Canción: Back to me- Marian Hill ft. Lauren Jauregui (mi mujer, Lauren Jauregui)
Lauren's POV
Realmente este sitio es increíble. El sonido del mar, las vistas del Golden Gate... Pero soy incapaz de disfrutarlo como me gustaría porque no me saco de la cabeza lo que pasó hace unos minutos. Las ganas inmensas que tenía de besarla no eran normales. Un segundo más y lo hubiese hecho. Shannon no tiene ni idea de lo que me cuesta aguantarme las ganas de besarla, de tocarla, de acariciarla... Ni idea.
Un escalofrío recorre mi cuerpo y Shannon me mira. Hace bastante frío aquí por culpa de la brisa que siempre hay en la costa.
-¿Tienes frío?-pregunta Shannon.
-Un poco.-respondo acercando mis piernas a mi cuerpo, para mantener el calor.
-Toma.
Shannon se quita la sudadera y me la da. La agarro pero me quedo mirando a la de ojos verdes dudando entre si ponerla o no. Ella se va a congelar con solo una camiseta.
-Estaré bien, no tengo mucho frío.-dice.
Me pongo la sudadera por encima de la mía, lo que me cuesta un poco pero vale la pena. Un agradable calorcito empieza a aparecer en mi cuerpo y sonrío levemente. ¿Cómo no voy a sentir algo por Shannon si hace cosas así por mi? ¿Cómo no voy a sentir algo por Shannon si después de todo se sigue preocupando por mi? ¿Cómo no voy a sentir algo por Shannon si la miro, ahí sentada en la arena con el mar de fondo, y me parece la imagen más bonita que he visto nunca?
¿Por qué tiene que ser todo tan complicado?
-Lauren.-me llama Shannon, quien me mira con preocupación.-¿Seguro que estás bien? Tienes la misma cara que en el coche.
-Sí sí.-contesto rápidamente apartando la mirada de ella. Como la mire un segundo más, me pondré a llorar otra vez.
-¿Qué te pasa?-pregunta sabiendo que le estaba mintiendo con mi corta respuesta.
La vuelvo a mirar, a esos ojos verdes que hoy tienen el mismo color que un bosque. ¿Le digo la verdad? ¿Vuelvo a mentirle? Quizás mentirle sea la mejor opción, la más fácil. Pero eso significaría tener que seguir guardando esto dentro y ya no puedo más. Así que, simplemente, dejo que las palabras salgan de mi boca.
-Que cada vez que sonríes me apetece comerte a besos. Que me gustaría poder dormir abrazada a ti. Que cuando me miras siento como mi corazón se acelera como lo hacía hace años. Que la mínima cosa que hagas me parece hermosa. Que me gustaría hacerte el amor cada segundo del día. Que me haces sentir como nunca nadie me hará sentir. Que odio no poder tenerte. Que el hecho de que no sientas lo mismo me mata.-paro un solo segundo para tomar aire antes de decir lo último mientras que Shannon asimila lo que le estoy diciendo.-Que te quiero, joder.
Shannon no dice nada, simplemente toma aire por la boca y se muerde el labio, a la vez que pasa una mano por su pelo, haciendo que una vez más, quiera hacerla mía. Las lágrimas empezaron a salir en cuanto dije la primera palabra, pero ni siquiera me preocupo por limpiarlas.
-Para lo único que ha servido alejarme de Isaac es para darme cuenta de que con quien realmente quiero estar es contigo.
Shannon sigue sin decir nada, y eso me molesta más que si dijese que no siente lo mismo.
-Di algo, por Dios.-le pido.
-Es que lo estoy asimilando.-dice finalmente, con la voz tan baja que casi no la oigo por el ruido de las pequeñas olas.
Imito su movimiento de hace unos segundos y paso una mano por mi pelo. Lo siguiente que noto son las suaves manos de Shannon en mi rostro, secándome las lágrimas con mucho cuidado. Su tacto me pone la piel de gallina y suspiro. No puede hacer cosas así después de enterarse de que mis sentimientos por ella han vuelto. O nunca se han ido. No lo se.
-Shannon, para.-digo muy a mi pesar, ya que el contacto de sus manos con mi piel es algo que no quiero que nunca se termine.
Shannon, en cambio, mantiene sus manos en mi rostro. Las deja en mis mejillas húmedas y antes de que yo me pueda dar cuenta de en lo que está pensando, ella se mueve. Se acerca a mi rápidamente y sus labios se encuentran con los míos. Al principio me quedo quieta, pero en cuanto sus labios comienzan a moverse sobre los míos, reacciono. Nuestros labios se mueven al mismo ritmo, como lo hacían hace años. Todo el peso que tenía encima desapareció por completo en cuanto nuestros labios se tocaron.
Shannon se mueve sin apartar sus labios de los míos para acabar quedando sobre mi cuerpo. Mientras que una de sus manos acaricia mi mejilla y la otra mi pelo, las mías se posan en su espalda.
Durante los segundos que dura el beso, intento disfrutar lo máximo que puedo del sabor y suavidad de sus labios. Las mariposas de mi estómago explotaron y siento un calor inmenso en todo mi cuerpo, sobre todo en mis mejillas. Cuando el beso se termina, Shannon no se aparta mucho de mi. Pega su frente con la mía y aún con los ojos cerrados, habla.
