Me llamo Jack Frost, ¿Y tu?

By Poppy-coquelicot

592K 34.3K 10.5K

Mi demente historia, de como una chica conoce a un supuesto personaje de cuentos para niños... - ¡Hey! Soy ta... More

Me llamo Jack Frost, ¿y tu?
Mi hermano le dispara a un pájaro muy grande.
Una adolescente cree en mi
Una nevada invade mi cuarto.
Un poco de nieve no molesta a nadie.
Siento como me atraviesan el corazón.
Descubro el pasado oscuro de Santa Claus.
Tengo un padre y dos mejores amigos celosos.
Tres tipos feos quieren matarme.
Estoy en la mejor fábrica de juguetes del mundo.
Organizo una competencia caza-monstruos.
Escucho la historia de una bailarina y un juguetero.
Me llevo dos grandes preocupaciones.
¿Soy el blanco o la carnada?
Jamás imaginé que pasaría esto.
Visitar mis recuerdos no me lleva a nada bueno.
Aprendo cómo dejar de sentir dolor.
¿Me arriesgo a seguir un impulso?
Nos ataca un maniático con vestido.
Tengo un antepasado.
¿Es posible llenar de oscuridad el corazón? Espero que no.
Yo, tu Chico helado, y tu, mi Zanahoria.
¿Quien es real para mi?
¿Qué aprendí? A nunca mirar por las ventanas.
Secuestran todo lo que amo.
Soy libre otra vez.
¡Devuélvanme a mi Chico Helado!
Nunca pensé que podía ganar y perder.
El tiempo pasa y los recuerdos quedan.

Cada vez comprendo menos a las personas.

18.7K 1.2K 713
By Poppy-coquelicot

JACK

La puerta de la oficina de Norte se cerró detrás de mí con fuerza y la cerradura se accionó sola. Esto ya me había pasado un vez pero es no descontaba que tuviese pánico, créanme, no quieren ver a Norte enojado... experiencia propia. El gordinflón es bueno y amable pero si se molesta... créanme, corran.

- ¡¿Una chica?! - me preguntó, más vale me gritó - ¿Cómo se te ocurre traer una chica aquí Jack?

- ¡Los Tristwch nos atacaron! - le respondí enfrentándolo - No iba a dejarla sola con esas cosas en la ciudad ¡Además no sé porqué te pones así, cuando Sophie apareció en la madriguera por TU culpa no dijiste nada! - muy bien, eso no fue lo mejor que pude haber dicho... seguramente apareceré en una zanja pisoteado por renos, pero... era cierto.

- Una cosa es una niña de tres años ¡Otra es una muchacha de diecisiete!

- ¿Qué importa la edad que tenga? Sigue creyendo en nosotros y si es así yo voy a cuidarla. 

Sé que estoy metiendo más y más la pata, pero Sia era la primera amiga que tenía y no iba  a dejarla solamente porque tenía diecisiete años y no era exactamente "una niña". Norte me dio la espalda. Estaba molesto, pero más que nada parecía... frustrado, cansado... con si lo único que hiciera fuese traer más problemas. ¡Noticia de último momento! Eso es lo que siempre hago.

- Voy a paréceme a Conejo y sé que voy a arrepentirme pero nosotros protegemos niños Jack, no adolecentes. Los chicos de su edad ya saben cuidarse solos.

- Tú dijiste que Vi... Ella, afecta a todos por igual, ya sean niños o adultos. Si ella lo necesita voy a ayúdala.

¿Recuerdan al Santa Claus furioso que casi me ahorca? Bueno, ahora lo tenía frente a mi mirándome compasivo ¿Soy el único que no lo entiende? Además... creo que prefiero al Norte molesto, ahora hay algo que de verdad me asusta en su mirada. Él suspiró y sacudió la cabeza con resignación.

- Sabía que esto pasaría en algún momento - murmuró. Creo que fue más para sí mismo que para mí.

- ¿Qué cosa? - claramente yo tengo que preguntar.

- Además ella debe tener más o menos la misma edad que tú aparentas...

- ¿Y qué tiene que ver? -  ¿Es tan difícil ser claro, solamente una vez? Juro que siempre diré las cosas directamente y al próximo que ande con rodeos lo congelo de por vida.

Norte me miró incrédulo por un segundo, antes de soltar una carcajada estridente y que me dejó completamente pasmado. Hace un segundo estaba totalmente furioso y ahora ríe... es oficial, Santa Claus perdió la cabeza, lo siento niños, no habrá navidad este año. Justo entonces la puerta se abrió y Conejo asomó la cabeza.

- ¿Ya podemos empezar o todavía tienes que darle una lección a Frost? - preguntó, por el tono parecía bastante entusiasmado con eso de "que me dieran una lección". Pero en cuanto me vio de pie intacto y tranquilo se puso serio.

