Me sentía nerviosa ante la penetrante mirada verde de Harry. Después de haber pronunciado esas palabras se pasó la lengua lentamente por el labio inferior esperando a mi respuesta.
"Harry me voy" dijo la pelirroja desde el otro lado de la puerta.
A diferencia de las chicas con las que Harry solía estar ella no llevaba tatuajes y tenía un rostro de niña buena. No la podía juzgar ya que no sabía nada de ella.
"Si no te vas te golpearé tan fuerte que saldrás directo a la enfermería" dije soltándome bruscamente de su agarre.
Él mostraba diversión y una sonrisa de burla apareció en su rostro.
"No lo veo no lo creo" dijo riendo.
"Al parecer no te has dado cuenta de tu enorme marca roja, ¿verdad?" dejó de sonreír. "¿No te hizo gracia? Si es más intensa que la cabellera de la pelirroja" dije en tono burlón.
La expresión de burla y diversión del rostro de Harry desaparecieron, mostrándose enfadado como estaba hace unos minutos atrás.
"No sería tan gracioso si te pasase a ti también" dijo acercándose.
En ese momento el miedo se apoderó de mi y retrocedí negando lentamente. Realmente no le conocía y tampoco sabía cual eran sus intenciones.
"¿Qué pasa, tienes miedo?" dijo deteniéndose.
"Vete ahora" dije con un hilo de voz.
"Vine antes a hablar por las buenas pero me encontré con tu madre y decidí volver más tarde"
"¿Edward?" pregunté confusa.
"Edward, Harry, Styles ¿qué más da?"
"Tienes razón" me miró confundido "Idiota, imbécil, cabrón ¿qué más da?"
Se acercó rápidamente a mí dando tres zancadas y me acercó cogiéndome de la muñeca bruscamente a él provocando que nuestros pechos chocasen. Mi muñeca estaba atrapada por su enorme mano, no le estaba mirando pero sentía su mirada intensa puesta en mí.
"Me estás empezando a cansar Jess" dijo suspirando.
Soltó mi muñeca y caminó hacía la cama de Eleanor. Se sentó y colocó su cabeza entre sus manos. Yo seguía de pie sin saber como reaccionar, lo único que observaba era su espalda subiendo y bajando ligeramente a causa de su respiración. Si me acercaba tal vez me echaría y me gritaría pero tal vez se comportaría educadamente cosa que dudaba.
"¿Estás bien?" pregunta estúpida.
Antes de darme cuenta ya estaba sentada junto a él, no me movía, ni si quiera le miraba ya que no sabía como iba a reaccionar.
"Estoy hecho mierda" susurró "Jess, aléjate de mí. No soy lo que crees que soy, hago daño a la gente sin darme cuenta. Soy incapaz de hacer algo bien, nadie quiere estar conmigo yo no quiero estar con nadie. Soy el chico al que todo el mundo evita, el que todo el mundo teme. No puedes seguir acercándote a mí o hacer ver que te interesas y te preocupas, no tienes porque hacerlo, no necesito tu pena, no es necesaria, guárdatela para quien realmente la necesite".
"Yo no me acerco a ti por pena" dije decidida.
Harry era una de esas personas a las cuales nunca me hubiese acercado por su físico. Pero eso era antes, ahora no me importaba el físico si no que intentaba conocer a una persona y quererla por su interior. No entendía porque me acercaba a él y me empeñaba a conocerle si sabía que no lo iba a lograr pero había algo que me hacía querer estar con su compañía, había algo que me decía que con él estaba segura.
"Pues entonces, ¿porqué lo haces?" noté su mirada en mí.
"No lo sé Harry, no lo sé" dije mirándole.
Su mirada se clavó en la mía, a diferencia de antes ahora podía apreciar la mirada verde que tanto me cautivaba. Bajó su mirada en mis labios y se detenió en ellos. "Jess, tú eres fuerte, no te muevas" dijo mi vocecilla interior ayudándome a no inclinarme hacía él. No sé que me pasaba, primero quería pegarle con una sartén y ahora intentaba no besarle.
"¿Tu padre no vino a visitarte también?" preguntó alejándose un poco.
"Está muerto" dije mirando hacia mis manos las cuales se movían nerviosamente y mordí el interior de mi mejilla para no llorar.
