Llamada entrante de Reece.
"—Eres realmente insoportable, niño"
"—Puede que allá sea de madrugada pero aquí no"
"—Realmente te odio cuando haces esto"
Mattie casi pudo sentir la sonrisa del chico.
"—Me amas, Madeline"
"—Fue un error confesarte eso, hombre"
Reece rió, el error más maravilloso del mundo, pensó.
"—¿Para qué llamabas?"
"—Nececito tu ayuda ¿ingeniería o pedagogía?"
"—¿Universidad?"
"—Supongo que ya es momento de pensarlo"
"—Pero..."
"—Mattie, se te quebró la voz ¿qué pasa?"
"—Sabes, la mayoría de las parejas termina cuando entran a la universidad"
"—Primero, no somos pareja aún porque tú no quieres y segundo, no nos pasará"
"—¿Por qué estás tan seguro?"
"—Porque me conozco a la perfección y no soy tan idiota como para dejar libre a la chica de mis sueños... nadie es tan idiota"
"—¿Lo prometes?"
"—Lo prometo"