- Conejo, amigo - dijo Norte todavía riendo -, no hay ninguna lección que pueda darle sobre esto. Es algo que tiene que descubrir él.

- ¿Descubrir qué? - ¡Voy a matarlo si no se explica!

- ¡Oh vamos! ¡¿Trajo a una chica aquí y no piensas hacer nada?!

- ¿Y qué quieres que haga? - dijo Norte sonriente y mirándome todavía compasivo. Me sentía idiota parado allí esperando una explicación que evidentemente nadie iba a darme.

- ¡Bah! - exclamó Conejo haciendo un gesto y saliendo.

Cuando la puerta se cerró Norte cambió de actitud, ahora estaba mucho más serio que antes pero todavía parecía algo compasivo.

- Escucha Jack, sé que no voy a poder impedir esto y lo que tenga suceder sucederá pero, te recomiendo que no lo hagas. Nosotros somos diferentes, no... no estamos hechos para eso.

- ¿Eso? - pregunté - fui amigo de Jaime toda la vida, hasta el día de hoy que puede verme y tiene 65 años.

Norte hizo una risita sorda y me palmeó la espada.

- Lo entenderás más adelante Jack - me dijo, aunque después soltó un largo suspiro - solamente espero que no te equivoques, por tu bien.

Iba a volver a preguntar de qué rayos estaba hablando cuando abrió la puerta y me empujó fuera, entonces salió en dirección a la sala del mundo. Lo seguí todavía preguntándome qué había querido decirme ¿Por qué estaba recomendándome no ser amigo de Sia? Era una de las mejores cosas que me había pasado, ¿Por qué no me haría bien?

Iba tan ensimismado en mi mismo que no me di cuenta cuando llegamos. Hada y Meme hablaban con Sia (bueno, en realidad Hada la estaba haciendo un interrogatorio nivel profesional a la velocidad de la luz, cada tanto se interrumpía a si misma y le daba alguna indicación a sus hadas sobre un diente, y Sia respondía a lo que podía mientras Meme asentía o negaba con la cabeza) y Conejo me miraba con el entrecejo fruncido (gran noticia). Yo le sonreí, si que ella estuviese aquí le molestaba, era otro motivo más para hacerla quedar todo el tiempo posible.

-Sia Slater - dijo Norte acercándose, ella apenas se sonrojo (es tan gracioso cuando hace eso) pero su cara reflejaba una emoción que a duras penas podía contener - buena chica, siempre hacía sus tareas pero se escapaba a jugar cuando su madre no la veía.

Sia sonrió sonrojada pero como era obvio no apartó la mirada.

- Santa Claus - respondió en el mismo tono que Norte - Buen hombre, siempre me trajo regalos, aunque me debe una bicicleta de cuando tenía diez años. ¿Cómo me conoce?

- ¿Por qué todos quieren una bicicletas? - bufó Norte - Y conozco a todos los niños querida, tengo que hacerlo si quiero ponerlos en la lista correcta - le explicó mostrándole sus dos tatuajes. Sia asintió lentamente y dio un paso hacia atrás.

- Es un encanto - dijo Hada entusiasmada y mirándome radiante - No entiendo porqué no nos hablaste de ella Jack.

Me rasqué la cabeza nervioso. ¿Por qué no les había hablado de ella? la verdad no lo sé, creo que era porque quería que nuestra amistad fuera algo mío. Así como ella no podía hablar de mí y teníamos esas escapas furtivas por la noche, quería que todo se mantuviese así... en secreto, clandestino, que solamente fuera algo nuestro.

- No te preocupes Hada - dijo Sia mirándome molesta - Jack no suele hablar ni explicar muchas cosas. No me sorprende que no les haya hablado de mí - Cada palabra fue como un golpe, no me atreví a decir nada, no quería que se enfade más. Ella miró a Norte todavía con el entrecejo apenas fruncido y los labios apretados - Si pudiese decirme por dónde podría retirarme un momento completamente molesta para no tener que verlo, se lo agradecería.

Norte señaló el pasillo por dónde habíamos venido. Sia le dio un corto gracias, me lanzó una última mirada fulminante y se fue a grandes zancadas.

- Muy bien, se fue, ahora podemos comenzar con la reunión - dijo Conejo frotándose las manos. Norte le dijo algo como "Todavía está en la fábrica" pero no le presté atención, en cuanto Sia dobló el pasillo salía tras ella.

- ¡Frost regresa aquí! - me gritó Conejo, pero lo ignoré. Después tendría tiempo para discutir con él.

Sia estaba sentada en un ventanal, mirando hacia afuera. Se abrazaba las piernas y jugueteaba con su gorrito de lana en las manos. Cuando me vio soltó un bufido y se levantó dispuesta a irse, pero yo la alcancé antes de que diera siquiera un paso.