"Lo siento, realmente me merecía el ostión que me has dado" dijo intentando hacerme sonreír.
Sus enormes manos se posaron sobre las mías cubriéndolas totalmente y aportándoles calor. Nos quedamos en silencio, no era incómodo, estaba bien.
"¿Te han dicho alguna vez que tu bipolaridad es preocupante?" pregunté intentando humorizar el ambiente.
"Tú eres la primera" sonrió ampliamente mostrando sus hoyuelos.
"Está bien ser la primera" dije sonriendo también.
"Ya que te gusta, también podrías ser la primera en otras cosas" dijo levantando las cejas levemente.
Yo me atraganté con mi propia saliva, no quería pensar mal pero eso era lo que él me estaba dando a entender. Reí para ocultar mi evidente nerviosismo y volví a hacer contacto visual con él.
"Eres un cerdo" dije sonriendo.
"Y tú una malpensada, ¿en qué estabas pensando?" dijo esperando mi respuesta.
"No lo sé, déjame en paz" dije mientras notaba mi cara arder.
"Cuando te sonrojas te ves adorable" dijo en un susurro apenas audible que pude escuchar.
Nos volvimos a quedar en silencio. Sus manos se seguían encontrando sobre las mías. Su tacto era suave y cuidadoso. Aún no creía la forma tan radical en la que Harry había pasado de bueno a malo, de oscuro a iluminado. El seguía manteniendo su sonrisa en el rostro, se veía angelical con ella.
"¿Te gusta lo que ves?" preguntó egocentricamente.
"Ugh, no te estoy mirando a ti" el levantó sus cejas esperando una explicación. "Miraba tu sonrisa, pero no a ti".
"No hace falta que pongas excusas para poder observarme ángel".
MI corazón se paró una milésima de segundo al escuchar esa palabra pronunciada delicadamente por sus labios rosados, "Ángel". Esa palabra me recordó a Patch, el personaje fictício del cual estaba enamorada. Sonreí ampliamente mientras le observaba.
"¿Ángel?" pregunté.
"¿No te gusta?" preguntó.
"Me encanta, me recuerda a Patch" dije.
"¿Es tu perro?" mi sonrisa desapareció dramáticamente, el rió.
"No tiene gracia" dije riendo mientras me levantaba para mostrarle el libro.
Me dirigí a mi escritorio y me estiré para llegar a la estantería de arriba, no sé como pude dejarlo ahí. Por más que me estiraba para llegar no podía cogerlo. Escuchaba la hermosa risa de Harry resonar detrás mío. Se acercó y estiró el brazo. Como él era más alto logró coger el libro sin dificultad.
"Aquí tienes pequeña" dijo entrgándomelo.
No sabía si me llamó pequeña por mi estatura o cariñosamente pero había conseguido derretirme el interior. Era difícil creer que hace unos minutos estaba poseïdo por el mismo demonio. Colocó sus manos un mi cintura mientras yo sostenía el libro y me acercó a él mientras sonreía. Me daba igual aquella parte de mí que me decía que no lo hiciese pero en este momento lo que quería era besarle y eso era lo que haría. Sus labios rozaron los míos y antes de poder sentirlo se abrió la puerta seguido de una voz.
"Manteneros separados".
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SIENTO HABER TARDADO TANTO, COMO SABÉIS ESTAS SEMANAS SON LOS EXÁMENES FINALES Y QUIERO APROBARLOS CON BUENAS NOTAS (HE SUSPENDIDO DOS D: ) QUERÍA HACER UN CAPÍTULO LARGO PERO NO HE PODIDO POR FALTA DE IMAGINACÍON SI ES ABURRIDO LO SIENTO, INTENTARÉ QUE EL PRÓXIMO SEA MEJOR. INTENTARÉ SEGUIRLA EL LUNES O EL MARTES. 20 VOTOS Y LA SIGO ANTES. ESPERO QUE LES GUSTE :)
PD: ME GUSTARÍA SABER QUIEN LEE LA NOVELA, SI ERES LECTORA COMENTA AUN QUE SEA UN PUNTO, LOL.
PD2: ESTE CAPÍTULO VA DEDICADO A TOOODAS LAS LECTORAS DE DANGER, A MASSIVE THANK YOU ;)x