-Solo necesitaba que dijeses eso.-susurra.-Que querías estar conmigo. Nada más.
-Quiero estar contigo, Shan.-repito con una sonrisa, moviendo una de mis manos para llevarla a su mejilla y acariciarla. Una pequeña sonrisa aparece en su rostro y eso provoca que una aparezca en el mío.-No te imaginas cuánto te quiero.
Durante unos pocos segundos, lo único que se escucha es el ruido del mar y el sonido de los coches a lo lejos. Luego esos dos sonidos pasan a segundo plano cuando Shannon comienza a reírse. Sus ojos se abren, y el color y brillo que tienen me dejan sin aliento.
-¿Ves? Tenía razón desde el principio.-dice dejándome un poco confundida, ya que no se a lo que se refiere.-Siempre sentiste algo por mi.
-Sí, tenías razón. ¿Quieres que te aplauda?-pregunto molesta.
-No.-contesta antes de darme un corto beso. Y otro. Y otro más.-Me debes una comida.
-¿Qué?-pregunto confundida, ya que sus pequeños besos me habían dejado en otro mundo. Antes de que Shannon pueda explicármelo, me doy cuenta.-Oh sí, la carrera.
Shannon me da un beso en la nariz justo antes de levantarse con un solo movimiento y agarra mi mano para ayudarme a que me levante. Me sacudo la ropa para quitar la arena y en cuanto tiene oportunidad, Shannon me vuelve a agarrar la mano. Me lleva hacia la orilla del mar y se queda frente a ella.
-¿Sabes que llevo tiempo pensando en tatuarme?-dice con un tono de pregunta, pero se que no espera una respuesta.
No me sorprende que Shannon quiera tatuarse. Ahora muchísima gente tiene tatuajes, no están tan mal vistos como hace años. Además Shannon es una artista, se dedica a dibujar cosas que pasan por su cabeza en lienzos en blanco. Seguramente vea su cuerpo como otro lienzo en blanco y quiere que otro artista pinte en él algo que sea realmente importante para ella.
-Tengo dos cosas en mente. La primera es un pincel, y creo que no hace falta explicar porqué.-dice riendo, lo que provoca una pequeña sonrisa en mi rostro.-Además me gustaría que lo diseñase Aaron.
-¿Y la otra?-pregunto con curiosidad.
-Algo relacionado con el mar. Una ola, puede.-contesta.-El sonido de las olas, el olor del mar... todo sobre ello me relaja. Es una forma de escape para mi. ¿Cuando tengo muchas cosas en mente? Voy al mar. ¿Cuando me agobio por algo? Voy al mar. ¿Cuando simplemente necesito respirar? Al mar que voy. Siempre consigue relajarme. No podría vivir en una ciudad sin mar, me sentiría atrapada.
-Es una buena razón.-digo observando su perfil mientras ella mira al frente, aún con mi mano al rededor de la suya.
-Además cuando estoy junto al mar siempre pasan cosas buenas. Todas las veces que mis padres me dijeron que iba a tener un nuevo hermano, adivina donde estaba.
-¿En la playa?-intento adivinar aún sabiendo la respuesta.
-Más o menos.-dice riendo.-Cuando me dijeron lo de Dylan estaba en la playa, con Harry estaba caminando por el paseo de la playa y con Lucy estaba dando un simple paseo por la arena con mi madre.
-Increíble.-comento bastante sorprendida.
-Y si eso no es suficiente, mira lo que acaba de pasar y dónde estamos.-dice sonriendo de oreja a oreja a la vez que gira su cabeza para mirarme.-¡Incluso nuestro primer beso fue al lado del mar!
-Vaya...-digo sin saber qué más decir. Todo esto me ha dejado sin palabras.-Es increíble.
-Eso ya lo has dicho.-se ríe Shannon.-Deberíamos volver porque mi estómago empieza a rugir.
Pensabais que me había olvidado de esta historia eh. Pues no porque tengo a una personita que me la recuerda cada poco (gracias,Karla). En honor al vigésimo cumpleaños de Lauren, os dejo este capítulo por aquí. Disfrutadlo.
Ah y ahí tenéis el momento más esperado de todos. Pero llegarán otros momentos también deseados. ¿Puede que un encuentro entre Isaac y Shannon? O aún mejor, ¿un reencuentro de Shannon y los Cimorelli? Quién sabe jejejeje
Por cierto, me gustaría decir que muchas veces cuando escribo a Shannon, las cosas que dice y hace, me estoy escribiendo a mi misma. Sobretodo en esto último del mar. No os hacéis la idea de lo importante que es el mar para mi. No, no me anunciaron que iba a tener un hermano estando en la playa (creo), ni tampoco he besado a alguien por primera vez ahí (qué triste, 18 años y sin primer beso). Pero sí que es muy importante para mi, sí que me relaja y sí que sería incapaz de vivir en una ciudad sin mar. Podría pasarme dos horas sentada frente al mar simplemente mirándolo y escuchándolo. Es mi vía de escape, simplemente con verlo ya me siento mejor (y si me meto a hacer surf ni os cuento).
Bueno,dejo de daros la brasa ya, que no se ni por qué os cuento esto. Hasta luego chavalas y chavales.
-María