- Espera - dije tomándola del brazo. Ella se soltó y me dio la espalda, pero de pronto se volvió hacia mí clavando sus ojos en los míos.

-  ¿Por qué no les hablaste de mí? ¿Por qué me ocultaste todo esto? ¿Es que te doy vergüenza? - me soltó furiosa - ¿O qué, el gran Jack Frost es demasiado increíble para tener de amiga a una mortal?

- ¿Qué? No, claro que no - respondí confundido.

- ¿Y entonces por qué? - gran pregunta, también me la estoy haciendo yo en este momento.

- Yo... no lo sé. No quería que los demás supieran y... - ella puso una mano frente a mi y suspiró.

- ¿Sabes qué Jack? No me interesa. Solo... solo llévame a casa.

Entonces se volvió para irse otra vez, pero no iba a permitírselo, quería explicarle aunque ni siquiera yo lo entendiera.

- Escucha - le insistí y volví a tomarla por el brazo -. No dije nada porque quería que fuese algo mío ¿Bien. Sé que suena egoísta pero... por una vez, por una sola vez quería tener algo yo, solamente yo. Quería tener una amiga que fuese solamente mía - Ella no se inmuto, es más por su expresión me dio a entender que tenía que explicarme mejor -. Siempre tuve una vida muy solitaria y... por más que muchas veces me gustaba esta solo muchas otras moría por tener a alguien con quien compartir algo. Por 300 años nadie pudo verme, nadie me conocía y ni siquiera me llevaba bien con los demás inmortales, no te das una idea de lo miserable que me sentía algunas noches. Después, apareció tu abuelo, fue el primer niño en creer en mí y mi mejor amigo, gracias a él soy lo que soy ahora. Por unos años fue fantástico pero... después Jaime creció y yo ya no encajaba en su vida. Volví a quedarme solo, si, los niños me veían y jugaba con ellos pero... no tenía amigos y todos acaban olvidándose de mí en algún momento. Siempre era igual, un día iba a saludarlos y me atravesaban como su fuese un fantasma... odiaba cuando pasaba eso - me sentía idiota hablando de eso, ¿Por qué a ella iba a interesarle? pero a pesar de eso era como sacarme un peso de encima. Ni siquiera estaba pensando en lo que decía, solamente dejaba que mi boca se mueva sola mientras veía como ella escucha atenta a todo, aunque no podía deducir qué era lo que pensaba -.Tú fuiste la primer persona que realmente se interesó en mi después de tu abuelo. Además, para cuando tu abuelo tenía tu edad yo dejé de tratar tanto con él, que tú quisieras hablar conmigo fue lo mejor que me pasó en mucho tiempo. Quería conservar eso como algo nuestro, de nadie más. Sabía que si le decía a los demás (particularmente a Norte y Conejo) me dirían que ya no podía verte, que tenía responsabilidades con los niños y que tú ya no lo eras. Por eso no lo hice.

Idiota. Cursi. Sentimental... ¿En qué diablos estaba pensando? ¡Yo no soy así! Cuando pensé en todo lo que había dicho me asquee de mi mismo. Además, no había logrado nada, Sia seguía frente a mí con su misma cara de indiferencia y molestia de hacía un momento. Suspiró y terminó por soltarse de mi ¡Gran jugada Frost! ahora eres un idiota y además cursi.

- No es justo - me reprochó ella y me quedé contrariado -. No puedo estar enojada contigo cuando me dices algo como eso - Entonces me abrazó. Sigo pensando que tiene un severo problema de cambio de emociones repentinas.

Escuché un sollozo detrás de nosotros y cuando me giré allí estaban todos, Hada tenía las manos en el pecho mientras lloraba emocionada y Meme parecía conmovido, pero cuando miré a Norte noté que detrás de su sonrisa nos veía afligido. Todavía no me había soltado de Sia, en realidad, siquiera me di cuenta eso hasta que Conejo me agarró de la sudadera.

- Muy bien Romeo se acabó el espectáculo. Reunión, ahora, tengo otras cosas que hacer además de ver qué es lo que quiere esta demente ahora.  

- ¡No necesito que me arrastren canguro! - le dije molesto.

- ¡Co-ne-jo! - me gritó él - ¡¿Acaso no ves las orejas Frost?! A como vuelvas a decirlo hago explotar uno de mis huevo en tus pantalones.  

- Y entonces olvídate de una pascua sin nieve, usarás un picahielos para pasar por tus túneles - respondí enfrentándolo.

- Que linda relación la que tiene - escuché decirle Sia a Norte, él se rió.

- Parece que se odian pero en el fondo se aprecian.

- Muy… muy… muy en el fondo ¿No? - inquirió ella. Meme asintió.

De pronto, un grupo de duendes apareció corriendo seguido por varios yetis que comenzaron a gruñir y señalar la sala del mundo.

