse el contenido de un trago.
Así estuvieron unas horas, bebiendo y bailando con desconocidas, divirtiéndose como dos adolescentes normales. Ambos seguían cuerdos a pesar de el alcohol consumido. Pasaron los minutos hasta las horas donde ellos seguían divirtiéndose con tranquilidad.
* 1:35pm
Fuera del local, en la parte trasera, había otra entrada por la cual Michelle y sus amigos entraron pagando al guardia. Entraron por la puerta que daba a unas escaleras, las subieron sintiendo sus oídos retumbar por la musica. Al llegar al piso encontraron mesas esparcidas en todos lados y a algunos humanos sentados en ellas. Encontraron una mesa vacía y se sentaron mientras reían, una joven se acercó a ellos.
-¡Buenas noches ¿que desean?!-grito amistosa.
Entre ellos se miraron indecisos.
-¡¿Que nos recomiendas?!-grito devuelta Emma a la chica, ésta se quedo pensante.
-¡Ojos verdes!-grito la joven sonriendoles, los cachorros se quedaron confundidos-¡Denme un momento!-grito alejándose misteriosa.
-¡Me agrada!-exclama Sarah sonriendo.
-¡A ti todo el mundo te agrada Sarah!-dijo Michelle mirándola, Sarah le saco la lengua y todos rieron.
-¡Tengan!-llego la joven con una bandeja con vasos de vidrios con un contenido verde y una cereza en el fondo.
Los repartió y antes de irse les sonrió agradable.
-Lo bueno es que el alcohol no nos afecta...-murmuro Oliver mirando la bebida.
La primera en beber fue Taylor, todos la miraron expectantes.
-Esta buena-respondió.
En ese momento Michelle olió un aroma a mentas.
¡Mate! - rugió Ellen.
Michelle subió la mirada buscando y Emma hizo los mismo pero con mas desespero.
-¿Que pasa?-pregunta Oliver.
-Mate-responden antes de levantarse.
Daniel se aleja de la pista donde bailaba con una morena, quien dejo sola al ver que casi lo violaba, y se sentó en un taburete de la barra, uno de los bartender se acerco a el.
-¿Deseas algo?-preguntó a Daniel.
-Una limonada por favor-contestó amable, el bartender se alejo asintiendo.
Daniel casi se queda sin aire cuando una mano fuerte golpeo su espalda, Jesse lo miro riéndose mientras es fulminado.
-¿Cansado?-pregunto el rubio cerca de él.
-¡Si!-respondió y el bartender le entrego la bebida.
Desde la barandilla del segundo piso alguien los observaba con indecisión.
-¿Vamos?-preguntó la rubia a la morena.
-Ve tu primero-dijo la morena nerviosa.
Michelle la miro aburrida y decidida fue bajando las escaleras, se mezclo entre las personas mientras caminaba como león a su presa, las luces pegaban por momentos a su rostro pero nunca dejo de mirar a aquel joven de cabellera castaña.
-¡¿Disculpen?!-escucharon detrás de ellos y voltearon.
Daniel quedo hipnotizado al ver tal belleza frente él.
-¡¿Gustarías bailar?!-le preguntó la rubia con voz melodiosa.
-A-ah ¡Si!-respondió levantándose, Michie sonrió al notarlo tan embobado.
Ambos estiraron sus manos y chocaron, sintieron una corriente eléctrica recorrerlos. Michie sonrió mas y Daniel la observó fascinado. La loba lo jalo al tumulto de gente y se pegaron. Se volteo pegando su espalda a su pecho masculino y empezó a moverse sensualmente al rito de la canción How Deep Is Your Love de Calvin Harris.
Daniel no sabia que hacer, aquel movimiento de cadera tan caliente lo ponía mucho, así que dudoso coloco sus manos ellas sintiendo unas deliciosas curvas. Michie noto que era tímido así que tomo las manos de Daniel y las coloco en sus muslos debajo del vestido y se pego mas a él. Ambos se movían lento y mensual sintiendo la temperatura subir. La loba se volteo quedando ahora frente a frente, sus ojos chocaron y Daniel se quedo admirando aquellas lagunas, entonces su cuerpo reacciono solo colocando sus manos en su espalda baja pegándola mas a él, no quería que se alejara, sentía una grandísimo atracción a ella y no solo sexual. Michie movía sus caderas chocando con las de su mate, provocándolo; Pegó un pequeño salto cuando sintió dos manos en su trasero, debajo de la falda. El cuerpo de Daniel se calentó mas al sentir piel tibia bajo sus manos.
Jesse estaba sentando en la barra cuanto alguien se sienta a su lado.
-¡Un amor en llamas por favor!-grito la morena al bartender.
-¡Me das uno también!-gritó mirándola-¡¿Como te llamas?!-preguntó curioso y atraído.
-¡Emma!-contestó y llego el bartender con la bebida roja pasión.
-¡Soy Jesse!-gritó hipnotizado por sus ojos chocolate.
Emma sonrió feliz.
Daniel alejo las manos y dejo una en su espalda baja, ambos movieron las caderas de un lados al otro, para delante y para atrás, tocándose. Michie tuvo el atrevimiento de acercar su cara al cuello de su mate y olfateo.
Menta, pensó.
Separo sus labios levemente y los roso con su oído, aquello hizo estremecer al castaño y apretar las caderas de la rubia.
-¿Y si nos vamos?-preguntó la rubia con picardía al oído del joven provocándole un gemido que ella escuchó perfectamente.
-Contigo al fin del mundo-contestó sincero.
Michie sonrió y alejo el rostro del cuello para mirarlo a los ojos. Daniel tenía unas ganas de besarla que no pudo evitar rosar sus labios con los suyos, una corriente los recorrió y no pudieron evitar unir sus bocas en un beso deseoso. Sus labios se movían en sincronía, como si estuvieran hechos para estar juntos, sus lenguas chocaron formando una guerra, Michie no pudo evitar jalar aquel cabello castaño y Daniel no pudo evitar pegarla mas él. Se comían con aquel beso feroz, lleno de lujuria pero también algo mas. Daniel mordió el labio de la rubia encendiéndola, ella gimio en respuesta encendiéndolo. Se separaron por falta de aire y se miraron a los ojos, éstos brillaban, mostrando miles de emociones y sentimientos. Michie dejo un ultimo beso en aquellos labios sabor a menta, Daniel no lo pudo evitar y paso la punta de su lengua por esos labios rosados cereza.
-Vamos...
Se tomaron de las manos y salieron de aquel lugar.
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¿Y... Que tal?
¿Les gustó el como se conocieron?
Advertencia...
Siguiente capitulo con contenido adulto, leer bajo tu responsabilidad.
Canción - How Deep Is Your Love - Calvin Harris.