- ¡Basta de discusiones! - exclamó Norte tan súbitamente que Sia dio un saltito en su lugar - Todos en este mismo instante a la salón.  

 Sia y yo intercambiamos una mirada y hasta que yo no estuve a su lado ella no se movió. Cuando llegamos logré ver a Norte cargando sus espadas y poniéndose el abrigo.

- ¿Y ahora? - preguntó Sia mirándolo expectante, pero él prácticamente ni le prestó atención.

- Jack llévala a su casa - fue todo lo que dijo.

- Wow, un segundo - dijo ella - No pelee contra esas cosas, partí la puerta de mi armario, ni casi caigo al vacío desde un auto volador para quedarme en casa. Creo que ya estoy suficientemente involucrada en esto para saber qué está pasado. Si no soy una niña como escuché al conejo decir, entonces tengo autoridad para elegir por mi misma y yo quiero ir.

Por primera vez quise dar un paso afuera e irme.

- Esto no es un juego Sia - le advirtió Norte completamente serio - y no puedes tomar una decisión así por ti misma, no tienes idea de a lo que nos enfrentamos.

- Creo que lo supe cuando tuve que dispararle a uno de esos monstruos para evitar que desoye a Jack - contestó ella. De pronto la tensión que había en el ambiente podía cortarse con un cuchillo.

Escuché la risita sorda de Conejo e intentando pasar disimulado le lancé un rayo de hielo ¡Já! Que intente reírse con la cara congelada. Hada nos miró con reproche pero yo me encogí de hombros, no iba a dejar que se burle de mí, nunca.

- Todos al trineo - dijo Norte zanjando la cuestión, pero por alguna razón Sia no parecía enfadada sino que se quedó de brazos cruzados mirándolo con una pequeña sonrisa en el rostro.

- ¿Y eso significa…

- Todos al trineo - repitió él marcando bien la primer palabra y saliendo.

Sia sonrió y fue corriendo por su arco y su cajac, los había dejado en una esquina cuando entramos. Yo me quedé completamente pasmado, pero claramente, el más sorprendido era Conejo.

- ¿QUÉ? - gritó mientras seguía a Norte - ¿Te volviste loco? ¡Es una mortal! ¡Hola, creo que las galletas y la leche te afectaron! ¿Cómo puedes dejar que se arriesgue así?

Yo iba un poco más atrás con Sia, la verdad es que también estaba cuestionando un poco la decisión de Norte. Me preocupaba Sia, aunque la había visto en acción y sabía lo buena que era, no podía arriesgarla de esa forma. La miré de reojo por un momento, ella parecía más entusiasmada que otra cosa por un momento quise congelarla  asegurarme de que se quedaría en el polo hasta que regresara, pero fue cuando me di cuenta de que la conversación entre Conejo y Norte había cambiado.

- Tengo un presentimiento sobre ella - murmuró Norte -, aquí, en mi panza.

- ¡Tú y tu panza! - le recriminó Conejo en voz baja completamente histérico - ¿Estás arriesgando su vida por tu panza? ¡No podemos guiarnos siempre por ella!

- Además todavía recuerdo lo que dijo el Hombre de la Luna cuando los demás se fueron - afirmó él. Conejo permaneció un momento en silencio.

- ¿Tú crees que…? Pero si es eso es cierto ella…

La frase quedó en el aire. Norte solamente se encogió de hombros y se dio una palmaditas en la barriga, como si dijera "es un presentimiento". Volví a mirar a Sia ¿Qué fue lo que le dijo el Hombre de la Luna a Norte? ¿Y qué era lo que esos dos nos estaban ocultando?

Continue Reading

You'll Also Like

124K 7K 33
𝑭𝑨𝑵𝑭𝑰𝑪/𝐄𝐥 𝐜𝐨𝐧𝐨𝐜𝐞𝐫𝐬𝐞 𝐭𝐫𝐚𝐞 𝐦𝐮𝐜𝐡𝐨𝐬 𝐩𝐫𝐨𝐛𝐥𝐞𝐦𝐚𝐬, 𝐝𝐞 𝐮𝐧𝐚 𝐮 𝐨𝐭𝐫𝐚 𝐦𝐚𝐧𝐞𝐫𝐚 𝐬𝐮 𝐫𝐞𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧 𝐬𝐞𝐚 𝐜𝐨...
24.5K 1.2K 18
Un sueño para muchos. Un deseo de poder estar junto con los protagonistas de esta animación que cobrara vida en la imaginación. ___ (tn) es una perso...
3.3K 283 12
Donde unos niños viajan al pasado por accidente, conocerán a sus padres antes de que fueran pareja. El Soukoku y el Shin Soukoku tendrán que aprender...
3.1K 299 10
Aprendí a observar... a observarlo. Historia corta.